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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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La llave de bronce - por Maritel

LA LLAVE DE BRONCE

El anciano encontró la llave en el primer escalón de la puerta del fondo; una llave grande, de bronce, pulida por el uso, semejante a la de la puerta que acababa de abrir.
«¡Qué extraño, pensó Vicente, mía no es, alguien debió dejarla ahí; porque si se le hubiese caído, se habría percatado y la levantaría»… Al instante la dejó caer, para comprobarlo.
«Sí, era evidente que alguien puso ahí esa llave». Estaba sorprendido;« pensó que alguien intentó abrir la puerta»; pero dejarla, al no poder hacerlo, era algo que no le quedaba claro.
La levantó nuevamente y volvió a examinarla.
Por más que su cabeza daba vueltas, no encontró explicación alguna.
Caminó por el sendero empedrado y húmedo, que lo llevaría hasta el muro cubierto de enredaderas. Todas las mañanas acostumbraba ir hasta ese lugar donde el aroma de los jazmines le traía gratos recuerdos; allí también aguardaba para ver el sol iluminando los árboles y el jardín.
Se detuvo; aspiró el aire fresco de la mañana, como esperando que la naturaleza le revelara el misterio…Sintió el frío del metal en su mano; su cabeza volvió a buscar un argumento que le explicara lo sucedido y cuanto más lo pensaba, más absurdo le parecía; pero aquella sensación rara que sintió al principio, lo mantenía expectante y angustiado.
Decidió entrar a la casa para desayunar. Cuando pisaba el tercer escalón oyó sonar el teléfono que había dejado encima de la mesa de la cocina. Era un mensaje con letras mayúsculas que decía:«la llave de bronce que encontraste no es tuya; así que la dejas donde estaba».
El anciano quedó estupefacto. Volvió a leer el mensaje sin firma y cuyo número no figuraba en su escasa lista de amigos y familiares. Se quedó sentado sin saber qué hacer, sintiendo su corazón latir con fuerza y su mente confundida, ante una advertencia tan amedrentadora.
Vicente había cumplido ochenta años y hacía cinco que era viudo; vivía solo en su casa y que, a decir verdad, le resultaba demasiado grande; tanto que ya varias veces ha pensado en la propuesta de su hija Mercedes: «comprar una casa más chica, que quedara cerca de la suya, para poder verse todos los días y compartir más tiempo junto a su nieto, que ya tiene tres años»…
Suena nuevamente el teléfono. Esta vez era ella, invitándolo a almorzar como todos los domingos.
Oír la voz de su hija lo calmó, sintiendo que no estaba solo.
Recién se dio cuenta del día en que vivía y también, que no ha soltado la llave de su mano.
Se levantó y la puso en el mismo lugar donde la había encontrado; extendió la mirada hasta el final del sendero, como si quisiera que el rumor de las hojas y el aroma de las flores le revelaran el misterioso e intrigante suceso. Bajó la cabeza, cerrando la puerta con doble giro de la llave como lo hacía siempre.
Luego de un frugal desayuno, sacó su viejo Austin 70 y marchó a casa de Mercedes.
Todo transcurrió con normalidad. Ella lo notó un tanto distraído. No le llamó la atención ya que otras veces ha estado así y luego, vuelve a ser el mismo alegre y bromista de siempre.
Regresó temprano y no salió con sus amigos; Se sentía cansado y resolvió acostarse.
No le fue fácil conciliar el sueño, porque aquella llave de bronce le daba vueltas y más vueltas en la cabeza…«¿Por qué? ¿Quién? ¿Qué móviles lo impulsarían?»… Era muy difícil descifrar el misterio.
Así pasó la noche, inquieto, sobresaltado, perseguido por ideas absurdas.
Al otro día se dirigió a la puerta del fondo y con premura la abrió. ¡Ahí estaba la misteriosa llave! ¡Pero esta vez en el segundo escalón!
Reaccionó de inmediato: cerró la puerta, se preparó el desayuno y se sentó a la mesa.
«¡Ya estaba la decisión tomada! No lo pensaría más, ni pasaría más noches de cavilaciones, imaginando cosas horrendas»…
Marcó en el celular el número de su hija y le pasó un mensaje en estos términos:«Mercedes, he decidido poner en venta la casa. Espero alegrarte con la noticia. Besos».

Maritel

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19 comentarios

  1. 1. Fonta dice:

    Hola lei el relato, me dejo la intriga, que seria esa llave? o era alguna representacion de algun miedo del anciano?… intriga, intriga, me gusto el relato, y los detalles (como el de la hija, el auto del viejo), te espero por el mio si queres es el nro 125, un abrazo

    Escrito el 18 junio 2016 a las 00:04
  2. 2. José Luis Jaimes dice:

    Hola y gracias Maritel por tus consideraciones acerca de mi relato. He tomado en cuenta el tema de las iniciales, lo que no quedó claro ni para ti ni para Manoli VF, pues los dos. han resaltado lo. mismo. Aprovecho el paseo por este jardin bonito y me asomo a la encrucijada en que ha sido puesto Vicente, por la aparición de esa rara llave de bronce. El texto se deja recorrer sin problemas, es coherente y nos da. muestras de cómo se enrarece la atmosfera donde vive el anciano. Pero pensé que estaba a las puertas de un. relato con hadas y gnomos traviesos, debo confesar y es por lo siguiente:”Se detuvo;aspiró el aire fresco de la mañana, como esperando que la naturaleza le revelara el misterio…”/”Se levantó y la puso en el mismo lugar donde la había encontrado; extendió la mirada hasta el final del sendero, como si quisiera que el rumor de las hojas y el aroma de las flores le revelaran el misterioso e intrigante suceso.” Despues de esas dos invocaciones a la naturaleza apostaba por respuestas provenientesbdel mundo feérico. U tambien decir que las propias preguntas no respondidas por Vicente, hubiesen dado para un relato más largo.

    Escrito el 18 junio 2016 a las 20:31
  3. 3. gaia dice:

    Sorpresivo final. muy bueno!
    Me puedes leer en el 202

    Escrito el 19 junio 2016 a las 14:45
  4. 4. GAIA dice:

    Sorpresivo final, muy original!
    Me puedes leer en el 202

    Escrito el 19 junio 2016 a las 14:46
  5. 5. Jesus Lacupett dice:

    Hola Maritel:
    Intrigante y hermosa historia. Me agrado como fuiste desarrollando el suspenso, pero necesitamos un segundo capitulo para resolver el misterio.
    Perdona la falta de acentos pero este teclado no los tiene.
    Felicitaciones.

    Escrito el 20 junio 2016 a las 02:15
  6. 6. María Esther dice:

    Gracias Fonta, Gaia, José Luis y Jesús, por vuestros comentarios.
    Yo pretendí hacer un final ambiguo; no se si lo habré logrado, o mejor dicho, si se entiende que el final se puede interpretar de diferentes maneras.
    Por qué el anciano resuelve
    vender la casa: ¿por complacer a su hija?; ¿porque sintió la necesidad de estar junto a su nieto?; ¿porque se sintió amenazado por alguien, cuyos móviles desconocía?;¿o esa extraña señal lo ayudó a resolver una situación de soledad, que al cabo de cinco años,se le hacía insostenible?
    Así que el misterio,lo habrá de resolver el lector.
    Gaia, en su comentario pone énfasis en el final, lo que me lleva a pensar que de esa manera estaría acertada la elección de la ambigüedad.

    Escrito el 20 junio 2016 a las 03:30
  7. Jolines Maritel, ¿nos dejas así, con esa intriga? La verdad es que es un buen final para jugar con la imaginación del lector. Me ha gustado la historia.

    Solo un par de pequeñas apreciciones:

    – “Todas las mañanas acostumbraba ir hasta…” Sería ‘acostumbraba a’
    – “vivía solo en su casa y que, a decir verdad, le resultaba demasiado grande…” En esta frase suprimiría el ‘que’

    Muchas gracias por pasarte y comentar mi relato!!

    Escrito el 20 junio 2016 a las 18:53
  8. 8. María Esther dice:

    Muchas gracias Carolina, tendré en cuenta tus correcciones.

    Escrito el 20 junio 2016 a las 22:32
  9. 9. Luis Rivas V dice:

    Hola Maritel, soy Luis Rivas V del 130. Excelente Final, todo un cliffhanger, si tienes mas me gustaria leer en que termina si no es una lastima porque me dejo con ganas de mas.

    Gracias por tu texto, nos seguimos leyendo

    Escrito el 21 junio 2016 a las 08:18
  10. 10. Amanda Quintana dice:

    Hola Maritel, muchas gracias por pasar a dejar tu comentario a mi texto. El tuyo me gustó por varias cosas; el aura poética con la cual describís lo que le pasa al anciano en su ser, las descripciones del lugar, la forma en que va transcurriendo su día, pero sobre todo el final, que para mí es un cliffhanger, me gustó mucho, dejándome con preguntas que, claro, deberé resolver yo, pero que me invitan a quere saber más acerca de la misteriosa llave y la decisión del anciano.

    Con respecto a las formas, creo que hay un par de cosas que podrían corregirse, para que quede un poco mejor, pero por favor, tomalo como una sugerencia desde mi punto de vista, es algo personal, para nada es regla ni mucho menos.

    “Decidió entrar a la casa para desayunar. Cuando pisaba el tercer escalón oyó sonar el teléfono que había dejado encima de la mesa de la cocina.” Acá podrías eliminar el punto seguido para continuar la oración entre “desayunar” y “cuando”, ya que la acción continúa. También la palabra “pisaba” podrías cambiarla por “pisó”, porque esa fue acción de momento, no es que siempre sonaba el teléfono al pisar el tercer escalón, solo sucedió una vez.

    “tanto que ya varias veces ha pensado en la propuesta de su hija Mercedes” Acá podrías también usar el mismo tiempo pasado: en lugar de “ha pensado” podrías decir “pensó”, creo que quedaría más acomodado al relato.

    “Suena nuevamente el teléfono.” Lo mismo, quizá podría ir que “Sonó nuevamente el teléfono”.

    Otra vez, solo son apreciaciones mías, no me tomes demasiado en cuenta, tu texto me pareció muy lindo y de hecho me gustaría leerte de nuevo el próximo mes.

    Besos.

    Escrito el 22 junio 2016 a las 15:38
  11. HOla Maritel, como siempre me gustó leer tu relato, como también encontrar tu comentario en el mío. Tu cuento es una historia intrigante, lleva al lector a hacer conjeturas del por qué la llave, quien es el/la dueño o dueña, cual es la razón de estar ahí… Me dejó con ganas de saber más. En resumen, un buen cliffhanger.
    Los detalles ya te los han marcado los demás, creo que están bien, de hecho no tengo nada para agregar en cuanto a estructura.
    ¡Exitos!

    Escrito el 22 junio 2016 a las 15:46
  12. 12. Ratopin Johnson dice:

    Hola Maritel

    A mí me ha resultado ambiguo el final, como comentas era tu intención.
    Yo pensé incluso en el alzheimer, y que el hombre dándose cuenta de que ya no puede valerse por sí mismo, decidiera finalmente vender la casa.
    Pero claro, la llave que se mueve tanto. Eso me rompía un poco, aunque podía ser él mismo el que lo hiciera.
    Otra idea, que alguien quiere que se vaya (puede ser incluso la hija la que le envía el mensaje). En definitiva muchas preguntas.

    Una cosa que sí me ha llamado la atención son algunos cambios de tiempo, de pasado a presente. Creo que la primera vez que ocurre es en “Suena nuevamente el teléfono.”, pero después pasa dos o tres veces más.

    Historia interesante y muy abierta Maritel
    Saludos

    Escrito el 22 junio 2016 a las 20:46
  13. 13. María Esther dice:

    Gracias Luis, Amanda,Fernando y Ratopín.Me alegró mucho que les haya gustado el relato.También encontré muy acertadaslas sugerencias para corregir algunos tiempos verbales.Es mi problema, lo se y les pido por favor que no me los dejen pasar porque yo leo y leo y siempre se me queda alguno escondido por ahí.
    En cuanto al final veo que gustó e hizo pensar;lo que es muy importante, según los consejos que he leído en las entradas de este taller.
    Con mucho gusto nos seguiremos leyendo.

    Escrito el 23 junio 2016 a las 02:56
  14. 14. Nuria GR dice:

    Hola Maritel, en primer lugar te agradezco que te hayas pasado por mi relato y dejado tus comentarios.
    Paso a comentar el tuyo comenzando con el contenido. Me ha gustado cómo has planteado la historia, y que el final quede abierto al lector. He echado en falta un poco más de información quizá, pero en general es una buena historia.
    En lo que se refiere a la forma, he leído los demás comentarios un poco rápido así que perdón si me repito. En primer lugar, no entiendo bien el uso de las comillas que haces en algunos momentos. Por ejemplo:
    “«¡Qué extraño, pensó Vicente, mía no es, alguien debió dejarla ahí; porque si se le hubiese caído, se habría percatado y la levantaría»… Al instante la dejó caer, para comprobarlo.”
    Si son, como a mí me parece, para expresar el pensamiento del anciano, no deberías incluir dentro de ellas la voz del narrador. Es decir, deberías cerrarlas para meter al narrador y volver a abrirlas para volver a comenzar con el pensamiento del anciano. Ejemplo:
    “«¡Qué extraño!» pensó Vicente «mía no es,…»”
    También ocurro en el párrafo a continuación:
    “«Sí, era evidente que alguien puso ahí esa llave». Estaba sorprendido;« pensó que alguien intentó abrir la puerta»; pero dejarla, al no poder hacerlo, era algo que no le quedaba claro.”
    Pones comillas y sin embargo no es el pensamiento del anciano el que introduces sino al narrador, ya que el anciano pensaría:
    “«Sí, es evidente que alguien puso ahí esa llave»” o “«alguien intentó abrir la puerta y lo ha dejado al no poder hacerlo»”
    En resumen, si tu intención es meter el pensamiento del anciano debes introducirlo como él lo pensaría realmente, y si quieres que sea el narrador no serían necesarias las comillas. Ocurre esto mismo de las comillas a lo largo del texto.
    Otro punto que debes tener en cuenta son los tiempos verbales. He visto que en algunos sitios los cambias en una misma frase y queda algo confuso. Te pongo un ejemplo: “Recién se dio cuenta del día en que vivía y también, que no ha soltado la llave de su mano.” Creo que quedaría más armónico si en lugar de “ha soltado” dijeras “había soltado” ya que estás utilizando el pasado. También en “Ella lo notó un tanto distraído. No le llamó la atención ya que otras veces ha estado así y luego, vuelve a ser el mismo alegre y bromista de siempre.” Ocurre lo mismo, sería más adecuado decir “otras veces había estado así y luego, volvía a ser..” ya que estás relatando en pasado.
    Espero que mis comentarios te sean de utilidad y que nos sigamos leyendo en el futuro.
    Saludos.

    Escrito el 24 junio 2016 a las 13:52
  15. 15. María Esther dice:

    Muchas gracias Nuria por tus comentarios tan acertados.Tendré que escribir mucho para superarme en ese aspecto, ya lo veo.no sabes cuanto te lo agradezco.No se, creo que tendré que estudiar el uso de los tiempos verbales uno por uno, ya que tengo ese problema desde que empecé en él taller; siempre me lo han marcado,lo he corregido en cada cuento, pero cada vez que escribo me pasa lo mismo.Bueno a lo mejor tu me podrías indicar, otra solución.
    Lo de las comillas,creo que es falta de atención; si es verdad está mezclado el pensamiento del protagonista, con lo que dice el narrador.
    Nuevamente te lo agradezco.

    Escrito el 25 junio 2016 a las 23:26
  16. 16. siulLegna dice:

    Buen relato Maritel:
    Su tranquilo desarrollo reclama la atencion del lector disfrutando de sus desayunos campestres. Las inquietudes del anciano tiene buena resolución con su último mensaje.
    Un placer haberte leido.
    Saludos.

    Escrito el 26 junio 2016 a las 11:54
  17. 17. luis dice:

    Hola Maritel, soy Luis tu vecino de abajo. Ante todo gracias por pasar por mi relato. He leído el tuyo y no acabo de comprender la historia. No se qué tiene que ver la llave misteriosa y porqué el anciano al final decide ir a vivir con su hija. Las descripciones las he encontrado bien. Saludos.

    Escrito el 26 junio 2016 a las 15:41
  18. 18. María Esther dice:

    Quiero agradecer a todos los que me han leído y comentado, porque es muy importante para mi.Yo también he disfrutado mucho con el ejercicio, a la vez que sigo aprendiendo.
    Suerte y felicidad para todos.
    Seguiremos en la buena lectura y comentarios constructivos.

    Escrito el 30 junio 2016 a las 14:59
  19. 19. Laura G. dice:

    Hola Maritel.

    Muchas gracias por tu comentario en mi texto.

    Tu relato me ha gustado mucho, porque tiene un nosequé que lo hace muy agradable e intrigante a la vez.

    Me he percatado de que cambias de vez en cuando los tiempos verbales, no sé si es un fallo o es tu intención, pero de todas formas queda curioso.

    Me gustan los finales ambiguos que hacen participar al lector imaginando qué puede pasar después (muy Stephen King jaja).

    En definitiva, muy buen relato.
    Sigue así.
    Un saludo.

    Escrito el 30 junio 2016 a las 20:55

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