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Mistela y rollizos de anis - por Concha Estellés pascual

Web: https://escritora57.blogspot.com.es/?m=1

MISTELA Y ROLLITOS DE ANIS

Ana cepillaba el pelo gris de Carmen, pasaba el cepillo con suavidad mientras con la mirada ausente le decía:
— ¡Madre!, aquella noche cuando el sol ya estaba escondido tras las montañas y la luna brillaba sobre el tejado, me sorprendió la lluvia. Envuelta en tiriteras corrí para resguardarme; fui hacia el granero, la puerta se abría y cerraba empujada por el aire que silbaba en mis oídos, Entonces les vi. Estaban amarrados de la cintura, medio escondidos entre la paja, reconocí los rizos del pelo que dos horas antes yo había acariciado y la camisa que la noche anterior planché, para él.
Cuando los vi allí a los dos… peor aún, cuando me di cuenta que mi hombre, a quien besaba y acariciaba era a usted. ¡Madre, eso no lo podía perdonar! La sangre me ardió y pensé en matarles a los dos.
Busqué los polvos que poníamos en los mendrugos de pan para las ratas; no los encontré, más tarde apareció usted con las mejillas encendidas. Llevaba el paquete de veneno en una mano y un libro de recetas en la otra, ¡Como si me hubiera leído el pensamiento!
Dos semanas después la una frente a la otra vestidas de negro y sentadas a los pies de la cama de mi Serafín, usted con el rosario en la mano mientras yo, dudando si marchar o quedarme ¡y, ya ve!, decidí quedarme, aunque la casa ya me parecía demasiado pequeña para los cuatro.
¡Si, madre para los cuatro!, porque Serafín y Antoñito (mi padre) cada noche vienen a visitarme, me traen una rosa blanca que siempre dejan sobre la mesilla de noche, luego se sientan en cuclillas en mi almohada.
Escucho en silencio su conversación, siempre lo mismo, primero la voz ronca de mi Serafín dictando sentencia:
—Lo sé todo. Ana y Carmen (tu mujer), me han envenenado poco a poco.
Un chupito de mistela y rollitos de anís, venga…venga…que la vida son cuatro días y nos quedan dos. A tu salud, brindemos, venga vamos allá con otra copita.
—Para mí siempre los rollitos y ellas sólo mistela, ingenuo de mí. Pensé que las dos eran mías, ¿Cómo iba yo a sospechar?
— ¡Bueno!, no te quejes, a mí me envenenaron también, cada noche el mismo puré de calabaza, para limpiar el intestino decían. ¡Ya conoces a Carmen y el genio que tiene!, Cómo para hacerle la contra.

—Oye, Antoñito, ¿A ti qué te han dicho cuando has llegado?, ¡Como soy nuevo en esto! No sé cómo va.
—! A ver!, es la primera vez que estás muerto…¿no?
—Sí, ¡Claro, la primera!
Sorprendiendo a suegro y yerno, se escuchó desde muy lejos: — También es mi primera vez. El eco de la voz les llegaba desde la parte más oscura y se oía aún tan lejana que Serafín tardo un poco en poder reconocerla, mientras se iba acercando, Antoñito que no ha olvidado la voz grave de su mujer (Carmen) le preguntó:
— ¿Y tú, que haces aquí?
Serafín poniéndose entre los dos le increpó, — ¡Eso, eso!, ¿Qué haces aquí?, ella agachando la cabeza miró el rosario que tenía en la mano y disculpándose le respondió: — ¡Perdona! No quise pero, eras tú o yo.

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5 comentarios

  1. 1. rubisco dice:

    ¡Guau, Concha! ¡Qué giro tan sorprendente al final!

    He de reconocer que me he perdido en varias partes del relato: no me queda claro si está narrado en primera o tercera persona, o si hay párrafos que son parte de un diálogo. Cuando ocurre esto, conviene usar el símbolo » al comienzo de cada nuevo párrafo. Es la única mención negativa que podría hacerte; de resto pienso que la estructura está muy bien.

    Sobre la historia, está bien construida. Veo que los personajes son los que cuentan lo que ocurre, y el narrador es casi inexistente. Eso ayuda a sumergirse en la historia, casi como si uno formara parte de la conversación.

    Y de la historia… ¡qué decir! Me ha gustado, no me esperaba ese final tan tétrico, y a la vez tan poco serio, como es que se van encontrando y se van reprochando los distintos asesinatos. ¡Espero leer algo tuyo en el próximo reto!

    Escrito el 17 octubre 2016 a las 22:22
  2. Rubisco, muchas gracias por tus comentarios. Tendré encuenta tus sugerencias y pondré más atención al hecho de que en algunos puntos te hayas perdido un poco, de ser así; sin duda es culpa mía. Lo lamento. Muchas gracias.

    Escrito el 18 octubre 2016 a las 01:07
  3. Hola,Concha.
    La historia me encantó. Muy dinámica, pero algo enredada por culpa de los signos de diálogo. Si lo repasas un poquito estaría perfecto.
    Un gran final.
    Saludos. Nos seguimos leyendo
    P.D.: Mi cuento es el 111.

    Escrito el 18 octubre 2016 a las 12:25
  4. 4. Laia Gabue dice:

    ¡Hola Concha!
    Enhorabuena por tu relato es ameno y entretenido.
    Por la forma de hablar de los personajes me he imaginado una pequeña familia que vivía en una casa en un entorno rural hace varios siglos atrás. No sé si esta era tu intención, espero que sí, porque a mi entender la atmosfera está bien lograda y consigues que el lector se meta en la historia y el entorno.
    El ritmo me parece bueno, aunque es cierto que he tenido que releer alguna de las frases para entenderlas bien. Creo que esto nos pasa cuando escribimos en primera persona porque escribimos tal cual pensamos. A mí me encantan los relatos en primera persona porque creo que ayudan al lector a visualizar los acontecimientos y a ponerse en la piel del personaje, y es difícil utilizar este tipo de narrador, así que enhorabuena, solo dándole unas retoques más quedará muy bien.
    Creo que la historia está bien estructurada, con sus tres partes fácilmente reconocibles, otro punto positivo.
    En referencia al contenido, la historia me ha parecido imaginativa y sorprendente. Has escogido un tema muy extendido y que se ha utilizado millones de veces (la infidelidad y el asesinato a causa de la misma), pero lo has hecho de forma diferente y original. Es la madre la que engaña a la hija con su yerno y además también la que lo mata. Además la forma de contarla, a través de una especie de visión o sueño también lo hace distinto. Aunque si tengo que decir la verdad, y esto probablemente es un problema mío, no he logrado entender bien que es lo que pasa al final. ¿La hija mata también a la madre? Pero si es así, ¿cómo es que al principio le cepilla el pelo? ¿Están todos muertos?
    Además entiendo que mate a su marido y a la madre, porque la engañaban, pero ¿y su padre?, creo que estaría bien explicar el motivo por el que se van matando unos a otros para acabar de cerrar el relato.
    ¡Vaya rollo te he soltado! A pesar de todo, en general me ha parecido un muy buen relato, sobre todo imaginativo, así que mi más sincera enhorabuena.
    ¡Nos leemos!

    Escrito el 21 octubre 2016 a las 18:58
  5. 5. María Luisa Plaza dice:

    Hola Concha,
    Gracias por leer mi relato. El tuyo me ha gustado mucho, aunque
    como Laia no acabo de entender el final. Tampoco que en el penúltimo párrafo aparezca un narrador en tercera persona. Creo que la hija podía haber introducido a la madre.
    Pero, por lo demas, me ha parecido una historia estupenda.
    Espero leer más relatos tuyos.

    Escrito el 23 octubre 2016 a las 07:51

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