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Recuerdos de una antigua realidad - por Leyre

Web: http://llecumbest.wordpress.com

Andrew Patterson nunca sería capaz de olvidar aquella noche…
Un manto de estrellas y oscuridad cubría el campamento provisional en el que descansaba la caravana. Fue en aquel momento, en aquel lugar, donde todo cambió para él.
—Andrew, ¿a qué estás esperando? Coge al caballo y límpialo. No tenemos toda la noche —ordenó un hombre con sombrero y gabardina.
El joven se levantó con parsimonia y echó a andar en dirección a su corcel. Un animal con un lacio cabello blanco sucio y unas fuertes patas que le permitían correr a gran velocidad.
El chico acarició el hocico de su compañero. Juntos habían realizado grandes carreras.
—¿Qué tal pequeño? Estarás cansado después de cabalgar durante tanto tiempo, ¿eh? No te preocupes, te espera un merecido descanso.
Agarró las riendas y lo guio a un mástil cercano. No sabía cuánto tiempo tenían pensado quedarse allí, pero habían montado el campamento completo. Ató bien a su montura y la cepilló durante un buen rato. Cuando hubo terminado se sentó con la espalda apoyada en el mástil y sacó un viejo cuaderno con una portada en cuero que en el centro rezaba “recuerdos”.
—Hace mucho tiempo que no escribo en el viejo cuaderno de papá. Él era todo un poeta. Me gustaría poder lograr algo tan grande algún día…
El animal, que se había tumbado a su lado, relinchó.
—Sí, sí. Ya lo sé. Pero no puedo hacer nada. —Se mantuvo en silencio unos segundos, pensativo—. Cuando en la lectura de la herencia me dijeron que solo dejaba en mis manos un viejo libro de recuerdos me enfadé con él. Siempre decía de mí que era su hijo predilecto, el mejor de todos… y al final resulta que solo me deja esto —levantó el libro—, un cuaderno de campo.
Observó el paisaje a su alrededor, calmado y sumiso.
—Luego descubrí lo que era en realidad. Todas esas historias que hay aquí dentro, las criaturas que muestra, los poderes que describe… pensaba que nada de eso era real, pero me equivocaba. Nunca ha existido algo más cierto que lo que cuenta este diario, nunca.
El caballo volvió a relinchar y chocó su hocico contra la sien del chico. Este se mantenía cabizbajo, pensando en lo que todo aquello podría significar. En el mundo en el que vivía, en todo lo desconocido que acechaba justo delante de los ojos de todos los ignorantes que decían que resultaba de necios insinuar una realidad diferente a la suya.
El joven alzó la mirada al cielo.
—Son unos cobardes, no quieren reconocer lo que saben que es cierto porque para ellos es desconocido… porque temen que sea más poderoso que todos nosotros.
De repente, se empezaron a oír unos ruidos extraños desde un arbusto cercano. Eran como rugidos, solo que mucho más penosos de lo que sonarían si fuesen reales.
—Ya están aquí otra vez… —volvió los ojos en blanco.
Un grupo de varios jóvenes, tanto chicas como chicos, salieron de entre la maleza corriendo y gesticulando de manera exagerada.
—¡Eh Patterson! ¿Ves esto? Somos una de tus patéticas criaturas —grito un niño gordo y con el pelo rubio.
El resto del grupo se rio de él como si se tratase de un monstruo de circo. Andrew, maduro, miró hacia otro lado y pasó de ellos mientras seguían comportándose como primates.
—Estoy harto de ellos… ¿tú no?
Relinchó a modo de respuesta.
—Sí. Tienes razón. No nos merecemos esto, son unos inútiles. Pero es demasiado arriesgado, ¿no crees?
Le golpeó en el hombro con suavidad.
—Es cierto, si estamos juntos nadie podrá con nosotros. ¿Sabes qué? Vamos a hacerlo, nos marchamos, ¡hoy mismo! Cumpliremos el sueño de mi padre y recopilaremos todos los datos posibles sobre el mundo que él descubrió.
Patterson se levantó rebosante de energía y soltó las riendas de su corcel. Marchó a ensillarlo y a preparar sus cosas para irse. Y esa misma noche, con el sol del amanecer despertando sobre sus cabezas, caballo y humano partieron juntos hacia algún lugar en el que jamás los molestarían.

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4 comentarios

  1. Saludos Leyre.
    Te hago una pregunta: continua? Porque ese mundo que el libro menciona suena interesante.
    Tu relato deja mucho a la imaginación. Aquí estoy pensando en que clase de mundo seria ese al que Andrew se va. Y eso no es malo, al contrario, levanta mucho interes.
    Solamente te digo que si hay continuación, quiero leerla.
    P.D. El caballo que comprende a su amo me parece genial.
    Saludos.

    Escrito el 17 diciembre 2016 a las 07:12
  2. 2. Mihail Rojas-Prieto dice:

    Leyre,

    Quiero decirte que tu texto es me pareció muy intrigante. (es mi opinión) No logro ubicarlo en algún lugar o tiempo específicos y por lo mismo engancha bastante. Queda uno con las ganas de saber que sigue en esta historia. ¿Por qué dice unos de los muchachos que son producto de Patterson? ¿Son reales o imaginarios? ¿Cuál es el mundo que descubrió el padre del protagonista? Creo que nos quedas debiendo lo que sigue.

    Y todo muy bien, muy interesante la historia. ¿Cuándo aparece la continuación?

    Escrito el 18 diciembre 2016 a las 21:01
  3. 3. Jorge Luis Acosta Torres dice:

    Buen relato. También a mí me dejo con la curiosidad de saber que pasaba, lo que me da impresión que era la idea.

    Si te interesa puedes leer mi relato y decimer que piensas es el 33.

    Escrito el 21 diciembre 2016 a las 07:16
  4. 4. Leyre dice:

    Gracias a los tres por vuestros comentarios. Estaré encantada de realizar una continuación del texto, pero lo publicaría en mi página web, la cual tenéis más arriba, bajo el título.
    Un saludo y feliz año, Leyre.

    Escrito el 2 enero 2017 a las 16:31

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