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El grito de Lucy - por Elena

El autor/a de este texto es menor de edad

Se giró al escuchar el grito, un grito desgarrador, que rompía el corazón a cualquiera… Un grito lleno de panico, dolor, odio… Un grito que congelaba la sangre en sólo oirlo, y que a la misma vez te la hacía hervir. Al girarse, encontró a Lucy, con la cara roja como su pelo pelirrojo que parecía de fuego, y con sus ojos esmeraldas llenos de lagrimas y de un hrviente dolor que haría llorar a cualquiera. Lucy parecía que se aguantaba las lagrimas con todas sus fuerzas, pero en kilometros a distancia ya se notaba que quería llorar. Y al fin, por el rostro de la joven resbalo una pequeña lagrima transaprente, que resbalaba por la mejilla roja carmesí de Lucy, y que acabó falleciendo en los labios rosados de la chica. Lucy le dió una fuerte bofetada a Aarón, que obserbaba a la chica, paralizado. Lo había pillado. Lo había encontrado con su amante en un hotel. Aarón sólo miraba como Lucy repetía una y otra vez entre gritos:
– ¡¿Cómo pudiste?! ¡Te entrege todo! ¡Mi corazón, mi alma, mi propia intimidad! ¡Te entrege todos mis secretos, todos mis llantos, todas mis risas! ¡Te entrege mi propio ser!
Lucy se sentía rota. Ella estaba locamente enamorada de Aarón. Aarón entró dentro dentro del corazon de ella, donde muy pocos entraban. Y es que Lucy estaba más que enamoraba, ya que cuando lo conoció, sintió como si la escencía de él se le metiera dentro. Que al final todo el estuviera dentro de ella. De su sangre, de su mente, de su alma… ¡Para Lucy Aarón era parte de ella misma! Como si él mismo fuera una extensión de ella misma… Y era algo parecido. Cuando Aarón sufría, ella tambien lo hacía. Cuando Aaron era feliz, ella tambien lo era. Pero cuando vió a Aaron con esa chica… Se sintió vacia. Como si dentro suyo se hubiera roto algo. Como si le hubieran quitado todo. Como si le hubieran mutliado.
Entonces volvió a gritar, dejando su alma en ello, como si estuviera a punto a morir… Aunque ya estuviera muerta… Muerta por dentro. Ya que Lucy ya no tenía nada dentro de ella. Sólo odio. Un profundo odio hacía Aarón, casi tan intenso como su amor por él. Su grito era desgarrador. Mostrando que estaba rota. Rota en mil pedazos. Sólo por alguien: Aarón.
Y es que ese era el problema de amar. Que dolía demasiado cuando tu entregabas y entregabas sin parar, sin importar que, entregando todo tu ser… Y que sin mas él no te diera nada. Sólo cuernos.
Lucy calló por fin, dejando de gritar. Mirando a Aarón, y susurrando amenaçadoramente:
– No te vuelvas acercar a mi nunca más si no quieres acabar tan destrozado como yo lo estoy por dentro.
Lucy se marchó del hotel.
Dejando a Aarón pensando, y a una chica muda que Lucy ni le dirigio la palabra. Aarón reproducía en su mente una y otra vec el grito de Lucy, y pensando en lo que había perdido.
Al fin y al cabo él no supo valorarla ni supo como amar de verdad. Porque cuando amas a alguien, tienes que ser fiel y leal, sincero… Cueste lo que cueste. No hay escusas.
Y el grito de Lucy explicó todo eso, aunque a primera vista sólo era un simple grito.

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3 comentarios

  1. 1. Cesar Henen dice:

    Hola Elena, antes que nada un gusto en leerte y comentarte.

    Consejo importante: revisión y más revisión de tus textos. Te coloco aquí las palabras que te falto corregir y las copio tal cual aparecen.
    “panico, oirlo, lagrimas(dos veces), hrviente kilómetros, transaprente, dio , observaba, entrege (tres veces), dentro (dos veces), corazon , escencía, Que al final todo (el) estuviera dentro de ella, tambien (dos veces), Aaron (dos veces), vío, mutliado, tu, mas, amenaçadoramente, dirigió, vec“
    También note algunos pleonasmos “pelo pelirrojo” basta con decir como su pelo rojo, “lagrima transparente” el agua es tranparente y las lagrimas son agua, sobra el trasparente.
    Repites muchas veces algunas palabras incluso los nombres de tus personajes, está bien hacerlo dentro de todo el relato, mas no en el mismo párrafo, trata siempre de usar un sinónimo y en caso de los nombres sustitúyelos por un artículo o sustantivo.

    Hay cosas que no calzan con la realidad y mucho menos en que se puedan hacer en 5 segundos, por ejemplo esto:
    “Lo había encontrado con su amante en un hotel. Aarón sólo miraba como Lucy repetía una y otra vez entre gritos:
    – ¡¿Cómo pudiste?! ¡Te entrege todo! ¡Mi corazón, mi alma, mi propia intimidad! ¡Te entrege todos mis secretos, todos mis llantos, todas mis risas! ¡Te entrege mi propio ser!”
    Es un error tuyo escribir que Lucy repetía una y otra vez todo eso, trata de hacerlo, trata de repetirlo una y otra vez, y toma te el tiempo veras que te lleva a mas de 5 segundos en decirlo por lo menos dos veces.

    La historia me gusta y muy común en que pasen esas cosas de engaños, traiciones y de mas; pero temo que no cumples el reto, (a mi opinión) a lo que ya mencione anteriormente. Te invito a seguir escribiendo y a que comentes el mío, relato 155.

    Un cordial saludo.

    Escrito el 19 enero 2017 a las 01:16
  2. 2. Campanilla86 dice:

    Hola, un placer leerte:

    Antes de nada soy nueva y es mi segunda participación.
    Tus fallos no son por no escribir bien , la idea es buena pero hay algunas faltas de ortografía. Observo una c trencada. Eres catalana, ¿verdad? basta con leer en castellano y poco a poco irás absorbiendo todo. A mi también me pasa.

    El contenido es bueno, ya que de amor y desamor todos hablamos.

    Destacaría la repetición de los nombres propios como es Aaron y Lucy entre otras cosas puede que alguna coma pero a mi me gustado mucho.

    Un saludo.

    Escrito el 19 enero 2017 a las 17:51
  3. 3. K. Marce dice:

    Saludos Elena:

    Creo que no había leído nada tuyo antes, y no sé si ésta es tu primera participación, como sea, bienvenida.

    Disculpas, porque tiendo a escribir mucho en mis comentarios, sobre todo cuando trato de analizarlos.

    No sé tu edad, intuyo que eres muy jovencita. Tal como te ha dicho Campanilla86, no es si está mal escrito o no. Pienso que tienes una idea en mente y no la sueltas hasta escribirla por completo.
    También se nota que no le has dado el reposo necesario a la escritura. Se recomienda antes de tomarlo como “definitivo”, te des una pausa, te alejes de tu propio escrito un par de días, unos tres a cinco. Lo releeas y analices. Con ese lapso de tiempo, olvidarás un poco tus dejes, esas manías que tenemos al escribir (excesos de cosas, palabras muleta, errores ortográficos, etc), algo que todos cometemos, pero filtramos a través de la revisión y corrección.
    Te aconsejo a que trates de conocer las palabras, cuando se tíldan, etc. Si te acostumbras a escribir correctamente, es mucho más fácil a la hora de corregir. Empleas menos tiempo viendo errores de tipeo y te concentras en la redacción, que es la columna de todo escrito.

    Te han mencionado los pleonasmos (redundancia) innecesaria. Pero a veces, buscamos ser creativos y usamos palabras que creemos que funcionan. Sin embargo, debes evitar lo que es obvio, lo demasiado retórico o flórido que da sensación de “ser novato”. Trata de simplificar. Y extiéndete cuando sea necesario. Recuerda el consejo: Contar vrs Mostrar. Ambos son necesarios en su justo equilibrio. Cuenta lo obvio, muestra lo importante o destacado.

    Cuando nos apasionamos por escribir, no medimos espacio-tiempo-historia. En la tuya hay saltos entre lo que ocurre, y lo que ha ocurrido. Es indispensables que tengas claro la suscesión de hechos, cuándo y cómo narrar algo. Una estructura fuerte y clara, te dará una historia firme y creíble.

    Recuerda que todo, absolutamente todo, puede mejorarse. No tengas temor de modificar esa idea preconcebida, esa frase, ese párrafo. Aprende a sustituir palabras, buscar sinónimos, y desterrar aquello que no aporta nada a la trama.
    Para darte un ejemplo, te marco algo tuyo con algo modificado:
    «Se giró al escuchar el grito(1), un grito(2) desgarrador, que rompía el corazón a cualquiera… Un grito (3) lleno de panico, dolor, odio… Un grito(4) que congelaba la sangre en sólo oirlo, y que a la misma vez te la hacía hervir. Al girarse, encontró a Lucy, con la cara roja(1) como su pelo pelirrojo(2) que parecía de fuego(3*), y con sus ojos esmeraldas llenos de lagrimas(1) y de un hrviente dolor que haría llorar(2*) a cualquiera. Lucy parecía que se aguantaba las lagrimas(3) con todas sus fuerzas, pero en kilometros a distancia ya se notaba que quería llorar(4*). Y al fin, por el rostro de la joven resbalo una pequeña lagrima(5) transaprente, que resbalaba por la mejilla roja(4) carmesí(5*) de Lucy, y que acabó falleciendo en los labios rosados(6**) de la chica.»
    ***Lo sugerido, como ejemplo:***
    «Se giró al escuchar el grito, tan desgarrador que rompía el corazón a cualquier. Aquel lleno de pánico, dolor, odio. Tan confuso que congelaba y hervía la sangre.
    Al girarse encontró a Lucy, con el rostro perturbado, con un color como fuego, igual a su cabello. Sus ojos esmeraldas estaban llenos de lágrimas con un hirviente dolor que conmovería a cualquiera. Lucy parecía que aguantaba el sufrimiento con todas las fuerzas, pero era notorio el deseo de llorar. Sin poderlo evitar, una lágrima resbaló por el rostro de la joven, sobre esa la mejilla encolerizada, hasta perderse dentro en los labios rosados de la chica.»

    Recuerda que debes evitar los posesivos (su, sus) cuando se entiende que se habla de una persona en particular; se prefiere siempre el, la, etc.
    Como puedes ver, en ese texto modificado, se ha plasmado lo mismo que ha sentido Lucy. Pero se ha evitado la carga extra que no aporta al texto, sino una distracción con la sobreabundancia de palabras iguales, posesivos, descripciones, etc.

    Creo que tienes una mente muy inquieta y fértil. Y siempre me alegra sobremanera que los jóvenes se aventuren en este campo tan hermoso como lo es la literatura. Te animo a seguir, a pulir las deficiencias, a enriquecer las fortalezas. Siempre se aprende, nadie es perfecto y estamos aprendiendo un arte en donde nunca el conocimiento es suficiente. Espero haberte ayudado en algo. ¡Nos leemos!

    Escrito el 25 enero 2017 a las 06:25

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