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EL SEGUNDO PISO DE LA ESQUINA - por Marijuana

EL SEGUNDO PISO DE LA ESQUINA

Se giró al escuchar el grito; un poco más y cae, le tomó por sorpresa, lo distrajo y por poco tropieza con una coladera mal cerrada. Una vez que se repuso, giró de nuevo, no ubicaba de dónde provenía ese ruido tan angustiante, movía su cabeza en todas direcciones y nada llamaba demasiado su atención. Sin embargo lo incomodó, a Javier y también a su acompañante, era algo inusual, y se notaba que a los demás transeúntes también lo habían escuchado, todos volteaban para todos lados buscando el origen.

Javier y Elvira, caminaban hacia su lugar de trabajo cuando oyeron el grito, la calle estaba medianamente transitada, vendedores ambulantes por aquí y por allá y muchos peatones ocupando las aceras.
“ ¿Escuchaste? Qué rayos habrá sido ese ruido?”, preguntó a su acompañante.
“ Sí, me pareció escuchar un grito pero hay mucho barullo en la calle y no identifico de dónde proviene”.

Se encontraban a tan sólo unos metros de la esquina de Cedros y Pinos, donde se localizaba la compañía Redes en Movimiento, de la cual ellos eran becarios en el área de mercadotecnia. No habían recorrido ni cinco pasos cuando volvieron a oír otro grito, era un sonido ahogado, lleno de desesperación y de pánico. Se voltearon a ver y sin decirse nada corrieron hasta la entrada de su edificio, el ruido venía del segundo o tercer piso.

Había cinco pisos en el inmueble; ellos trabajaban en el primero; el segundo y tercero eran casa-habitación, y el cuarto y quinto pertenecían a una empresa dedicada a la industria de acabados de construcción. Realmente no tenían mucha relación con los demás inquilinos.

“¿Oyeron los gritos que salieron de este edificio?”, preguntó Javier desesperado una vez que entró a la oficina.
“Sí!, pero fuimos a tocar la puerta y nadie abre, ya llamamos a la policía, espero que no tarde”. Le respondió otro compañero.

Mientras tanto, Elvira subía lo más velozmente que le daban las piernas y tocó la puerta de los departamentos en los pisos dos y tres. Efectivamente nadie respondía.

“Abranme! ¿Qué está pasando? Sólo quiero ayudar!”, exclamaba.
Pegó el oído a la puerta para ver si percibía o distinguía algún sonido pero lo único que podía escuchar era su agitada respiración. Parecía que no hubiera nadie adentro de ninguno de los dos departamentos.

Todo había sucedido tan rápido, que para cuando arribó la policía y los oficiales preguntaban por lo sucedido, tanto los peatones como Javier y Elvira y sus compañeros de trabajo, contestaban desordenadamente, parecía que emitían frases sin sentido debido al nerviosismo y el desasosiego.

Hubieran tenido que irrumpir en los departamentos si nadie respondía al llamado de la puerta, pero finalmente una mujer abrió en el departamento del segundo piso. Su aspecto era desaliñado y demacrado, estaba como en estado de shock, ni siquiera podía hablar. Muy lentamente los oficiales fueron interpretando sus acciones, ella los conducía a la estancia del lugar y cuando señaló la pared de atrás de la mesa del comedor, todos se quedaron estupefactos, había pedazos de papel tapiz arrancado por todos lados y detrás de éste, huecos en el cemento con cinco cadáveres, y uno de ellos aparentemente había muerto hacía un par de días solamente.

“ Capitán, tiene que ver esto”, le dijo uno de los oficiales a su superior al tiempo que le mostraba una foto enmarcada encima de la chimenea.
“ A juzgar por la foto, parece que este último cadáver corresponde a su padre”.
“ Así es. Ahora se puede explicar el fuertísimo grito que se escuchó afuera, pobre mujer”.
Diga a los médicos que están abajo en la ambulancia que vengan por ella por favor, hay que revisarla. Busquemos también una agenda o algo que nos indique a quién podemos llamar para que se haga cargo de la mujer, encuentren un familiar o una amiga; no aparecen fotos de ninguna pareja o sea que asumo que vive sola”.

Dicho esto, se la llevaron a un hospital y se dio a conocer la noticia en los medios, era un horror lo que había pasado, la población estaba impresionada, cómo era posible que algo así sucediera! Quién había estado entrando al departamento a hacer esos horrores sin que la mujer supiera? Se abría a partir de ese momento una línea de investigación que por las características de los hechos tomaría bastante tiempo. Sobre cómo y por qué la mujer arrancó el papel tapiz de la pared, es algo que no huele bien.

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5 comentarios

  1. 1. Tarquino dice:

    Según mi pobre conocimiento literario está bien escrito, se describe la acción, uno queda bien ubicado en la escena, pero… (siempre hay un, pero para todo). Como que le falta final. Bastante expectativa, para un final que no aporta nada, ni siquiera del tipo “abierto”

    Escrito el 19 enero 2017 a las 04:50
  2. 2. Juan Chukofis dice:

    Hola Marijuana,

    El narrador me parece que es interesante, alguien que está afuera de la historia, no es ningún personaje y supone mucho, sabe tan poco como los mismos personajes. Creo que, a su vez, eso trae el problema de que no sabemos nada sobre lo que pasó en ese segundo piso y cuesta engancharse con algo que genera intriga. Algún mínimo dato que te haga querer saber más.
    Por otro lado perdí un poco la referencia de los personajes. Al principio está el foco puesto en Javier, después en Elvira, después en los dos y al final en la policía.
    Con respecto al final coincido en parte con el comentario anterior pero creo que es algo que tiene que ver con lo poco que se sabe acerca de lo que pasó.

    Saludos y gracias

    Escrito el 20 enero 2017 a las 12:57
  3. 3. Laura dice:

    Hola Marijuana.
    Planteas el relato con mucha intriga al inicio pero parece que luego se va desdibujando, tornándose demasiado plano y explicativo.
    Coincido con los comentarios anteriores.
    Puede pulirse como un relato donde la mujer va rompiendo el papel y encontrando los cadáveres.
    El tema resulta atractivo.
    Exitoso 2017

    Escrito el 30 enero 2017 a las 10:31
  4. 4. PerePaella dice:

    Hola Marijuana.
    Coincido con lo dicho en comentarios anteriores, la idea es buena, no está mal escrito, pero parece que te pierdes un poco en el desarrollo.
    El límite de palabras no ayuda, por lo que nos hemos de ceñir a contar solo aquello que aporta información necesaria a la historia.
    Hay una máxima que la he oído aplicada a los diálogos, pero que yo intento aplicar a todo lo que escribo: “Si no aporta información necesaria o ayuda a hacer avanzar la trama, mejor sacarlo.” Así hay más espacio para contar lo que ha faltado.
    Te animo a que sigas escribiendo, porque imaginación y palabras no te faltan.
    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 30 enero 2017 a las 15:03
  5. 5. Marijuana dice:

    Muchas gracias por sus comentarios, me son de mucha ayuda.

    Sin duda los trataré de aplicar para el reto que viene esta semana.

    Saludos!

    Escrito el 1 febrero 2017 a las 01:18

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