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Vida Eterna - por Oriana Colmenares

El autor/a de este texto es menor de edad

Se giró al escuchar el grito – ¡Emma!- era un hombre, alto y corpulento envuelto en una sudadera que se acercaba.
– ¿Quién eres y dónde estamos?- Era una plaza solitaria, llena de árboles.
– En tu mente, yo…un intruso.- sonrió – Me llamo Leo.
– Estoy soñando- intentó comprender
– Es algo más profundo que soñar-dijo- Ven, caminemos
– Dijiste que eras intruso.
– ¿Qué puede pasar?
El chico era definitivamente atractivo, tenía ese aire de misterio que la cautivó.
– Cierto.-
Londres, el lugar favorito de Emma, era una locura pero era la primera vez en mucho tiempo en que se sintió relajada. Era de noche, el ambiente le inspiraba una paz inigualable. Leo resulto ser un chico divertido por el cual sentía una rara atracción. Una vez sentados, la miró y sus bocas se fueron acercando. Pero repentinamente, todo su alrededor empezó a oscurecer.
– ¿Qué ocurre?-
-Es tiempo de irte Hermosa-
-¿Volveré a regresar?-
-Claro que si -sonrió- depende de ti.- musitó rozando sus labios.
Durante todo el trabajo no paró de pensar en el sueño, fue sumamente realista. -¿Dormiste bien con las pastillas?- Era Kate.
-Creo que más de lo que debería.
– Perfecto. Le diré a Dereck
Esa misma noche, ya en casa, nuevamente tomó otra pastilla que surgió rápido efecto
Estaba en un departamento, intrigada. Camino un poco y había un hermoso atardecer londinense.
– Lindas bragas- dio un salto al escuchar la voz de Leo. Sus mejillas ardieron al ver su pijama-Tranquila, esperare aquí a que te pongas algo decente.
Minutos después volvió con unos jeans que encontró.
-Desearía vivir aquí.
Hablaron de lo monótona que era su vida, y el par de copas, surgió efecto en ambos.
-Pronto me iré.
Se acercó, tomó su mejilla y sonrió aniquilándola.
-Entonces…no perdamos tiempo.- Y por fin la besó, fue exquisito. Hasta que la oscuridad llegó indicando la hora de volver.
Era una locura, pero fue floreciendo algo inexplicable que se convirtió en adicción y cada que crecía su insania, su mundo real, le pasaba factura. Perdiendo todo, siendo Leo, lo único importante.
Una noche unieron sus cuerpos, fundiéndose en uno solo, con sus piernas entrelazadas, era un completo éxtasis. Todo era perfecto hasta que las luces empezaron a parpadeaban.
-Alguien te está despertando.
-Per…
Todo se volvió negro; al abrir los ojos vio la cara de Kate.
-¡Dios mío Emma, al fin despiertas!
– Kate ¿qué haces aquí?
– ¡Estoy preocupada por ti!- exclamó- Emma perdiste tu trabajo, tu teléfono está muerto, parece que no comes desde hace días, me faltan dedos para contar.
-Kate relájate.
– Vives drogada- dijo con el frasco en sus manos- Pero ya no más.
Se intentó levantar, Emma en un rápido movimiento la jaló haciéndola caer.
-¡Que sea la última vez que tocas mis cosas!
— ¿Qué te ocurre?-su voz se quebró- ¿Dónde está la Emma que yo conocí?
– lárgate.
-Emma…no.
-¡Que te largues!- la empujo. Vuelta en lágrimas la chica obedeció.
Una vez sola, se sentó en un rincón del apartamento, abrazando sus rodillas y se quebró.
-Destroce tu vida.- Se paralizó. Era Leo. Su expresión era triste
-¿Cómo…
-¿Recuerdas cuando te dije que era un intruso?- asintió- Era cierto.
-Explícate.-
– Soy un Fantasma Emma- No podía mirarla a los ojos- Morí hace dos años, estaba en la calle frente a una plaza, ¿sabes lo último que vi? – sonrió con tristeza- A ti, tan hermosa y tímida, te admiré por un rato hasta que decidí ir a preguntarte tu nombre -lo miraba atónita- cuando cruce, esa persecución…
-Dios, lo recuerdo-
– El auto de los delincuentes me arroyó…
– Fui directo allá y llamé a urgencias- la Chica lloraba- Dios mío, eras tú.
– Fuiste lo último que vi entre mi agonía. Yo solo quería verte de nuevo.
– Leo escucha- se levantó- Mi vida ya estaba rota desde hace tiempo, eres lo único bueno de ella.
– Pero no puedes vivir de solo pastillas.
– Hay otra forma.
– No Emma, Seria algo egoísta.
– Egoísta seria que me dejes viviendo una vida que no quiero.
– Es una locura.
– ¿Que más locura que esta?
Y así fue como la adicción de un amor pudo más que la cordura.
El frasco cayó al suelo completamente vacío, ella se acostó en la cama y él a su lado. Pronto sintió su respiración disminuir, para que luego su corazón dejara de latir y así comenzar su vida eterna.

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7 comentarios

  1. 1. Alonso T dice:

    Oriana:
    Soy nuevo aquí, pero te comparto lo que veo de tu texto. Me gustó la temática: drogas, muerte, amor, eternidad, abandono de la vida. Son temas bastante presentes en el mundo juvenil y con tu juventud nos los pones sobre la mesa, gracias por ello. Creo que tienes talento al que sacarle mucho partido.
    Me parece que en los diálogos hay un aspecto en que podrás lograr más precisión. En este sitio hay algunas entradas que tratan del tema. El uso de la raya en los diálogos podrás mejorarlo leyendo sobre ello también en este sitio (yo aquí he aprendido a escribir ese signo; aunque su uso todavía es una camisa que me queda grande. Gracias por compartir tu obra.

    Escrito el 17 enero 2017 a las 21:52
  2. 2. Lulita dice:

    ¡Hola Oriana!
    Me atrapó tu texto, la historia es triste. la soledad del adicto y su manera de ver la realidad.
    Me gustó mucho.

    Escrito el 19 enero 2017 a las 00:35
  3. 3. Vanessa Boggio dice:

    Hola Oriana, me gustó tu historia, realmente muestras la adicción desde un punto de vista mucho más romántico que lo que ocurre en la realidad.
    Te felicito

    Escrito el 19 enero 2017 a las 23:43
  4. 4. Hilda G.M. dice:

    Hola, Oriana. Me ha tocado comentar tu texto. Igual que Alonso T. pienso que has abordado un tema de mucha actualidad. Has contado bien la historia, pero creo que necesitas pulirla un poco. Entre los detalles que veo está lo de los guiones, que ya te ha comentado Alonso T., también en algunos diálogos se te ha pasado poner el punto y aparte. En algunas formas verbales en pasado y en futuro no has puesto el acento gráfico que deberían llevar. En el texto aparece en varias ocasiones la expresión “surgió efecto” en lugar de “surtió efecto”, así como “arroyó” en lugar de “arrolló”, este último de “arrollar” que tiene el significado precisamente que tú querías: ser atropellado por un vehículo. Como ves, son pequeñas cosas que se pueden eliminar con una revisión del texto 😉 Por lo demás, tu historia me ha gustado. Muchas gracias por compartirla. Saludos 🙂

    Escrito el 20 enero 2017 a las 10:31
  5. 5. Oriana dice:

    Hola a todos, muchas gracias por sus comentarios y criticas, las tomaré en cuenta. Soy nueva en el mundo de la escritura, pero se ha vuelto parte de mi, una necesidad constante y una forma de poder sacar a la luz todas las locuras de mi mente. Muchas gracias por sus comentarios y por ayudarme a crecer poco a poco en esto, que es mi mayor pasión.

    Escrito el 21 enero 2017 a las 05:24
  6. Hola Oriana :
    Gracias por pasar por mi relato.
    Siento que te haya desilusionado, pero este mes lo presenté de prisa y corriendo la víspera del cierre y eso, casi nunca sale bien. Referente al tema me ha sorprendido que sea tan “corriente” ya que es algo que viví muy de cerca y te puedo asegurar que me dejó impresionado durante mucho tiempo.
    Respecto al tuyo te comento que debes separar los diálogos. Por ejemplo
    ―¿Quién es y donde estamos?
    Era una plaza solitaria llena de árboles…

    Durante todo el trabajo…
    ―¿Dormiste bien con las pastillas? ―Era Kate.

    Fíjate en poner siempre los diálogos con guión largo, has mezclado largos y cortos.
    La historia desgraciadamente es bastante real aunque lo cuentas un poco precipitadamente. Felicidades, sigue escribiendo que lo harás muy bien.

    Escrito el 26 enero 2017 a las 10:45
  7. 7. Pilar dice:

    Hola, Oriana

    Bienvenida!!!
    Me ha gustado mucho tu texto. Es cierto que tienes que depurar muchas cosillas, pero es cuestión de práctica. En literautas tienes muchos consejos, no olvides consultarlos y sobre todo no pares de escribir. Enhorabuena!!!
    Un abrazo. Num. 105

    Escrito el 27 enero 2017 a las 12:58

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