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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Simon - por Jean Ives Thibauth

Web: http://jeanivesthibauth.WordPress.com

Si estás leyendo esto significa que eres el único superviviente y que necesitas conocer el Gran Secreto. Ya es hora de que sepas quién eres en realidad. Si mis cálculos son correctos, ahora mismo estarás debajo de la escalera que lleva al desván, o lo que queda de ella. A través de los cristales rotos de la vidriera puedes ver los primeros rayos de sol de la mañana. Son de un naranja intenso y apenas calientan pero, qué gratificante es sentirlos de nuevo, ¿verdad?

Los últimos doce habitantes ya no estamos. Has pasado tu primera noche completamente solo y ahora no sabes si comerte la última ración de los víveres que nos dejó la viuda Douglas antes de morir: una hogaza de pan y un frasco de miel. Te arrascas una oreja cuando piensas en ella. Siempre lo haces cuando estás nervioso. Pero hazme caso y no vayas a verla una vez más, por muchas tentaciones que te entren. Sabes que su cadáver no es agradable. Ahora mismo los gusanos corroen su dulce cara y sabes que esa imagen te hará vomitar.

Al desván ya no puedes subir, hace mucho que se rompió la escalera. Era muy vieja y su madera no resistió la humedad y las polillas. Aunque la viuda Douglas hacía mucho tiempo que no podía subir a causa de la artritis que carcomía sus huesos. Fue entonces cuando decidió dejarnos la comida en este hueco tan confortable en el que te encuentras ahora.

Así que lo mejor es que bajes. Junto a la entrada, dos pisos más abajo, aún queda un trozo de espejo en el que te puedes mirar.
Sabes que tienes que andar con cuidado por la casa. La viuda Douglas por fin llegó a la planta baja en su búsqueda de la fortuna del Señor Douglas. Te encontrarás con los agujeros en las paredes por donde entra este frío de invierno, las tuberías arrancadas, los muebles hechos añicos. El dinero estaba escondido por cualquier sitio.
Aún puedes escucharla diciéndote eso de “solo me faltan un par de libras para el té de esta tarde. Al senador y a su esposa les encantan las pastas con chocolate”. Ella, mientras tanto, martilleaba con gran habilidad sobre el cuadro con la imagen de la reina de Inglaterra, miraba dentro del agujero que había hecho y, arrugando el ceño con disgusto, se disponía a destrozar el piano.

Ahora la casa está toda desmantelada, como su vida social. A última hora sólo pasaban por allí el empleado de correos y el lechero. Ella salía a recibirlos con una media rota y la otra caída hasta el tobillo. Se limpiaba las manos en su mandil para saludarles, aunque sólo consiguiera ensuciárselas más. Y ellos contemplaban esas manos negras y el nido de cuervos en el que se había convertido su peinado y retrocedían cautelosos mientras se despedían con palabras a medio pronunciar.

Ella nos enseña a leer y a escribir. La paciencia fue una de sus mayores virtudes. Después de cenar la acompañábamos a la biblioteca y nos arremolinábamos a su alrededor. Al contrario que a mucha gente, le encantaba que fisgoneáramos el periódico por encima de su hombro. Nos cuidaba como si fuésemos sus hijos. Llegamos a ser tan numerosos que a todas horas se podían oír a los más pequeños correteando por cada rincón de la casa. “Mis niños clandestinos”, nos decía.

Fuimos como un regalo para ella porque nos descubrió justo cuando pasó de ser la Señora Douglas a la Viuda Douglas.
Te sorprendió husmeando en la cocina y te persiguió con su martillo dispuesta a destrozarte el cráneo. Tú te refugiaste tras la columna del salón. Ella se enredó con el vuelo de su vestido de seda salvaje y erró su tiro haciendo un escandaloso boquete en el mármol. Así pudo comprobar que la columna estaba hueca y que dentro había un fajo de billetes bien apretados. Estaba salvada de la bancarrota. Entonces te convirtió en su talismán. Nos acomodó en el desván, donde no podrían descubrirnos. Nadie entendería la extraña alianza que formamos. Ella te llamaba Simon y tú la llamabas Debbie.

Ahora que estás por fin frente al espejo hazme caso y mírate. Dime que ves. ¿Una mirada vivaracha, un cuerpo rechoncho? Sin duda no estás hecho para bailar un tango. Sigue mirando. ¿Orejas grandes, bigote y rabo?
¡Exacto!
Tío Simon, eres un pequeño roedor. Y no estás solo. Sal de la mansión Douglas y vente con nosotros. Estaremos encantados de recibirte.

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40 comentarios

  1. 1. Anael dice:

    ¡Hola Jean!

    Esta vez me toca comentarte por obligación, pero pensaba hacerlo de todos modos, no te vayas a pensar que una abandona las buenas costumbres 😉

    Tu relato me ha gustado, es simpático y nos lleva a ver la vida de la viuda Douglas a través de los ojos de su hijo predilecto 😉 Me ha encantado la sorpresa final, obliga a una relectura en la que se entiende todo mucho mejor. Al principio creía que había habido un apocalipsis zombie o algo parecido.

    Cumples bien el reto, y has utilizado un narrador en segunda con destreza lo que me parece muy complicado. Buen trabajo. Forma, puntuación y ortografía muy cuidadas, nada que decir al respecto (por sorprendente que parezca en mí) además de que se agradece mucho lo bien corregido que está. Muy buen ritmo y fluidez por el relato, no me ha costado nada seguirlo.

    Pero… Siempre hay pero. Por eso estamos aquí, ¿verdad? Pues bien, mi pero está en la frase final. He leído toda la historia y ya se me había olvidado que había un Gran Secreto que desvelar. Así que cuando dice: “Tío Simon, eres un pequeño roedor.” Me suena un poco redundante. Ya has descrito que tiene orejas, bigotes y rabo (es verdad que podría ser un gato… aunque la imagen del roedor salta a la vista primero, por eso de que está bajo las escaleras y que es rechoncho). Yo quitaría lo de que es un roedor, o a lo mejor reafirmaría lo del secreto para dar énfasis de que están desvelando algo y así hacer un efecto de quitar el telón. Parece que no confíes en que el lector vaya a adivinar que se trata de un ratón. Por eso lo cambiaría a algo así:

    “Sigue mirando. ¿Orejas grandes, bigote y rabo?
    ¡Exacto!
    Tío Simon, ése es el Gran Secreto. Eres un pequeño roedor. Y no estás solo.”

    A lo mejor sólo empeoro el final, que es gracioso y sorprendente. Pero es que si no hago sugerencias… 🙂 He disfrutado de tu texto, se ve que has tenido más tiempo para dedicarle esta vez. Muy bien cumplido el reto, que no es nada fácil en tu caso porque has estado entrando y saliendo de todos lostimepos (incluso futuro) pero está claro que el narrador está en presente y has sabido cuadrar muy bien los otros tiempos sin perder el tiempo central. Buen trabajo.

    ¡Un abrazo, nos leemos!

    Escrito el 17 febrero 2017 a las 19:15
  2. 2. Earendil dice:

    Hola, Jean.
    Coincido plenamente con la anterior comentarista. Personalmente no he tenido ningún problema en identificar la verdadera personalidad de Simon desde el principio del relato. Entiendo que la sorpresa de tal revelación estaba dedicada al protagonista, a Simon, y no al lector, por lo que yo no sé si cambiaría algo del final, como te apuntaban.
    Está claro que el ratón no tenía conciencia de su naturaleza, tal vez porque la viuda lo sobreprotegía y él se “dejaba querer”, como decimos por estos lares. O, tal vez, porque no sea condición indispensable para la subsistencia de los ratones que conozcan que lo son (No me hagas caso, es broma ☺)
    En cuanto a la forma, no he detectado faltas de ortografía ni gramática, la redacción es impecable.
    Te felicito por tu trabajo.
    Nos leemos.

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 20:10
  3. 3. Osvaldo Mario Vela Sáenz dice:

    Hola Jean, ya los dos comentaristas anteriores hicieron el despelleje suficiente de tu trabajo

    Solo me queda por agregar que tu trabajo me pareció muy bueno, tanto por su redacción como por su fácil lectura. Te felicito.

    El hecho de que Simón era un ratón se notó desde un principio pero con una pequeña probabilidad de duda. La cual se aclaro con el desenlace.

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 22:10
  4. 4. Laura dice:

    Hola Jean.
    Tu relato me tuvo atrapada desde el inicio, resultándome espeluznante por momentos. Pensaba en otra situación totalmente diferente pero lo llevaste hacia el final correspondiente.
    Con respecto a lo formal, creo que en algunos lugares has usado el tiempo pasado.
    De todos modos, un relato muy entretenido

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 22:45
  5. 5. Jean Ives Thibauth dice:

    ANAEL: Me alegro de que te halla gustado.
    Es curioso que digas que te evocaba un apocalipsis zombi o algo así porque es lo mismo que comentó mi lector beta casero.
    En cuanto al final, decirte que ya no me quedaban muchas palabras para alargar el texto y que no me quedaba otro remedio que usar “roedor” de la manera que buenamente podía.
    El uso de diferentes tiempos verbales es algo que dudé si cumplía el reto adicional. Pero pensé que podía ser una pequeña trampa literaria usar el pasado para que el narrador recordara. No te creas, que me resultó muy difícil de escribir. Además no sé si notaste la intención que tuve de narrar los hechos en sentido inverso, de final al principio. Me parecía apropiado desandar el camino para que el ratón descubriera quien era. Y eso me complicaba aún más el reto adicional.

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 23:09
  6. 6. Luis Ponce dice:

    Hola Jean:
    Aplaudo la estructura y la ambientación.
    Has sabido pintar un escenario sombrío, húmedo y solitario. La viuda detallada con esmero se vuelve notoria en la confrontación con los visitantes y su carácter desvirtuado o acentuado por su pérdida de la razón se vuelve el motor del relato.
    Interesante el uso de la segunda persona, bien logrado.
    Saludos

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 00:40
  7. 7. Miguel Mesías dice:

    Hola Jean! No tengo mucho para comentar de tu historia más que decirte que me gustó mucho y disfruté leerla. Te leí el mes pasado y no quería dejar de pasar otra vez por tus escritos.

    Bien logrado, bien escrito, una situación muy interesante, buenos personajes (linda “familia” de roedores!), buena historia, y tremendamente bien usadas las palabras de la consigna: como si las hubieras necesitado para tu relato y no fuera que tuvieras que cumplir simplemente con lo que nos pedían. Excelente.

    Felicitaciones y muchos saludos,
    MM

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 16:45
  8. 8. Jean Ives Thibauth dice:

    EARENDIL
    Muchas gracias por tus amables palabras. Es cierto que había pensado en un roedor sobreprotegido por su madre hasta tal punto que pierde su propia conciencia de ratón. Aunque igual es que es tan viejo que ya esta un poco senil, jeje.

    OSVALDO
    Muchas gracias por tus felicitaciones. Se agradecen un monton, sobre todo porque me hacen volver a tener fe en mi escritura. Con este texto no me sentía muy a gusto y mira tú que sorpresa.

    LAURA
    Muchas gracias por pasarte y comentar. Hacer que el lector quede atrapado desde el principio es una de las metas cuando escribo. Como todos, ¿verdad? Jeje. El tiempo en pasado y el futuro están escritos propósito como habrás podido comprobar en mi respuesta a Anael. Por eso no sabia si cumpliría el reto opcional.

    LUIS PONCE
    Muchas gracias por pasarte y comentar. Lo de la ambientación me ha llegado al alma. Yo es que veía la mansión Douglas y el descenso a la locura de su propietaria en mi cabeza con una nitidez asombrosa y saber que los lectores lo han podido ver con sus propios ojos me llena de orgullo. Y usar la segunda persona es difícil, no te creas.

    MIGUEL MESÍAS
    Muchas gracias por tus felicitaciones y por buscarme otro mes más. Que expresionmas graciosa has utilizado (linda familia de roedores) y es que es verdad que eran una familia. Numerosa y caotica, añadiría yo, pero una familia al fin y al cabo. Para mí eran muchísimas doce palabras y me costo crear un relato alredodr de ellas. Pensé que alguna se iban a ver muy forzadas.

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 22:29
  9. 9. Wyrell dice:

    Hola Jean, cómo va?

    Comento algo curioso primero (nada que ver con el texto): noté que tienes un enlace a tu web bajo tu nombre, yo juraría haber puesto la mía cuando envié el texto pero no aparece :/, una pena.

    Bueno, empezamos:

    Al comenzar con la historia no imaginé un apocalipsis zombie sino más bien una comedia donde el “Gran Secreto” acababa siendo algún cliché como “eres el único que puede detener el avance de los hombres termita” o algo así. No sé por qué, solo se me vino eso a la cabeza cuando leí el primer párrafo.

    Está bien logrado el avance de la historia, manteniendo la revelación de la verdadera forma de Simon hasta el final. Me gustó este detalle, no lo vi venir. Pero debo decir que el último párrafo me decepcionó un poco, no por desvelar el “Gran Secreto” (que, como ya dije, es un toque que me encantó) sino más bien por el secreto en sí. Sólo se nombró al inicio del relato y luego no se abordó más el tema, llegué a olvidarme de él. Comprendo que esto probablemente se deba al límite de palabras.

    Un saludo.

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 23:23
  10. 10. M.L.Plaza dice:

    Hola Jean Ives.
    Gracias por los comentarios a mi relato, tan pertinentes como siempre.
    Acabo de leer tu relato dos veces. Debo de ser la única persona que no se había dado cuenta de qué iba la historia. Para mí el final ha sido una sorpresa total. Además creo que no la acabo de entender. Se supone que tío Simon es el último superviviente, entonces el narrador al decirle “…vente con nosotros” ¿le está pidiendo que se suicide? ¿Todo es una broma?
    Cómo veras, a mí el final me ha descolocado por completo.
    Aún así me ha encantado leerte. Me ha parecido un texto interesante y muy bien escrito.
    Saludos.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 01:27
  11. 11. charola dice:

    Hola Jean Ives!

    Primera vez que leo un relato tuyo y me ha gustado. El narrador en segunda persona y las descripciones están bien logradas.
    Disfruté leyéndolo y mantienes la atención todo el tiempo hasta el desenlace que me pareció genial.

    Solo dos cosas:
    -“Te arrascas una oreja cuando piensas en ella”. ¿Qué quisiste poner? ¿Te rascas? No creo que sea te arrancas.
    -“Ella nos enseña a leer y a escribir”. Creo que debe estar en tiempo pasado porque lo que sigue lo está.

    Felicitaciones.

    Te invito a que leas el mío: 134. Saludos.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 08:22
  12. 12. Javier López dice:

    Hola Jean Ives, al igual que Anael, he caído cerquita pero te hubiera buscado igualmente. Me ha gustado cómo desgranas la historia a modo de testamento, aunque me queda la duda al final de cómo un ratón puede leer, pero bueno, será mi mente obtusa. También creo que hay algunos tiempos verbales que no concuerdan con el presente, que tratas de usar como parte del reto propuesto, y te quedan frases que no encajan bien, como “El dinero estaba escondido por cualquier sitio”. No es que esté mal escrito, se entiende, pero nos saca del empleo del tiempo presente del resto. Igual que en este párrafo “Ahora la casa está toda desmantelada, como su vida social. A última hora sólo pasaban por allí el empleado de correos y el lechero. Ella salía a recibirlos con una media rota y la otra caída hasta el tobillo. Se limpiaba las manos en su mandil para saludarles, aunque sólo consiguiera ensuciárselas más. Y ellos contemplaban esas manos negras y el nido de cuervos en el que se había convertido su peinado y retrocedían cautelosos mientras se despedían con palabras a medio pronunciar.” Cuentas algo que pasaba antes, por lo que salimos del ahora. En cualquier caso, buena historia. Un abrazo.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 13:42
  13. 13. Romina Eleonora Mc Cormack dice:

    Me encantó!! Las dos historias paralelas: la del roedor y la de la viuda. Humor, locura. El manejo del hilo discursivo inverso al de la historia. La trama. Todo.
    Felicitaciones.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 18:44
  14. 14. María Kersimon dice:

    Hola, Jean Yves,
    Esta vez te aplaudo bien fuerte, casi me duelen las manos, porque es la mejor historia que he leído de tí a todos los niveles (redacción, tempo, suspense, originalidad). Me llevaste por donde quisiste, super intrigada hasta el desenlace. La forma en que describes la decrepitud es un cuadro, tanto la de la casa como la de la señora. Está muy muy bien llevada… El tono general tan serio e inquietante a la vez hace presagiar un desenlace fatal y el todo cautiva tanto que uno se olvida de los tiempos verbales mezclados y apenas los ve. Yo finalmente creo que había que poner en pasado todo aquello que había ocurrido antes. Tampoco lo hice así, tratando demasiado de alinearme a las directrices dadas. Creo que hay que ser más asertivos en otra ocasión.
    No me queda más que congratularte ante tu obvio progreso. Para mí, es lo mejor que has escrito hasta ahora. Saludos

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 19:30
  15. 15. Verso suelto dice:

    Un gran relato que mantiene la intriga hasta el final. Sabes crear ambientes, para mi es lo mejor. ¿cosas mejorables? Creo que ya te las han apuntado.
    Felicidades y gracias por tu visita.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 21:54
  16. 16. R.J. Esperanza Pardo dice:

    Hola, Jean Ives Thibauth

    Lo primero de todo decirte que me ha parecido una historia muy original: la trama, la sorpresa final, la voz del narrador, la sintaxis… Yo también me apunto a la percepción de algunos comentaristas sobre que el comienzo parece una escena apocalíptica de supervivientes zombis y todo eso; pero a partir del tercer párrafo el argumento evoluciona a algo más terrenal.

    La trama está bien llevada, a ella se une la intriga por descubrir quién es el protagonista, Simon, y vas añadiendo pistas, como si fuera un acertijo.

    El narrador elegido me resulta nuevo, no estoy muy familiarizada a esta 2ª persona, tengo que estudiar cómo va esto del narrador en 2ª porque yo tenía la idea de que en estos casos quien narra se dirige expresamente al propio lector, sin embargo en tu relato habla un protagonista que está ausente (lo hace por medio de carta o grabación (?)…) dirigiéndose al protagonista Simon. Te confieso que al comienzo me he sentido un poco “amonestada” por este narrador en 2ª, creí que se dirigía a mí, luego me he tranquilizado al darme cuenta de que la cosa no iba conmigo 🙂
    El estilo en la sintaxis también me parece original, no solo porque las frases están muy marcadas y divididas con puntos y seguido (desde luego esto consigue el efecto de contribuir al ambiente sombrío de la casa), sino también porque, aunque la narración esté en presente, hay más tiempos en pasado y me resulta algo extraño. El motivo es justificable ya que el narrador parece ser también un buen amigo de Simón y quiere convencerle para que se vaya de allí a vivir con ellos y para ello necesita utilizar el tiempo pasado, que como dijo el poeta, siempre fue mejor.

    Por último, la triple O de originalidad se la lleva Simon. La elección del protagonista me ha encantado.

    Enhorabuena por un relato tan original.
    Hasta la próxima, compañero.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 22:13
  17. 17. Paola dice:

    Hola Jean

    Veo que ya te lo han dicho todo. Me ha encantado. Nunca intento entender entre lineas mientras leo un relato, es como querer saber el final de una peli antes de que acabe, prefiero dejarme llevar por el autor y ver el tuco de magia al final. Lo has conseguido.
    Me ha encantado el inicio, obligas al lector a ser protagonista y aunque es un recurso bastante utilizado, lo has hecho bien y ahí estaba yo buscando los rayos de sol. El narrador en segunda persona es todo un reto. No es fácil hacerlo bien y los has hecho.
    Enhorabuena.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 19:27
  18. 18. Ebea dice:

    Hola Jean Ives Thibauth, agradecida por tu siempre bienvenida visita, he venido a curiosear un poquito por tu espacio.

    Me ha gustado mucho tu escena, al principio pensaba en un niño y en un apocalipsis, me sorprendió el final, he de reconocerlo.

    La ambientación es fantástica y el personaje de la viuda Douglas me pareció totalmente entrañable (y un poco loco, para qué decir lo contrario). He disfrutado de la lectura y, aunque no usas siempre el presente, yo creo que sí has cumplido el reto adicional, ya que la acción y la escena tiene lugar en el presente y sólo usas el pasado para contar un recuerdo… no lo sé, la verdad, en mi escena yo tuve esa duda y finalmente no me quise arriesgar y la desarrollé toda en tiempo presente y omití los recuerdos.

    Te doy mis sinceras felicitaciones por tu gran trabajo. Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 19:43
  19. 19. Maria Jesús dice:

    Un relato original hasta más no poder, me ha gustado mucho. Solo una cosa, creo que no se dice “arrascarse”, si no “rascarse”. Por lo demás genial. Un saludo.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 20:35
  20. 20. Isan dice:

    Hola Jean Ives:

    Hs disfrutado mucho con tu relato simpático e imaginativo. Una carta invitándole a alguien a abandonar la casa. Has hecho una descripción soberbia de la casa en ruinas que, poco a poca se fue cargando la viuda en busca de más pasta.

    Coincido con Anael en que se intuye que estamos ante un roedor, por eso el final no es necesario que lo explicites. Yo he pensado otro final. Tal vez si se le dice que se mire y acepte su realidad, o algo así.

    Únicamente comentar ese “arrascar” que le sobra la primera A. Error muy extendido y que yo practico asiduamente (el error y la acción).

    Tal vez los retos de este mes se prestaban más a relatar historias sin muchas complicaciones o al menos así lo percibí yo, lo cual no ha sido óbice para que hayas hecho un trabajo muy elaborado. Ha sido un placer como siempre leerte.

    Hasta otra.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 21:23
  21. 21. Yoli dice:

    Hola, Jean.
    Gracias por comentar mi relato. El tuyo me ha gustado mucho, lo he encontrado original, y como Ebea, yo también pensaba que el protagonista era un niño, aunque con el transcurrir del relato es cuando he ido notando que no lo era. Muy buena descripción de la casa, y aunque la viuda Douglas no este muy bien de la cabeza, me ha caído simpática. Te seguiré leyendo.
    Saludos.

    Escrito el 22 febrero 2017 a las 12:23
  22. 22. marazul dice:

    Hola Jean Ives:
    Me sumo a los aplausos. No solo me ha encantado la historia por su originalidad en cuanto al tema, sino que he disfrutado mucho con las descripciones: “Ahora la casa está toda desmantelada….con palabras a medio pronunciar”. Este párrafo es magnífico.
    Muy acertada la estructura que le has dado al texto que se convierte en una gran metáfora:¿prosopopeya,se llama esta figura retórica? y además con el añadido de encajar tan bien las doce palabras y el reto.
    Un buen trabajo, ameno, original…me ha encantado
    Imposible “despellejar” nada jeje…
    Saludos, Jean Ives

    Escrito el 22 febrero 2017 a las 12:46
  23. 23. beba dice:

    Hola, Jean Ives:
    Me faltan manos para aplaudirte. Y, felizmente no tengo que usar las mías para señalar ninguna “sugerencia”. Simplemente genial: rico en imágenes y en imaginación; construcción impecable; entretenido y consistente.
    UN gusto haberte leído. Y muchas gracias por tu visita y amable comentario.

    Escrito el 22 febrero 2017 a las 13:04
  24. 24. Lorkiano dice:

    Hola Jean Ives:

    Te devuelvo la visita y me uno a los comentarios de Charola y Javier López.

    El relato me ha gustado mucho, pero me descoloca descubrir que es un ratón el que está leyendo todo (y resulta que la viuda a quien en realidad estaba enseñando a leer y escribir era a unos ratones). Sobre todo cuando le dice que no vaya a ver su cadaver porque la imagen le haría vomitar.

    Original, sobre todo con el giro final, y muy bien escrito.

    ¡¡Felicidades!!

    ¡Nos leemos!

    Escrito el 22 febrero 2017 a las 19:31
  25. 25. PEPE ILLARGUIA dice:

    Muchas gracias Jean por tu paseo por mi viejo barrio. En tu caserón a medias derruido me he encontrado unas cuantas cosas para comentar:
    -(Forma) Mezclas los tiempos verbales, abusando muchas veces del infinitivo de los que he contado que superan la decena, y del gerundio otro montón. Me explico, el verbo es el centro neurálgico de la frase, y todo lo demás gira a su alrededor. Si analizas el último párrafo, está plagado de verbos, estás lo repites tres veces, luego las acciones cambian según el modo verbal: del imperativo, hazme, mírate, sigue mirando, sal, vente; al infinitivo, bailar. Y por último la frase final podía haber finalizado con un: te recibiremos encantados.
    -(Contenido) No tiene más importancia, pero ¿no te extraña que estando en los primeros rayos del día con un sol anaranjado de primavera, y luego el correo y el lechero aparezcan por la tarde? Creo que es la única ciudad del mundo en la que ocurre eso.
    De todos modos, no es de extrañar con la viuda Douglas, estos ingleses están un poco locos, casi como este caótico relato.
    La segunda persona es muy difícil de manejar y tienes un reto por delante en próximas aventuras.
    Un abrazo compañero.

    Escrito el 22 febrero 2017 a las 22:43
  26. 26. Menta dice:

    Buenos días Jean Ives Thibauth:

    Ayer por la noche empecé a leer tu relato y el primer párrafo ya me cautivó. Entonces me dije: ¡Esto promete, lo voy a dejar para mañana cuando mi cabeza esté fresca! Lo he leído ya varias veces y también los comentarios (para no repetirme) y tengo que felicitarte porque me ha gustado mucho. Me uno a todos los compañeros que te han felicitado.

    También te doy las gracias porque ahora voy a estudiar lo del narrador en segunda persona para ver si también practico esto.

    Muchas gracias por haber compartido tu escrito con todos nosotros. Un saludo. Menta

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 09:05
  27. 27. Berundgaar dice:

    Hola, Jean Ives Thibauth.

    Te devuelvo la visita y el comentario. Curiosamente, desde el primer momento ya me he olido que el protagonista no era humano, aunque no sé decirte la razón.

    Es un cuento precioso, tierno y gracioso a partes iguales. Rezuma tanto nostalgia como esperanza y la verdad, me ha hecho sonreír en varias ocasiones.

    He disfrutado “como un cerdo en el fango” XDXD.

    Sólo un par de cosillas. Una ya te la han comentado. Lo correcto es “rascar” y no “arrascar”, aunque sé de mucha gente que lo pronuncia y escribe así.

    La segunda es que al principio de un párrafo hay dos verbos que no están en el mismo tiempo,
    “Ella nos enseña a leer y a escribir. La paciencia fue una de sus mayores virtudes…”
    Todo el párrafo está en pasado, excepto la primera frase. O todo en pasado, o todo en presente, como prefieras.

    Y ya no te digo nada más, porque no hay nada más que decir, el relato engancha desde el primer momento y a pesar de tratar el deterioro de la Sra Douglas, al estar contado desde el punto de vista de Simon, te deja un sabor de boca realmente agradable.

    Mil gracias por alegrarme el día.

    Un saludo.

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 09:54
  28. 28. ortzaize dice:

    original relato, de los ratones( creo)
    la señora douglas es muy interesante y su deterioro muy bien redactado.
    me ha gustado gracias.

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 14:00
  29. 29. lectora70 dice:

    Hola Jean Ives!

    Muchas gracias por pasar por mi relato y comentarlo!

    Veo que los compañeros ya te han hecho muchos comentarios técnicos.

    Yo te daré mi opinión personal. Tu historia me ha gustado mucho. No esperaba que fuese un ratón… Jajaja. Muy original!

    Felicidades!

    Te seguiré leyendo!

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 19:02
  30. 30. Baltasar dice:

    Hola, Jean:
    Muchas gracias por tu lectura y comentarios. No entiendo muy bien qué quieres decir con «amontonado mucho el texto». Si lees ─lógicamente en mi relato─ el comentario que hago al que me hizo la compañera ─no ero─, Mateo, puede que te aclare algo. No lo sé.
    Y no lo sé porque estoy realmente hecho un lío. Tú, que has elegido un narrador en segunda persona, perfectamente, pero eh aquí el problema: tú, yo también, hemos aceptado el reto «de escribir el relato en tiempo presente, ¿y? En tus dos primeros párrafos encuentro: «sepas, estarás, has pasado, dejó, hará… », ni un solo presente, bueno sí, «sepas», pero en modo subjuntivo.
    Yo, como habrás visto, narro en primera persona; pero me han puesto verde, tanto Nora, como la señora Mateo. Me agradaría echaras un vistazo a mi contestación a esta última.
    Y ya estoy contigo.
    Muy simpática la historieta de tu ratoncito Simon y muy bien escrita. Te felicito. Si he de serte sincero, con el «Gran Secreto» imaginé que ibas a introducirnos en algo así como «Crónicas Marcianas» de Ray Bradbury. Luego todo fluyó por una historieta de ratoncicllos, amena, framcamente bien escrita y, sobre todo, con ritmo. Felicidades de nuevo.
    Solo unas cosillas de no demasiada importancia, que citaré por orden de aparición.
    Los verbos ya dichos, ninguno en presente y que por tanto no responden al reto de escribir el relato en tiempo presente. Para no repetir lo que escribí, te agradecería vieras mi contestación a la señora Mateo.
    «arrascar». No lo contempla nuestro Diccionario.
    “solo me faltan un par de libras…” Jean, permíteme. ¿Por qué no utilizas las comillas angulares («»)? Date cuenta que en todo lo que leas son estas comillas las que se usan. Las inglesas (“”) se usan cuando dentro del entrecomillado con angulares hay otro texto que ha de ir entre comillas de nuevo. Espero este uso en la escena de marzo.
    «Ella nos “enseña” a leer y escribir». Creo es, Ella nos enseñó: como lo prueba, «la paciencia fue…
    «pasó de ser la Señora Duglas a la Viuda Duglas». señora y viuda son dos sustantivos comunes; por lo tanto, en minúsculas. Seguro que has leído más de una vez: El rey Felipe VI. Puesto que rey es un sustantivo como señora o viuda.
    «Dime que ves». Qué acentuado, como oración interrogativa indirecta que es.
    Pues nada más, amigo Jean. Hasta la próxima.
    Un abrazo.

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 20:29
  31. 31. Maria Jesus Hernando Navas dice:

    Hola Jean, me dijiste al comentar el mio que despellajara el tuyo. Lo siento no puedo cumplir tu deseo. Me parece muy simpatico y bien escrito, vamos que me ha gustado la historia. No me extiendo más, un saludo y nos seguimos leyendo.

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 22:31
  32. 32. Rita dice:

    Hola, Jean.
    Un buen relato; muy interesante. Me ha pasado como Anael: al principio pensé que hubo una especie de apocalipsis o algo parecido. Me ha gustado mucho la primera frase; por lo menos a mí me ha enganchado y animado a leer, ya que me encantan las historias de apocalipsis. Eso no quiere decir que me haya decepcionado. Ni mucho menos: ha sido muy entretenido.
    En cuanto a los mejorables, vamos a ello:
    1. “apenas calientan pero, qué gratificante es…”. La coma va antes de “pero”: “apenas calientan, pero qué gratificante es…”.
    2. Los roedores no necesitan subir al desván por las escaleras. Pueden hacerlo por dentro de las paredes, por ejemplo. Esta parte no es muy coherente.
    3. “El dinero estaba escondido por cualquier sitio.”. Esta oración suena rara. No sé en qué lado del charco estás (ni si se dirá así por allí), pero en España es así: “El dinero estaba escondido en cualquier sitio.”.
    4. “se podían oír a los más pequeños…”. El verbo (podían) es impersonal en este caso, por lo que no hay sujeto. Por ello, debe ir en tercera persona del singular: “se podía oír a los más pequeños…”.
    5. “Entonces te convirtió en su talismán.”. Después de “Entonces” va coma: “Entonces, te convirtió en su talismán.”.
    6. “Ahora que estás por fin frente al espejo hazme caso y mírate.”. “por fin” va entre comas: “Ahora que estás, por fin, frente al espejo hazme caso y mírate.”. También podría ponerse así: “Ahora que, por fin, estás frente al espejo hazme caso y mírate.”.
    7. “Dime que ves.” Ese “que” lleva tilde, ya que introduce una pregunta (¿Qué es lo que ves?): “Dime qué ves.”.
    8. “Sin duda no estás hecho para bailar un tango.”. Después de “Sin duda” va coma: “Sin duda, no estás hecho para bailar un tango.”.
    Prueba a leer el texto en voz alta para la puntuación. Te ayudará.
    9. “Te arrascas una oreja cuando piensas en ella.”. Aquí te han comentado que es “rascas” en lugar de “arrascas”. Sin embargo, ambos están bien: arrascar existe y es lo mismo que rascar.
    Creo que el reto lo cumples bien, a pesar de utilizar tiempos pasados, pero siempre que lo requiere, dejando lo que tiene que estar en presente tal cual.
    Tengo que decir que, salvo los fallos que te he señalado, el tuyo es un texto muy limpio. Pocos como éste se ven.
    Espero haberte ayudado. Sigue así.
    Si te apetece pasarte por mi relato, soy el 117.
    Nos leemos.

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 23:11
  33. 33. Rita dice:

    Corrijo, en el tercer fallo que te señalo sería así: “El dinero estaría escondido en cualquier sitio.”. Es una suposición, por lo que el verbo tiene que ser en condicional. Léelo en voz alta y verás que suena mejor.

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 23:43
  34. 34. Rita dice:

    Se me olvidaba jaaja
    Me parece muy valiente por tu parte el uso del narrador testigo. Me parece una elección difícil, pero tú lo has desarrollado muy bien a lo largo del texto.
    Y ya está jaaja creo que no se me olvida nada xD

    Escrito el 23 febrero 2017 a las 23:55
  35. 35. Wolfdux dice:

    Me gusta la manera en la que nos presentas la trama y nos conduces por ella. Me ha parecido ver un par de cosas a revisar, pero los compañeros ya las han mencionado todas así que no me repetiré. Me había olvidado por completo de la palabra roedor y la sorpresa a sido mayúscula desvelándome el gran secreto, jeje. Felicidades.

    Escrito el 26 febrero 2017 a las 11:26
  36. Hola, Jean Ives Thibauth
    Un relato muy original, el narrador en 2.º persona me ha resultado muy interesante, ayuda el desarrollo de la historia.
    Las imágenes tienen fuerza y recrean muy bien el escenario.
    Bueno, ¿ya te han dicho que es una historia genial? Pues para mí lo es.
    Otros compañeros te han dejado muy buenas sugerencias.
    Un saludo.
    Liliana.

    Escrito el 26 febrero 2017 a las 19:45
  37. 37. Cryssta dice:

    Hola Jean Ives, después de todo lo que te han dicho los compañeros a mí solo me queda aplaudirte y felicitarte por tan buen relato.

    Escrito el 28 febrero 2017 a las 11:06
  38. 38. Jean Ives Thibauth dice:

    Muchas gracias a todos por leer, comentar y aportar sugerencias. Siempre se aprende un montón.
    Ahora voy a pasar a contestaros uno a uno.

    WYRELL:
    Yo solo puse el enlace al blog en la casilla correspondiente. A las malas, si hay algún error siempre puedes incorporarlo a un comentario posterior una vez se publique tu relato.
    Me alegro haberte sorprendido con la identidad de Simon. No me lo esperaba ya que todos sabíamos las palabras que estaban en juego.
    Tienes razón al decir que el secreto queda desvelado con el resto de la historia. Creo que es algo en lo que tengo que trabajar.

    M.L.PLAZA:
    La verdad es que la palabra del inicio “superviviente” puede inducir a error porque Simon no lo es del planeta tierra, solo de la mansión Douglas. Estuve dudando de si dejarla, sustituirla o buscar otra manera de empezar el relato. Pero como no se me ocurrió nada mejor lo dejé a ver qué me decíais. Al fin y al cabo esto es como un laboratorio donde experimentar.

    CHAROLA:
    Gracias a tí he descubierto una palabra que uso y que no existe. Al parecer es un vulgarismo. Me encanta haberla descubierto. Muchas gracias. Aunque he de decirte que me parece que tiene más fuerza “arrascar” que “rascar” jeje.
    La frase que comentas que debería estar en pasado, al igual que lo que la sigue, es una de las muchas partes donde dudé. Yo quería cumplir el reto adicional y tenía los tiempos verbales alrededor de mi cabeza danzando caoticamente y mareándome.
    Pienso que igual queda mejor “Ella fué la que nos enseña a leer y escribir”, por no romper el ritmo. ¿Tú qué piensas?

    JAVIER LÓPEZ:
    Muchísimas gracias por tu fidelidad.
    Creo que somos unos privilegiados por poder dar vida a las cosas absurdas que nos pasan por la cabeza. No se cómo un ratón puede leer y escribir, pero tampoco entiendo que Micky Mouse tenga un perro de mascota. jejeje.
    Lo de salir del tiempo presente y utilizar el pasado lo usé como recurso para contar acontecimientos ocurridos con anterioridad sin estropear el ritmo en presente de la carta. Igual hice trampa para poder cumplir el reto adicional, pero es con lo mejor que me pude arreglar.

    ROMINA ELEONORA MC CORMACK:
    Gracias por tu entusiasmo. Me alegro de que te hallas dado cuenta de que el hilo discursivo estaba a la inversa. Fué todo un reto elaborarlo.

    MARÍA KERSIMON:
    Aún estoy oyendo tu ovación. Gracias por seguir mi evolución. Espero estar a la altura en el próximo relato.

    VERSO SUELTO:
    Me alegro haber coseguido intrigarte hasta el final. Me parecía ovbio por las palabras que teníamos que utilizar. La creación del ambiente no me costó mucho y yo creo que era porque lo veía con precisión en mi cabeza.

    R.J.ESPERANZA PARDO:
    El narrador en segunda persona es un reto lo mires por donde lo mires. No es fácil utilizarlo. El más familiar para mí es, sin duda, el que utilizamos cuando escribimos una carta. Por eso lo escogí.
    Me ha llegado muy hondo la “triple o de originalidad”. Muchas gracias por esa expresión tan “original”.

    PAOLA:
    Me alegro haberte llevado a mi terreno, jejej. Como aprendiz en esto de la magia no es fácil mantener el truco bajo el sombrero todo el rato.

    …Y seguimos en un rato.

    Escrito el 28 febrero 2017 a las 20:47
  39. 39. K. Marce dice:

    Saludos Jean Ives:

    Muchas gracias por leer mi texto, disculpa la tardanza de llegar al tuyo; culpo a mi prveedor de servicio de Internet que nos dejó varios días sin servicio.

    Lo malo de llegar tan tarde, (ya me he pasado aún leer el reto de marzo), es que todo parece estar dicho. Confío en que los compañeros han repartido buenos consejos y que todo es para el bien de tu texto.

    En cuanto a mi opinión, te la daré como lectora. Me ha gustado mucho esa ambiguedad en la información, pareciera que todo ocurrió después de una gran catastrofe, que esos pobres “apostoles” (doce) no han sobrevivido, sino solo uno. Y para colmo se llama Simon… jejeje. En fin, que me ha gustado la viuda, un poco impulsiva y que me hizo pensar que quizá era loca, (¡¡¡quien ataca con un martillo a otro???) para enterarme que era una gran familia de roedores.
    Y yo amo a esos animalitos, así que espero que los otros once, se hallan muerto de vejez o de gordura de tantas atenciones de “Debbie”.

    Me ha gustado mucho, ha sido fácil de leer, creo que aunque se perdieran algunos tiempos verbales como reto, no le ha quitado nada; porque si alguien fuera del taller lo lee, no verá esos detalles que nosotros buscamos con lupa.

    Contigo concluyo mis lecturas atrasadas del día, no quería dejarte fuera y me voy a la cama pensando en el tío Simon, que me has hecho recordar a mi primera mascota ratón cuando yo tenía diez años de edad. Mi madre no lo persiguió con martillo en mano, pero lo rescaté de su escoba y lo hice mi mascota por unos meses.

    ¡Nos leemos!

    Escrito el 3 marzo 2017 a las 10:14
  40. 40. Raymond Carr dice:

    Hola, Jean Ives Thibauth.
    Formalmente el relato de este mes está muy bien. Lo que pasa es que no soy capaz de encontrar un contenido digno de recordar. Tiene mucho mérito describir una peripecia tan complicada, sin duda. Pero no veo lo que quieres contar.
    Hasta pronto amigo.

    Escrito el 14 marzo 2017 a las 20:20

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