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Confesiones - por Edu SC

Mi futura esposa, Valentine, se siente triste esta mañana. La muerte de su vecino, el muy respetable señor Romero, la ha afectado más de lo que pensaba. Ni siquiera el regalo, en forma de bollo de canela de su pastelería favorita, parece animarla. Deja el bollito a un lado, me abraza y me ruega que visite a Catalina, la desdichada viuda. La mujer, demostrándome gran aprecio, ha preguntado en repetidas ocasiones por mí. Y yo, que desde ayer tengo el firme propósito de ser un hombre fiel, ardo en deseos de complacer a Valentine. Así que me dirijo a ver a la viuda.

—Nunca le fui infiel, nunca en estos doce años. ¿Puedes creerlo, Charles?— dice poco más tarde Catalina, mientras tomamos el te. Al preguntar se estira y muestra su estupendo cuerpo, vestido con escasa tela negra, como queriendo reafirmar la dudosa probabilidad de tales hechos. Notando la boca seca, me limito a asentir.

—Pero, guárdame el secreto Charles—continua ella—, yo no le amaba. Aunque nunca le traicioné, mi corazón pertenecía a otro. Y sí, deseé carnalmente a otros hombres, con un fuego que en ocasiones temí acabara abrasándome, pero mantuve mis votos. ¿Acaso no he cumplido? Dime.

Asiento de nuevo.

—¡Oh, Charles, lo siento!, qué terribles confesiones para un alma joven como la tuya. Ven, bailemos un tango, a él le habría gustado. Adoraba el tango, le recordaba a su tierra.

Se levanta y pone en marcha el gramófono. Y bailamos. Cogidos de la mano, noto la frialdad de la alianza que aún lleva contra mi piel. Después, siento la calidez de su boca contra la mía. Luego…me pierdo en múltiples sensaciones.

——————————————————-

De pie ante Valentine y sus padres, tratando de evocar el perfume de Catalina para que me sirva de talismán en mi ardua tarea, expongo la nueva situación: no habrá boda.

—No se trata de ti, Valentine, soy yo. Despreciable, es cierto, pero no puedo sino obedecer a mi corazón. Y éste me dice que, por el momento, pertenece a Catalina, ya ves. No estoy hecho para el matrimonio, Valentine, en el fondo creo hacerte un favor al romper nuestro compromiso.

Valentine no dice nada, permanece cruzada de brazos. Su madre, la señora Durrell, lanza un gemidito ahogado. Temo que se pueda desmayar, tal y como hizo al anunciarse nuestro compromiso, pero aguanta. El que me preocupa de verdad es Tom Durrell, el padre de Valentine. Mientras hablo, su rostro adquiere un extraño color naranja que deriva rápido hacia tonos más oscuros. Su nariz se contrae hacia arriba, se estira el labio superior mostrando los dientes y se hinchan los mofletes, dándole el aspecto de un roedor morado de ojos enfurecidos. Completada su transformación en el momento de finalizar mi discurso, el señor Durrell, sin mediar palabra, asciende la escalera saltando los escalones de tres en tres. Se escuchan ruidos metálicos en el piso de arriba, objetos que caen al suelo y, al cabo de un momento, le veo bajar. Blande un sable en una mano y lo que parece un frasco de pastillas en la otra, apretado contra el pecho.

—¡Tú, bellaco!—grita apuntándome con el sable— Consentí en que trataras de robarme a mi hija. ¡Pero no consentiré que robes a la mujer que amo!, ¡no ahora que por fin puede ser mía!

Tras estas palabras hay unos instantes de silencio rotos por el golpe que produce el cuerpo de la señora Durrell al caer desmayada.

—¡Mamá!
—¡Clarice!
—¡Tom!

Me giro. En la puerta, hermosa en un vestido largo y oscuro, veo a Catalina. El padre de Valentine ha arrojado el sable y corre hacia su esposa pero, a un paso de llegar se detiene y aferra su pecho con una mano mientras trata en vano de abrir el frasco con la otra. Se desploma justo al lado del cuerpo caído, retuerce las manos contra el pecho y, al final, exhala un gruñido y queda quieto.

Mi deseada Catalina, Valentine y la esposa del señor Durrell que, justo entonces, recobra el conocimiento, se arrojan sobre el cuerpo caído. Al parecer no tienen problemas en compartir partes del pobre hombre, para arrojar copiosas lagrimas sobre las mismas.

Yo, ignorado, plantado en medio del salón, vivo pero sumido en la soledad, no dejo de preguntarme si alguien me llorará así el día de mi muerte.

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14 comentarios

  1. Edu, me pareció muysimpático tu relato, nos deja saboreando una sonrisa.

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 12:57
  2. 2. Bea dice:

    Hola Edu:

    Al igual que a Clara, me ha parecido un relato muy simpático y gracioso, con un cariz melancólico y puede que en ciertos momentos sugerente.
    Me ha gustado mucho como íntegras las palabras en el texto y la forma en la que describes lo que sucede.
    Sin embargo, me he perdido un poco en los hechos del final. Creo que a podido ser debido a la rápida consecución de los hechos, en esos momentos en los que sucede todo tan rapido y hay tanto jaleo duele suele ser difícil narrarlos, a mi también me pasa. Pero bueno eso con la práctica se resuelve.

    Si te apetece estoy en el 230.

    ¡Sigue así, nos leemos!

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 19:36
  3. 3. Edu SC dice:

    Hola Clara y Bea, muchas gracias por vuestros comentarios.

    Bea, agradezco mucho tu comentario final. Es algo en lo que procuro trabajar, la clardidad. El primer filtro que paso, que es el de mi mujer, en muchas ocasiones obtiene un resultado en forma de “No he entieeeendo nada”,así tal cual. Así que, después de eso, trato de aclarar la situación que, por supuesto, en mi mente es cristalina. Agradezo mucho que alguien me lo diga si no lo entiende. Me ayudará a seguir tratando de mejorar.
    Dicho esto, reconozco que me ha costado mucho esta escena. Las doce palabras no me han aportado mucha inspiración y no estoy especialmente orgulloso del resultado obtenido, pero no quería faltar a la cita.
    No he encontrado tu nombre en la lista Clara, así que no puedo comentarte. Me paso por el tuyo lo antes posible Bea.
    Un abrazo.

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 20:14
  4. 4. Earendil dice:

    Hola, Edu.
    Ante todo, quiero agradecer tu paso por mi relato y tus amables palabras.
    ¿Del tuyo? Me ha gustado su aroma a película en blanco y negro, dramático y sensual a la vez, pero con ese pequeño toque de humor que suaviza la tragedia.
    Tal vez sea el lenguaje que has usado, con palabras como “gramófono”, y expresiones un tanto decimonónicas para describir las situaciones. Pero me ha gustado y, ya te digo, he visto pasar las escenas como en una película antigua.
    En cuanto a la parte formal, no he visto faltas de ortografía ni nada que merezca una revisión ni mejora.
    Me alegro de haber pasado por aquí, aunque estés el último de la fila ☺
    Un saludo

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 20:52
  5. Hola Edu! Lo prometido es deuda…
    En cuanto a la parte estética solo me ha parecido ver un error “te” en lugar de “té”.
    Tengo dudas respecto a la corrección de usar coma después del pronombre “Yo, ignorado…” También tengo dudas si es correcto decir “consentí en que…”, de hecho frases más tarde utilizas la forma que considero más correcta “consentí que”. Quizá querías utilizar “cedí en que”.
    Luego esta frase me ha descolocado bastante “Y yo, que desde ayer tengo el firme propósito de ser un hombre fiel, ardo en deseos de complacer a Valentine” no entiendo muy bien el comentario de la fidelidad, creo que no hace falta porque luego se describes los hechos.
    También creo que se podría ganar en los diálogos evitando las repeticiones de los nombres Charles o Catalina y acortando las aclaraciones tras los diálogos.
    La parte final me ha encantado, ha sido como una comedia, muy coral con todos los personajes desfilando y muy divertido. He de confesar que me has arrancado una sonrisa y eso es difícil en mi y como escritor.
    En resumen buena historia, divertida, con algún cliché que otro, pero divertida.

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 21:12
  6. 6. María Esther dice:

    Hola Edu SC te devuelvo la visita con mucho gusto.
    Tu historia fluye bien, se lee con facilidad, sin tropiezos.
    Es una comedia como ya te lo han dicho,que resulta por momentos tragicómica, donde el protagonista se queda solo y desamparado.
    Sigue escribiendo.Nos leemos.
    Maritel

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 04:34
  7. 7. Diego Manresa Bilbao dice:

    Hola Edu,
    Considerando la dificultad del reto, te ha quedado aparante el relato. Fluido, aunque un poco confuso, ya que habia que poner las doce palabras.

    Un saludo y nos leemos!

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 13:36
  8. 8. Juan Sauce dice:

    Hola, Edu.

    Al igual que a mis compañeros, a mí también me ha hecho sonreír tu relato. El principio aparentemente trágico se torna en comedia alcanzando su cénit, por lo menos en mi opinión, en el momento en que el padre de Valentine comienza a cambiar de color y después baja con el sable con la auténtica revelación. ¡Muy cómico!

    Cambiaría alguna frase, más que nada por cómo suena: “Ni siquiera el regalo, en forma de bollo de canela de su pastelería favorita, parece animarla” por “Ni siquiera el bollo de canela, que le he traído como regalo de su pastelería favorita, parece animarla”. O “Cogidos de la mano, noto la frialdad de la alianza que aún lleva contra mi piel” por “Cogidos de la mano, noto en mi piel la frialdad de su alianza, que aún lleva puesta”. Pero esto suele ser bastante subjetivo, cuestión de gustos.

    El final, a pesar de la cantidad de personajes, a mí me parece que lo has llevado satisfactoriamente. Aunque como, para mí, el punto álgido me ha quedado unos párrafos más atrás, no me ha dado la sensación de ser tan redondo. De nuevo supongo que esto es cuestión de gustos.

    Resumiendo, muy divertida la historia y bien logrado el reto por tu parte. Te lo dice un compañero de unos textos más atrás. ¡Saludos!

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 16:15
  9. 9. Alush dice:

    Querido Edu:
    Llegué a tu texto por ser el último ,así como para hacerte compañía.
    Y me encantó tu cuento. Llevadero, fresco, con humor y fluye.
    El final es original y en la forma de escribir me permitiste poder imaginarme la historia como en un escenario de teatro.
    Nos seguimos . Si tenés ganas pasate por mi cuento
    Alush

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 22:08
  10. 10. LIAH PERSON dice:

    Hola Edu SC,
    un relato muy teatral. Me he imaginado a los personajes encima de un escenario, sobre todo en la escena final que se convierte en una tragi-comedia o comi-tragedia (si es que esto existe) de enredo, genial. Lo que no tengo claro es si tu intención real era provocar esa comicidad, o si tu narración iba más enfocada al drama puro y duro.
    En cualquier caso, lo que importa es el resultado final y lo que despierta en el lector; y en ese sentido, el relato engancha.
    Un saludo

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 14:40
  11. 11. John Doe dice:

    Hola Edu, cómo siempre un placer leer tu relato. Me ha gustado mucho la manera como íntegras las palabras del reto y la estructura del relato, el tono en el que esta escrito y el ritmo que genera. Los personajes son simpáticos y divertidos y el giro del final verdaderamente gracioso. Nos leeremos en la próxima ocasión. Un abrazo.
    Si quieres pasar por el mío estoy en el 232. Saludos.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 14:48
  12. 12. María Kersimon dice:

    Hola Edu, una comedia muy lograda. visualicé como sobre un escenario toda la escena (valga la redundancia) y me ha parecido que tenía una gran teatralidad. todo es movimiento, cambio de entornos, cambio de personajes… Un buen sainete, lleno de equívocos, de sorpresas jocosas, que no dejan al espectador indiferente, sino que más bien le alegran el momento.La integración de las palabras en el texto genial, y como transcurre al momento, no tuviste problemas con el tiempo verbal. Se trata de un divertimento ligero, pero bien logrado. No se diría que te ha resultado difícil. Saludos.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 17:49
  13. 13. Servio Flores dice:

    Hola Edu SC, el relato muy bueno, ágil. Se lee con mucho humor. Me recordó algun entremes de Cervantes. Si no ha leído los entremeses de Cervantes, como recomendación de lectura es algo que puede abonar a su cultivo del oficio.

    Al final me perdí un “pixin”.

    Felicidades, nos seguimos leyendo.

    Escrito el 22 febrero 2017 a las 02:06
  14. 14. Cryssta dice:

    Hola Edu, desde la primera vez que te leí he tenido la sensación de que tú y yo somos almas gemelas en esto de la Literatura. Tenemos un estilo parecido en cuanto a la forma y mira tú por dónde esta vez los dos hemos escrito humor. Vamos a tener que plantearnos el escribir un libro juntos, jeje.

    Una vez más me ha encantado tu relato.

    Escrito el 24 febrero 2017 a las 14:22

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