EL MENTIROSO - por el chaval

EL MENTIROSO

Hay que ser valiente para ser mentiroso y, si saben aguantar la mentira no es fácil saber si es verdad o están engañando. Se suele decir que si son piadosas, infantiles, tontas, o es para hacer el bien, no son tan mentiras.
Un vecino de escalera me pone en antecedentes que, en una obra cercana trabaja un tipo de lo más mentiroso, porque dice que es << montañista>>, que se cuida junto con otros amigos de limpiar de escombros las montañas; que es novelista y también <<ojista>>; de esos médicos que se cuidan de la vista. Ante esos adjetivos tan peculiares me mueve la curiosidad por conocer a esa persona y sobre todo por la palabra novelista.
Es una empresa de restauración de fachadas en sistema vertical, donde emplean cuerdas, mosquetones, anclajes, y también un arnés en forma de plataforma-silla para ir desplazándose verticalmente en su trabajo.
–Bien, le digo, por lo que hace es posible que sea montañero o alpinista y le sirva para su trabajo.
–También es novelista?. Bobadas, pregúntele, me dice, pregúntele, si no me cree. Yo siempre digo la verdad.
— Hombre, puede ser que lo haga para subsistir de escritor ( que no es difícil llegar a ello ) o trabaje en este oficio tan peligroso porque le guste como afición o entrete- nimiento. — Mire usted, el escritor y poeta italiano Erri de Luca es un gran enamorado del alpinismo, y no se olvida de añadir algún comentario sobre ello en sus escritos.
Decido saludarle así que le veo bajar de su andamio particular para hablar de sus obras, literarias claro, puesto que es interesante saber de otras personas que se dedican al loable ejercicio de mover palabras para encontrar un sentido a lo que se quiere explicar.
Es una persona joven, aparenta tener la cuarentena; delgado y mediana estatura, con manos grandes y callosas en consonancia con su duro oficio. Me imagino un lápiz en sus manos, pero seguramente le tratará con delicadeza y cariño, haciéndole resbalar con suavidad sobre el papel. Lleva en la mano izquierda unas gafas grandes muy tapadas, como de motorista << seguramente sean para protegerse mejor de los golpes o raspaduras en las paredes, pero recuerdan a un antifaz >>.
Es afable y sonriente y, a bote pronto me intereso cómo puedo saber los títulos de sus obras, donde puedo encontrar su bibliografía, ya que siento curiosidad como aficiona- nado a leer y además con la suerte de conocer a un escritor.
Se me queda mirando estupefacto. – ¿De dónde ha sacado que soy novelista?—
–Conozco a la persona que me lo ha contado; es el señor que me ha dicho que habla con usted a menudo; y para más señas es alto, delgado y siempre va con un diccionario de latín con tapas verdes bajo el brazo.
Se estremece convulsivamente de las carcajadas que le hacen doblar el cuerpo y repitiendo sin parar –¡novelista!–¡novelista!–, cuando soy un simple lector de comics infantiles y alguna novela negra .
–Oiga, que todavía hay algo más, me ha dicho que usted es oculista; él lo llama “ojista” el médico que se cuida de la vista.
Pobre hombre, está rojo por falta de aire; — Quiere un poco de agua? . Por señas me indica una cantimplora adosada a la pared, mientras descansa sobre un bidón de hojalata apretándose con una mano el estómago, mientras se seca el sudor y las lágri- mas.
Menos mal que está agotado, porque al decirle esto último, exclama;—Este tío tergiversa las cosas y además es inculto y mentiroso; el que le haya hablado de que vivo frente a un oculista, que seamos amigos y me explique muchas cosas de oftalmología, y que por desgracia, le haya comentado a este tipo no quiere decir que yo también sea médico.
Nos despedimos, y jurando en broma que si ve desde las alturas a éste individuo, le tira encima una palada de cemento y a continuación agua, para que quede como una estatua Aprovecha para darme una entrada de cine ( en la calle Chaplin, n•22,) –donde exhibimos documentales de escalada y alpinismo, con el fin de recaudar fondos para nuestro club y una asociación de voluntarios ayudar en la recuperación de excursionistas y personas extraviadas en peligro de accidentes de montaña.