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"Apartamento tranquilo y económico. Se alquila para fijo" - por marazul
Susana esperaba la llegada del autobús. Se subió la cremallera de la cazadora con firmeza, luego metió las manos en los bolsillos y se entretuvo observando las deportivas blancas ya algo gastadas. No estaba nerviosa pero sí impaciente por llegar al número veintinueve de la calle Paraíso, su destino y última parada.
En el autobús, sentada junto a la ventanilla, miraba distraída el coche gris que estaba parado junto a ellos en el semáforo, tenía los cristales tintados.
Al bajarse pudo comprobar que en ese número había un solar: «seguramente van a construir aquí, pensó».
Entonces comenzó a caminar en dirección opuesta a la ciudad, allí en donde las casas son más bajas y la calzada se vuelve camino. Mientras se alejaba de los edificios, la luna empezaba a asomar con timidez. La tarde se agotaba un día más.
Ni un coche, ni una moto, ni un perro…nada ni nadie se cruzaban con ella; sin embargo Susana estaba expectante ante aquella cita previamente concertada.
El texto del anuncio era bien claro: "apartamento interior situado en barrio tranquilo y soleado. Vecindario silencioso. Muy económico. Se alquila para fijo."
A la izquierda del camino una larga tapia de color blanco atrajo su atención. Por encima de ella varios árboles picudos de hojas de un verde muy oscuro.
La verja que daba acceso a aquel cementerio se encontraba entreabierta.
Antes de entrar, Susana se palpó el bolsillo izquierdo de la cazadora y se ajustó el cinturón del pantalón vaquero comprobando que todo estaba en regla.
Siempre fue muy disciplinada; por eso le gustaba tanto este trabajo. Los años de Academia los recordaba con verdadero entusiasmo: las clases teóricas, el adiestramiento bien hecho, los ejercicios para ponerse en forma, la alimentación sana junto con el control psicológico. Todo, incluso las temidas pruebas de resistencia que superó con éxito.
Empujó la verja y entró en el cementerio. Fue caminando entre tumbas y panteones, entre flores secas y margaritas recién cortadas con los cinco sentidos en guardia. El sexto sentido percibía una presencia que no podía ver pero sí intuir… porque Susana, que olfateaba como un sabueso, lo olía.
La rapidez con que aquel hombre la atacó por detrás, sujetando fuertemente sus muñecas, avivó el espíritu combativo de la chica que abrió sus musculosos brazos e introdujo la pierna izquierda justo por detrás de la derecha de aquella fiera, derribándole.
—¡Zorra! ¡No escaparás! —bramó lleno de rabia.
Agarró a la chica por el tobillo consiguiendo que perdiera el equilibrio y cayera sobre el duro mármol de una de las tumbas hiriéndose en la frente con el filo de una cruz.
El hombre fue reptando sudoroso hasta llegar a ella. Esta pudo sentir su aliento en la nuca y escuchar las palabras soeces que le decía.
—Ya te tengo, furcia… Todas sois iguales, no venís por el apartamento —aseguraba, mientras introducía la mano por debajo de la cazadora de Susana— venís a que os…
—¿Y qué coño es esto? ¡No será un micrófono… no serás una poli de mierda!
Fue entonces cuando por primera vez Susana al girarse pudo verle la cara. Tan cerca la tenía, tan cerca las manos de aquel hombre que oprimían su cuello cada vez con más fuerza…
Ni la visión de aquellos ojos inyectados en sangre, ni los insultos, ni la ira del individuo consiguieron que Susana olvidase a aquellas pobres chicas violadas y asesinadas.
Muy al contrario, eso le dio fuerzas para acometer el tremendo golpe dirigido a la entrepierna. Un golpe bajo que consiguió apartar al asesino que gritaba de dolor.
Primero fueron las luces giratorias, después el sonido de la sirena. Del coche gris con cristales tintados salieron dos hombres, agentes de paisano, al grito de:
—¡Alto, policía! ¡Al suelo, al suelo! —ordenaban empuñando las armas.
Para entonces Susana ya se había quitado el cinturón y había atado al individuo a una de las verjas de lo que parecía un panteón ilustre.
Detrás el Comisario Vázquez que acercándose a Susana le preguntó:
—¿Se encuentra bien sargento?
—Sí, Comisario… picó el anzuelo, le hemos atrapado… al fin.
—Que sus compañeros la lleven a la enfermería, sargento.
—No es necesario, Vázquez, me encuentro bien.
El Comisario Enrique Vázquez se dirigió a uno de las Agentes:
—López, asegúrate de que la sargento se pase por la enfermería. Que le echen un vistazo a esa herida en la cabeza.
Marazul: como siempre tu historia de ha cautivado, ya sé que ese no es el adjetivo apropiado, pero lo que quiero decir es que se supone el final, pero yo intuía que le darías otro enfoque y tenía prisa por saber.. y efectivamente, diste un giro genial.
¡Enhorabuena!
Hola Marazul! Qué bien leerte! Se nota que escribes frecuentemente porque las palabras salen fluidas y se visualizan. Es como si una cámara acompañase a Susana… En un momento creí que su cazadora era como el abrigo marrón de mi Susana, jejeje… Buenas descripciones.
Quizás ese final lo hubiera alargado un poco.
Un placer leerte.
Hola Marazul.
Me ha gustado mucho tu historia, debo admitir que no capté ninguna de las pistas así que el final fue una total sorpresa para mi.
Algo que me gusto mucho es que hayas usado todos esos elementos, como el auto gris o el cinturón y lo hayas usado para el final, dándole sentido en la historia.
Increíble, felicitaciones.
Hola, marazul.
Gracias por tu comentario, ya tomé buena nota de tus consejos.
Aquí estoy como todos los meses para disfrutar de tus historias. Hoy me sorprendiste muy gratamente. Me gustan mucho las historias de acción y la tuya está muy bien llevada.
Un abrazo.
Hola marazul, es buena tu historia, buen giro el final, buen ritmo. Te hago una sugerencia respecto del narrador. Lo haría un narrador no omnisciente para favorecer aún más la tensión.
Observación: seguramente es error de tipeo, la comilla la cierras después de la palabra pensó.«seguramente van a construir aquí, pensó». Y los dos puntos antes de la palabra seguramente no irían y pondría punto seguido.
Soy tu vecina del 86 por si te quieres pasar.
Cariños y nos seguimos leyendo
Muchas gracias Guiomar, lunaclara, Jose Maria, Liliana y Marisa. Es verdad, Marisa, que el relato en primera persona puede dar más intriga y dinamismo al relato. Creo que el hecho de tener que comenzar con una frase obligada puede influir en la elección del narrador, aunque es verdad que se pueden combinar.
Gracias por vuestros amables comentarios
Un abrazo
Marazul, no dije narrador en primera persona, dije: omnisciente. El omnisciente puede ser en tercera persona, o sea un testigo.
Ponerla en primera persona es hablar de otro tipo de estructura y esa no fue mi intención.
Abrazos y a seguir jugando.
Hola Marazul,
Una historia ligera y relajante que te mantiene en alerta. Me gsuta la forma que le has dado. Me gustó el juego de palabras con el que juegas con el nombre de la calle (paraíso) y disfruté con los preparativos de la chica, la caída sobre el mármol, hiriéndose con el filo de la cruz.. todo ello entraña una vena humorística sutil. Solo me faltó un eslabón intermedio entre la dirección dada por el anuncio y el penetrar en el cementerio. Mi mente cartesiana. Disfruté un montón con el forcejeo sexual sobre una tumba. ¿Qué tendrá esta mezcla que nos cautiva? Yo misma introduje una escena parecida en mi relato, no lo pude resistir, aunque en un contexto diferente. Un buen relato, Marazul, una vez más te felicito. Trepidante, intenso, y con heroïna, que sale muy bien parada ella. Un abrazo.
Hola Marazul!
Me llamó la atención el título de tu relato y me paré a leerlo. Qué bueno! Rápido, ameno, con intriga, un lenguaje fluido, en fin… me ha gustado mucho.
Felicidades!!
Estoy en el 173, por si te apetece pasarte.
Saludos!!
Marisa, me lio un poco con los diferentes narradores. Algún día lo acabaré de pillar del todo jeje…Gracias por aclarar. Me paso por tu relato en breve.
María Kersimon, aún no he leído el tuyo pero eres una de mis lecturas obligadas, me paso en cuanto pueda. Yo también pensé en ese eslabón que me quedaba suelto, pero pensé “bueno, el lector cuando descubra el final pensará que como se trataba de una policía gancho la estaría siguiendo y ella se lo puso fácil al entrar en el cementerio”. Algo así, María. Pero me encanta tu opinión como lectora.
Muchas gracias chicas por vuestra opinión
Hola Marazul.
Muchas gracias por pasarte por mi relato.
El tuyo me ha sorprendido gratamente. Está muy bien construido. No has dejado cabos sueltos y todo al final encaja a la perfección. La historia, además, es trepidante, y se ve claramente a pesar de tener tanta acción. Yo creo que es algo muy difícil que tu has conseguido sin problema.
Solo he notado un par de fallitos sin importancia que seguro son problemas en el recorte:
_ «seguramente van a construir aquí, pensó». Aquí el pensó va fuera de las comillas.
—Ya te tengo, furcia… Todas sois iguales, no venís por el apartamento —aseguraba, mientras introducía la mano por debajo de la cazadora de Susana— venís a que os…
—¿Y qué coño es esto? ¡No será un micrófono… no serás una poli de mierda!
Aquí parece que hablan dos personas cuando en realidad es la misma. Es como si se te hubiera cortado el diálogo al editar.
Mis felicitaciones. Este mes te ha salido un relato redondo.
Nos seguimos leyendo.
Hola Marazul! Buen relato! Tiene buen ritmo que uno sigue y va en tensión porque no sabe con qué se va a encontrar. Un poco que me detuvo fue cuando entra al cementerio. Quiero creer que la cita estaba prevista allí. Es culpa mía, en todo caso, pues yo esperaba que se encontrase en el apartamento tranquilo. Pero fue toda una sorpresa el resto. Muy buen relato Marazul.
Te felicito. Estoy en el # 199 por si quieres leer mi relato.
Hola Marazul!
Primera vez que te leo y debo de decir que me has sorprendido, no esperaba para nada ese giro final, me ha gustado más el ambiente de la primera parte debo decir, tal vez hubiera seguido más con el misterio y no tanto con lo policial pero eso ya son opiniones personales que no tienen nada que ver con tu forma de escribir.
Muy buen trabajo, me ha gustado mucho y soy tu vecina del 87 “Doña Susana” por si te quieres pasar.
Un beso! Nos leemos!
Hola Marazul, como siempre aquí estoy bajo tu texto para comentarte. Tu escritura sin importar el tema es siempre sutil y fácil de seguir.
En el primer párrafo cuando describes con interés el arreglo personal de Susana, me imaginé que venia una historia de trama amorosa a la Corin Tellado, En lugar de eso me encuentro con un trabajo detectivesco a la Sherlock Holmes.
Me encanta como vas introduciendo las piezas de información de la historia al avanzar la trama. Al llegar al desenlace, les das el valor justo de su existencia.
Enhorabuena y nos seguimos leyendo.
Hola Marazul:
Si no recuerdo mal, este relato nada tiene que ver con lo que en ti es más habitual, es decir, relatos más poéticos, lo cual está bien porque hay que ir cambiando de registros y de estilos.
No sé qué me ha pasado que algo he debido de leer antes de empezar a fondo la lectura y, para cuando Susana entra en el cementerio, ya sabía que era poli, o es porque se deja entrever por lo de la academia, la disciplina, etc. así que la sorpresa final no ha existido. Aun con todo no ha dejado de gustarme el conflicto que has montado y cómo lo has resuelto. La introducción me ha parecido magnífica. Lleva al lector hasta dentro del relato.
Te comento alguna cosilla sin importancia que yo tocaría:
“…y margaritas recién cortadas con los cinco sentidos…” creo que después de cortadas habría que separar lo siguiente para que no de la sensación de que emplea los cinco sentidos para cortar y no para caminar alerta.
“…la atacó por detrás, sujetando fuertemente…” quizás sin coma se lee mejor.
“Detrás el Comisario Vázquez que acercándose a Susana le preguntó”. Sin embargo aquí acotaría entre comas “acercándose a Susana”.
Para acabar, lo de sentir el aliento en la nuca me ha hecho recordar a una persona en mi relación profesional que siempre decía: “No me jode que me den por el culo, lo que me jode es el aliento en la nuca.” Perdón, no lo he podido evitar.
Un abrazo. Hasta el próximo.
Hola, buenos dias!
Como siempre, buscando tu relato que me suele encantar y esta vez no ha sido para menos.
Lo único que decir además de lo dicho por los compañeros en que sin embargo, suele ir entre comas o punto y coma y coma. Quedaría así:”Ni un coche, ni una moto, ni un perro…nada ni nadie se cruzaban con ella; sin embargo, Susana…
La expresión sin embargo es una locución adverbial con el sentido adversativo ‘a pesar de ello’ que funciona como marcador del discurso. Puede ocupar varios lugares en la oración y suele escribirse aislada por comas del resto del enunciado: Al mirar por la ventana, sin embargo, no lo pudo ver.
Espero haberte sido de ayuda.
Por lo demás que decirte, es fantástico.
Saludos,
Nora C.P. número 9
Ana Luna los títulos son un punto importante. Gracias por leer mi relato.
Jean Ives, tomo muy en cuenta tus observaciones viniendo de un buen escritor como tú. Mil gracias
charola, la cita era en el número 29 de la calle Paraíso y Susana, la mujer policía, se lo puso fácil entrando al cementerio -una pista más para demostrar que Susana no era una inquilina al uso.Gracias por tu tiempo.
Auxi o “Doña Susana” me paso por el tuyo en breve. Gracias.
Este fin de semana lo dedicaré a leer vuestros relato y os doy mi impresión. Un abrazo
Osvaldo, amigo, eres muy amable y me alegra que te hayas pasado por aquí. Un abrazo
Isan, me gusta tocar temas diferentes y no encasillarme. Lo tomo como un ejercicio más de aprendizaje, aunque… es verdad que el “sello” siempre surge. No tienes por qué discularte… sentir el aliento en la nuca es desagaradable e inquietante… a no ser que un escalofrío recorra tu espalda, pero eso es otro tema, Isan. Gracias por comentar.
Nora, !claro que has sido de ayuda!
Me sirve para repasar. Agradezco mucho que te hayas pasado y, como ya he dicho, este fin de semana con tranquilidad devuelvo las visitas. Un abrazo
Hola Marazul:
Como siempre, un buen relato.
Pero pensé al principio que ibas por otro camino:”apartamento interior situado en barrio tranquilo y soleado. Vecindario silencioso. Muy economico. Se alquila para fijo.”
Que puede ser: una tumba es una apartamento interior. Un cementerio es un barrio tranquilo, un vecindario silencioso, económico y permanente.
Pero el giro ha sido bien logrado y redondeas un policial donde se nota tu impronta.
Un abrazo.
Luis, has captado el juego de palabras. Todo el anuncio es un mensaje “subliminal”. Ya sabes que los asesinos en serie tienen una mente enferma y retorcida… supongo jajaja….Mil gracias por comentar.
Hola Marazul
Me quedó un poquito extraño que se publique en alquiler un apartamento en un cementerio. No creo que existan. Por ese motivo pensé que era fuera de él
Por lo demás, muy bien llevado. Felicitaciones.
Hola marazul,
Título genial. Historia con muy buen ritmo y detalle como pinceladas que van llevando la historia, más tu toque de humor.
Me encantó.
Muchas gracias por tu visita y tus comentarios.
Seguiremos en la lucha mes a mes.
Un abrazo
Hola Marazul,muy bien planteado tu texto y buena pelea de una profesional, atrapando a un representante de la mayor lacra machista;es broma, pero le tenías que haber metido en uno de los apartamentos que anunciaba y que fuera pensando que no hay que jugar con las mujeres.
Te agradezco que hayas pasado por mi relato. Tiene un porcentaje muy alto de verdad, él Carlos con nombre real, fue olímpico y murió estas pasadas navidades, después de tres años de su mujer.
Gracias Laura por leer y comentar mi relato.
Juana, es verdad que los títulos hay que cuidarlos porque pueden enganchar o por el contrario alejar al posible lector. Mil gracias por leer mi relato.
el chaval, ¿qué tal? No se me dan bien las peleas porque soy más de abrazar que de pelear jeje….pero estoy aprendiendo que el saber no ocupa lugar.
Un abrazo, amigos
Hola Marazul.
Un relato redondo lleno de intriga y de acción. Me ha gustado. Ese punto tan fino de humor que lo atraviesa me parece genial.
Yo también intuí pronto que la chica era una policía pero eso no le ha quitado ni un ápice de emoción. Algunas veces nos empeñamos en jugar a las adivinanzas y no hace falta, especialmente si la historia está tan bien contada como en este caso.
Saludos, (223)
Un relato original que se aleja de todo lo que he ido leyendo en el taller, felicidades por ello.
Me ha descolocado esto: “Al bajarse pudo comprobar que en ese número había un solar: «seguramente van a construir aquí, pensó».” Cuando dice “ese número”, ¿se refiere al 29 de la c/ Paraíso?
Un saludo.
Me gusta, es una buena introducción, un buen comienzo que promete.
Sigue escribiendo.
Un saludo.
Gracias Marián me alegro que te haya gustado mi relato.
Wolfdux, sí la cita es en el número 29 de la calle Paraíso. En circunstancias normales la chica al descubrir que en esa dirección no hay nada, solo un solar, se hubiera dado la vuelta. Pero esta Susana es una mujer policía que quiere poner una trampa al violador/asesino en serie, por ese motivo sigue caminando, porque sabe que la va a seguir…
Me paso por tu relato, Wolfdux, muchas gracias por comentar.
SBMontero: seguiré escribiendo… seguiré. Gracias por tu tiempo
Hola Marazul,
Me ha parecido diferente a otras cosas que has escrito, pero me ha gustado.
Me gusta como vas narrando, y sin decir que es policía, en algún momento, con el comentario de la academia, pero ya bien entrado el relato, lo descubrimos.
A mi se mi me gusta el titulo. Para mí tiene gancho.
Y respecto a lo que dice Marisa respecto del narrador. Yo creo que este que utilizas es el narrador omnisciente, ese que es como dios, por decirlo de alguna manera. Y este no puede ser testigo, creo yo, es decir otro personaje. Por lo que he encontrado:
DE 3ª PERSONA
NARRADOR OMNISCIENTE ( que todo lo sabe). El narrador omnisciente es aquel cuyo conocimiento de los hechos es total y absoluto. Sabe lo que piensan y sienten los personajes: sus sentimientos, sensaciones, intenciones, planes…
NARRADOR OBSERVADOR. Sólo cuenta lo que puede observar. El narrador muestra lo que ve, de modo parecido a como lo hace una cámara de cine.
DE 1 ª PERSONA
NARRADOR PROTAGONISTA. El narrador es también el protagonista de la historia (autobiografía real o ficticia).
NARRADOR PERSONAJE SECUNDARIO. El narrador es un testigo que ha asistido al desarrollo de los hechos.
Luego habla del narrador en segunda persona:
DE 2 ª PERSONA
El narrador HABLA EN 2ª PERSONA. Crea el efecto de estar contándose la historia a sí mismo o a un yo desdoblado.
Saludos, un placer
¡Hola Marazul!
Ya estoy por aquí de nuevo, pones el listón alto y lo cumples. Me ha gustado mucho la historia, muy cuidada y con sorpresa final. Ya me preguntaba yo a dónde se dirigía esta Susana que tan entrenada parecía.
Esta vez no hay lentejas. Las dos cosas que me han saltado a la vista te las ha dicho JeanIves, así que, como no me voy a repetir, no hay lentejitas 🙂 Me ha gustado la historia, de ritmo ágil y emocionante, personajes creíbles y con una buena atmósfera que nos mantiene intrigados hasta el final. Muy bien coreogrfiadala escena de acción (que mira que son difíciles de escribir), así que mi enhorabuena. Muy buen trabajo este mes.
Lamento que no haya sugerencias esta vez,pero chica, si trabajas así de bien, qué se le va a hacer 😉 Si tienes tiempo, me encantaría que te pasaras por mi relato a repartir las collejas literarias que consideres necesarias 🙂 https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-43/7740
¡Un abrazo, nos leemos!
Hola marazul,
Me ha gustado esta historia donde experimentas un género distinto a lo que nos tienes acostumbrado. Planteas un tema candente en la sociedad actual. Se nota que has trabajado el relato, está bien construido y narrado con detalles cuidados, tanto en la ambientación, destaca la pelea con el malvado, como en la caracterización de la sargento Vázquez.
Un relato muy bien escrito que muestra tu capacidad para acometer tareas de mayor enjundia.
Felicidades y un abrazo.
Ratopin, muchas gracias por pasarte a leer mi relato y por el repaso de los diferentes tipos de narrador.Yo utilizo el omnisciente, el que todo lo sabe. Creo que es el más sencillo de todos. Marisa me daba otras opciones y estuve pensando sobre ello. También podría haber elegido a un narrador testigo, es verdad, pero me resultaba más complicado. Saludos
Anael: a mi me gustan las lentejas y sobre todo si están bien guisadas. Esta vez me has puesto muy poquitas en el plato y me he quedado con ganas jajajajaj….
He leído tu relato hace días y ahora te dejo mi comentario. Como avanzadilla te diré que me encantó el título.
Un besote
Roger, ya te echaba yo en falta jajaja…, bueno tomémoslo como un divertimento y nunca como una obligación -me refiero a leer y comentar los textos de los compañeros.
Gracias por pasarte, Roger. Me pasaré por tus dominios… me pasaré
Un abrazo
Hola marazul, me he pasado por tu relato solo para leer por placer y me alegro porque me ha gustado, sobre todo su ritmo.
Felicidades.