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Osito de Felpa - por André Effroi

Papi no había vuelto desde que salio a investigar al jardín con el bate de beisbol en sus manos.

Mami y la pequeña Sofía lloraban sin más no poder, y yo, yacía aún en los pequeños y tiernos brazos de la niña. La habitación permanecía en total oscuridad, polvorienta y llena de recuerdos viejos que me hacían caer en la más triste y terrible nostalgia. Me hacían recordar esa época en la que Sofía y yo teníamos nuestra fiesta de té en él jardín con nuestros coloridos invitados. Cada vez que veía una de esos recuerdos, pensaba «si tan solo nos dejaran esas crueles personas…»

Esa noche había sido terrible. Un desgarrador grito proveniente del jardín estremeció a Mami y a Sofía. El horrible alarido provenía de un hombre. El grito fue desapareciendo, y lo único que se escuchaba eran esos extraños chasquidos que sonaban como si varias bestias masticaran carne. Las dos miraban de lejos con horror la única ventana que había en él ático. Sofi se paro para poder asomarse por ella.

—No Sofi —dijo Mami mientras la tomaba por un brazo—, no lo hagas linda.

La abrazo cálidamente, mientras Sofía recostaba su pequeña cabecita en el suave pecho de su madre. Sofi me dejo en las piernas de su madre, y luego rodeo a Mami con sus brazos mientras se hallaban sentadas en una oscura esquina del ático.

—Tengo mucho miedo —dijo Sofía con una trémula voz, mientras lágrimas de tristeza brotaban de sus ojos—Tranquila linda —dijo Mami con un tono suave, mientras acariciaba lisa cabellera de Sofía—. Yo estoy aquí, tu no te preocupes.

Desde el ático, se oían los fuertes portazos dados por las bestias que intentaban entrar a nuestro hogar ¿Que querían esas bestias de nosotros? Sofia me cogió, y luego me tuvo en sus calidos brazos, mientras admiraba como una araña se comía a una pequeña mosca que se encontraba atrapada en su seda.

—¿Crees que a Papi… —No Sofia —dijo Mami—, No pienses en eso ¿De acuerdo?.

Sofi estaba muy preocupada por su padre, era muy notable en ella. Estaba seguro de que ella pensaba en lo que le pudo haber ocurrido. Mami se veía tranquila, aunque se notaba a leguas que tenia miedo. La delataba su rápida y fuerte respiración.

—Mami ¿Que quieren esas personas de nosotros? —pregunto Sofia a su madre— Comida, están hambrientos y no tienen para comer —respondio Mami—. Dejaremos que tomen lo que quieran, y esperamos a que se larguen. Sofi asintió con la cabeza.

Oímos los azotes que se escuchaban en la cocina. Habían entrado. Los pasos se hacían mas fuertes con el tiempo, hasta el punto de oírse por debajo de nosotros. Mami abrazo a Sofi, y de repente se logro oír un golpe en aquella puerta. Los golpes fueron aumentando, y luego ahí estaban ellos…

Halaron a Mami por un brazo, mientras ella gritaba desgarradoramente. Sofi miraba la escena con horror, su cara se asqueaba al admirar la escena. Yo no podía creer que Mami halla sido la cena de esa noche. Aun así quise advertirle a Sofi que corriera, estaba seguro de que ella seria el aperitivo de la noche. Pero era imposible. La tomaron a ella y luego me lanzaron por los aires, como a un "frisbee". Caí de lado, frente un viejo y polvoriento espejo. Lo único que veía era imágenes borrosas y perturbadoras sombras a través del espejo, que luego se empezaba a teñir de rojo. Los gritos de Sofi se habían detenido, solo oía el crujir de los huesos y los gruñidos de esas caníbales. Veía como ese liquido carmesí salpicaba en las paredes, mientras permanecía inmóvil, sin poder haber hecho algo por Mami y Sofi.

Pasaron días, y yo todavía seguía acostado frente a ese espejo. Veía mi inexpresivo reflejo, mi peludo cuerpo repleto de manchas de sangre y ese adorable lazo que me había hecho Sofi. Solo veía a un inútil "oso de felpa".

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7 comentarios

  1. 1. Daniela dice:

    Felicidades. La narración y elección de palabras fue bastante acertada. Me gustó cómo terminó la historia. Bastante adecuado y cruda, muy adherida a la realidad, me gusta eso.
    La narración a partir del punto de vista de un objeto inanimado fue una idea fabulosa, me encantó.
    Pásate a leer la mía, se llama “Utopía según quién”, comenta.
    Saludos

    Escrito el 17 mayo 2017 a las 15:34
  2. Bravo por ese “osito” André, aunque pienso que esto es un cuento de terror, no sabemos si los seres son caníbales, o simplemente zombis, que pasaban por allí, por lo que no se puede considerar distopía, a no ser que la sociedad entera esté amenazada por esos entes diabólicos a los que no les gustan los ositos de peluche.
    Tierna y encantadora, tanto que yo no le pondría el +18, ya que solo se nota que están alteradas porque se agita la respiración de la niña Sofi, y la madre tan tranquila. Luego, eso sí, un poquito de sangre, Ketchup en las películas.
    Ojo con las repeticiones, mientras 8 veces.
    Un saludo y a por el próximo reto.

    Escrito el 17 mayo 2017 a las 18:52
  3. 3. Juan Nadie dice:

    Hay un cuento de Stevenson que, sin ser en absoluto parecido, relata un ataque a un barco por parte de nativos caníbales de una manera que me lo recuerda.
    Me gusta pero quizás necesitara algo que lo ligara mas a una distopía.
    Por otro lado el recurso del muñeco es muy bueno y como final me gusto mucho-
    Te seguiré leyendo, un placer.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 12:40
  4. 4. Javier López dice:

    Hola André. Gran relato de terror, muy intenso y bien descrito, aunque como ya te han dicho no me parece del todo que cumpla el reto opcional. Eso sí, la angustia del trance se deja sentir a través de un objeto inanimado y eso tiene mucho mérito.
    Técnicamente solo un par de cosillas, a mi modo de ver, que no tienen porque ser correcciones. Cada cual a su gusto.
    Cuando dices “no lo hagas linda.” yo pondría una coma antes de linda.
    Al emplear el localismo “Halaron a Mami” no todos pueden entenderlo. Se comprende que la agarran, eso sí.
    Aquí, “Mami halla sido la cena” debes poner haya, de haber, no halla, de hallar.

    Por lo demás gran escena.
    Sigue escribiendo.

    Un saludo.

    Escrito el 19 mayo 2017 a las 12:42
  5. 5. André Effroi dice:

    Muchas gracias por los comentarios.

    Estoy de acuerdo que le faltaron cosas para que se relacionara mas a una distopía. Había hecho una versión con una introducción distópica, pero preferí centrarme mas en el terror y la impotencia del osito de felpa que en el ambiente distópico.

    Gracias Javier por las correcciones. Todavía no puedo creer que escribí “halla” en vez de “haya”, se me paso de largo ese detalle. Estoy impactado.

    Muchas gracias a todos por leer.

    Escrito el 21 mayo 2017 a las 22:36
  6. 6. Wolfdux dice:

    Gran relato. Contado desde una perspectiva muy original. Por decir algo a revisar, me parece que se abusa demasiado de las palabras que hacen referencia a la madre:

    “La abrazo cálidamente, mientras Sofía recostaba su pequeña cabecita en el suave pecho de su madre. Sofi me dejo en las piernas de su madre, y luego rodeo a Mami con sus brazos mientras se hallaban sentadas en una oscura esquina del ático.”

    Por lo demás, un relato interesante. Un saludo.

    Escrito el 22 mayo 2017 a las 08:53
  7. 7. Laura dice:

    Hola André
    Felicitaciones por tu relato. En toda su extensión.
    Sigue escribiendo.
    Hasta la próxima propuesta

    Escrito el 1 junio 2017 a las 10:51

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