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funcionario en oficina.. - por lucas
El compañero de trabajo llego tarde como siempre. Después ya soltó la primera mentira, seguida de la segunda y la tercera. Apenas llevábamos media hora en la oficina y ya había mentido tres veces, al cabo de la siguiente media hora, estuve cargando el móvil y después salí a tomar café durante una hora y media, de paso me acerqué a un taller cercano para ir preparando la pre-itv del coche que tengo que pasar antes del día siete de julio y parece que debo de pulir los faros y limpiar un circuito para que no salgan demasiados humos. Al llegar a la oficina el compañero estaba ensimismado con algo de internet, hasta que descolgó el teléfono no era nadie, lo volvió a colgar y continuó mirando la pantalla como si algo importante estuviera viendo. Esa es la vida.
Hola Lucas,
Lo de los trabajadores zombies es una de las tantas tristes realidades de la actualidad. Desde luego no comulgo en absoluto con ella. Bien buscado el micro. En lo formal creo que debes trabajar sobre todo la puntuación.
Un saludo,
Hola Lucas,
Me pareció llamativa tu idea. Simple pero original. Vidas cotidianas que descritas como aquí, llaman la atención.
En lo personal deberias tener cuidado con las mayúsculas en el título y yo intentaría conectar un poco mas lo que pasa en el texto, es decir, conectar al compañero mentiroso,saber un poco más de lo que está viendo en el ordenador…en fin, consejos y opinion de una humilde novata.
Te invito a pasar por mi relato, el 125.
Enhorabuena.
Hola, Lucas:
A tu protagonista le ocurre aquello de que es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio…
En cuanto al aspecto formal, fallan los signos de puntuación en la redacción del micro.
Saludos.
Hola, Lucas.
Si la intención es crear esa sensación de vida gris, sin sentido y monótona, tarea conseguida. Coincido con los compañeros en que la narración se te escapa a ese mismo tono gris, ya que no encadenas bien los signos de puntuación. Las frases se encadenan deshilvanadas y, aún a propósito, desmerecen tu esfuerzo.
Un saludo.
Gracias. Intentaba transmitir el mundo gris y siniestro de las oficinas. Escribo en el movil y no salen acentos.
Hola Lucas.
Coincido con los compañeros con la puntuación.
En realidad has plasmado la gris monotonía de la vida de oficina. Esas personas, ¡siguen su vida gris fuera de ella?
Con respecto al mentiroso, podrías agregar los motivos que lo llevan a mentir, o las reacciones de los compañeros a ellas y cómo impactan en él, se me ocurre, para dar profundidad a los personajes. Son sólo ideas que me van surgiendo al correr los dedos por el teclado.
EL trabajo tuyo es muy original. Tal vez necesita algo más de pulimento.
Felices vacaciones
Saludos Lucas:
Gracias por leer y comentar mi relato (140) del mes de junio. Disculpas por llegar tarde al tuyo, por razones fuera de mi dominio, estuve fuera de Internet y casi incomunicada del mundo, en fín…
Como estoy atrasada con mis lecturas y comentar a otros, no he leído a tus comentaristas, así que si repito, tendrás que disculparme.
No sé si te lo han mencionado, pero recuerda que los títulos deben comenzar con mayúscula, los puntos suspensivos siempre son tres (y no puede llevar un solo punto, porque los títulos no se puntean con punto final), hay algunos problemitas de falta de tílde en algunas palabras y quizá debas revisar la puntuación.
La idea, me ha gustado mucho. Has planteado muy bien la arrogancia del empleado público, el que llega a hacer nada, el que le miente al compañero, al “usuario/afiliado/contribuyente”, etc. Y el otro que ve el defecto ajeno y no ve la viga en su propio ojo. Es tan típico, que parece que en todas partes el “sistema es igual”.
No hay nada peor que la burocracia, innecesaria y mantenida. Por ello he rechazado pertenecer a ese sistema durante toda mi vida (solo trabajé en sector privado, en donde el asunto es otro y la explotación es de otro nivel). Y lo penoso de no ser parte del sistema, es que sabemos que no lo cambiaremos, y por eso nos alejamos de él. Es triste saber que si vas con las mejores intenciones, te cansas de ser “el buen empleado” ante la holgazanería, dejadez y pedantería de tus compañeros.
PD: Leí tu nota del móvil, debes buscar la manera que te aparezcan las letras tildadas (o cargar un nuevo teclado), porque si sigues con la costumbre de escribir por el celular, con los demás retos de setecientas cincuenta palabras, las posibilidades son mayores de que te vuelvan a comentar sobre eso.
¡Nos leemos!