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Al día siguiente - por Kriptana
Suena la alarma. Demasiado temprano, la ignoro. Imposible dormir más. Me revuelvo inquieta entre las sábanas. La siguiente alarma me saca de la cama. Me levanto y la apago, a oscuras.
Instintivamente desbloqueo el teléfono. Hoy no sé qué hacer con él. Miro mensajes y juegos. Bloqueo y desbloqueo de nuevo. Reviso el correo y lo dejo muerto entre los dedos. La banda sonora del día es la lluvia persistente.
Mal día para no trabajar. Quiero mantenerme ocupada, intentado no pensar. La plancha… diez prendas, un cigarro… Diez prendas, una partida… Las horas pasan demasiado lentas. La mirada triste se pierde en mil infinitos que nunca fueron.
Cuando termina el día me pregunto si me has recordado, cómo no dejo de recordarte yo. Si has tenido que luchar contra el deseo de escribir “buenos días”.
Cuando termina el día, las mariposas que antes eran de fuego hoy son de plomo.
Hola Kriptana:
Desde luego, el relato hace honor al seudónimo de su autora, es muy críptico. Aunque, cuando lo leí la primera vez me vino a la cabeza el lugar de nacimiento de Superman y pensé que la cosa se ponía interesante. Me equivoqué en lo de Kripton, pero tu relato es muy interesante.
Es un relato difícil porque cargas mucho la mano y eso está bien porque dejas ahí el gusanillo de volver a leerlo. Primero me llevas hacia ese estado incómodo del día sin trabajo, ese trabajo que actúa como un somnífero pero que no se aprecia hasta el “intentando no pensar”. Pero “la mirada triste se pierde”. ¡Qué fuerza tiene esa frase!
Después viene la clave: “si me has recordado”, “si has tenido que luchar”. ¡Qué sensibilidad! Eres una gran escritora. Ese desvalimiento está muy logrado, espero que no sea autobiográfico, lo digo porque casi se puede tocar. Y el final, cómo pesan esas mariposas.
Tendría que hacerte una crítica pero lo único que se me ocurre es que si yo tuviera tu magnifica historia la escribiría de otra forma. Pero yo no tengo esta gran historia.
Enhorabuena. Un saludo,
Arnoldo Supiar
Hola, Kriptana:
Cuando estaba leyendo el texto, no me esperaba para nada ese giro final. Me encontraba leyendo algo totalmente cotidiano y “aburrido”, y cuando llegué al final me quedé impactada. Quién iba a pensar que empezarías leyendo sobre un día cualquiera en casa sin trabajar y acabarías descubriendo que el protagonista está sufriendo por amor.
La parte final está escrita con tanta sensibilidad y acierto de palabras que te revuelve por dentro.
Y la última frase me parece increíble y perfecta para cerrar tu relato. Completa a la perfección el círculo de la parte final que iniciaste con la frase “Cuando termina el día” y finalizaste con otra frase que también empezaba con “Cuando termina el día”.
Después de leer ese final, ya te queda clara la elección del título, y no podría haber uno que explicara mejor lo ocurrido.
Un saludo,
Albión
Hola Kriptana, yo al igual que Arnoldo me guié por tu seudónimo para abalanzarme sobre la lectura del texto.
Esperaba en encontrar una Super Chica, y mira que la encontré, pero ella padecía de uno de dos males; o del amor o del desdén.
Me gustó mucho tu micro, has plasmado frases muy bonitas y muy profundas, Te felicito
Es díficil plasmar en tan pocas palabras tantas cosas y te felicito por ello, se te nota la sensibilidad y la habilidad para plasmar sentimientos.
Pero no me gustan los relatos tristes seguro que pensó en la protagonista y le daba vueltas a mil excusas para poder hablarle.
Un saludo
Hola Arnoldo, gracias por tu visita y tu comentario.
Supongo que cada persona escribiría una misma historia, y todas serían distintas. Los mismos hechos los enfoca cada uno de forma diferente.
Un saludo,
Gracias por tu comentario, Albión
El sufrimiento, qué no el dolor, también puede ser cotidiano.
Un saludo,
Hola Osvaldo, por alguna razón que desconozco mi seudónimo siempre resulta curioso a los demás.
Gracias por tu comentario,
Un saludo,
Hola José Ignacio, gracias por tu comentario tan halagador.
Es tentador tratar de imaginar lo que piensa otra persona, pero siempre nos queda la duda de cual es la verdad. Nunca sabremos si es acertada tu alternativa final.
Un saludo,
Hola, Criptana:
Me ha parecido uhn relato interesante, dado que transmites muy bien el tedio vital que sufre la protagonista, y del que muchas personas, por otra parte, son víctimas también; incluso yo he llegado a sentirme identificada. El final te ha quedado también bastante bien.
Perdona, no me he dado cuenta de que tu pseudónimo está escrito con K. Lo siento.
Gracias por el comentario, Perla.
Un saludo
Hola Kriptana:
Mantenerse ocupada para no pensar. Me gusta la descripción de cómo va realizando cada actividad, contrastando con aquello que trata de reprimir pero al final es imposible.
Saludos!
Hola Claudia, gracias por la visita y el comentario.
Un saludo
Hola Kriptana:
Cuando el amor lo ocupa todo hay riesgo de quedarse vacío cuando se vaya, parece que eso es lo que le ha pasado a la protagonista de tu trabajo. ¿Y cómo evitarlo? Ni idea…pasa una y otra vez, será que tiene que ser así.
en tu frase: ” como no dejo de recordarte yo” si no me equivoco ese como no lleva tilde.
¡Buen trabajo!
Saluditos
Hola Carmelilla, gracias por tu visita y tu comentario.
Un saludo
Hola Kriptana.
Gran relato de un día que parece de pesadilla. Me encantó el final de las mariposas.
Lo único que te señalaría es un par de cambios, que por supuesto, tomas o dejas, a tu gusto:”Cuando termina el día me pregunto si me has recordado, cómo no dejo de recordarte yo. Si has tenido que luchar contra el deseo de escribir “buenos días”. El cómo con acento se me hace más de pregunta que de modo de sentir, yo lo hubiese dejado sin acento. Quitaría el yo del “recordarte yo” ya que se supone por la conjugación empleada. Y quitaría el punto del Si has tenido … ya que en mi criterio continúas con la oración anterior. De modo que yo lo hubiese dejado así:
Cuando termina el día me pregunto si me has recordado, como no dejo de recordarte, si has tenido que luchar contra el deseo de escribir “buenos días”…
De todos modos, son detalles, que en nada perjudican tu texto escrito con gran belleza y sencillez.
Hola Laura,
Gracias por la visita y el comentario. Tomo nota de esos detalles.
Un saludo