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El deseo - por asmatu
Recluido en una isla, Zhiiriad buscaba algo que llevarse a la boca. Llevaba años exiliado allí y era un rastreador astuto, pero apenas quedaba nada que cazar.
Revisó cada una de las trampas de la noche anterior y volcó lo poco que encontró en su zurrón. Decepcionado por el reducido botín, volvió a su madriguera.
Comenzó a devorar sus presas cuando una voz gritó:
– ¡No me comas!
Asustado, un pequeño hombrecillo pataleaba evitando la boca y los dientes de Zhiiriad.
– Tengo mucha hambre -sonrió- ¿Por qué no habría de hacerlo?
– Soy el último en mi especie -afirmó la diminuta voz.
– Umpg. ¿Y?
– Puedo… ¡puedo concederte cualquier deseo … si me perdonas la vida!
Zhiiriad fingió reflexionar, sabía bien lo que deseaba: exigió al hombrecillo que su diminuta raza volviese a cubrir toda la isla.
Y mientras formulaba el deseo se le caía la baba.
Eran tan fáciles de atrapar…
Tan sabrosos…
Hola Asmatu
Soy tu vecina #208 Infiel con Guante virtual.
Me ha gustado tu micro, muy fluido, invita a leer desde el principio hasta el final.
Anotarte que entre el guión largo y el comienzo de la letra no se deja espacio. Los guiones que pones después, también deben ser largos.
Ya vendrá otro compañero a indicarte otra cosilla.
Te felicito, sigue escribiendo.
¡Saludos!
(¯`•¸•´¯)YOLI(¯`•¸•´¯)
Asmatu
¿No le dio pena a tu protagonista ser tan cruel? ¡Hombre! le podía haber perdonado la vida con la condición de que le proporcionara comida diaria, mientras durara su exilio.
Lo de los guiones es una nueva norma, como otras muchas que… mejor lo hablamos otro día.
Bromas aparte está bien escrito y diseñado.
¡Enhorabuena!
Muy buen micro. Me imaginé a Rocket de guardianes de la galaxia como protagonista. Fuera de eso de la puntuacion, ha sido muy entretenido, casi atrapante. Felicidades 🙂
Nos seguimos leyendo…
Hola Asmatu,
muy bueno tu micro, me ha encantado el final, me ha arrancado una sonrisa. Es ingenioso, ácido y mordaz. ¿Quizás hubiera sido más lógico pedirle al hombrecillo salir de la isla? O quizás no, tal vez ya no entienda su vida de otra manera… A parte que uno se puede volver muy loco después de estar condenado a la soledad del exilio. A mí me ha gustado tal y como está.
Felicidades y un saludo.