Desde hace una temporada hemos recibido bastantes consultas sobre cursos de escritura. Muchos de vosotros nos habéis escrito para preguntarnos si merece la pena tomarlos o cuáles son los más recomendables entre la enorme oferta que se ofrece hoy en día.
Aunque por norma general yo soy más partidaria de la formación autodidacta, es cierto que la ayuda de un profesional que nos oriente y nos ofrezca una valoración objetiva sobre nuestros textos nos puede hacer mejorar mucho como escritores.
Hace años tomé algún curso presencial e hice cursos online de los que estaban disponibles por aquel entonces, pero no me quedé contenta con ellos. Hoy, gracias a esta experiencia y a las opiniones que me habéis enviado para ayudarme a preparar esta entrada, me gustaría hacer una recopilación de los aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir un curso de escritura, así como una breve lista de lugares donde se imparten estos cursos y que nuestros lectores nos han recomendado a través de las redes sociales.
Pero antes de entrar en materia, vamos a reflexionar un instante sobre la pregunta clave en torno a este tema: ¿es de verdad útil tomar cursos de escritura? Sí, lo es. Siempre y cuando sea el curso apropiado para ti, puedes sacar mucho en claro. Veamos pues qué pasos podemos seguir para encontrar el curso apropiado:
¿Qué tipo de curso es?
Hoy en día tenemos a nuestra disposición decenas de páginas web que nos ofrecen cursos de escritura no presenciales, que podemos seguir desde nuestro ordenador sin movernos de casa. Este tipo de cursos tienen la ventaja de que pueden adaptarse a nuestros horarios caóticos y puedes realizarlos desde cualquier lugar del mundo. Si vives en un lugar donde es imposible acceder a cursos presenciales, suponen una clara ventaja.
Por otro lado, los cursos presenciales, aunque conllevan que haya que adaptarse a un horario concreto y acudir a un local, tienen la ventaja de que nos conectan con otros escritores, de que podemos hablar de tú a tú con el tutor o tutora que lo imparte y, sobre todo, que tienen una mayor adhesión para las personas a las que les cuesta seguir una disciplina. Al realizar cursos online en los que tienes que organizar tú el tiempo, es más fácil dejarlo para última hora y, al llegar esta, postponer el trabajo para el día siguiente. Al curso presencial, en cambio, tienes que ir y vas, sobre todo si lo disfrutas.
Por eso es importante que reflexiones bien sobre este punto antes de decidirte por un curso. ¿Qué opciones tienes disponible? ¿Hay cursos presenciales interesantes en tu entorno? ¿Son compatibles con tu horario? O, por el contrario, ¿crees que encaja más contigo un curso no presencial? ¿Serás capaz de organizarte para no dejar el curso a medias?
Sé honesto/a cuando respondas a estas preguntas e intenta encontrar el curso que mejor funcione para ti en este momento.
¿Cuáles son su precio y su duración?
Tampoco podemos dejar de lado el aspecto más práctico de todos: ¿cuánto dura el curso y, sobre todo, cuánto va a costar? A veces, por muy atractivo que te resulte una opción, quizá no puedas permitírtela porque es demasiado cara o porque requiere una cantidad de tiempo del que no dispones en ese momento.
Reflexiona qué es mejor, si olvidarte de esta primera opción y buscar otra que se adapte mejor a tus posibilidades, o ahorrar y/o reorganizar tu agenda para, dentro de un tiempo, poder apuntarte a ese curso porque crees que es el mejor para ti.
¿Quién lo imparte?
Otro aspecto fundamental a la hora de elegir un curso u otro es la persona que lo imparte. No solo por su currículo o la clase de tutor que será, sino también por la sintonía que puedas tener con esa persona.
Cuando estaba en el instituto acudía a un curso literario que llevaba una mujer con la que no me entendía bien. Teníamos conceptos muy distintos de cómo funcionaba la creatividad y cómo había que enfrentarse a la escritura; por no hablar de nuestros gustos literarios, que no podían ser más dispares. Por este motivo mi experiencia con aquel curso fue nefasta y ni lo disfruté ni aprendí gran cosa con él.
Una charla previa con el tutor o tutora del curso, si es posible, te ayudará a ver si es el curso en el que encajas. Hazlo siempre que puedas. Incluso cuando se trate de un curso por la red y no presencial, intenta intercambiar algunos correos con esa persona. Además de ahorrarte un tiempo precioso en caso de que no sea lo que estás buscando, también te dará una pista sobre cuán accesible es. Lo que nos lleva al siguiente punto.
¿Cuenta con tutorías?
Esta pregunta has de hacértela sobre todo cuando se trata de un curso online. Hace años seguí un curso de microrrelato a través de la plataforma Bubok que, en principio, tenía buena pinta. Sin embargo, acabé bastante decepcionada precisamente por este aspecto.
El curso consistía en enviarte una serie de pautas por correo para que, cada semana, construyeras un microrrelato. Luego, el tutor del curso te enviaba una pequeña corrección donde te decía qué aspectos le habían gustado y cuáles podías mejorar, pero ahí se terminaba todo. No era posible una interacción mayor, ni una charla o un debate con este tutor para mejorar y aprender aún más.
Si crees que este sistema funciona contigo, adelante. Pero si te ocurre como a mí, que prefieres una interacción mayor con la persona que va a juzgar tu relato, intenta encontrar un curso o bien presencial, o bien que ofrezca horas de tutoría directa (ya sea por chat, por email o videoconferencia). Sacarás más en claro.
¿Podrás interactuar con otros compañeros?
En los cursos presenciales la respuesta a esta pregunta suele estar clara. Habrá otros escritores apuntados al curso, como tú, y podrás charlar con ellos durante y después de las clases. En los cursos a través de la red no siempre ocurre.
Algunos sí tienen unas fechas concretas y ofrecen foros en los que se puede interactuar con los compañeros a modo de aula (aunque no siempre son lugares muy activos, depende de la cantidad de gente que haga el curso al mismo tiempo que tú); mientras que otros son cursos cerrados en los que te apuntas cuando puedes y se imparten en exclusiva para ti, sin relación con nadie más que no sea el tutor o tutora.
No digo que este aspecto sea imprescindible, pero sí has de reflexionar sobre la importancia que tiene para ti. A veces, compartir la experiencia con otras personas que están aprendiendo nos ayuda mucho a crecer como escritores, tal y como ocurre con el taller Móntame una escena. Sin embargo, puede que ya tengas esa parte cubierta o que prefieras que el contacto se limite al tutor del curso, sin mayores complicaciones.
Reflexiona sobre la importancia que tiene para ti la interacción con el resto de compañeros y tenla en cuenta a la hora de decidirte.
¿Qué materias se imparten?
Por último, pero quizás lo más importante, no te olvides de analizar bien el temario del curso. Hay algunos lugares donde este aspecto no queda nada claro y se limitan a un breve índice, muy genérico; mientras que en otros sitios desglosan punto por punto los temas que se impartirán.
Saber qué te vas a encontrar cuando estés realizando el curso es fundamental, para no llevarte un chasco y darte cuenta a mitad de camino de que no era tan avanzado como creías o que no te ayudaba con esas partes de tu escritura que quieres pulir.
En caso de duda, siempre puedes contactar con los organizadores del curso y pedirles más información. Es mejor preguntar y aclarar cualquier cosa que no te quede clara antes de lanzarte a por el curso sin saber si es el adecuado para ti.
Algunos cursos recomendados
Tal y como dije al comienzo, antes de preparar esta entrada se nos ocurrió pedir ayuda en las redes sociales y preguntar a nuestros lectores qué cursos habían hecho y cuáles nos podían recomendar. Como resultado tenemos una pequeña lista que esperamos te sea útil en tu búsqueda.
Escuela de escritura del Ateneu Barcelonés. Una de las estrellas. Nos lo han recomendado bastantes personas y ofrecen tanto cursos presenciales (en Barcelona, claro) y virtuales. Son cursos largos y de precio elevado, pero ofrecen opciones de financiación.
Cálamo & Cran. Una agencia que cuenta también con servicios de edición y corrección de textos, así como otras materias interesantes como formación en edición profesional o derechos de autor. Los cursos de narrativa los imparte el autor Víctor J. Sanz (al que también podéis encontrar en su web y en redes sociales como Twitter) y, aunque no son baratos, también ofrecen opción de pago fraccionado. Otro aspecto a favor es el desglose de contenidos de cada curso; bastante completo.
Fuentetaja Literaria. Otro sitio que nos han recomendado y que cuenta con talleres virtuales y videotalleres, pero también con talleres presenciales y tutorías en muchas ciudades de España.
Hotel Kafka. Con este nombre tan sugerente nos encontramos con una escuela que ofrece cursos de narrativa presenciales y virtuales, así como un Máster en Escritura Creativa (aunque este último es presencial, claro; en Madrid). Me ha llamado la atención que incluyen en el repertorio de cursos alguno de poesía, lo cual no es tan habitual encontrar pese a que existe demanda.
Taller de corte y corrección. En esta ocasión viajamos hasta Argentina, donde el autor Marcelo di Marco gestiona grupos de escritura presenciales, aunque también ofrece talleres virtuales y, lo más interesante, tiene un canal de Youtube donde cada semana suben vídeos con técnicas para mejorar la escritura.
Narrativas y otras lunas. Otros talleres que nos han recomendado han sido los de Lidia Luna, que además de ser una opción más breve y económica que las anteriores, nos parece interesante por la accesibilidad y la cercanía de la tutora, algo a tener en cuenta.
Cursos de Teo Palacios. El escritor de novela histórica Teo Palacios lleva más de diez años impartiendo talleres y ahora nos ofrece en su web un curso de corrección de textos y dos de novela a través de lo que él denomina el método PEN. Sus cursos no son excesivamente caros y ofrece tutoría permanente, videoconferencias y grupos de trabajo. Además, hemos hablado con Teo sobre sus cursos y estamos preparando una entrevista con él para que nos hable un poco de su experiencia. La publicaremos próximamente en el blog.
Las vacaciones literarias de Diana P. Morales. Aunque en esta lista quería ceñirme a sitios que ofreciesen siempre la opción online o al menos un buen abanico de opciones presenciales (para evitar localismos, ya que nos leéis desde lugares muy distintos del planeta), no podía dejar de incluir el mini retiro de escritura de Diana P. Morales. Por original y por interesante. Cada año, esta profesora andaluza (imparte talleres presenciales en Sevilla) y directora de la web Portal del escritor (donde también se imparten cursos de escritura virtuales), organiza en Cádiz un fin de semana literario que, además de no ser demasiado caro, tiene la mejor de las pintas. Aunque creo que en este momento tiene casi todas las plazas reservadas, puedes informarte en su web, en el apartado Vacaciones literarias.
Cursos en inglés de Coursera. Por último me gustaría hablaros de los cursos que ofrecen algunas universidades estadounidenses a través de la plataforma Coursera. Son cursos en inglés, claro, y para participar en ellos tenemos que escribir en este idioma (lo cual los descarta para la mayor parte de nosotros), pero también ofrecen la posibilidad de asistir solo como oyente y todos los vídeos cuentan con subtítulos en inglés (a modo de ayuda); algunos curso también tienen subtítulos en castellano.
Hasta aquí esta pequeña reflexión sobre los cursos de escritura. ¿Qué os ha parecido? ¿Algún aspecto más que os parezca que hay que tener en cuenta? ¿Alguno de vosotros ha hecho algún curso que pueda recomendarnos y no esté en la lista? O, por el contrario, ¿hay algún sitio que no nos recomendaríais? ¿Cuáles son vuestras experiencias con los cursos de escritura?
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