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LA LATA VACÍA - por CARMEN MEMBRILLA OLEA.
Web: http://elquemadordeesencias.blogspot.com.es/
LA LATA VACÍA- CARMEN MEMBRILLA OLEA.
Me pregunto cuál es la justa distancia que separa mi existencia de la existencia de cientos de objetos que me rodean.
¿Me pregunto esto porque soy racional?
Y si soy racional…. ¿Nunca podré ser un objeto?
¿Nunca podré parecerme a esta lata de refresco recién sacada del refrigerador?
Sin embargo ésta es una existencia tan válida como la mía porque aquí está. Parece cansada de ser así, como si estuviese aburrida de contener este líquido que le aporta gran parte de su identidad.
Yo creo que si pudiera hablar me pediría que la abriera, quizá para poder respirar, quizá para poder escuchar las voces que vienen de fuera.
Va perdiendo su frialdad, se va aclimatando a la temperatura ambiente. Yo diría que se siente más natural.
Lleva un tiempo sumida en una especie de tristeza melancólica y no sé cómo hacerla reaccionar. ¿Es posible que encierre algún secreto?
Comienzo a beber.
Al volver a dejarla sobre la mesa me susurran sus burbujas que siente miedo.
– ¿Miedo? ¿De qué?-pregunto sin comprender del todo.
– Tiene miedo de quedarse vacía-contestan ellas de forma contundente.
Entonces reacciono, vuelvo a cogerla, esta vez más lentamente, pasando mis dedos sobre ella en lo que pretendo que sea una caricia.
Le vuelvo a acercar mis labios .
No voy a beber
Voy a hablar
Voy a hacerle comprender lo cerca que está de mí
Voy a decirle que no somos tan diferentes
Voy a contarle que yo también tengo miedo.
Mientras tanto los demás volverán a llamarme loco…. y yo comenzaré a sentirme un poco mejor porque he encontrado una nueva complicidad en mi lucha perpetua contra el vacío.
Huyo de la cordura de todos, de mi propia racionalidad y de los esquemas mentales que quieren hacer de mí una sombra.
Comienzan por fin mis confidencias.
Aquí continúo
Sin beber
He decidido hablar con ella
"Yo también estoy cansado de ser así. Estoy aburrido de contener esto que aporta gran parte de mi identidad. A veces me ahogo. A veces creo que estoy sordo. Siempre estoy solo"
Después de un tiempo sumido en un silencio triste y ciertamente melancólico le confieso la verdad: "No quiero ser como una lata vacía".
Grito. Doy puñetazos a las paredes. Me golpeo a mí mismo.
Caigo extenuado. Cierro los ojos. Alguien ha vuelto a pincharme. Noto como si mi cuerpo empezara a levitar. Estoy tan cansado… mañana vendrá el doctor, querrá que le hable del suceso de hoy pero lo tengo todo planeado; sólo lanzaré una pregunta:
– ¿Cree usted que es tan lejana la diferencia entre mi existencia y la de una lata de refresco recién sacada del refrigerador?
Él hará lo de siempre; me mirará fijamente, sonreirá y pronunciará las siguientes palabras:
– Bueno César, un día más empieza nuestro combate…
Fascinante relato. El símil de la lata con el personaje es brillante. Magníficamente escrito y original. Por decirte algo, el guión de los diálogos es el largo.
Enhorabuena
Gracias David Rubio por tus amables palabras. Me encanta que te haya gustado.Me anima muchísimo este comentario. Un placer conocerte y…por supuesto, tendré en cuenta lo del guión. Un abrazo, amigo.
Guau! Precioso relato! Ese paralelismo entre la lata vacía y el personaje es fantástico, te pone los pelos de punta y lo que es mejor: te hace pensar. Has plasmado muy bien la lucha personal por dar sentido a la vida. Te felicito, y te animo a subirlo a un blog para que la gente lea y disfrute de tus escritos.
Muchísimas gracias Lunaclara. Es cierto, se trata de la lucha por dar sentido a la vida. Por establecer el punto exacto entre la locura y la cordura. Me alegra que te haya gustado. Tengo un blog por si me quieres visitar:
http://elquemadordeesencias.blogspot.com.es
Un saludo y gracias por tu atención
¡¡genial!!. La forma en que el personaje proyecta en la lata me estupenda. Me ha sorprendido gratamente. ¡Enhorabuena!
Muchas gracias Ana Delicado. Un saludo desde el sur de España.
Wao! Me ha tocado! fluido,delicado,poético,empatico. Sin duda el que más me ha emocionado de los que he leído. Felicidades!Nos leemos!
chapeau, genial, me ha encantado. De verdad esperaba que hubiera textos sobre luchas internas, pero este ha sobrepasado mis espectativas, no le falta nada ni le sobra. Mi enhorabuena, en serio, un gran texto.
Muy bueno el relato. Me ha encantado. Perfecta la forma de exponer los sentimientos del protagonista a través de algo tan sencillo. Excelente cómo planteas que todo tiene un final y que irracionalmente todos vivimos el presente con miedo a que llegue ese final. Te apunto una idea. has encontrado una forma de plantear problemas internos. Quizá este relato podría ser uno más de una serie de relatos que tienen como hilo conductor las visitas que recibe César de su psiquiatra, quizá adornados con la narración de anécdotas con otros internos del sanatorio, y en el que cada relato te haga preguntarte sobre algo de lo que nos preguntamos muchos a diario. Enhorabuena
Muy buen relato Carmen. Es tan profundo que dice mucho más de lo que cuentan sus palabras. Hasta ahora no había leído (que yo recuerde) ninguno que verse sobre las luchas internas que todos tenemos en algún momento de nuestras vidas.
Lo has hecho francamente bien, enhorabuena!
Un saludo!!! No dejes de escribir…
¡Hola, Carmen!
Leí ayer tu texto y me sentí muy identificada con el tema que describes, esa magnífica lucha existencial que mediante una hermosa y lograda prosopopeya ha cautivado mi corazón de lectora.
Es increíble con que sensibilidad desarrollas un tema revestido de tantas interpretaciones violentas: el conflicto. Que puede ser destructivo, pero como tú bien planteas puede comprenderse como un aspecto constructivo, que nos hace aprender, cambiar y crecer.
El uso del simbolismo tanto en el contenido como en la forma hacen de tu relato un agradable encuentro con las palabras.
¡Felicidades de corazón por tu gran trabajo!
Te sigo leyendo en la próxima aventura…
Saludos.
Hola Carmen,
Sólo se me ocurre una palabra para resumir mi opinión sobre tu relato: PERFECTO.
Ni le falta, ni le sobra. Un planteamiento impecable, original. Pocas palabras que dicen muchísimo.
Impresionante. Vale, entonces dos palabras: perfecto e impresionante.
Me voy a ver tu blog y a buscar más relatos tuyos.
Un saludo.
Original e interesante relato sobre las luchas internas, me quedo con ganas de un poquito mas. Que pena que no tuvieras 1500 palabras.
Yo también voy a visitar tu blog y espero leerte en la próxima escena.
Felicidades
Muchísimas gracias Kangreja por tus palabras. Me animan para continuar escribiendo. Un abrazo.
Gracias Aurora Losa. Yo también opino que las luchas internas nos definen a todos. No hace falta estar loco como mi personaje para debatirse y atormentarse y tratar de buscar opciones dentro, muy dentro de nosotros mismos. Un saludo
Gracias Jose Ramón. Anotada queda la magnífica idea que me apuntas. Ahora consiste en encontrar el tiempo necesario para llevarla a cabo…El tiempo siempre me lo pone todo difícil, pero no imposible. Gracias por tu atención y por tu lectura. Un abrazo.
Gracias Virginia Figueroa. Pienso que estamos vivos en función de todo aquello que nos planteamos interiormente. Es necesario. Para mí es como respirar. Un saludo y hasta pronto
Gracias Ada Lena G.P. por tu comentario. Es importantísimo para mí saber que el relato te ha gustado, te ha llegado en cierta manera. Un placer conocerte. Seguimos en contacto
Gracias Ana por tu simpatía. Me encanta que visites mi blog. Para mí es un honor. Un beso.
Gracias Ana, por tu simpatía y que sepas que me encanta que visites mi blog. Encontrarás cuentos en la etiqueta OLOR A PROSA. Un beso
Gracias Miranda y bienvenida a mi blog. Para mí es un honor que me visiteis.Un beso y hasta muy pronto