Vuelo Cancelado - por El Juglar Miserable

Debí imaginarlo, fui un completo iluso al creer que encontraría un vuelo disponible en estas fechas.

-¿Acaso tienes idea de con quién te estas metiendo? ¿Sabes lo que esos tipos harán contigo ahora que se enteren lo que has hecho?
-Si no lo supiera no te pediría que me llevarás al aeropuerto con tanta urgencia, debo desaparecer literalmente y cuanto antes, el primer vuelo que salga no importa que destino lleve.

Imbécil, solo a mí se me ocurre pensar en encontrar una salida segura volando en estas fechas. Tengo que pensar, no me puedo quedar aquí soy un blanco fácil. Prometo que si salgo de esta me retiro, definitivamente no más estafas.

-Se ve preocupado, no me diga adivinaré, también le cancelaron su vuelo.
-¿Qué? No… sí… bueno…
-Por supuesto, todos los que estamos aquí no damos crédito, pero era de esperarse. En estas fechas resulta imposible trasladarse a donde nos esperan. ¿No es así señor…?

Lo que me faltaba un viejo que quiere conversar, no puedo perder más tiempo, quizá pueda sacar algo de provecho, sé que prometí no más estafas, pero…

-Andrés, mi nombre es Andrés
-Tanto gusto Andrés, soy Matías ¿no le molesta la compañía? así la espera será menos larga. Aunque la verdad si le he de ser sincero Andrés, estaba pensando seriamente retirarme a mi hogar. La idea de pasar la víspera de navidad esperando lo imposible no me entusiasma en lo más mínimo. Y dígame ¿usted es de por aquí?
-No, iba a realizar un traslado… pero…
-Ya veo. Yo pensaba visitar a mi hija. El año pasado mi negocio impidió estar presente y pensaba revindicarme. Al parecer no será posible.
-Bueno… ya será el otro año ¿no cree?
-No amigo Andrés, a los 75 años uno no sabe si vivirá una navidad más. ¿Usted me entiende? A esta edad uno simplemente se la pasa haciendo un recuento de su vida. Lo que uno hizo de bueno, lo malo, lo que me hubiera gustado cambiar… Llevar una vida más tranquila quizás.
-Sí… una vida más tranquila.
-Veo que me entiende a la perfección amigo Andrés y no se lo digo por que sean estas fechas, no nada de eso, pero la gente intenta sacar su mejor lado solo ahora, cuando pienso que deberían hacerlo toda la vida… ¿No lo cree así?
-Sí… creo que tiene razón.
-Ve aquél joven de allá, el que esta con las religiosas. El también perdió el vuelo y no es de aquí igual que usted, las monjas se enteraron y ¿sabe usted que le propusieron? Que pasara con ellas la noche buena para que no se quedara aquí en el aeropuerto y sabe cual fue su reacción, ¡se negó rotundamente! Todo eso me lo platicó antes de que las hermanas regresaran a insistirle una vez más, me confesó que le aterran las religiosas y que por nada del mundo pasaría la noche en el convento solo con esas dos monjas. Ignoro si el tenga razón y realmente lo querían hacer objeto de sus más bajas pasiones. Si me lo pregunta, ellas solo querían hacerle un favor para que no se quede aquí a pasar la noche. Parece que no todos creen en la bondad de los extraños, aunque se trate de un par de religiosas. En fin, permítame contestar, quizás mi hija.

Si este viejo me ofrece pasar la noche en su casa habré ganado tiempo, mañana podré largarme a otro sitio, pero esta noche sería mi oportunidad perfecta.

-Pues bien amigo Andrés efectivamente se trataba de mi hija entiende a la perfección lo que ha sucedido tendré que pasar acá la navidad, ¿Dígame una cosa? ¿Quisiera pasar esta noche en mi casa y compartir una cena fría con este pobre viejo.
-Encantado señor, para mi será un honor pasar la noche buena con usted.

Perfecto, ahora a dormir tranquilamente y ya mañana será otro día. A fin de cuentas este viejo si terminó por ser mi pase de escape.

-Amigo Andrés unos amigos pasaron por nosotros, de hecho creo que los conoce, ¿Sabe? Trabajan para mí y detesto perder la navidad al lado de mi hija por cuestión de negocios, ya me sucedió el año pasado y este año veo que no fue la excepción. Ahora creo que usted tiene algo que nos pertenece ¿No es así? Tendrá que dejar de creer en la bondad de los extraños amigo Andrés y más si es navidad.