Cookie MonsterEsta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las condiciones de uso.

Do you speak english?

¿If you prefer, you can visit the Literautas site in english?

Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

<< Volver a la lista de textos

En el Campamento - por Bernardo Castro Sáez

Llegamos al anochecer.
El fuego ardía en el campamento y a pesar de la altura de sus llamas, no se podía ver ni siquiera a un par de metros a su alrededor.
Como les señalaba.
La noche estaba muy oscura a pesar del fuego y en esta ocasión, a parte de la oscuridad, nos acompañaban los molestos mosquitos que en esta época de verano aparecían en una cantidad inimaginable. Justo en ese momento había pillado uno en mi mejilla. El dolor de su picadura me hacía recordar, la vez que me clavé una aguja en el dedo del pie. Lo digo porque las picaduras de estos bichos son algo semejante, sin mencionar, lo molesto que son y lo difícil que es dormir en un lugar así.
¿Por qué me quejó? y lo preguntas todavía.
Recuerdas que no tenía muchas ganas de venir.
¡Tú!… me obligaste. Me obligaste como siempre lo haces, sin tener en cuenta mi opinión. ¡No, te preocupes!, ya estoy acostumbrado a que me des órdenes y no tiene nada que ver mi resfrío. Aunque es molesto y no me permiten disfrutar de esta noche como yo quisiera.
Ya sé que mis narices están rotas de tanto sonarme, pero que quieres, sino me dejaste ni siquiera traer algo para este maldito resfrío.
No me grites ni me empujes. Nunca he usado contra ti la violencia, por lo tanto, no lo vengas a hacer conmigo, mira que no me gusta que me saquen de quicio, mi humor es muy ligero cuando se trata de mi tranquilidad.
Me preguntas por qué tomo este palo. ¡Te lo advierto! ¡Déjame tranquilo de una vez! ¡Aléjate! ¡No te acerques más!…
…Lo siento, pero te lo buscaste…¡Tú!… ¡Tú! Eres el culpable de todo. Fue tu culpa que te golpeara de esa forma. Ni siquiera te alejaste.
¿Y ahora qué hago?
Siempre fuiste un vago y ahora, como tal, te entierro.

Así, recordó el poeta, su último verso. Con la muerte de su compañero.
─ ¡Muy bien!, Gabriel. Aunque me hubiera gustado que el recuerdo fuera más romántico, que hiciera fluir los sentimiento, que reflejara la unión del amor más que la del odio; pero en fin, es tu trabajo; espero que este trabajo no sea el reflejo de tu alma.
─ ¡No! Profesor, lo que sucede realmente y tengo que decirlo, no tenía un tema para escribir. Pensé, pensé… y pensé; pero no se me ocurría nada, hasta que escuché en las noticias, el asesinato que había ocurrido la semana pasada y bueno… de esa noticia… saqué la idea.
─ Está bien, total, los poetas pueden escribir lo que se les ocurra. Un poema siempre será un poema, independiente del tema que lo alimente. Aunque en el fondo, un poema no es más que el reflejo del estado de ánimo en el cual el poeta se encuentra. ¡Escúchalo bien!… Gabriel. ¡Jamás!, el poeta está fuera del poema o el poema está aislado del poeta. Es una unión indisoluble, eterna y profunda.
─ Pero… profesor, no estoy tan de acuerdo con usted, por ejemplo, este poema nació por casualidad, por un suceso externo a mis emociones. Casi fue por cumplir y eso lo distancia profundamente de lo que realmente siento. Un poema, puede desligarse del poeta y a veces, se vuelve invisible, incluso para quien lo escribió. Creo que un poema es una casualidad del destino y nada más.

─ Pero… Javier, cómo vas hacer ese diálogo tan liviano. Cómo pretendes escribir una obra de teatro con ese discurso. Cada poeta debiera tener sus propias particularidades. Deja de leer y copiar esas tonterías que escribe ese autor y búscate un libro que realmente refleje los recuerdos de sus tormentos o amoríos.
─ No estoy de acuerdo contigo, Mario. Pienso que toda obra literaria tiene su propio recuerdo y punto, independiente de quien lo dice, ya sea un profesor, un crítico, un mecánico o un matemático. Un recuerdo es sólo un recuerdo y eso, nadie lo puede negar.
─ ¡Sí! Nancy, lo sé, pero…
─ ¡Pero, nada!… ¡déjense de hablar tonterías! y pidamos otra cerveza mejor, que la noche está que arde y mi garganta que explota.
─ ¡Así se habla!…. ¡Salud, entonces!
─ ¡Salud!
─ ¡Siiiii!…. ¡Salud!
─ ¡Salud! por todos los de la Generación del 98’.
─ ¡Salud! porque el próximo año, vamos a invitar a un buen poeta y hacer el mejor campamento del año y así, recordar los viejo tiempos.

¿Te ha gustado esta entrada? Recibe en tu correo los nuevos comentarios que se publiquen.

6 comentarios

  1. 1. novel_madriles dice:

    Hola. Tu relato, a nivel formal me ha costado bastante leerlo, Alguna falta de ortografía propia del procesador de textos. Donde escribes “sino” entiendo que quieres decir “si no” (“sino me dejaste ni siquiera traer algo para este maldito resfrío”). Luego también la distribución de algunas comas me ha hecho más pesado tu texto, y la falta de guiones para reflejar una conversación en la primera parte. Que conste que soy novato y no tengo gran experiencia formal, pero se me ha hecho muy duro leerlo y entenderlo. No he entendido bien el mensaje de tu relato, pero debe ser que me he despistado. De todas formas, ánimo, escribir aquí es un acto de valentía y de honradez, por lo que te felicito y animo a seguir. Un saludo.

    Escrito el 17 diciembre 2016 a las 18:19
  2. 2. bealcasa dice:

    Tienes razón, ahora que lo he vuelto a leer me ha costado un poco, no hay mucha fluidez; quise utilizar una técnica que me ha llamado mucho la atención; pero, bueno, para la próxima saldrá mejor.

    Gracias por tus comentarios. La idea es justamente lo que has descrito.

    Escrito el 17 diciembre 2016 a las 22:01
  3. 3. tyess dice:

    ¿Recuerdos? ¿Eran recuerdos, o lecturas?
    Creo que tiene potencial, pero le falta pulir y aclarar algunos detalles como qué tanta veracidad hay en cada escrito…

    Bueno, eso. Felices fiestas.

    Escrito el 22 diciembre 2016 a las 17:32
  4. Hola Bernardo
    A mi también me ha costado un poco de leer tu relato. He visto tres historias.
    La primera hasta “siempre fuiste un vago”. Después desde “así recordó el poeta”, hasta “nada mas” y la otra el resto. En la primera parte creo que los diálogos tienen que empezar con guión largo o comillas.
    Bueno, te invito a que le des otro repaso y verás tú mismo como cambia.
    Felicidades y nos seguimos leyendo.

    Escrito el 23 diciembre 2016 a las 20:12
  5. 5. bealcasa dice:

    Lo primero, agradecer a cada uno de ustedes por sus comentarios, no saben cuánto me han servido. La idea era utilizar la técnica de la caja china, un relato dentro de otro. La primera parte no es un diálogo propiamente tal, sino la respuesta a una interrogación que un”otro”, un invisible, le responde o lo cuestiona. Pero, creo que no resulto. Tendré que afinar aún más y tomar cada uno de sus comentario para mejorarlo.
    Abrazos a todos y que disfruten a concho este fin de año.

    Escrito el 26 diciembre 2016 a las 23:46
  6. Hola Bernardo!!

    La verdad es que a mi también me ha costado seguir el hilo de la historia, sobre todo la primera parte.

    No desistas y sigue escribiendo y probando técnicas, seguro que algún día lo consigues.

    Soy la número 35, por si quieres echarle un vistazo.

    Un saludo y Felices Fiestas!!

    Escrito el 29 diciembre 2016 a las 21:48

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.