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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Julia - por Lemo

Como cada doce de mes, subo con parsimonia por la señorial escalera del edificio, al llegar al segundo piso llamo al timbre de la única puerta que hay en el rellano, al rato escucho la voz de mi cita.
¬—¿Quién es?
—Soy el roedor —contesto, es mi alias. Conoce de sobra mi verdadero nombre pero debo seguir usando mi mote por si alguien acecha en el edificio.
La viuda abre la puerta, echa una rápida mirada por detrás de mí y me hace pasar con cierta urgencia.
Oigo música en la sala de estar, parece un tango. Algo sucede, es la primera vez que escucho un melodía en esta casa. Me invita a pasar y ante gran sorpresa me encuentro a Julia, sentada en el sofá, apenas tapada con un camisón naranja.
Al verme, la cara de Julia se vuelve casi como el camisón que lleva puesto.
—Te presento a mi hija Julia —Mi cara de sorpresa debe ser mayúscula—Su marido es un auténtico patán y es incapaz de darme un nieto. He pensado que tu, Carlos, puedes ponerle remedio a esta situación.—Intento decir algo pero mi balbuceo no consigue callar su voz— mi talismán, ¿podrías darme esa ilusión?—Me dice acariciándome la mejilla con voz zalamera— Es por lo que le he dicho a mi hija que viniera esta tarde. Evidentemente esto es un secreto que no puede salir jamás de esta casa, y claro el regalo de este mes será muy, pero que muy especial.
No puede admitir que lo nuestro sea un simple negocio, por lo que al pago de mis servicios lo llama "regalo", como si yo vinieses allí por amor al arte o más bien por amor a ella. A mí no me importa.
—Os he preparado el cuarto de invitados, voy a salir a realizar unos recados, volveré sobre las ocho, creo que con una hora es más que suficiente. Disfruta querida.
Oigo la puerta cerrarse, me encamino directo al aparador del mueble, necesito un trago inmediatamente. Julia sigue sin abrir esa hermosa boca.
Qué mundo tan pequeño, ni más ni menos que la chica cañón de la universidad es hija de la viuda. Jamás pensé que un día iba a probar fruta tan exótica. Y menos después de que se casara con Alberto, en eso la viuda tiene razón , es un auténtico imbécil.
Me acerco al sofá y agarro su mano con suavidad, le invito a levantarse y nos quedamos mirándonos fijamente el uno al otro, ella semidesnuda, el licor hace su efecto y empiezo a perder mi repentina timidez, me dejo invadir por su belleza y sensualidad que provoca el afloramiento de las innumerables fantasías que me causó. Acaricio su mano mientras juego con su alianza, ella no me dice nada, pero se deja llevar al cuarto de invitados con una sonrisa en los labios.
Oigo la cerradura de la puerta. «Mierda si ya son las ocho y media», ha pasado el tiempo volando.
Me visto rápidamente mientras la viuda deja algo en su cuarto y salgo inmediatamente al pasillo.
—Vaya, vaya, vaya—proclama— Veo que te ha gustado la mojigata de mi hija.
Sigo sus pasos al salón como un pelele, abre el frasco y sin mirar mete la mano y agarra un fajo de billetes de cincuenta.
—Ten, tu regalito de hoy. Mañana quiero que vuelvas, hay que aprovechar la ventana, pero como he visto que te ha gustado mañana corre a tu cargo.
Abandono la casa sin poder despedirme de Julia, suena el teléfono, echo una mirada a la pantalla y veo que es Alberto. Joder parece que me vigila.
—¿Qué pasa Alberto?— contesto.
—¿ya has acabado tu trabajito? ya me dirás algún día de quien se trata—es de los pocos clientes que Alberto no conoce—Te llamaba porqué se me olvidó comentarte que esta noche cenamos con la jefa de producto de Schaub, donde siempre.
—Pero…
—Si ya sé que soy un desastre, pero no puedes dejarme solo, además me traeré a Julia que hace mucho que no os veis, y quien sabe quizás las cosas acaben como no te imaginas.
Tu sí que no te imaginas como van a acabar las cosas, pensé.

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12 comentarios

  1. 1. Maria Jesús dice:

    Par mi gusto es texto está muy bien escrito, con un lenguaje comprensible, que son los que a mi me gustan, huyendo de vocablos rebuscados, y sin meter paja innecesaria, pero lo que es la trama no termino de entenderla. Aún asi es un buen ejercicio. Un saludo.

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 09:48
  2. 2. Berundgaar dice:

    Ha habido un momento en que no he tenido claro si el protagonista-narrador era hombre o mujer. Coincido con María Jesús en que el lenguaje es claro y sin florituras (como el mío, por ejemplo), lo que lo hace fácil de leer. Puede que haya algún fallo con los signos de puntuación, pero en conjunto está bastante bien. Y el final me ha puesto una sonrisa pícara en la cara. Eso es lo que más me ha gustado. Sigue así, porque prometes. Un saludo.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 08:39
  3. 3. PerePaella dice:

    Hola Lemo
    Me ha gustado mucho tu texto. Es original y está escrito con un lenguaje sencillo. Tien un buen ritmo y se lee con facilidad. Pero a mi lo que me ha confundido ha sido el final,no llego a entender, ¿el tal Alberto también quiere que el protagonista le haga un favor a su mujer?
    Por cierto las acotaciones en los diálogos son las que van entre los guiones largos. Te paso aquí uno de tus diálogos para que veas la diferencia:
    “—Te presento a mi hija Julia —Mi cara de sorpresa debe ser mayúscula— Su marido es un auténtico patán y es incapaz de darme un nieto. He pensado que tu, Carlos, puedes ponerle remedio a esta situación, —intento decir algo pero mi balbuceo no consigue callar su voz—. Mi talismán, ¿podrías darme esa ilusión? —Me dice acariciándome la mejilla con voz zalamera— Es por lo que…”
    Felicidades por el relato y nos seguimos leyendo.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 13:35
  4. 4. Marula dice:

    Hola Lemo! Me gusto tu cuento, lo pude leer de corrido sin tener que determe o volver atras porque no entendiera algo y eso me da gusto! Tiene sus momentos de intriga y los personajes estan bien diferenciados. Felicidades!

    Escrito el 25 febrero 2017 a las 15:57
  5. Lemo:
    Me parece que tu cuento esta bien escrito, bien narrado y el modo que vos escribes es muy bueno. Lo que si no encontré el conflicto en la trama y el final no lo entendí del todo.
    Te invito a pasarte por mi texto, es el 41.

    Escrito el 25 febrero 2017 a las 18:53
  6. 6. Laura dice:

    Hola Lemo.
    Un relato interesante con una posible vuelta adicional en el final.
    Tiene algunos detalles que dificultan su lectura en algunos tramos, que me obligaron a volver hacia el rol del personaje, pero muy bien.
    Tal vez puedas poner una separación entre la parte en que ella se deja llevar al cuarto de invitados y cuando ya son las ocho y media, para separar el lapso de tiempo que haya transcurrido entre ambos momentos. Pero nada grave en sí.
    Con respecto a las rayas de diálogo, creo que cuando los inicias debes dejar un espacio entre la misma y la primer letra. Hay una entrada muy completa al respecto en el blog de Literautas para tener en cuenta.
    Tu relato da para una novela.
    Te espero para la próxima escena.

    Escrito el 26 febrero 2017 a las 11:42
  7. 7. Diego Corin dice:

    Leí tu relato a primera hora de la mañana, lectura de desayuno, me gustó y evidentemente me cierra. Tiene eso que tiene que tener para introducir al lector en ambiente.
    Intentaré buscarte en la próxima para volver a leerte.

    Escrito el 26 febrero 2017 a las 13:08
  8. 8. Lemo dice:

    Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.
    La verdad es que sigo con el tiempo justo y no he podido pasarme por aquí hasta ahora.
    No pude dedicarle todo el tiempo que me hubiese gustado, y cierto que puede faltar el conflicto.
    Suelo plasmar siempre un conflicto claro en mis relatos, pero a veces me salen relatos costumbristas o trozos de una historia mayor que efectivamente no posee ese conflicto, pero si se lee con atención siempre suele haber algo al respecto.

    Espero pasarme por vuestros relatos, mas pronto que tarde.

    Nos leemos

    Escrito el 26 febrero 2017 a las 19:19
  9. 9. Cryssta dice:

    Hola Lemo, no tengo apenas tiempo para escribir, solo quería decirte que me he pasado a leer tu relato y me ha gustado mucho.

    Un beso.

    Escrito el 28 febrero 2017 a las 13:36
  10. 10. Marcelo Kisi dice:

    Hola Lemo!

    Mil gracias por pasarte por mi relato y por tus cálidas palabras.

    Nada más para contarte que me ha gustado mucho tu relato, es cierto que el lenguaje es simple -como a mí me gusta- pero sabés crear un ambiente de sex appeal misterioso que a mí me resulta fascinante.

    Felicitaciones!!

    Escrito el 4 marzo 2017 a las 15:05
  11. 11. K. Marce dice:

    Saludos Lemo:

    Muchas gracias por pasar por mi texto y tu comentario. Sigo peleando con el tiempo, pero al fin, ya puedo decir que casi concluyo con mis visitas.

    Me ha gustado la idea original del relato, un “gigoló” que vende favores. La trama es un un tanto más compleja de lo que aparenta, o al menos, así lo he percibido.
    Creo que la madre de la joven ya ha pasado por la experiencia, por eso sabe que puede contar con Carlos para su hija. Me es claro que se trata de un caballero (contrario a Berundgaar) ya que ella menciona la incompetencia de que el marido es incapáz de embarazar a la hija. Al inicio la madre parece comprensiva, pero al final, parece despectiva con respecto a su hija (mojigata). Lo cual, a la verdad, no me agradó. Lo cual, me hace pensar, que no es tan buena madre después de todo, y que quizá es ella una manipuladora que “obliga” a su hija a darle un nieto.

    Tiendo a leer mucho “entre líneas” y buscarle sentido a todo; por lo que pienso que falta un poco de “veracidad” en cuanto al trato: Embarazar a la hija. Si Carlos es un gigoló (que seguro lo es, tiene cita con la viuda cada 12), no se dejaría embaucar un hijo para otro. Es más, no le agradará para nada embarazar a una mujer, por mucho que ella le guste. Es algo que no me cuadra, quizá por el terror de muchos hombres con respecto a la paternidad. Mucho más, tratándose de la esposa de alguien que él ya conoce.
    Si Carlos es un vendedor de sexo, no debería tener tantas inhibiciones con Julia, si no al contrario; porque al final de cuentas, es otra transacción monetaria. Desconozco las razones del porqué la madre asume que Carlos lo ha disfrutado tanto que su siguiente visita será “gratis”.
    No me quedó claro, la relación entre Alberto y Carlos. Ni las intenciones de esa cita, con Julia y ¿quién es la jefe de Schaub?

    Debes revisar la ortografía, se te han escapado algunos detalle: “un melodia” es una melodia, algunos espacios entre puntuación, mayúsculas faltantes.
    En el diálogo de la madre cuando le explica a Carlos, el porqué de su visita. A posterior hay otra intervensión de la misma mujer, lo cual crea confusión ya que parece que es “otra” persona hablando, cuando se trata de la continuidad del diálogo de la madre. También creo que es ahí a donde Laura, ha mencionado los espacios que se necesitan después de la raya (acotaciones). Ese diálogo en particular lo veo muy largo, con tres acotaciones narrativas.

    Te marco una alternativa:

    —Te presento a mi hija Julia —Mi sorpresa es mayúscula—. Su marido es un auténtico patán, incapaz de darme un nieto. He pensado que tú, Carlos, puedes ponerle remedio a “eso”. —Sólo balbuceo sin conseguir callar su voz—. Mi talismán, ¿podrías darme esa ilusión?— me acaricia la mejilla con voz zalamera—. Por esa razón le he pedido a mi hija que viniera esta tarde. Esto es un secreto que no puede salir jamás de esta casa, y claro el regalo de este mes será muy, pero que muy especial.

    No puede admitir que lo nuestro es un simple negocio, por lo que al pago de mis servicios lo llama “regalo”, como si yo vinieses acá por amor al arte o más bien por amor a ella. A mí ella no me importa.

    —Os he preparado el cuarto de invitados —Continúa la viuda—, saldré a realizar unos recados, volveré sobre las ocho, creo que con una hora es más que suficiente. Disfruta querida.

    Una palabra más, palabra menos. Todo el texto ha sido escrito en un bloque, yo no tengo problemas con bloques grandes; pero tratándose de diálogos extensos, eso suele confundir entre el diálogo y la narrativa si no hay un marcador de separación.

    En el primer pensamiento, cuando la madre regresa, le has colocado «», no así al último pensamiento del texto.

    Espero que lo anotado te sea de utilidad, para mejorar un texto que ha sido muy bueno.
    Menudo lío el de Carlos, la prudencia aconseja salir corriendo tal José bíblico… en fin, creo que eso no va a pasar.

    ¡Nos leemos!

    Escrito el 6 marzo 2017 a las 09:18
  12. 12. Lemo dice:

    Gracias a los últimos comentarios.

    En Cuanto a todas tus dudas K Marce, hay mas de un hombre que no le importa dejar retoños repartidos por allí Jaja. Pero bueno sería algo como Carlos, Gigoló a tiempo parcial, que trabaja para Alberto casado con Julia excompañera de clase (no amiga) de la universidad. Viuda dominante y egoísta, hija insatisfecha y sumisa que se casa por glamour. Un trabajo de 10 mn (no nos engañemos) se alarga hora y media !! vamos, allí hay mas que un simple trabajo.
    Por último Shaub es una marca, digo ” cena con la jefa de producto”.

    Lo bonito es que cada uno puede, dentro de unos limites, darle un sentido totalmente diferente al original. Por eso muchas veces mis relatos no acaban de gustar ya que no explica totalmente la trama y deja la puerta abierta, hay gente que no acaba de gustarle pero no lo puedo evitar.

    Gracias por tus consejos, pero este año acabo escribiendo a última hora, este relato lo envié a las 22h del día 15. Y el de este mes va por el camino incluso quizás me pille el toro.

    Escrito el 6 marzo 2017 a las 11:49

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