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Ausencia - por Elena Mahía
Hacía rato que el sol se colaba por las rendijas de la persiana. Ricardo se frotó los ojos. Había dormido poco durante la noche.
Se incorporó y evitó mirar el lado de la cama que durante cuarenta años había ocupado Carmen y que, desde hacía uno, permanecía vacío y frío.
Empezó su rutina diaria como un autómata. Sabía que la clave era hacerlo todo despacio, pero sin pausa. Cuando no actuaba así, una angustia abismal lo abrazaba y le obligaba a estar sentado en la butaca del salón con la vista perdida. Eso le sucedía desde que el doctor le dijera: “Hay esperanza, el cáncer de su esposa no está extendido”.
Se paró ante la cómoda, acercó a su nariz el frasco de perfume de Carmen y aspiró con fuerza aquel olor suave. Salió a hacer la compra, perseguido por los recuerdos, que aleteaban a su alrededor como cuervos negros.
Hola, Elena.
Gracias por tu comentario. El tuyo me ha gustado, lo he encontrado una cierta melancolía, y hace que te sientas cercano al personaje. La frase final es muy bonita.
Saludos
¡Hola Elena! Primero, quiero agradecerte por tomarte el tiempo de leer mi relato y comentarlo. Respecto al tuyo, debo decir que desde el comienzo me trasmitiste ese aire melancólico, esa pérdida y cómo el personaje principal la va sobrellevando.
Las descripciones y comparaciones que hiciste me gustan mucho: “Empezó su rutina diaria como un autómata”, “…perseguido por los recuerdos, que aleteaban a su alrededor como cuervos negros”. Me resulta una lectura muy fácil de seguir, con un buen ritmo y buen manejo de las palabras.
Lo que me faltó fue el final. Entiendo que este mes era un poco más complicado porque solo estaban permitidas ciento cincuenta palabras, pero hubiera sido más atrapante si tal vez el final hubiera tenido algún tipo de giro, desde mi punto de vista. Nos empiezas hablando de este hombre que perdió a su esposa hace un año y al final, nada cambió. Mi humilde consejo es que trates de aportarle algo inesperado a la historia. Algo que deje pensando al lector.
¡Sigue escribiendo!
Feliz día 🙂
Hola Elena.
Tienes un hermoso y dulce texto, triste y real.
Hasta la próxima propuesta
El tema es claro, “la ausencia”. Tratar un tema así es delicado y complejo, sin embargo he visto momentos de lucidez en el relato. Tal vez, siendo más sutil y no dejar caer tan rápido que era su esposa y que tenía cáncer habrían sumado puntos.
Nos leemos.
Hola Elena:
Tu relato me ha gustado mucho. El tema es claro y conciso: la pérdida de un ser querido y la vida después de ello.
Me ha gustado mucho la forma en la que describes esa rutina auto impuesta del personaje, asi como sus sentimientos, te hace visualizar perfectamente la escena y ponerte en la piel del personaje principal perfectamente.
No puedo mas que felicitarte por tu trabajo porque como te digo, me ha encantado.
Si te apetece pasarte, yo estoy en el 258.
¡Nos leemos!