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Virtteka - por Eunice

Web: http://kimerasdelfuturo.blogspot.com

Era mi primera visita a Virtteka. Un gran letrero sobre la puerta rezaba “Disfruta de los clásicos como nunca antes” acompañado de un gran libro abierto del cual salían unos mortíferos tentáculos. Estaba realmente emocionado.

Entré y eché un vistazo general a la estancia. Ésta, estaba decorada a la vieja usanza. Bonitas estanterías, libros viejos por todas partes y lámparas de pie junto a grandes butacas y mesitas de té. Sólo las zonas de lectura reflejaban el carácter tecnológico de aquella biblioteca virtual. Mientras contemplaba aquel lugar un empleado se acercó.

– ¿Es la primera vez que viene?

– Sí.- contesté tímidamente –

– Le explicaré cual es el funcionamiento. Estos sillones de aquí son los puntos de lectura – dijo señalando una butaca que recordaba a los secadores de un salón de belleza – Todos estos sillones llevan incorporados el sistema Virtteka. Este sistema le permite crear una cuenta de usuario y leer todos los libros que quiera. Su cuenta permanecerá activa ya sea que venga mañana o el año que viene, tal vez. Al comenzar un libro puede elegir el personaje que será durante la novela y si quiere salir del programa puede hacerlo de dos maneras, o bien utilizando la acción salir, en la esquina superior derecha de la pantalla, o bien esperando a que termine el libro. El programa es muy intuitivo, no tendrá problema en manejarlo, pero si tiene alguna pregunta no dude en buscarme.

Esperé a que se fuera y me senté. El sistema me detectó al momento y creó un usuario automáticamente a partir de la huella de mi retina. Elegí al doctor Jeckyll y comencé el clásico libro.

En mitad de una calle de Londres podía ver como Utterson, el notario, de cara arrugada y jamás iluminada por una sonrisa, andaba calle abajo.

A los pocos minutos, apareció el menú principal. Solo dos opciones en la pantalla: continuar y comenzar libro nuevo. Sin pararme a leer pulsé continuar.

En seguida me di cuenta que no era el mismo libro que había comenzado. “¡Cuan extraño! permanecer aquí mientras ese objeto está viendo la luz del día por primera vez desde que comenzaron en la Tierra los periodos glaciares” fue el pensamiento que acudió a mi, mientras me invadía la sensación de estar a una gran distancia de la Tierra. “¿Por qué su color negro?” seguí pensando inducido por el libro que otra persona había dejado a medias. Intenté salir de allí, pero Virtteka no respondía. El libro continuaba, y entonces, el menú de inicio volvió a aparecer.

Repetí la misma acción que anteriormente y entré en otro libro distinto. El mismo proceso se produjo en varias ocasiones. Claramente Virtteka estaba fallando. Saltaba de libro y usuario y, lo que era peor, no me dejaba salir del programa. Recordé que había otra forma de salir de allí, leyendo un libro completo. Pero el menú aparecía al finalizar la página sin darme opción a continuar con el mismo ejemplar. ¿Encontraría un libro abierto por la última página? Decidí probar suerte.

Escogí continuar por enésima vez. Ahora me encontraba en una habitación, mi habitación, y estaba a oscuras. Olía a mar, como cuando todo ocurrió. Sentí la culpa de quien había hecho algo horrible. “¿Puedo nadar hasta la isla, miss Claythorne?” sonaba en mi cabeza. Noté como una mano gélida rozaba mi hombro y grité. Enseguida Lombard, Blove y Amstrong vinieron en mi ayuda. Solo había sido un alga colgada del techo por una mente macabra… y de nuevo el menú de inicio.

Ya estaba cansado, quería salir de allí. Marqué la opción de continuar deseando que fuera la última y por fin tuve suerte. Allí estaba, montado a caballo, escapando del príncipe Humperdink. Todavía notaba el cuerpo pesado, al fin y al cabo hacía unas horas había estado muerto. Parecía que todo iba a terminar bien, pero vi como Fezzik conducía su caballo hacía el camino equivocado, Iñigo caía del suyo malherido y yo no podía sostenerme, estábamos acorralados.

El libro acabó. No podía creerlo, ¡Al fin era libre! Me levanté con prisa de aquel sillón y miré a mi alrededor en busca de alguien que supiera lo que acababa de pasar. Nadie había notado nada. Informé del error a un empleado, el cual me miró con cara de pocos amigos, y salí de allí a toda prisa. Siempre había pensado que no había mejor sensación que leer uno de aquellos libros antiguos con sus tapas de cartón y páginas desgastadas. Ahora sabía que estaba en lo cierto.

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8 comentarios

  1. 1. Servio dice:

    Me ha gustado mucho su relato, Eunice. Esa intertextualidad que maneja es interesante. Si puede lea el mio, aunque en contextos diferentes coinciden en eso.
    mi relato es el numero 34, “Algún Día”.
    Saludos y adelante.

    Escrito el 28 junio 2013 a las 18:04
  2. Interesante relato, una idea muy original y atractiva, ¡aunque pensaba que la explotarías más! De hecho, yo que tú, la aprovecharía para algún otro relato. Si no me equivoco, la escena final es de La princesa prometida, ¿verdad? Aún no le he leído : ) He de reconocer que es la única escena que he creído reconocer, junto a la inicial (¡vergüenza debería darme). En fin, muy buen trabajo. Me apunto tu blog para pasarme por allí alguna que otra vez este verano ; )

    Escrito el 28 junio 2013 a las 18:27
  3. 3. lunaclara dice:

    Guau, Eunice, es una gran idea esa de la biblioteca virtual, digna de un libro, en serio te lo digo.
    El relato me parece muy entretenido, aunque sí q es verdad q en algun parrafo me he perdido. Sorry. Aun asi, muchas felicidades!!

    Escrito el 28 junio 2013 a las 20:45
  4. 4. Eunice dice:

    Muchas Gracias a todos por vuestros comentarios. ¡Así da gusto escribir!

    Escrito el 1 julio 2013 a las 08:29
  5. 5. Eunice dice:

    Por cierto, se me había pasado decirte, David, que los libros que he utilizado para crear el relato son Dr. Jeckyl y Mr. Hyde, 2001 una odisea en el espacio, diez negritos y La princesa prometida. Has acertado con el último, aunque si no lo has leído siento haberte destrozado el final… ¡Menos mal que tiene una “segunda parte” que continua un poco con lo que pasa después de eso!

    Escrito el 1 julio 2013 a las 08:33
  6. 6. Abbey dice:

    Original, muy original.
    Me ha encantado la idea de introducirse en un libro y formar parte de él. Gran idea para un proyecto más ambicioso.
    Lo de recrear escenas de libros clásicos… ¡Genial!.
    Enhorabuena

    Escrito el 1 julio 2013 a las 19:22
  7. 7. Jose Torma dice:

    Wow, me ha gustado mucho. Felicidades.

    Escrito el 2 julio 2013 a las 18:39
  8. 8. marcos dice:

    Uau, esta es una idea genial, de verdad. Veo que está publicado en 2013. Espero que hoy, cinco años después, ya seas una excelente escritora. Si puedes, convierte este relato en una novela. Digno de película también. Brillante.

    Escrito el 10 agosto 2018 a las 12:51

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