Cookie MonsterEsta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las condiciones de uso.

Do you speak english?

¿If you prefer, you can visit the Literautas site in english?

Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

<< Volver a la lista de textos

La lucha por el pasado de antaño - por Chdnk

Web: http://bitacoradeunmortal.blogspot.com

Entre la tensión de un ejército de sobrevivientes y los combatientes de una próxima generación se encontraban el líder de la rebelión enfrentándose contra aquel ser humano modificado por la tecnología.
Bruce era aquel sobreviviente, se había criado entre las calles en los últimos vestigios de una sociedad decadente. Su madre con escasos recursos apenas podía mantenerlo con el trabajo de una vieja fábrica, mientras su padre moría por una enfermedad terminal.
Los días pasaban en cámara lenta, Bruce trataba de encontrarle un sentido a su asistencia a clases.
– ¡Miserables Humanos! ¿Inferiores! Gritaba el resto de sus compañeros modificados con piezas robóticas y pensamiento controlado.
El niño veía con ira cada reacción e imposición de estos seres, espera que algo cambiara alguna vez. En uno de sus tantos paseos por los rincones ocultos de la ciudad, consiguió libros abandonados relatando la historia de un pasado de año a la sociedad actual.
Empezó a observar cómo no era el único desplazado en aquel mundo robótico, creando un gremio secreto, primero con un concepto infantil donde se recodaba al pasado, después con ayuda de algunos conocidos y un viejo tío de los mismos, ayudaron a los niños a conocer las partes de las máquinas, estudiando su funcionamiento y puntos débiles en cada uno de ellos.
Habían pasado alrededor de 5 años desde aquel entonces, Bruce regresaba a casa luego de una larga reunión en torno a técnicas de autodefensa. Hasta escuchar unos gritos procedentes al refugio donde estaban sus padres:
– ¡ Déjenme en paz! Suelten a mi esposo, gritaba la madre alterada.
– No me da la gana, aquí hay un traidor.. Decía un hombre de 30 años de edad con expresión voraz.
– Deja… a mi… es..po..sa en paz. Decía el padre levantándose con gran dificultad.
– Ja.. ¿Dejarlos en paz? Mejor dicho ayudaría a limpiar escorias como ustedes de esta sociedad… Ja.
Quedó un momento de tensión y en el instante que Bruce entró en la puerta de su hogar pudo ver cómo sus padres eran atravesados por el gancho de metal en la mano derecha del individuo agresor.
– No…. Un grito ahogado dejó congelado a Bruce mientras veía caer la mirada de sus padres. Todo se tornó negro y despareció del lugar en cuestión, perdiendo el conocimiento, un vecino y amigo de la familia lo había rescatado en el último momento.

Con el resentimiento de la muerte de sus padres y más pérdidas en mano del “cambio”, había entrenado y transcurrido algunos a los. Ahora estaba enfrente de aquel asesino de sus padres, quién sonreía sin piedad.
– Bruce, la misma expresión que cuando mate a tus padres, lo recuerdo como si fuera ayer. Ja, que buenos recuerdos.
– Itnard, el mayor ejecutor de esta pseudo-revolución, hoy verás.
– ¿Ante tu gremio “secreto? Por favor, no es siquiera un secreto que sólo son un puñado de críos rebeldes intentando sobrevivir desplazados.
En aquel momento un enfrentamiento empezó entre humanos, máquinas y humanos modificados sin conciencia propia por su supervivencia.
Bruce e Itnard peleaban a la par, los puños de Itnard eran esquivados por Bruce, asestando apenas cada 2 golpes.

El muchacho sabía que debía esperar para atacar tratando de esquivar el mayor número de golpes frontales. Sin esperarlo, un puño fulminante lo dejó sin aire alguno, ITnard se empezó a reír producto del acierto y empezando a acercarse al muchacho. Con el poco aire que le quedaba a Bruce, desplegó 2 tonfas guardadas en los compartimientos de un bolso en su espalda. Itnard modificó su mano derecha a una cuchilla con la que comenzó a emparejar con dificultad los golpes de las tonfas, las cuales iban inutilizando cada complemento mecánico. La caída de un próximo compañero descuidó el flanco izquierdo de Bruce siendo herido en la rodilla derecha y aprovechando el exceso de seguridad y el golpe de un tercero a Itnard, para propiciar al mismo una serie de golpes continuos y clave en su cráneo mecánico hasta dejarlo inconsciente. Había ganado la guerra, al fin la habían ganado. Mientras miraba como los demás celebraban y las máquinas caían, apenas pudo divisar como n rayo se dirigía a él en su último esfuerzo al no poder reaccionar, les gritó a sus compañeros:
– ¡Libertad! ¡Continúen luchando!

¿Te ha gustado esta entrada? Recibe en tu correo los nuevos comentarios que se publiquen.

Todavía no hay comentarios en este texto. Anímate y deja el tuyo!

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.