mascotica - por Leonardo Alvarez

Martin abre la puerta de su apartamento
— Sigan, están en su casa
Camina a la cocina
— ¿Whiskey o tequila? — Pregunta
— Lo que quieras BB — oye a lo lejos…
Martin muy seductor o eso cree se acerca al sillón y se sienta entre tres hermosas mujeres.
Martin es un hombre que no es casado pero espera un hijo, ese fin de semana su novia viajo y lo dejo solo. Él ya tiene un plan para disfrutar de esos dos días de soledad.
Sus 3 acompañantes reciben el trago, se ponen de pie y lentamente se quitan la ropa mientras Martin se pone cómodo en una silla de su comedor.
— ¿Listo bebe? — dice una de ellas
Lo amarran de las manos y piernas, no sin antes quitarle toda la ropa,
— Auchhh — grita Martin
— ¿Te duele mascotica?
— No, no me duele, me encanta, quiero más mis amas — dice Martin muy excitado.
Sus dominatrices le amarran unas cuerdas en los testículos
— A la 1, a las 2, y a las… — grita una de las dominatrices
— Duro, tiren más duro — grita Martin
Una ama lo golpea con un látigo por las nalgas, mientras otra trae un plato de espaguetis a la boloñesa, Martin se pone en 4 patas ansioso de saber que le tienen preparado sus amas, meten sus pies en los espaguetis toman del cabello a su esclavo y lo ponen a comer de sus pies
— Deja el plato limpio cerdo — gritan las 3 amas al tiempo
Luego de más de 2 horas de humillaciones lo dejan descansar, el feliz se recuesta en el tapete del cuarto.
Cuando abre los ojos se encuentra con una escena inesperada
— ¿Hey pero que hacen? — pregunta Martin no tan contento
— Cállate esclavo, todas estas joyas son para tus amas, podemos disponer de lo que queramos — grita una de las mujeres
recibe un latigazo en el pecho, Seguido de un taconazo en la cabeza
— ¿qué más tienes puto? — grita una mujer
— nada ama, ya se llevaron lo que hay!!!
— Ahhh ¿muy bravito nuestro cachorrito? — grita otra de las mujeres, y lo toma del cabello
— Mira a tus amas perro, míralas
Las 3 mujeres se quitan toda la ropa y suben a la cama, se besan entre ellas
— ¿Eso te gusta no cerdo?, eso si — gritan las 3
En un acto cómico una toma una almohada y le propina un almohazado a otra, esta cae noqueada al piso
— ¡Jueputa que le hizo a esta vieja! — le grita una a la otra sorprendida
— Nada, le pegue pasito, solo fue con la almohada
Revisan la almohada, y dentro de la funda encuentran un regalo sorpresa que tiene Martin para su esposa, un consolador bañado en oro
En el momento que las dos amas ven el brillo del oro se llenan de codicia, una camina con el consolador en la mano sin dejar de verlo, mientras su compañera toma una lámpara de noche y se la arroja por la espalda, ella y el consolador caen al piso la otra corre a recogerlo, adolorida su compañera la toma de una pierna y le entierra las uñas, la hace caer y la agarra a puños en los senos, la que está encima toma el consolador y se lo estrella en la cara a su compañera
— Es mío, quiero que mi cuca sienta ese oro brillante — dice —
— Nooo es mío — grita la que lo tiene, se lo mete entre la vagina — mira como lo marco — grita
Histérica le propina un rodillazo a la base del consolador y se lo introduce más dentro de lo que su rival puede soportar, la hace desmayar.
— ¿dijo que me ganaba perrita?
— Lo saca de la vagina de ella lo lame y se da la vuelta, en el momento que se da la vuelta Martin le rompe una tabla en la cabeza, cae inconsciente… Martin en el aire toma el dichoso consolador y lo huele
— Ummm que rico el olor de mi ama —
Toma a su semiconsciente ama, la pone en 4 y pasa el consolador por su lengua
— Ahora tú vas a hacer lo que yo diga zorra — dice Martin.