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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Los montesinos - por Vicente Pacheco Gallego

Amanece un nuevo día en el parque urbano «Los Montesinos». Salen los primeros rayos solares de primavera que despiertan a la fauna y la flora. Las flores se agitan al son del suave viento mediterráneo. Los jardineros empiezan sus tareas. Entre la maleza descuidada nacen margaritas y flores silvestres. En el centro del parque se alza una fuente con una cúpula verde, donde los caños de agua no funcionan. Algunos ancianos se detienen a contemplar la obra y hacen observaciones.

Mientras tanto, en uno de los senderos del parque que se desliza sobre los árboles en una suave llanura, avanza levantando el polvo del camino un anciano acompañado por un niño joven que parece ser su nieto. Al ver un banco de madera el niño dice:

— Mira abuelo, aquí te puedes sentar mientras voy a jugar con mis amigos. Además tienes un periódico.

— Muy bien hijo, ve a jugar.

El hombre se sienta en el banco y saca unas gafas que procede a colocarse. Mira la fecha del periódico, se dice que es atrasado y, resignado, empieza a leerlo.

Poco rato después aparece por la misma vereda una mujer mayor acompañada por una niña de rubias coletas. Se dirigen al mismo banco donde está sentado el hombre. La niña comenta:

— Mira abuelita, aquí te puedes sentar. Y muy risueña añade: Además estarás en buena compañía. Me voy a jugar con mis amiguitas.

La señora se sienta en el banco, y dice muy alegre:
— ¡Buenos días!

El hombre apenas baja el periódico y la mira levemente por encima para responder un respetuoso:
— Buenos días.

Sin hacerle mucho caso, la mujer saca una bolsita con migas de pan que va echando al suelo mientras exclama:

— ¡Pitas, pitas, pitas!, ¡Pitas, pitas, pitas!

El hombre la interrumpe en su labor.

— ¡Oiga señora, que son gorriones, no gallinas!

Ante ésta interrupción, los gorriones se sobresaltan y vuelan hasta la seguridad de un árbol cercano.

La mujer responde:

— Los llamo como quiero y además me hacen caso.

— Claro, les da de comer. Manifiesta el hombre

La señora, indiferente ante el comentario, empieza a emitir sonidos con sus labios a la par que lanza comida.

— ¡Preeest, miiist, miiist!, ¡Preeest, miiist, miiist!

Los gorriones vuelven a bajar y aprovechan para darse un festín. Mientras comen miran al banco.

— ¡A ti te conozco chiquitín! Come, come y ponte fuerte. Comenta la mujer.

El hombre la mira atónito y boquiabierto, al mismo tiempo que se mueve inquieto en el banco y agita torpemente el periódico. La mujer le mira contrariada.

— Ya que me asusta a los gorriones, dígame que lee.

El anciano la mira gravemente y con gesto duro dice:

— Una noticia de muerte y destrucción.

— ¡Ande, ande, no sea exagerado!. Deme el periódico y busquemos algo más ameno. Comenta divertida.

La mujer toma el periódico entre sus manos y empieza a pasar páginas hasta que lee:

— «Hombre mayor se dedica a espantar gorriones». ¿Que le parece ésta noticia?

El hombre se muestra cariacontecido.

— Vamos, hombre. No se ofenda.

El hombre le responde lo más impasible que puede:

— No estoy ofendido. Es que usted no me conoce.

— Eso es cierto, ni siquiera nos hemos presentado

— Leandro, me llamo Leandro. ¿Y usted?

— Graciela.

— Mucho gusto en conocerla Graciela.

Leandro alarga la mano y Graciela se la tiende para estrechársela. Ambos se miran nuevamente con renovados bríos.

Graciela comienza de nuevo la búsqueda de una noticia. Se detiene en una y expresa:

«El día de los enamorados de ayer fue muy original y especial para María la mujer de Juan, que cortó parte de una calle para llenarla de rosas amarillas».

— Como se nota que ya no quedan hombres de los de antes, ahora por nada que hacen ya es original y especial, se lamenta Graciela.

En ese momento Leandro se levanta del banco, se acerca a unas margaritas cercanas, corta una de ellas y se dirige a Graciela para ponerla suavemente sobre su rebeca, y vuelve a sentarse. Poco a poco a Graciela se le ponen los ojos vidriosos.

— Ve usted como no me conoce, asevera Leandro.

Extiende ambas manos que entrelaza con las de Graciela y deposita sendos besos en ambos dorsos de la mano. Ella suspira feliz.

FIN

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21 comentarios

  1. 1. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Antes que nada quiero agradecer a las tres personas que han dejado sus comentarios de texto por su gran ayuda. Aunque no os lo creáis, cuando escribo suelo hacerlo más como en los anteriores talleres, sin diálogos.

    Aquí dejo uno de los pocos textos que he realizado con diálogos, y eso se ha notado con algunos fallos que ya he empezado a realizar.

    Dejo este comentario para el resto de gente que vaya leyendo el texto y tenga en cuenta mi falta de practica en los diálogos

    Escrito el 28 marzo 2014 a las 13:26
  2. 2. lunaclara dice:

    Hola Vicente! A mi precisamente me pasa distinto q a ti: suelo escribir diálogos y en este taller no los he usado. Yo he de mejorar en esto último y en las descripciones.
    Desde mi experiencia puedo decirte q no me chocan los diálogos q has escrito. Me choca mas q 2 personas mayores entren tan pronto en intimidad.
    Te felicito x tu esfuerzo.

    Escrito el 28 marzo 2014 a las 17:43
  3. 3. David Rubio dice:

    Es un muy buen relato. Quizás en el final me pasa como a Lunaclara, queda demasiado dulzón. Pero hasta ahí el relato es muy entretenido, consigues crear química entre el viejo gruñón y esa encantadora abuelita.
    Respecto a los diálogos no he visto nada extraño, son fluidos y con gracia.
    Salvo por el final es un muy buen relato. Saludos

    Escrito el 28 marzo 2014 a las 22:32
  4. 4. Ana dice:

    Hola, Vicente!

    Me tocó comentar tu relato y me encantó hacerlo. Me parece fenomenal que te atrevas con los diálogos si piensas que no son tu fuerte. A mí me parece que te han quedado muy creíbles.

    Me pareció una historia muy tierna, aunque también me chocó que Leandro le besara las manos a Graciela y que ella se dejara.

    Un buen relato. Espero seguir leyéndote!

    Escrito el 29 marzo 2014 a las 12:01
  5. 5. Borja dice:

    Hola, Vicente!!
    Disculpa la demora… El día a día…
    En primer lugar me gustaría comentar que la encuentro una historia muy tierna. Me gusta el vinculo abuelo-nieto y todo el ambiente de absoluta normalidad que creas.
    Como lo menos bueno, decir que encuentro, tal y como dice luna, poco veraz o posible, esa forma de reaccionar y de relacionarse los dos ancianos.
    Los diálogos son como todo, se mejora usándolos. Y sin arriesgar no se gana.
    Enhorabuena.
    Un saludo!!!

    Escrito el 31 marzo 2014 a las 10:07
  6. 6. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Hola lunaclara, muchas gracias por tu comentario. Desde mi punto de vista estamos aquí para aprender y quise lanzarme con los diálogos, que junto a las descripciones, como te pasa a tí, siempre hay que mejorar. Gracias por tus felicitaciones

    Hola David Rubio, muchas gracias por pasarte por el relato y dejar tu comentario. Al estar pendiente de las 750 palabras, quizá precipite los besos en las manos para darle un final romántico, que me apetecía mucho. Pero, como muy bien me han comentado, hay que darle un sentido al texto y no hacer cosas por que me apetezcan.

    Hola Ana, te estoy muy, muy, muy agradecido por enviar tu comentario para poder seguir aprendiendo. La verdad es que en este texto que envíe estaba bastante inseguro y ya estaba deseando recibir los comentarios. Hay que seguir aprendiendo cada día.

    Un saludo a todos

    Escrito el 31 marzo 2014 a las 10:10
  7. 7. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Hola Borja, muchas gracias por tu comentario. Desde el primer momento que tuve la idea en mi cabeza quise hacer una historia tierna y cotidiana. El relato tenía ya 700 palabras cuando estaba cerca del final, así que mira me lance y me precipite con los besos en las manos.

    Un saludo Borja

    Escrito el 31 marzo 2014 a las 10:51
  8. 8. Miranda dice:

    Hola Vicente:

    Sencilla historia cotidiana, bien contada, con un dialogo facilmente creible y que trata un tema poco habitual: las relaciones o los sentimientos en la tercera edad.
    Aunque a muchas personas ni se les pase por la mente es un tema que tambien existen, mucho más de lo que creemos. Yo tube la oportunidad de descubrirlo, en unos familiares octogenarios hace poco años. Quiza alguún dia haga un relato en ese sentido. O quiza un día Iria nos ponga una escena sobre ello.

    Saludos, nos leemos.

    Escrito el 31 marzo 2014 a las 14:18
  9. 9. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Muchas gracias por tu comentario Miranda, como ya he comentado desde el principio que la idea llegó hasta mi mente quise hacer una historia tierna y cotidiana, y por ese sentido se ha conseguido.

    Escrito el 31 marzo 2014 a las 14:37
  10. 10. Aurora Losa dice:

    Para no gustarte hacer diálogos esta escena tan teatral te ha quedado muy bien. Me encanta el retrato de los dos abuelillos, pero lo que más me ha gustado, lo que más de todo, es cómo los nietos los dejan allí en el banco, como en un cambio de roles (lo lógico sería que los abuelos dejaran a los niños en los columpios).
    Muy bonito, en serio.
    Enhorabuena.

    Escrito el 2 abril 2014 a las 12:44
  11. 11. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Muchas gracias por tu comentario Aurora. No es que no me gusten los diálogos, es que me cuesta ponerlos. Siempre veo el relato que quiero escribir desde otro punto de vista y eso hace que me cueste el ponerlos.

    Un saludo

    Escrito el 2 abril 2014 a las 14:12
  12. 12. Ada Lena G. P. dice:

    “Agridulce”, este sería el adjetivo que, a mi parecer tal vez, podría resumir esta bella historia sobre la vejez. Unos personajes entrañables que no tienen “pelos en la lengua”, condición que se obtiene, generalmente, a estas edades. Quizá uno de los pocos privilegios que en esta fase de la vida el ser humano conquista con dignidad y desparpajo.
    Vicente, un relato maravilloso y muy bien escrito. Un estilo directo que se engrandece con ese dibujo del carácter de los presonajes.
    ¡Muchas felicidades, caballero!
    Saludos de Ada.

    Escrito el 3 abril 2014 a las 20:00
  13. 13. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Muchas gracias por tu comentario Ada Lena. He intentado que los personajes fueran los más reales posibles y en ese aspecto parece ser que he acertado.

    Escrito el 3 abril 2014 a las 21:58
  14. 14. forvetor dice:

    buenas Vicente,
    cierto que el diálogo y la narración asociada está un poco “acartonada”, produciendo ese efecto teatral que comenta algún compañero. pero como comenta el buen Borja sin practicar no se mejora. y arriesgarse a presentar un relato con una técnica no dominada merece un comentario y un halago. bien hecho!
    la historia me parece muy tierna y creíble, por qué no? yo con mi mejor amigo casi me lío a tortas la tarde que lo conocí… comienzos más extraños he visto 😉
    para mi el único error grave del texto son algunas redundancias que he encontrado por ahí esparcidas; “niño joven”, “se miran nuevamente con renovados brios”…
    a seguir trabajando así de bien! nos leemos!
    Sergio Mesa / forvetor
    http://miesquinadelring.com/

    Escrito el 4 abril 2014 a las 16:20
  15. 15. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Hola Sergio, muchas gracias por tu comentario, no lo había visto, ni tampoco la gente que me mando los comentarios, así que doblemente agradecido. Hay que seguir mejorando cada día.

    Un saludo

    Escrito el 4 abril 2014 a las 22:06
  16. Hola Vicente!
    (disculpa mi demora en leer tu relato)
    El comienzo me gusta, vas pintando un cuadro poco a poco y dejas que el lector se vaya imaginando cada recodo de ese parque.
    Los personajes me parecen entrañables y esos gestos espontáneos que dan vida a la escena me han dibujado una sonrisa, sobre todo cuando Graciela llama a los gorriones o cuando lee la noticia “«Hombre mayor se dedica a espantar gorriones»”.
    Buen trabajo y no dejes nunca de crecer. 😉
    Un abrazo!

    Escrito el 5 abril 2014 a las 16:21
  17. 17. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Hola Virginia. Gracias por la visita y por tu comentario, que es lo más importante. La demora es lo de menos. Mi intención era entrar poco a poco en el relato y por esa parte se ha cumplido. Me alegra mucho tu sonrisa, por que me lo pase en grande creando esos textos para Graciela.

    Un saludo.

    Escrito el 6 abril 2014 a las 14:38
  18. 18. Chiripa dice:

    Hola Vicente,
    La descripción del parque Los Montesinos, con la que inicias tu relato, me pareció perfecta, tanto que lo estaba viendo todo con mis propios ojos
    Nos presentaste una cariñosa y tierna la relación de los niños con sus abuelos
    Los diálogos no me molestan y siento que le dieron agilidad al relato.

    Definitivamente, un relato es diferente para el que lo escribe y para cada lector. ( y ahora te vas a reir):
    Yo imaginé que los abuelitos eran pareja, que llegan al parque con sus nietos, quienes los sientan juntos. Él, al principio es brusco, impaciente, al hablar con ella, pero luego, recuerda que tiene Alzeimer (no lo conoce), entonces, enternecido con sus comentarios, le regala la margarita y le besa las manos.
    Ves? No te des mala vida, no se puede complacer a todo el mundo
    Me gusto leerte y te felicito

    Si quieres responder este comentario por favor hazlo en mi relato (que es el del título mas largo) porque con el afán de leer y comentar otros relatos de los compis no volveré por aquí. De paso, te invito a leerlo. Jajaja
    Feliz escritura, espero leerte este mes!

    Escrito el 12 abril 2014 a las 02:42
  19. 19. Servio Flores dice:

    Bonita historia. Ya poco que comentar, ya han dicho casi todo.
    Solo me resta felicitarlo.
    Saludos

    Escrito el 13 abril 2014 a las 07:21
  20. 20. Vicente Pacheco Gallego dice:

    Muchas gracias por vuestros comentarios Chiripa y Servio Flores. Me alegro mucho que te guste la descripción Chiripa, la verdad es que la pensé mucho para que quedara bonita, y también muchas gracias por tu imaginación, por que además el algo que en ningún momento había pensado.

    Escrito el 15 abril 2014 a las 12:49
  21. 21. Chiripa dice:

    Hola Vicente,
    Gracias por tu revisión y comentarios a mi relato.
    Espero el castillo te haya inspirado y hatas enciado el relato este mes
    Slds,

    Escrito el 16 abril 2014 a las 02:20

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