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Un miércoles de verano - por Jota A.
Web: http://almadecuentacuentos.blogspot.com.es/
Un estallido de luz rompió la oscuridad nocturna del Parque de la Herradura. Los álamos movieron sus hojas, como queriendo ocultarse del eléctrico espectáculo que ante ellos se desarrollaba.
Cuando la oscuridad volvió a su sitio, la figura de un hombre echó a correr desde el mismo punto en que antes había estado la esfera luminosa. Alcanzó la papelera en el borde del paseo y rebuscó en su interior. Latas, cartones de refresco, un viejo periódico manchado de alguna sustancia grasienta… Mierda. Otra vez.
El hombre se apartó un par de pasos de la papelera, cerró los ojos y desapareció acompañado de una estampida sónica.
Mismo punto del parque, misma hora, siete días antes. La esfera de luz hizo acto de presencia y el hombre reapareció, abalanzándose de nuevo hacia la papelera. Mierda, mierda, mierda. Nada, otra vez. Había sido un miércoles, de eso estaba seguro. Así que saltó una vez más una semana hacia el pasado.
Y otra.
Y otra.
No podía ser mucho más atrás. Recordaba ir en manga corta cuando lo tiró a la papelera. Si seguía retrocediendo se metería de lleno en la primavera y la de aquel año había sido fría y lluviosa. ¿O no había sido un miércoles? Sí, miércoles, no era momento de entrar en pánico.
Secó la sangre que le había empezado a gotear de la nariz. Un salto más. Uno. Si no lo encontraba, buscaría otra forma de recuperarlo. Un escalofrío le recorrió la espalda sólo con pensarlo. Saltó.
Nada. No era posible. Basura y más basura, pero no lo que él quería. Se echó las manos a la cabeza. Una punzada de dolor le atravesó el cráneo y la sangre brotó con más fuerza de su nariz. Cayó de rodillas.
—Chico, estás hecho mierda.
La voz, inconfundible, había venido del banco junto a los árboles, a su espalda.
—Hija de puta…
—Tsche, tsche, tsche, esa lengua…
—¿Cómo me has seguido hasta aquí?
—¿Seguirte? No, te estaba esperando. Acabas de tirar esto —la mujer sacó un pequeño cilindro metálico del bolsillo— en esa papelera hace unos minutos. Supuse que antes o después volverías a por ello. Oh, pobre, ¿creías que con un truco tan malo te ibas a librar de mí?
El hombre se incorporó. Un pequeño mareo le acompañó al dar el primer paso hacia la mujer.
—No tienes ni idea de en qué te estás metiendo. Dámelo ahora mismo y quizá olvide que has estado implicada.
La risa de la mujer, aguda y cantarina, fue su única respuesta.
El hombre cerró los ojos y saltó.
La mujer estaba revolviendo en la papelera. Había visto como el hombre al que seguía acababa de tirar algo allí antes de seguir huyendo a la carrera por el paseo de la Herradura. El fogonazo de luz a su espalda la sorprendió. Antes de que pudiese darse la vuelta, un fuerte golpe la hizo caer al suelo. Trató de incorporarse pero un puntapié en el estómago la obligó a doblarse sobre sí misma. Otra patada más en la cabeza y perdió el sentido.
El hombre se derrumbó a su lado, sangrando por la nariz y los oídos. La vista se le nublaba y sentía tal presión en la cabeza que temió que fuese a explotar en pedazos. Reposó unos instantes, hasta que su pulso volvió a un ritmo razonable y se incorporó con dificultad, arrastrando sus pasos hasta la papelera.
El cilindro estaba allí, casi en el fondo. Lo recuperó entre jadeos.
La mujer. Aquella mala pécora. Se arrodilló junto a ella y rebuscó entre las pertenencias de sus bolsillos. Se guardó la cámara, el teléfono, un bloc de notas.
Apretó el cilindro con fuerza en el puño. Esperaba realmente que su contenido valiese la pena…
El bolígrafo, sí, buena idea. Garabateó “Te quiero” en el dorso de la mano que sostenía el cilindro, cerró los ojos y saltó.
Se supone que esto es para que otros comenten el relato pero me voy a autocomentar para responder a un par de interrogantes que planteaba uno de mis comentaristas, aunque me juegue un ban. xD
Dice que “No se ve nada que explique para que se escribe “Te quiero” en la mano el protagonista… sencillamente lleva a pensar “¿A cuento de qué?”
Es sencillo de entender. Por el ritmo de deterioro que sufre el protagonista en los tres últimos saltos, y como ha tenido que efectuar uno más de los que se había permitido como límite final, sabe que no sobrevivirá al salto de regreso. Y hace lo que haría cualquier ser humano que sabe que va morir: intenta despedirse de sus seres queridos.
El mensaje sirve tambien como anclaje del resultado: ella le está esperando al otro lado del últomo salto para recoger el cilindro y verá el mensaje al recogerlo de su mano.
Hay una segunda lectura simbólica del texto con un tema muy diferente, pero si no se ha entendido esta, mejor ni lo menciono. xD
También comenta que la aparición del periódico es irrelevante y que puede llegar a suponer incumplir uno de los requisitos. Me remito a la redacción original del taller:
“Para participar en el taller de este mes tenéis que enviarnos un relato (con su presentación, su nudo y su desenlace) en el que se cumplan las siguientes características:
1. El relato ha de tener lugar en una única localización y ésta ha de ser un parque urbano.
2. En el relato tiene que aparecer un ejemplar de un periódico atrasado.”
Dice que tiene que aparecer, y aparece, pero no especifica que tenga que ser relevante en la historia. En mi caso, es completamente irrelevante y no incumple el requisito tal cual está redactado.
De hecho, mi objetivo bonus de este taller era “saltarme” los dos requisitos. El segundo, haciendo uso de la mera mención (no es casualidad que esté entre la basura), y el primero por el procedimiento de convertir el tiempo en el escenario en que se desarrolla la trama. Porque el parque es también irrelevante, podría tratarse de un garaje o el pasillo de un centro comercial y la historia sería idéntica. 😉
Un saludo,
J.A.
Hola J.
Quizá sea porque lo primero que he leído es tu auto- comentario, la historia me parece clara, el personaje se va debilitando al hacer los viajes en el tiempo.
Está bien escrita y consigues realmente tus objetivos de “saltarte” los requisitos a la vez de cumplirlos.
Es la primera vez que te leo, seguiré haciéndolo en los próximos talleres.
Saludos
Me lo he creído, me has metido en la historia desde el primer destello de luz.
Creo que todo se entiende a la perfección. Has hecho que perciba el estado del protagonista a lo largo de la historia, sobretodo en los últimos saltos y la escena final, con sangre brotando de su cerebro y la cabeza a punto de estallar, pensando tan solo en su objetivo y en los que más quiere. Me ha parecido brillante, me ha encantado. Enhorabuena.
Un abrazo,
Aina
http://ainaponstriay.wordpress.com
Hola Jota! Gran relato. Conmueve, me he emocionado mucho. Lo he tenido q leer varias veces para comprenderlo bien, pero es fantástico.
Cual es el leit motiv del cilindro?
Muchas felicidades!!! Me han dado ganas de leer algo mas extenso.
Encuentro tu relato como algo que he visto o leido antes. Entiendo perfectamente el sentido del protagonista de estar buscando. Me perdi totalmente en la relacion con la mujer, pero tal vez solo sea un despiste mio. Estoy viendo una serie americana que se llama “The Tomorrow People” que trata basicamente de esos saltos que hace el protagonista, con la salvedad de que aqui brinca en el tiempo.
Fuera de todo me a parecido una lectura entretenida.
Felicidades
Si te sirve de algo, para mi el texto está bastante claro, de hecho quería destacar lo mucho que me ha gustado el desarrollo del relato, la importancia de los saltos en el tiempo (especialmente la forma en que los introduces y el modo en que afectan al protagonista) y el desenlace con esa nota.
Amén de todo esto, y después de expresarte mi enhorabuena, me gustaría decirte que lo que no termino de encajar es la relación con la mujer, no es que el personaje me resulte superfluo, pero la relación es demasiado ambigua o falta algo más en ella. Aunque también podemos achacarlo a la falta de espacio, creo que has andado muy cerca del límite. En todo caso, a mi me ha parecido un relato entretenido, bien estructurado y comprensible salvo esto último que te he comentado.
Enhorabuena.
Me ha gustado su relato, es muy gráfico y me hace recordar a la película terminator, por lo de las esferas.
No me queda claro el personaje de la mujer. Igual lo del cilindro, que tiene, a quien se lo lleva, porqué lo tiró siendo tan valioso…
Aún así el relato me ha gustado porque es muy dinámico y mantiene en la lectura.
Saludos