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Sólo un juego - por Ciielo Riin

El autor/a de este texto es menor de edad

Un día agradable fue cuando él me trajo a este castillo que denominó mi reino. Perfecta para comenzar nuestra vida, pensé en ese instante al ver las altas torres blancas alzarse a mi frente, la gran puerta caer ante mí… y él a mí lado sonriéndome mientras entrábamos y jurándome que solo la muerte nos separaría.
Esos días parecían tan reales que ahora viéndolo tirando a unos metros de mí, me hace dar cuenta lo poco que duró todo.
Siempre supe que era un romántico sin remedios que no le importaba la presencia de mis padres para lanzarme piropos. Y es por eso que al principio se ganó la enemistad de mi padre y hermano, pero con la ayuda de mi madre, él pudo ganárselos. Estaba tan feliz cuando los había visto a los cuatro compartir un simple té en la sala de mi antiguo hogar… pero los problemas aun persistieron, aunque ahora con su familia.
Mi amor era de una rica familia y yo, clasificada por como plebeya me creyeron una caza fortunas. No dudaron en rechazarme y humillarme, y aun cuando mi amor les advirtió que no lo soportaría de nuevo, ellos prefirieron perder un hijo que aceptarme en su entorno.
Fue triste irme del pueblo en que nací y dejar a mi familia pero él aun me quedaba, mi amor me prefería a mí antes que su familia.
Y ahora… jamás creí que aquel romanticismo que me enamoró le serviría como medio de distracción mientras en otro reino lejano levantaba otra familia con engaños.
Aquella traición la negué miles de veces con la esperanza de que él me lo dijera, después de todo, un error cualquiera lo cometía y yo por él sería capaz de olvidar todo y recomenzar. Pero conforme pasaba los días cada flor bella que traía, cada palabra dulce que de sus labios salía, era una puñalada más a mi alma, el dolor quemaba y de poco el resentimiento me apoderaba. Le quise advertir, los pocos vecinos que teníamos ya me trataban como la tonta engañada, quise hacer que se arrepintiera pero solo conseguía su enfado por mi desconfianza, sólo gritaba mostrando que lo decepcionaba y no sabía amarlo como merecía.
Nunca lo admitió.
Me hizo creer que todo era un engaño de mi cabeza, que exageraba los chismes de la mala gente… que él me amaba y yo era la que fallaba por dudar.
Quizás ya estaba al borde de la locura cuando lo seguí a uno de esos viajes de trabajo que había comenzado a realizar una vez que nos fuimos de nuestro pueblo natal. Recuerdo más de una vez decirme que me rindiera y confiara en él pero cuando vi a lo lejos que paraba frente a un castillo amarillo, mi corazón se oprimió.
Todo lo que en las calles me decían se me venían a la mente, todos los momentos en que me gritó indignado por suponer su engaño, me heló la sangre. Y cuando la vi a ella salir de las grandes puertas con un bulto entre sus manos, mis ojos ya no permitían las lágrimas salir.
No lo llamé, ni siquiera se enteró de que lo había seguido.
Unas semanas después, entró como siempre, y se enojó al instante viendo que había descuidado la limpieza. Pero el enojo se fue al verme en una esquina, se precipitó a mí alarmado. Yo sostenía mis piernas con una de mis manos mientras la otra empuñaba un objeto filoso tras mi espalda.
Dejé todo por él, creí que irnos del pueblo por el rechazo de su familia era una valerosa promesa de su amor pero todo cambió hace unas semanas y verlo allí con ella y ese bebé, sonriendo como lo hacía conmigo, diciéndole quizás palabras que ya me ha dicho… me pregunté si sólo yo era un juego para él.
Un juego… claro, seguro de eso trataba.
Fueron segundos, el verlo correr a mí y, en un parpadeo, verlo retroceder aterrorizado mientras se sostenía la garganta que salpicaba un rojo líquido.
Sin más amor y hundida en el odio y el rencor, me incliné a él y noté su mirada aterrorizada.
Si tan solo me hubiera reconocido todo, si hubiera dejado de lado todo su tonto juego… esto no habría pasado.
Antes de ver cómo el poco de vida abandonaba sus ojos, susurré: Se acabó el juego… amor.
Y así cumplió algo al menos, la muerte nos separó.

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3 comentarios

  1. 1. José Torma dice:

    Muy fuerte tu texto. El amor y el desamor, el engaño. Caray.

    Me gusto mucho la manera que lo fuiste narrando, envolviendome y llegando al punto en que no podia esperar a ver el desenlace. Si algo puedo criticar es que es un poco predecible pero al final del dia poca cosa. Muy bueno, felicidades.

    Escrito el 28 abril 2014 a las 23:14
  2. 2. Miranda dice:

    Un buen relato, duro para estar escrito por un menor. Me ha gustado.
    La única recomendación que te haría es que no hagas pareados o rimas dentro de una frase, resulta un lenguaje un poco chocante en un texto como este. (es una opinión totalmente personal)
    Enhorabuena de todas formas, el texto es interesante y tiene mucho nivel, sigue escribiendo y sigue aprendiendo. Por aquí estaremos para leerte.
    Saludos

    Escrito el 1 mayo 2014 a las 12:56
  3. 3. Maira Aguilar dice:

    Me encanto 😀 !! todo amor amor, y un poco de tristeza !! genial historia, otra de las tantas que me gustan!! Segui escribiendo asi :3 amo tus historias!!!!

    Escrito el 10 mayo 2014 a las 02:52

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