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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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La cita - por Kelly Hernández

Web: https://kellyjhernandez.wordpress.com/

Afuera, el cielo se iluminaba al mismo tiempo que rugía amenazante, entretanto yo recorría mi habitación de un lado a otro. Me sentaba en la cama por momentos, y al instante me levantaba; sentía que el aire me faltaba. No había forma de permanecer tranquilo. Miré el reloj deseando que ya dieran las diez. Tomé mi sombrilla, y caminé sin prisa las cuatro cuadras que había de la casa a mi edén.

Las viejas luces del parque titilaban bajo el ritmo sinfónico que producían las gotas de agua al caer, y ahí estaba yo, como cada noche, cumpliendo nuestra cita; a un lado de la banca de madera sosteniendo mi sombrilla esperando por Elena. Esa misma sinfonía acompañaba mis pensamientos, mientras una sensación gélida que a ratos hacia dar brincos a mi cuerpo me invadía, junto al movimiento casi involuntario de mis pies que dejaban al descubierto mi ansiedad.

El compás de un delicado caminar que se abría espacio en el agua poco a poco se acercaba, dando paso a una esbelta silueta ataviada en una fina gabardina de un blanco inmaculado, que resaltaba aún más su delicada piel morena. Su estilizada y alargada figura se proyectaba interminable en aquellas escurridizas aguas. Su rostro angelical esbozaba una tímida sonrisa. Sus finos labios no necesitaban musitar palabra alguna, mientras que los míos vacilantes, se ahogaban con las que tenía guardadas.

—Temía no encontrarte Benjamín —apenas susurró—. Mientras yo me abandonaba observándola.

—¡Sabía que vendrías! —le repliqué.

Ahí estábamos solo los dos, bajo la inmensidad de aquel manto oscuro y húmedo. Bajo esas gotas de agua, que poco a poco empapaban nuestros rostros, y terminaban bañando nuestros cuerpos. La complicidad que había en nuestras miradas nos delataba.

Sus brazos se extendieron invitándome a ir hacia ellos. Mi cuerpo acogió emocionado el llamado. Me acerque despacio, y nuestros cuerpos se juntaron. Mis manos se deslizaron lentamente sobre su cara, las suyas, acariciaban con vehemencia mi pecho. Mis manos cayeron rendidas a su cabellera, mientras ella jugaba hasta posar las suyas alrededor de mi cintura. Mientras yo me perdía en su tierna mirada, ella acercaba su rostro vacilante y juguetón hacia el mío. Sentí lo mucho que me deseaba. Ella Recorrió con sus manos mi espalda una y otra vez, las mías, acariciaban de forma sutil cada milímetro de su cuello. Nuestros labios tibios se fueron acercando, paulatinamente se rozaron, y terminamos uniéndonos en el más delirante beso. Sus suaves mordiscos recorrieron todo mi cuerpo, y yo sentí flotar. Y ahí estábamos ella y yo, perdidos en la grandeza de nuestro momento de pequeña intimidad.

Caminamos por aquellas vías enladrilladas de nuestro edén tomados de la mano, olvidando por completo el diluvio que se cernía sobre nosotros.
A lo lejos, se escucho un estridente ruido, su mirada se clavó dubitativa en la mía, nuestras manos se alejaron y nuestros cuerpos ya no se tocaban.

—¿Qué es todo ese escándalo? —me pregunté un tanto molesto.

Elena me miraba y se apartaba cada vez más.

—¡Espera un momento! —le dije desesperado—. No te vayas.

El estridente ruido se acercaba más y más y yo no entendía qué pasaba. Elena dio la vuelta, y empezó a caminar alejándose de mí.

—¡Por favor! —le supliqué.

—Es inevitable —Me respondió sin mirarme.

Su silueta se fue sumergiendo con cada paso en aquella oscuridad. Ese ruido estaba más cerca, robándome la calma. Una sensación de soledad me recorrió el cuerpo. Intentaba alcanzarla, pero no podía. Mi corazón se aceleraba, y ese ruido era más penetrante, sofocaba mis pensamientos; me alejaba de ella. Mi cuerpo se estremeció, de pronto, aquel sonido fue más audible. Di un salto y desperté bañado en sudor, justo cuando frente a la ventana de mi cuarto, en la mitad de la calle, pasaba un viejo Volkswagen con un parlante en su techo anunciando la inminente llegada del circo a la ciudad. Golpee lo más fuerte que pude las almohadas mientras me lamentaba. Mi cita, mi bella cita con ella, no había sido más que un sueño.

—¡Un sueño! —grité.

Después de una ducha, me vestí y me fui de prisa a mi trabajo sin probar nada de comida, al llegar, crucé la puerta hacia mi escritorio, y ahí estaba ella, tan linda y elegante como siempre; dándole un beso a su flamante esposo, quien además era mi jefe.

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16 comentarios

  1. Esta es mi primera participación en los talleres y realmente estaba nerviosa. Me costó trabajo soltar el miedo y dejar que me leyeran.
    Honestamente me preparé para recibir comentarios “no agradables”, pero me sorprendió la buena aceptación de mi texto. Comentarios anotados y en camino a corregir. Gracias a mis Betalectores.

    Escrito el 27 mayo 2014 a las 18:06
  2. 2. José Torma dice:

    Hola Kelly.

    Pues para ser tu primera participacion a mi me parecio de muy buena manufactura. Agil y sencilla, un poco predecible pero solo porque tengo años leyendo jaja.

    Tus descripciones muy buenas y algunas rayando en lo poetico…

    “Las viejas luces del parque titilaban bajo el ritmo sinfónico que producían las gotas de agua al caer” que a mi me hubiera gustado un punto en vez de una coma al terminar, pero cosa mia solamente.

    Bienvenida y te espero en mi relato No 38.

    Felicidades

    Escrito el 28 mayo 2014 a las 00:01
  3. 3. Cristina dice:

    ¡Hola!
    Me ha gustado mucho tu relato, sobretodo el momento en el que los amantes se juntan. Las descripciones de su encuentro son estupendas, felicidades. El final me ha hecho gracia, pero… ¡pobre Benjamín! 😉

    Enhorabuena por tu relato, te invito a leer el mío(nº19.

    ¡Un saludo!

    Escrito el 28 mayo 2014 a las 09:51
  4. 4. Aurora Losa dice:

    Relaja esos nervios porque es un gran debut. Te felicito por la forma en que nos describes a los amantes y su encuentro, y por cómo me has agarrado el pecho con el sonido que los separaba, barajé mil posibilidades pero ninguna era un Volkswagen, desde luego.
    Has jugado con la imaginación del lector y tu vocabulario me ha gustado mucho.
    Enhorabuena.

    Escrito el 29 mayo 2014 a las 15:31
  5. 5. Yiye dice:

    Pues habiendo escrito esto, tus preocupaciones no estaban para nada justificadas.

    Coincido en que el momento de su unión es muy bueno. Poco a poco, sin prisas, y con unas palabras muy bien elegidas. Da la sensación de que ha habido mucho trabajo detrás de este texto, especialmente de ese párrafo.

    Escrito el 30 mayo 2014 a las 02:45
  6. 6. David Rubio dice:

    Pues no tienes que preocuparte. Escribes muy bien, con claridad, tienes claro que relatar es contar algo. Por tanto tienes todos los mimbres.
    La historia en sí es bastante convencional, por eso lo único que te sugiero es que en futuros relatos no tengas miedo en ser exagerada, descabellada, huye de historias ya contadas y trocéalas, dales giros inesperados.

    Un saludo

    Escrito el 30 mayo 2014 a las 18:51
  7. 7. Ana Vera dice:

    Ja! Qué bueno, Kelly, qué bien narrado y qué bien escrito. El encuentro de los amantes, tan real, el momento de confusión cuando se estaba despertando, yo misma he sentido su confusión y su embotamiento mental y luego… el chasco de que era la mujer del jefe. ¡¡Bravo!!, me ha gustado muchísimo.

    Escrito el 30 mayo 2014 a las 23:05
  8. 8. marisa cuñat mafé dice:

    Me ha gustado tu historia. EL final le da un giro humorIstico inesperado que explica el recurso del despertar de un sueño que al parecer es fácil.Es lo que me dijeron
    en un taller de esscritura y que en este texto resuelves muy bie.en

    Escrito el 31 mayo 2014 a las 23:43
  9. 9. Kelly Hernández dice:

    Agradezco tu comentario José y tus sugerencias. Las comas son mi pesadilla ajjajaj

    Nos leemos

    Un abrazo
    http://kellyjhernandez.wordpress.com/

    Escrito el 3 junio 2014 a las 21:06
  10. 10. kelly Hernández dice:

    Gracias Cristina por tomarte el tiempo de leerme. El final se me ocurrió después que escribí el primer párrafo.

    Acepto la invitación de leerte

    Un abrazo
    http://kellyjhernandez.wordpress.com/

    Escrito el 3 junio 2014 a las 21:09
  11. 11. kelly Hernández dice:

    Hola Yiye, te cuento que leí muchos relatos de las escenas anteriores. Hay una gran calidad y no quería ser inferior al reto.
    Me alegro que te gustara.

    Nos leemos!

    http://kellyjhernandez.wordpress.com/

    Escrito el 3 junio 2014 a las 21:11
  12. 12. kelly Hernández dice:

    Gracias Aurora Losa por tu buena vibra y tus comentarios. Ni idea de carros, me tocó buscar en Internet cómo era un Volkswagen. ha sido un ejercicio muy productivo y por demás interesante!

    Un abrazo desde Colombia
    http://kellyjhernandez.wordpress.com/

    Escrito el 3 junio 2014 a las 21:15
  13. 13. kelly Hernández dice:

    David Rubio gracias por tus sugerencias y tomando apuntes. El nivel acá es muy alto y ha trabajar para mejorar.

    Un abrazo
    http://kellyjhernandez.wordpress.com/

    Escrito el 3 junio 2014 a las 21:17
  14. 14. kelly Hernández dice:

    Gratamente sorprendida. Gracias Ana Vera, que bueno que te gustara. el reto era transmitir lo que él personaje sentía y si tu lo percibiste, me doy por bien servida.

    Un abrazo y nos leemos!

    http://kellyjhernandez.wordpress.com/

    Escrito el 3 junio 2014 a las 21:20
  15. 15. Kelly Hernández dice:

    Hola marisa gracias por leerme y por tu comentario. Soy una novata en esta edición y me resulta estimulante tanta buena vibra. Por supuesto, tomando nota de las muchas cosas a mejorar.

    Un abrazo

    http://kellyjhernandez.wordpress.com/

    Escrito el 3 junio 2014 a las 21:26
  16. !Ah, que pena!

    Kelly, para ser una novata eres muy buena escritora. Me ha encantado el relato, pero una pena que al final el chico tenga tanta mala suerte :(. Ha sido un placer leerte. Luego me pasaré por tu blog a echarle un vistazo. Pásate por mi relato cuando tengas tiempo y me dices qué te parece. Es el número 22 de esta recopilación.

    Por cierto, yo también tengo un blog. Si haces clic sobre mi nombre podrás visitarlo.

    Un abrazo muy fuerte.

    Escrito el 8 junio 2014 a las 16:25

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