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Los gemelos - por Selene Lakes

Web: http://leonadelibros.wix.com/selenelakes

LOS GEMELOS

Sofi y Toni se dirigían juntos hacia la escuela. Eran gemelos y se llevaban muy bien. Sus manos permanecieron sin despegarse durante todo el trayecto. Toni estaba algo asustado, era su primer día de clase en el nuevo colegio. Sofi, la más segura y decidida de los dos, quizás por haber nacido unos minutos antes, le tranquilizó con un esbozo de sonrisa.
– Todo irá bien Toni, ya lo verás. Después de las clases de la mañana nos buscamos en el patio, ¿vale?
– ¡Claro!

El hombre del traje oscuro subió a su auto y emprendió camino a la oficina, desde que lo habían ascendido tenía más trabajo que nunca y quería agradecer a sus superiores la confianza. Mientras conducía cerró por un instante los ojos, intentando mantener a raya el dolor de cabeza que se agudizaba por momentos. De repente una pareja de niños apareció frente al auto, eran pequeños y se parecían mucho… fue lo único que alcanzó a ver… al momento siguiente solo fue consciente del chirrido del frenazo, estridente y atronador, que siempre precede a una desgracia.

Después de las clases de la mañana Toni intentaba localizar a su hermana desesperadamente, ¿dónde se habría metido? seguro que era una de sus bromas. Despistado, se interpuso entre unos chicos que jugaban a baloncesto, en la parte más alejada del patio. El balón rebotó con fuerza en su estómago dejándole sin aire durante unos interminables segundos. El golpe le empujó y cayó al suelo.

Esa mañana la señorita Roberta y la directora, la señorita Carmen, eran las encargadas de vigilar a los pequeños.
– ¿Dónde están los niños? – preguntó inquisitiva la señorita Roberta.
– Allí, al fondo del patio – respondió presurosa la señorita Carmen – y parece que ha sucedido algo, están todos apiñados… vamos a ver que pasa, Roberta.

Por unos instantes, el mundo de Toni fue negro, luego abrió los ojos y vio a Sofi. Estaba rara… como transparente, de sus ojos, idénticos a los suyos, emanaba una profunda tristeza que él no supo entender. La pequeña se acercó a su oído y le susurró unas palabras de despedida. De repente el rostro de Sofi empezó a desvanecerse y otros muchos rostros pertenecientes a los demás niños de la escuela tomaron forma a su alrededor.

Entonces, el pequeño Toni, recordó.

Sofi le indicaba que era el momento de cruzar puesto que el muñequito del semáforo para peatones ya estaba verde, era la única calle que tenían que cruzar y no había mucho tráfico con lo que no tendrían problema. Y en eso estaban cuando un automóvil les embistió, así, sin más. Toni estaba al otro lado con lo que fue Sofi quien sufrió el mayor impacto. Toni se levantó rápidamente del suelo y se acercó a su hermana que yacía a su lado. No vio el reguero de sangre que emanaba de su cabeza, ni sus contusiones, ni su vestido manchado y roto. Solo veía a su hermana sana y salva, sonriente como siempre. La ayudó a levantarse y juntos emprendieron el camino al colegio.

Pendiente como estaba de su hermana Toni no fue consciente de los gritos del conductor, ni de los murmullos de asombro y la expectación de los pocos testigos que dejaba atrás.

Selene Lakes

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6 comentarios

  1. 1. José Torma dice:

    Hola Selene.

    Por primera vez en mi vida me encuentro sin palabras. ¡No entendi!

    Voy de la mano con los niños, veo al señor subirse al auto y cerrar los ojos, imagino lo peor. Cortas a Toni saliendo de clases, buscando a su hermana (me es confuso que siendo gemelos no compartan las mismas clases). Luego busca a su hermana y un balonazo (¿el golpe del auto?) lo hace encontrar a su hermana y asi juntos morir.

    Me descoloca que se levanten como si nada, sin prestar atencion a las acciones del conductor, ¿son fantasmas? Dios mio, te pido una disculpa, pero no entendi.

    ¿Cuando las maestras preguntan por los niños… se refieren a los gemelos?.

    Que buen lio me arme… te felicito porque me hiciste dar vueltas como loco, creo que es el relato que mas he leido intentando pescar una pista que me hiciera ver la luz.

    Creo que sobre pense tu relato jaja y te reitero una disculpa por mis balbuceos, usualmente soy muy cuerdo te lo juro.

    Me encantaria si me pudieras escribir a mi correo para que me contaras ¿que lei, cuales eran tus intenciones?.

    En fin, aqui estamos para aprender y se que este relato tuyo es un reto para mi.

    Saludos

    Escrito el 30 octubre 2014 a las 16:39
  2. 2. Diego Manresa Bilbao dice:

    Hola Selene,
    Coincido con Jose. A pesar de que la idea me ha perecido muy buena, y la forma de contarla es atrevida y una buena idea, al final queda un poco confuso. Pero bueno, estamos aqui para aprender y el relato muestra que tienes talento.
    Un saludo y nos leemos!!!

    Escrito el 1 noviembre 2014 a las 18:31
  3. 3. Maureen dice:

    Yo creo que sí lo he entendido: en el accidente, la niña muere. El niño, conmocionado, no lo asimila y simplemente sigue andando hacia el colegio. En el recreo, tras el balonazo, es cuando “despierta” de su shock y se da cuenta de que su hermana se ha muerto. ¿Es así?

    Me gusta el fondo, el niño que pierde a su gemelo (en uno de mis relatos largos tengo un personaje igual), pero la historia en sí tal vez no resulta muy creíble: ¿el niño ha pasado la mañana en el colegio sin que sus padres, que acaban de perder a su hija, vayan a buscarlo? ¿Sin que ningún profesor se dé cuenta de que falta una niña?

    Creo que se podría hacer más creíble si la última parte de la historia no fuera ese mismo día: el niño experimenta la negación por la muerte de su hermana durante varios días/semanas y, por fin, un día recibe un balonazo y es entonces cuando se da cuenta de que ella ya no está. Puede ser que su hermana, como fantasma, le esté cuidando hasta que él se adapte o haga un amigo, y entonces ocurra lo del balonazo.

    Una idea estupenda, dura pero tristemente realista. Me ha gustado.

    Escrito el 3 noviembre 2014 a las 09:03
  4. 4. Ángel Gabriel dice:

    Coincido con los comentarios de José Toma y de Mauren, yo tampoco entendí los sucesos que trataste de plantear en tu relato, lo del accidente fue impactante, pero se pierde la secuencia de los ulteriores sucesos, no encuentro una correlación lógica entre el hecho del accidente, y luego el aparecimiento del niño en el patio de la escuela y el pelotaso, pero en terminos generales el relato tiene suspenso, conflicto, hay un desenlace, y lo hace a uno por lo mismo de ser confuso, seguir leyendo hasta el final, te recomiendo si no lo has hecho que leas PEDRO PARAMO de JUAN RULFO, para mi es una novela parecida a tu relato, confusa, y dificil de entender pero por lo mismo que engancha hasta el final, y según los críticos es la mejor novela de la literatura mexicana. MUY BUENO. Si tienes tiempo lee el mío, no es la gran cosa, espero tus comentarios. Es el número 16 EL COLEGIO Y LAS MUÑECAS.

    Escrito el 6 noviembre 2014 a las 02:00
  5. 5. Álvarez Vainlla dice:

    Hola compañero. No tenía intención de comentar tu relato pues creo que algunos compañeros ya te han dado algunas pinceladas y temo repetir lo mismo.

    Me gusta mucho el conflicto que creas y empatizo perfectamente con ambos gemelos; consigues despertar mi interés por adentrarme en la trama y descubrir que está pasando.

    Coincido que hay algún punto que me resulta difícil de creer. ¿Acaban de ser atropellados, su hermana ha muerto y el va al colegio como sin nada?, ¿sin que nadie de su familia lo vaya a recoger a clase? Quizá sea el punto débil de la historia, deberías haber utilizado alguna herramienta argumental para hacerla más creíble en ese punto.

    Por lo demás, enhorabuena. En cuanto al conflicto de los personajes es uno de los relatos que hasta ahora más han llamado mi atención.

    Un saludo

    Escrito el 6 noviembre 2014 a las 08:11
  6. 6. Celeste dice:

    A mi me gustó, yo entendí que el niño nunca fue al colegio, sino que estaba soñando por asi decirlo, tirado en la calle, todo lo del pelotazo y demás nunca existió, él lo estaba soñando. Y creo que murieron los dos por eso la ayudó a levantarse y siguieron su camino. ¿Puedes comentar si estoy en lo correcto?

    Escrito el 10 octubre 2015 a las 20:11

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