Cookie MonsterEsta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las condiciones de uso.

Do you speak english?

¿If you prefer, you can visit the Literautas site in english?

Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

<< Volver a la lista de textos

Sábado, 6 de junio - por Job Peró

Hoy, en esta isla, ha ocurrido un milagro. Gabriel, nuestro Primogénito, por fin ha llegado. Es un bebé precioso, despierto, inquieto, activo. ¡Y sólo tiene unas horas de vida! Nos sonríe a todos, sobre todo a su madre. No la ve, pero la siente, y la quiere constantemente a su lado, sin dejar de agarrarle el dedo. Un manita diminuta envolviendo con fuerza el dedo de su madre. ¡Es tan bonito! Su respiración es pausada, tranquila, firme y segura. Su madre descansa también.

El bebé es lo más bonito que jamás he visto, con sus pequeñas manitas recogidas bajo su mentón, y esos piececitos arrugados, rosaditos. ¡Dan ganas de comérselos! Nuestra alegría es tan inmensa que a este pequeño milagro no le va a faltar absolutamente de nada. Todos haremos tantos sacrificios como sean necesarios.

La llegada del pequeño transformará por completo nuestra vida en la isla. Somos un puñado de viejos, es cierto, pero tenemos un espíritu indomable y estamos guiados por una Luz que siempre nos ha dado la fuerza y el valor necesarios, que jamás nos ha abandonado.

¡Ha sido una espera tan larga!

Llevamos más de 40 años en la isla. Cuando llegamos de la mano de Enoc, nuestro guía, aquí no había nada, y sigue sin haber nada. Unas cuantas casitas con lo imprescindible al lado de la única playa que hay. Un recóndito y diminuto pedazo de Tierra olvidado de la mano de Dios en el que la Comunidad ha crecido y se ha hecho cada día más grande, más fuerte. Dependemos de los dones del cielo y del fruto de nuestros esfuerzos.

Temíamos que este momento no fuera a llegar, pero el Altísimo nunca nos abandona. De todos los que vinimos, algunos perdieron la fe, pero su sacrificio sirvió para alimentar nuestro espíritu y reforzar nuestros lazos con el Altísimo.

Hepsiba llegó sola. Ni siquiera había oído hablar de la isla. Navegaba perdida en una diminuta lancha, llorando, desesperada, angustiada, sedienta y hambrienta. Tenía sólo 16 años recién cumplidos, y la pobre criatura se había quedado sin nadie en el mundo. El velero en el que navegaba con su familia había naufragado y se había llevado a toda su familia al fondo del mar. Una desdichada náufraga, pero ungida por la diosa de la Fortuna. El destino la había traído hasta nosotros.

Antes de que llegara, tengo que reconocer que hubo un momento en que dudé. Temí que todo aquello por lo que nuestra vida tenía sentido no fuera a ocurrir. ¿Cómo pude dudar de Él? No dejo de fustigarme por ello. El dolor de las heridas me reconforta. Me recuerda que Le he fallado y que jamás debo volver a hacerlo.

Una semana después de la llegada de Hepsiba, Enoc posó sus manos sobre ella y sonrió. Era la elegida. Durante las seis noches de los siguientes seis días, Hepsiba recibió Su visita. Durante el día debíamos obligarla a comer. Estaba agotada, con heridas por todo el cuerpo: mordiscos, arañazos, moratones. Su amor es poderoso, Su amor es real, Su amor es doloroso, es intenso, es auténtico, profundo e insaciable. ¡Cuán afortunada debía de sentirse, escogida entre millones, saciando Su sed, bebiendo de Su amor! La séptima noche, Él no volvió. El milagro había germinado.

Hemos cuidado de Hepsiba, alimentándola, reconfortándola, limpiando sus heridas, orando por ella, orando con ella. Apenas decía nada y su mirada se perdía en ningún lugar en concreto. Nunca la dejamos sola. Ella es ahora la Madre de todos. Al nacer el bebé, Hepsiba ha llorado mucho. Todos lo hemos hecho. Ha sido un momento de inmensa felicidad.

Todos los esfuerzos de la comunidad, nuestros rezos, nuestros sacrificios de infieles, los sacrificios de algunos de nuestros propios hijos. Todo ha sido una prueba de nuestra fe en el Príncipe de la Creación.

Cuidaremos del pequeño con todo nuestro amor, con todo nuestro esmero. No le faltará nada. Gabriel crecerá y llegará el día en que todo Su poder se manifestará, volcando su ira sobre el Hombre. Se alzará, proclamando el nombre de su Padre, y guiará con mano firme y vara de hierro a sus huestes para expiar los pecados del mundo. Tenemos fieles por todo el mundo y ya todos conocen la buena nueva, el milagro que hoy se ha obrado en una pequeña isla sin mácula.

Por que el reino de la Tierra será nuestro, como ya lo es el de los Infiernos. Como lo será el de los Cielos.

¿Te ha gustado esta entrada? Recibe en tu correo los nuevos comentarios que se publiquen.

11 comentarios

  1. 1. Job Peró dice:

    Muchas gracias a las 3 personas que han comentado y corregido mi relato. He tomado buena nota de vuestras sugerencias. De hecho, gracias a ellas creo que debo aclarar alguna cosa para hacer más comprensible el texto (primera cosa a mejorar, supongo).

    Se trata del extracto de un diario de un día muy concreto: el sexto día de la semana, en el sexto día del sexto mes. Pensaba que con esto daría pistas sobre el tipo de “Comunidad” de la historia.

    No pretendía escribir una historia mágica sobre la Natividad de un nuevo Mesias del bien. Todo lo contrario. La fe de la viejecita, tan tierna cuando habla del bebé, es en realidad fe en la llegada del Mal para castigar al Hombre por sus pecados. Una zumbada, vamos.

    Veréis que hay muchas palabras en mayúsculas. Es lo normal en textos sagrados cuando la palabra hace referencia directa a una “divinidad”, aunque quizás me haya pasado! O, simplemente, no he sabido usar bien este recurso.

    Veo que debería retocarlo para que se entienda mejor. Gracias por vuestros consejos!

    Escrito el 28 diciembre 2014 a las 20:30
  2. 2. beba dice:

    Hola, Job:
    Muy místico tu relato; lleno de imágenes bíblicas que remiten- de algún modo a la Anunciación y a Belén, aunque ya nos dices que es al revés, y lo colofonas diciendo ” como ya lo es el de los Infiernos”.
    No me gusta jugar con lo sagrado, por lo que más bien no toco el argumento.
    Es un texto que tiene mucha fuerza; impacta. Y lo has manejado con solvencia, con un lenguaje muy maduro y expresivo. Sólo te señalo una construcción que creo debieras pulir:”… navegaba con su familia … y se había llevado a toda su familia…”
    Adelante. eliz 2015
    PD: Mi relato es el n°39

    Escrito el 29 diciembre 2014 a las 04:03
  3. 3. Paola Panzieri, papan dice:

    Hola, Job

    Lo primero,darte las gracias por el comentario que me has mandado. He aprendido mucho con él.Hay un punto y aparte en mi forma de escribir a partir de ahora. No sé como voy a poder agradecértelo.
    He entendido perfectamente la lección sobre la puntuación (como puedes ver aquí mismo) y, en cuanto a lo de la encantadora viejecita…tienes toda la razón. La belleza del árbol (la esfera) no me ha dejado ver la magia del bosque.Ella es el nexo entre el hombre y el mar. Le daré el papel que le corresponde en la historia.

    Escrito el 29 diciembre 2014 a las 10:54
  4. 4. Paola Panzieri, papan dice:

    …y ahora vamos con tu historia:
    En cuanto a la forma te diré que me parece perfecta. Tiene el ritmo necesario y equilibrado. En el último párrafo repites mundo,pero como el mundo es tan grande bien merece esa repetición.

    Me ha gustado la imagen que das al principio de la respiración pausada,tranquila, firme y segura del bebé, da la sensación de la paz después de la tormenta representada por el parto.

    No veo necesaria la aclaración de”lo satánico”, se entiende perfectamente:

    olvidado de la mano de Dios…
    nuestros sacrificios de infieles…
    el sacrificio de alguno de nuestros propios hijos…
    volcando su ira sobre el hombre…

    Yo opino que si lo aclaras más estropeas la sorpresa que uno ya va intuyendo a lo largo de la lectura.

    Empiezas dando una idea de sosiego y amor en una sociedad dispuesta a darlo todo por ello y, según vas avanzando empiezas a envenenar el ambiente poco a poco. El lector se niega a entender lo que realmente dices,sobre todo si es creyente, pero tú, en realidad lo haces bien. Nos negamos a admitir que en la maldad puede haber ternura y amor y,eso, amigo mio, no vas a poder corregirlo!

    Ha sido todo un placer conocerte. Con un gran punto en este lugar para enfatizar la frase. Hasta la próxima lectura y…gracias.

    Escrito el 29 diciembre 2014 a las 11:21
  5. 5. Job Peró dice:

    Gracias, Paola!! Un placer leerte y te buscaré en las próximas ediciones. Felices Fiestas!!!

    Escrito el 29 diciembre 2014 a las 11:40
  6. 6. Job Peró dice:

    Muchas gracias, Beba. Mi intención era transmitir que, por muy locos que pensemos que están los miembros de una secta, también podemos encontrarnos amor y ternura. Y eso, en el fondo, da más miedo todavía. Hay que tener mucho cuidado con lo místico. Felices fiestas igualmente!

    Escrito el 29 diciembre 2014 a las 11:44
  7. 7. Anoide dice:

    ¡Hola, Job! Feliz año nuevo 🙂

    Yo creo que la aclaración que haces es innecesaria. Aunque al principio parece sólo el nacimiento de un bebé cualquiera, el tono se vuelve cada vez más macabro a medida que vas leyendo y se hace evidente en el penúltimo párrafo. Ponerlo más claro aún le restaría magia al texto, además de que se hace pesado estar leyendo aclaraciones innecesarias.

    Para mí está muy bien tanto en forma como en contenido. No podría reprocharte más que la repetición de algunas palabras, como ya te han comentado.

    Sigue así 🙂 Te busco para leerte el próximo mes. ¡Un abrazo!

    Escrito el 1 enero 2015 a las 23:08
  8. 8. Ángel Gabriel dice:

    Yo si creí que se refería al nacimiento de un nuevo mecias, el nombre de quien lo engendra para mi no hila la historia del mal, en todo caso para entender mejor quien es, pudiste usar un nombre del padre, como Belcebú, o Belial o Lucifer, pero yo no conozco el nombre de Enoc como sinónimo del mal, perdón por mi ignorancia en el tema, pero la historia esta bien construida, en un juego mítico, siento que en el primer parrafo esta claro que es un bebé, el segundo parrafo es innecesario y abundante en ese hecho.
    Para mi hay contradicción entre hablar del mal y decir “Que el altísimo nunca nos abandona” porque el mal no biene de lo alto. Dice en otro parrafo “nuestra fe en el principe de la creación” y el Diablo no creo este mundo ni a los seres que habitan en el.El nombre del bebé Gabriel, no me parece el más asertado, Porque en la Biblia Gabriel fue el Ángel enviado por Dios para derrotar al diablo. En pocas palabras el relato es bello, profundo, un tema especial, pero si debió en mi humilde opinión basarse más objetivamente en los distintos términos para poder identificar mejor que se trataba de un anticristo, porque para mi existen muchas contradicciones. ¡¡¡¡¡¡¡BUEN TRABAJO!!!!!!!
    Te suplico leas el mío es el 106 LOS BALSEROS.

    Escrito el 5 enero 2015 a las 04:52
  9. 9. Job Peró dice:

    Hola, Angel. Muchas gracias por tus apuntes. A ver si puedo explicarlos bien.

    No pude encontrar cuál se cree que es, o será, el nombre del anticristo, así que decidí ser “malo” y usar el nombre de Gabriel. Significa “hombre de Dios” o “la fuerza de Dios”, entre otros significados. Me parecio que encajaba muy bien que el diablo use el nombre de uno de los ángeles de Dios como el de su propio hijo. Lo vi “diabólico. El problema es la extensión del texto y el formato tipo diario que usé, que no me permitía dar demasiadas explicaciones en este sentido. Usar Lucifer, Belcebu o Belial, definitivamente le hubiera quitado la gracia al texto.

    A idea era construir la imagen de una viejecita encantada con el nacimiento de un bebé en una comunidad aislada. Su cariño, su amor, su ternura. Para luego seguir con una realidad mucho más cruel y maligna. De ahí que me extendiera algo más en su admiración por el bebé en el segundo párrafo, pero también aproveché para introducir el tema de los sacrificios.

    Yo pensaba que el concepto de el “Altisimo” se refería a el más alto, no al que está en las alturas. Puede que haya patinado aquí. Gracias por hacerme el apunte.

    Hepsiba significa, en hebreo, “ella es mi alegría”. En algunos textos he encontrado que es la jieta de Lucifer y se dice que será la madre, precisamente, del Anticristo.

    Claro que todo esto lo sé porque lo busqué antes de escribirlo y es cierto que si no se explica, puede crear confusión. Igual me animo y escribo algo más extenso sobre esta historia, sin formato de diario, y entonces pueda dejar las cosas más claras.

    A ver qué se me ocurre para este mes. Todavía no me he puesto a ello!

    Un abrazo, feliz año nuevo y nos leemos!

    Enoc es, según la Biblia, el hijo de Caín, el primer asesino.

    Escrito el 5 enero 2015 a las 14:42
  10. 10. KMarce dice:

    Interesante relato. Me parece acertado el hecho que digas que no podías usar nombres tan “malevólos” porque se perdia el “suspense” del relato.
    Sin embargo, me atrevo a decir que el nombre del hijo de Caín, es HENOC, con la h, ya que ENOC, era hijo de Jafef, hijo de Set. Este ENOC no vió la muerte, ya que Dios se lo llevó al cielo segun Génesis.
    Henoc también tenia mal estirpe, ya que engendró hijos promiscuos, por lo que me perdí con la idea de que fuera ENOC el que no murió. Adicional, que me parece que la pobre chica fue abusada y no cuidada por este mal individuo, líder sectario de este grupo de personas, lo cual tambié me pareció realista para personificar el mal del hijo nacido de ella.
    Tambien me perdí cuando hablas de la viejita, porque no la encontré en el relato, o deberé de releerlo para ubicarla, porque me parece que en tu vision existia, pero resulto tanto ambiguo en el relato, pero vuelvo a leer para confirmar mi errata o no.
    Pero repito, me parecio interesante, un tema polémico si quieres, pero como dices, no hay peor maldad la que parece estar cubierta de virtud, y al final no hay peor lobo que el que se viste de oveja.

    Escrito el 8 enero 2015 a las 02:04
  11. 11. Job Peró dice:

    Hola, KMarce. Pues con lo de Enoc/Henoc tienes razón. En muchos sitios aparece con hache, y en otros sin. Supongo que depende del idioma en que se escribe, aunque lo más probable es que no me haya preocupado lo suficiente por confirmar cuál es el modo correcto de escribirlo en castellano.
    El tema de quién dejó embarazada a la chica, veo que quizás no quedó demasiado claro. En ningún momento hablé de que era Enoc (o Henoc) aunque tampoco dije lo contrario, y más cuando en el mismo párrafo lo menciono poniendo sus manos sobre ella y sonriendo. Error mío. La idea es que es una bestia quien la visita, tipo “La Semilla del Diablo”. Tendré que corregir esto. (Gracias!!!)
    Lo de la viejecita… ufff, aquí sí que pensaba que lo había dejado claro diciendo que son un “puñado de viejos” y que llevan más de 40 años en la isla. Espero que en la segunda lectura lo hayas detectado. Quizás debería dejarlo más claro?
    Agradezco mucho tus comentarios. Veo que se me han escapado cosas que pensaba que habían quedado claras.

    Escrito el 8 enero 2015 a las 18:19

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.