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La Hortensia - por Amanda Florít

Hoy, en esta isla, ha ocurrido un milagro. A la joven que creíamos desaparecida… regresó. Sin embargo, no es la misma que recuerdo de hace diez años. Se ve diferente. Y en sus manos sostiene un ramo cuyas flores reconocí al instante; no representan una amenaza el tipo que son pero sus efectos en alguien como ella tienden a ser inalcanzables para mí. Subestime el poder de esa flor. La Hortensia.
-¡Tía Elda! -grito Flora, mi sobrina, mientras corría hasta mí. Se congelo de los nervios al ver a Anna a orillas de la playa-. Tía, ¿Que carga en las manos? -pregunta temerosa.
-¿Te gustaría tomar un taza de té en nuestra casa, Anna? -señale el lugar por detrás de los árboles.
Anna asiente sin hablar. Juntas entramos a mi morada.
Durante la charla, Anna no soltaba las flores de Hortensia, las cuales son de color azul. Y al tomarnos el té, tampoco. No se dignaba a soltarlas. Le presté suma atención a sus acciones; acariciaba con delicadeza los pétalos, murmuraba en voz baja lo que siente por ellas y su calidez al sonreír. No parecía estar sufriendo, más bien se encontraba feliz. Sonrío satisfecha y aliviada.
-Supongo que Liam logró hallarte y enviarte de vuelta a tu hogar, aunque me parece un poco extraño que te haya regalado una hortensia y traerte a mi isla sin que te acompañe -digo sonriente, en el fondo de mi mente dudo mucho que mis palabras sean verdaderas.
Ella me mira fijamente, niega con la cabeza.
-No -mira la hortensia-. Yo nunca estuve desaparecida -no dejaba de mirarme, temblaba seriamente-. Fue Elayza… la que me devolvió la vida.
-Mmm… La Bruja del Olvido… ¿Por qué?
-Porque extraña mucho tener de vuelta a su familia.
-Pero no estás conforme con eso ¿cierto?
Anna baja la mirada hacia las flores. Varias lagrimas corren por su rostro. Sostiene con fuerza las flores, estando a punto de hacerles daño se las arrebato con cuidado y dejo que desahogue.
-¿Por qué? ¿Por qué? Yo no quería que me trajera de vuelta. No ahora, no hoy -dice tranquila y enfadada sin formar un berrinche.
Flora se acerca a ella y la toma de las manos tratando de consolarla. Canta suavemente. Anna levanta la mirada y sonríe. Se une a la niña para cantar.
"No le importará que me lleve la hortensia" pensé al verla a ella y a las flores.
-Flora, cuídala mientras resuelvo un asunto.
-De acuerdo -responde.
Salgo al jardín trasero de la casa. El invernadero se extiende hasta el limite de la isla (la cual es pequeña, para aclarar). También tengo un pequeño laboratorio debajo de aquel enorme árbol a mi izquierda y una mesa de picnic a mi derecha con vista al mar. Todo incluido dentro del invernadero. Nada se daña ni se pierde.
Camino recto, dejando atrás todo lo que mencioné, hasta detenerme frente a una fuente, de agua limpia y pura, con la estatua de una mujer tocando el violín. Sabiendo con exactitud mis intenciones hacia la hortensia, la introdujo en las claras aguas y los pétalos azules se tornan rojas enseguida.
Ahora echan un humo carmesí y sale a la superficie en azul celeste.
Extraigo las flores del agua y noto que pierden el color rojo hasta tornarse al color lila, dejando de brotar humo de ambos colores. No dejaba de mirarla.
-No es una reunión familiar lo que deseas, Elayza. Tu deseo… es la extinción de la raza inteligente que vive sobre Gea -dejo caer las flores a las aguas claras de la fuente y me volteo-. ¿O me equivoco?
Una joven de cabello blanco y vestida de negro me mira inocente.
-Esa hortensia es más un símbolo de muerte que de vida.
-Sé lo que significa pero en verdad quiero que viva, se lo merece -explica rogando.
-Traerás el final de nuestro mundo si sigues así, Elayza.
-Ella no volverá a Gea, tampoco a ese sueño eterno en el que estuvo.
Elayza desaparece frente a mí sin más que decir.
Me enfadé. Ahora lo sé. Su motivo es que sacrificará todas las vidas de Gea para revivir completamente a Anna (la Diosa Aurore), sin saber cómo lo hará.
Hasta entonces, debo alertar a la Emperatriz Adela sobre los planes de su hermana.
En el fondo de la fuente, la hortensia se marchitó y murió envenenada por las aguas puras.

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2 comentarios

  1. 1. Carlos dice:

    Relato entretenido, sin embargo, cuesta mucho conectar con la historia debido a que se nombran y aparecen personajes de los que no sabemos casi nada; llegas a perderte. Falta algo de trasfondo.

    Ahora bien, lo que sí que me ha sacado totalmente del texto han sido las aclaraciones entre paréntesis “(la cual es pequeña, para aclarar)” y “(la Diosa Aurore)”. Se cargan, a mi modo de ver, toda la magia del relato. Seguro que, pensándolo algo mejor, se te ocurren mil maneras de integrarlo mejor en el texto. A la vista está que imaginación y buenas ideas no te faltan.

    Por lo demás un buen relato que se disfruta.

    ¡Saludos!

    Escrito el 30 diciembre 2014 a las 23:16
  2. 2. David Rubio dice:

    Coincido con Carlos. Tampoco ayuda el buen número de acentos que faltan y errores de construcción en alguna frase. Por ejemplo:
    no representan una amenaza el tipo que son (¿el tipo que son?)pero sus efectos en alguien como ella tienden a ser inalcanzables para mí.
    En todo caso, se notan ideas y ganas. No dejes de escribir.
    Saludos

    Escrito el 9 enero 2015 a las 01:02

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