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Programación Matutina - por GAIA

PROGRAMACIÓN MATUTINA

Claudia apagó la luz y se acostó junto a su marido quien hacía rato roncaba profundamente. Ya era rutina que se fuera a la cama mucho después que él. Tenía que dejar todo limpio para que en la mañana Pablito pudiera gatear. Bueno, esa era una de las excusas para no irse a la cama con su esposo, hacía ya un tiempito que lo evitaba. No le gustaba que la tocara ni le perdonaba que la maltratara verbalmente y que le hubiera sido infiel con su hermana. Sin embargo a ella la disculpaba. -La pobre no tiene la culpa, el que me juró fidelidad en un altar fue él, siempre había sido floja de piernas e inmadura, sin malicia, tonta y vana., le contaba a su amiga Teresa.

¿Por qué no lo dejaba? Quizás porque en el fondo tenía miedo a la soledad, a volver a empezar, temor a que el niño se quedara sin padre, a que Pablo se casara con otra y tuvieran hijos, que se olvidara de Pablito.

Claudia era una mujer hermosa e insegura como habían sido todas las Pérez Olivo, beldades amazónicas, que se sentían feas e incapaces de sobrevivir sin un hombre al lado.

Esa noche lloró en silencio hasta quedarse dormida y soñó que era feliz, que abandonaba a su marido y que con su hijo se había ido a vivir a la costa y tenía un negocio próspero. Soñó que el “ogro” había muerto y que ya no tenía que verle esos ojos negros llenos de lujuria y maldad. Como los sueños, sueños son, al despertar volvió a la rutina diaria, a quedarse sola con su bebé.

Como todas las mañanas, encendió la radio para escuchar el Noticiero de siete a ocho, Boleros Inolvidables de ocho a diez y a Doña Esther y sus Consejitos Matrimoniales de diez a doce. La programación fue interrumpida para anunciar que doña Clara sustituiría a doña Esther a quien habían asesinado en la madrugada víctima de violencia machista.

Sobresaltada Claudia buscó el móvil y llamó al licenciado Díaz, quien aceptó representarla en demanda de divorcio por trato cruel.

Se marchó a la costa con Pablito y su radio como único equipaje.

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5 comentarios

  1. 1. Quique Crespo dice:

    Muy bueno, me gustó. Claro, conciso y concreto. Historia lamentablemente muy común en nuestros días, que por trillada y cotidiana no deja de conmocionar. Bien redactado.

    Escrito el 30 marzo 2015 a las 06:53
  2. 2. Leonardo Ossa dice:

    GAIA, ha sido una historia muy fluida la tuya. Me ha gustado el contraste que ofrece la muerte de doña Esther, precisamente la que daba los consejitos matrimoniales.
    Me agradó leerte. Un saludo.

    Escrito el 1 abril 2015 a las 00:48
  3. 3. Gota dice:

    Hola! Muy bueno tu relato, super dinámico e interesante. Te seguiré leyendo!
    Te invito a leer mi cuento, es el 164
    Saludos!

    Escrito el 2 abril 2015 a las 04:07
  4. 4. Chiripa dice:

    Buenísimo, GAIA!
    No le sobra, ni le falta nada.
    Lo leí de un tirón y quedé reconfortada con el final.
    ¡Vivan la radio y los momentos en que algo inesperado te hace”click” !

    Te invito a visitar mi relato Prueba de Admisión (# 6) @ https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-24/3027

    Escrito el 2 abril 2015 a las 18:23
  5. 5. Marcelo Kisi dice:

    Gaia hola!
    Me gustó mucho tu relato. A veces una sola palabra alcanza. Quzás como aporte, si bien el relato no deja de ser fotogénico y dinàmico, te sugeriría agragar más diàlogos directos, e intercalarlos con los indirectos que ya imcluís. Hacer hablar a los personajes siempre agrega vida a la historia. Lindo leerte!

    Escrito el 3 abril 2015 a las 21:12

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