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El dia que Ana no llegó a Pilates - por Sara
Web: http://historias-entrelineas.blogspot.com
El autor/a de este texto es menor de edad
Se despertó de repente. Estaba tumbada en medio de la carretera. Le dolía la cabeza y se tocó la frente. Cuando volvió a ver sus manos estaban empapadas de rojo. Estaba llena de heridas y la sangre corría por todo su cuerpo.
“ Buenos días. Son las seis de la mañana. Las cinco en Canarias. Esto es Anda Ya! con Dani Moreno el Gallo. Ánimo a todos, que hoy es viernes y tenemos un invitado muy especial…”
Su radio-despertador le pedía que se levantase. Ana se levantó rápidamente y se dirigió al aseo. Habitualmente, le cuesta levantarse porque es bastante dormilona, pero esa noche Ana había tenido pesadillas, estaba sudando y no soportaba ni un minuto más en la cama. Después de una buena ducha fría, se comió un cruasán. Finalmente, salió de casa, cogió el coche y se fue a trabajar.
Ana vivía en la capital, pero ella trabajaba de profesora de Economía en un instituto bastante lejos, situado en pueblo pequeño, a una hora de su casa. Rebeca, la de historia, también vivía en la capital y compartía coche con ella. Hoy le tocaba a Ana llevarlo. Ese día acabaron tarde de las evaluaciones, eran pasadas las 7 de la tarde en pleno invierno. Ya era de noche.
– Vamos, que quiero ver a mis hijos
– Yo también quiero llegar a la clase de Pilates- dijo Ana
– Te has apuntado a Pilates?
– Sí, voy desde hace dos meses, está muy bien, relaja y me gusta. Deberías probarlo.
Ana piso más fuerte el acelerador. La carretera estaba oscura. Rebeca encendió la radio y comenzó a cantar. Ana se unió. Reían juntas mientras cantaban de la peor forma posible “Chandelier” de Sia.
– Buff!. Estoy cansadísima Hoy dormiré pronto- dijo Rebeca parando de cantar.
– Yo también, esta noche he dormido fatal, he tenido pesadillas. He soñado que un león me atacaba. Era una pesadilla muy surrealista, pero me he despertado sudando. En serio, no te rías.
Y entre palabras y risas, Ana no vio al camión. No se dio cuenta hasta que ya era demasiado tarde.
Ana miró a su alrededor. Rebeca lloraba tumbada en una camilla. Ambas estaban llenas de heridas y la sangre corría por todo su cuerpo.
Muy buenas Sara
Me gusta comentar de manera ordenada, primero la forma y luego el contenido.
Antes que nada tengo que darte puntos extras por el Chandelier de Sia, dicho eso comenzamos.
•Forma
Es una lectura muy fluida y rápida dejando de lado que tu relato sea bastante corto, eso siempre es bueno, lograr que los ojos del lector vuelen por las palabras, sin ponerle tropezones por el camino.
La puntuación es mejorable, en el primer párrafo por ejemplo podrías utilizar comas en vez de tantos puntos y seguido. También intenta no juntar tanto las comas, esta bien darle momentos de oxigeno al lector pero no hay que pasarse que sino las frases quedan muy mécanicas.
Siempre me gusta ver personajes que hablan como personas normales, y que no parecen estar repitiendo frases oídas en alguna película; es algo que considero que les da humanidad, eso lo has hecho muy bien.
•Contenido
Creo que la estructura se puede trabajar un poquito mas. El primer párrafo lo encuentro un poco fuera de lugar ya que, aunque entiendo tu intención (creo), parece como si la protagonista despertase dos veces en dos sitios diferentes: primero en la carretera y luego en su cama. ¿Lo primero era un sueño premonitorio o era un avance de lo que iba a pasar?
Si se trataba de un sueño te recomendaría quitar el “Se despertó de repente”, si no es el caso entonces hay que trabajar mas los tiempos (qué es pasado, presente y futuro)
El narrador me da información de la protagonista y lo describe bastante bien, pero es información completamente irrelevante para la trama, no aportan fortaleza al accidente ni al desenlace. Por lo tanto lo verdaderamente importante en el argumento empieza cuando están en el coche, momentos antes del accidente.
Intenta utilizar bien la cantidad de palabras que se nos dan, y que todas las frases y todo lo dicho tengan relevancia. Cuando se llega al punto de que si quitas algo el relato se queda cojo, ahí es cuando sabes que has aprovechado bien las palabras.
Iiiii’m gonna swiiiiing from the chandelieeeer, from the chandeliiieeer : D
Diez puntos para Fabián, q deberia hacerse comentador profesional. Ha descrito perfectamente lo que yo también quería expresar y no sabía cómo. Y hasta cosas que ni se me habían ocurrido. Tanto por lo bueno como por las recomendaciones.
Lo importante es, sara, que escribes de una forma que invita a seguir leyendo. Lo demás se irá puliendo con la práctica.
Nos seguimos leyendo!
Estoy de acuerdo con lo ya dicho. El principio de la historia confunde un poco y el cuarto párrafo frena la lectura, sin embargo me parece que a partir del diálogo el ritmo se recupera muy bien y la historia resulta muy ágil.
Saludos Sara. No recuerdo haber leído algo tuyo antes, te animo a que lo sigas haciendo, necesitamos gente joven que gusta de escribir y de leer, que debes hacer mucho para mejorar tu propio estilo.
Coíncido con Fabián en los puntos expresados, el uso de los tiempos, las descripciones de importancia mínima (sus profesiones, la repetición de las localidades, etc.)
Debido a que soy una persona terriblemente visual, siempre que leo es como ver un video, inclusive añado un entorno que el autor no describe; por lo que ese primer “despertar” me fué un tanto extraño por el hecho de irse a dar una ducha y comerse un croassaint sin ningún remordimiento, quizá por ese: “Se despertó de repente” debería ir al final del primer párrafo, no al inicio.
También debes cuidar tu diálogos, recuerda que siempre entre los signos de ¿?¡! Va en mayúscula, y no olvides colocar los dos, porque en nuestro idioma es obligatorio. No olvides de signos de puntuación, los diálogos no tienen el punto final. Los guiones largos de apertura al diálogo. Y los números siempre se escribirán en letras, siete no 7. Esto solo se usa para números de díficil lectura o direcciones (221 Baker Street) 18°C, etc.
Procura no duplicar información “Ana vivía en la ciudad, Rebeca, también vivía en la ciudad” si van juntas en coche es porque viven cerca. “Siete de la tarde, ya era de noche”, quizá quisiste informar que había anochecido, o estaba oscuro.
Te sugiero que siempre leas en voz alta, por párrafos, como si leyeras el escrito de otro, te ayudará a identificar esos detallitos.
Como ves, son de fácil corrección y a medida que conoscas más técnicas te será muy fácil escribir más fluídamente. Todos aprendemos de todos, tienes creatividad una cualidad que no se aprende, pero si se desarrolla. Pule tu estilo.
Nos leemos.
Creo que he visto el futuro!
Jajaja el principio es como un flashback, pero de repente se esta en la habitación.
Hace falta algo que vincule o indique la situación, caso contrario parece que se teletransportan de un lugar a otro.
Cosas como signos y faltas son corregibles
tenemos un relato corto y fluido, muy bueno, sigue así.
Bajo mi punto de vista atrapas al lector, tu estilo es bueno, da igual de lo que hables que consigues situarnos y nos llevas a tu mundo. ¡Buen trabajo!