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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Parecía una tarde tranquila - por Lientur

Esa tranquila tarde primaveral en la capital no me permitía presagiar algo más interesante que ir a tomar un helado o permanecer sentado en un banco y mirar el estado de florecimiento de los árboles de la plaza. Apenas circulaban unos pocos autos y casi no se veían personas desplazándose por las calles.
A medida que fui bajando por la escalera del edificio, la sensación de satisfacción con que salí del departamento, fue dando paso a cierta intranquilidad. Me detuve antes de cruzar la puerta de salida y, apoyado en el pilar gravillado del muro del edificio, asomé el ojo derecho justo lo necesario para poder inspeccionar los autos se encontraban estacionados en al borde de la calzada.
Unos veinte metros en dirección a la esquina, pude distinguí la silueta del sedán color azul aparcado entre dos citronetas, sobre el que se recortaba la figura de un hombre fornido vestido con traje oscuro que expulsaba el humo de su cigarrillo hacia el piso, como si no quisiera que alguien lo viera fumando.
Permanecí unos minutos en la misma posición de vigía, esperando que el hombre terminara el cigarrillo y comenzara a rodear el automóvil para dirigirse a la puerta del chofer. Una vez que me dio la espalda, bajé el escalón que me separaba de la vereda y, sin mirar hacia el auto, me dirigí en dirección contraria tratando que mostrar una actitud relajada e indiferente.
Habiendo avanzado una decena de metros, apuré el andar para alejarme lo más pronto posible del edificio que acababa de abandonar, y luego iniciar un trotecito propio de alguien que pudiera estar practicando ejercicios. Cuando estaba por alcanzar la esquina, escuché a mi espalda el sonido del motor de un auto y el grito autoritario de un hombre: <<¡Agarra al desgraciado antes que escape!>>
Mientras pasaba del trote a una carrera de velocidad, busqué con la mirada a la persona a quien dirigía la instrucción, esperando verlo a la vuelta de la esquina. Antes de advertir la presencia de alguien, sentí un intenso dolor en el costado de la cabeza que hizo que mi visión se oscureciera. Perdí el control de las piernas y escuché el sonido de mi hombro golpeando contra el piso de concreto. Luego, perdí el conocimiento.
Al ir regresando poco a poco de la inconsciencia, comencé a sentir los dolores en distintas partes del cuerpo, especialmente la cabeza y el hombre izquierdo. Al abrir los ojos nada pude ver, y poco tardé en darme cuenta que tenía la cabeza cubierta por completo con una especie de bolsa. Me encontraba tendido en una superficie dura y fría y, cuando traté de explorar mi alrededor, no pude hacerlo porque mis muñecas estaban sujetas con una especie de cinta de empaquetar al cinturón de mi pantalón. Gracias al olor fétido del vómito que sentía en el borde inferior de la capucha, vagamente recordé el almuerzo y el encuentro amoroso que lo había seguido.
Comencé a sentir los trancos de las personas que se desplazaban a mi alrededor y un barullo marcado por quejidos y, de tiempo en tiempo, por aullidos brutales.
Un patadón en mi costado me puso en tensión mientras escuchaba el vozarrón que me interpelaba: <<Nombre y apellido>>. De mi boca reseca sólo salieron unos gemidos y sonidos ininteligibles. Otro puntapié en la misma zona: <<Contesta, mierda>>. Para evitar la repetición del castigo, traté de modular lo mejor posible: <<M-a-r-i-o H-e-rrrr-e-r-a>>.
<<Aquí está el vivito>> pregonó, aparentemente para superar los gritos que provenían de distintos puntos del recinto.
Mientras tanto, una marcha militar que parecía provenir de un aparato de radio, o tal vez de un altoparlante, que probablemente se usaban para enmascarar los sonidos de sufrimiento humano, dio paso a la voz de un locutor que informaba: <<Las fuerzas de seguridad consiguieron detener a un terrorista mientras trataba de instalar un artefacto explosivo en un basurero de la estación Salvador del Metro. Las primeras indagaciones hacen sospechar que se trata de Mario Herrera, militante comunista buscado por otro atentado de similares características.>>
<<¿Qué hacemos con este huevón, mi coronel?>> preguntó la misma voz a la persona que sigilosamente que se había aproximado a mi lugar.
Una voz, notoriamente mejor educada que la anterior, le respondió: <<Dale el tratamiento completo al hijoputa para que aprenda que no es llegar y tirarse la mujer a un oficial de las fuerzas armadas>>. Sentí un escalofrío y un intenso deseo, no sé si de mear o de defecar.

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6 comentarios

  1. 1. erika hill dice:

    Es una buena historia, sin embargo, debes tener cuidado con algunos errores de ortografía cometidos quizá por falta de atención, a mi me suele pasar, hicieron falta signos de admiración como en ” contesta mierda!” , a mi también, pero es q estoy desde el movil ja!. recuerda que cuando es un diálogo mejor que comillas es una – (raya), y por último, no uses palabras rebuscadas, se puede decir lo mismo con simpleza, ejemplo: personas desplazándose,solo personas caminando hubiera quedado igual. claro q es cuestión de gustos y estilos literarios, quizá se daba a q soy persona de no ponerle mucho color al asunto. Repito, buena historia.

    Escrito el 28 marzo 2015 a las 19:42
  2. 2. manuel pacheco rodriguez dice:

    buena historia, y bien por el final.estoy de acuerdo con los señalamientos de erika, aunque conozcos escritores que no usan nada para los dialogos. ¡ah! las comillas, para que te queden mejor, las puedes sacar con alt 174-« y 175-».
    saludos

    Escrito el 30 marzo 2015 a las 05:50
  3. 3. Fabián dice:

    Muy buenas Lientur.

    No me esperaba para nada ese giro final, muy bien hecho compañero.

    Como he venido haciendo hasta ahora, te comentaré primero la forma y luego el contenido.

    •Forma

    De acuerdo con lo dicho por los compañeros, hay errores tipográficos de escribir muy rápido sin revisar, faltan algunos acentos y la puntuación es mejorable, hay frases demasiado largas que dejan sin oxigeno (la primera por ejemplo).

    También te recomiendo iniciar párrafos cada vez que un personaje diferente habla, así se consigue una estructura un poco mas organizada.

    •Contenido

    No acabe de entender la finalidad de los gritos que se oían cuando lo capturan, ¿estaban torturando a gente? ¿Otros terroristas? ¿Es la mujer con la que se acostó?

    Y aquí ya entraré en el terreno de la especulación y del “hablar sin saber”, pero el sentido común me dice que el despliegue policial/militar a la espera de que el protagonista saliese del edificio, era un poco pobre. Si una persona está en busca y captura por ser sospechoso de ataques terroristas, me imagino que el despliegue policial sería bastante mayor, rodeando toda la manzana, con agentes apostados en las azoteas cercanas, etc, para que no haya posibilidad de huida. Pero como he dicho antes, no entiendo de procedimientos y maniobras policiales, solo me lo dicta el sentido común.

    Como decía al principio, muy original, con un giro que me pillo muy por sorpresa.
    Buen trabajo compañero.

    Escrito el 30 marzo 2015 a las 17:57
  4. 4. beba dice:

    Hola:
    Te leí, te comento… Los argumentos amargos y violentos me desagradan; pero eso no impide que analice tu relato para reconocer tus aciertos: me gustó la dinámica de la escapatoria; un ritmo adecuado a la situación; me gustó tu manejo del lenguaje con respeto de las reglas gramaticales.
    Comparto lo que te han señalado los otros comentaristas, para mejorar la historia.
    Adelante.

    Escrito el 1 abril 2015 a las 01:02
  5. 5. Ángel Gabriel dice:

    Hay errores tipográficos a la hora de escribir, letras que faltaron, corregible, la historia me pareció muy buena. Fabián hace una especulación que no comparto, porque según entiendo en el relato, al tipo no lo buscan por terrorista, sino lo persiguen unos cuantos allegados al jefe solo porque se estaba tirando a la mujer de éste, por lo que la acusación hecha es totalmente falsa, por eso entiendo no había un gran despliegue policial porque no querían atraer la atención de la prensa, y que se supiera la verdadera razón del arresto. ¡¡¡¡¡¡¡MUY BUENA TRAMA, MUY BUEN RELATO, ADELANTE!!!!!!

    Escrito el 2 abril 2015 a las 22:58
  6. 6. KMarce dice:

    Saludos Lientur:
    Violencia gráfica, fuerte vocabulario, entendible el +18. Pienso que tu historia tiene el mérito de mostrar la arrogancia de la policia, la milicia y cualquier entidad con cierto nivel de poder.
    Coincido con los comentarios de los compañeros, es cuestión de pulido que es quizá la parte más díficil a la hora de escribir, la revisión, dar cortes por aquí y allá, mejorar las técnicas.
    En cuanto a la forma de detallar los diálogos, no es una técnica que no se use, y me refiero a las comillas o flechas de diálogo, que es mejor usar la combinación «» (alt 174/175) que el uso de las que aparecen en el teclado <>. Estas son aceptadas, no es que no las puedas usar, pero su uso es más conocido o generalizado en los libros de idioma inglés, para el español el uso generalizado es el signo (alt0151) — guión largo.
    Lo que sí debes hacer es siempre dejar ese diálogo en su propia línea, no escribirlo de continúo. Así que cada expresión deberá llevar su inicio al lado izquierdo de las páginas, pese a lo corto que sea el mismo.
    —No.
    «No»
    Son reglas de redacción y edición, que te ayudaran a mejorar visiblemente lo que escribas. Así que atento a ellas.
    Por lo demás, al igual que Beba no tengo afición por éstos escenarios, pero valoramos la forma de hacerlo, la creatividad y la manera de expresar la idea. Creo que lo has logrado. Coincido con Ángel que se trataba de un despliegue vengativo por parte del marido.

    Nos leemos.

    Escrito el 4 abril 2015 a las 21:11

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