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La maldición - por Bimorí

El autor/a de este texto es menor de edad

La habitación estaba llena de un aroma a tabaco, distintivo de la áspera pipa que su tío cada noche introducía en sus labios considerándolo un arte. Ahí estaba su muchacho, su único sobrino, una persona de mediana edad, rasgos toscos, con una sonrisa empapada de cinismo, buscando en el estante del viejo y gran estudio papeles que su tío había dejado guardados. Se sentía una persona nueva pero algo que aún no tomaba conciencia era que el hecho de tener las manos empapadas con la sangre y la última esencia de su tío podrían cambiarlo.

Entre los papeles buscaba los documentos de bienes raíces que su tío se había encargado desde el ’87 por diez años, ahora sentía que un hedonismo consumiría su ser y tomaría las riendas de lo que pasaría a ser“poder”. Tomó todos los documentos y sin darse cuenta entre ellos cogió un espejo delgado y del tamaño de la palma de su mano. Salió en medio del alba de ese recóndito lugar.

Era un hombre solitario pero ambicioso, llego a lo que él consideraba su hogar, “un lugar para pensar”. Abrió el paquete de los papeles y al pasar cada uno por sus curtidas manos encontró el espejo que había traído consigo, en ese momento recordó una historia que su tío le había contado cuando era un niño, le relato que una mujer muy extraña en ese entonces le obsequio ese espejo diciendo:

La oscuridad y la alevosía se reflejan simplemente aquí como una confesión de fracaso.

Su tío la había guardado por una mera curiosidad, olvidándolo años más tarde.

Ahora él la tenía en sus manos, no le dio importancia. Esa misma noche una brisa fría recorría la ciudad con cautela, la luna se veía cubierta por un manto de tiniebla, el hombre al recostarse sintió como una daga atravesando su pecho, se tocó las manos, la piel, estaban ásperas y secas. Dio un respingo y tomo el espejo que había guardado en el cajón de lado, lo cogió y observo, era un reflejo espantoso, las pupilas irritadas y la piel llena de algo tan horrendo, algo indescriptible. Se restregó los ojos, se acercó nuevamente pero aún seguía esa espantosa imagen.

Una semana después se empezaron a escuchar voces recorriendo la ciudad que decían que un hombre había dejado este mundo, nadie sabía la causa, podía ser un asesinato, un ajuste de cuentas, o un loco remordimiento que a través de ese objeto de cristal le había mostrado la perversión consumiendo su ser, mostrando en el de esta manera una evidente monstruosidad.

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3 comentarios

  1. 1. Fabián dice:

    Me gustan este tipo de narradores sobrios que son directos y aportan su punto para que la atmósfera del relato sea oscurilla.

    •Forma

    Te manejas muy bien con las palabras y las seleccionas muy bien.
    Ten cuidado con los acentos que faltan muchos: “llegó, relató, obsequió, tomó, etc”

    Y en alguna frase veo un fallo que yo también cometo sin darme cuenta, cito la frase y te comento donde veo el fallo:

    “buscando en el estante del viejo y gran estudio papeles que su tío había dejado guardados.”

    A ver como lo explico.
    Aquí el sujeto son los papeles que busca, lo llamaré “A”, y el estudio es el escenario, “B”.
    Por lo tanto la construcción de la frase es así: “Buscando en “B” a “A””. Queda un poco raro el orden de esa frase, ¿no?. Pero mira lo que pasa cuando se invierten el escenario y el sujeto: “Buscando a A en B”, o sea “Buscando los papeles de su tío en los estantes del viejo y gran estudio” ¿Verdad que suena mejor así?

    Hasta que no se haya acabado de hablar de un tema (A) no empezamos por el siguiente (B), así la frase queda mas ordenada.
    Me he explicado fatal, es que es algo que a mi también me pasa y no se como explicarlo mejor, si no entendiste nada dimelo que intentaré explicarlo de otra manera.

    •Contenido

    Tiene el tono que podría tener un relato de Lovecraft, así oscuro, sobrio, directo, serio, me gusta ese tipo de ambientación.
    No utilizaste las 750 palabras pero no hace ni falta agregar ni quitar nada.

    Buen trabajo.

    Escrito el 28 abril 2015 a las 15:20
  2. 2. beba dice:

    Hola, Bimorí.
    Me ha gustado tu cuento. Creaste un clima apropiado al argumento; dejaste pistas para que conozcamos lo que se relaciona con la historia en sí, sin recargarla. Me gustó esta expresión:”La oscuridad y la alevosía se reflejan simplemente aquí como una confesión de fracaso”. Buen vocabulario. Buena ortografía.
    Como no has usado todas las palabras posibles, puedes tratar de conectar y desarrollar más los episodios del relato.
    Como ya te dijo Fabián, revisa los acentos, porque si no están puestos en su sitio se enreda la comprensión de la lectura.
    Puedes revisar y mejorar, también la puntuación, por ejemplo, en el último párrafo puedes separar con “;”los “dichos”en el pueblo.

    Escrito el 28 abril 2015 a las 21:12
  3. 3. janna30 dice:

    Buen relato Bilmori 😀 es sobrio, y creaste una atmosfera adecuada.
    Te felicito, me gustan las metáforas que haces y como presentas los detalles.
    Si los acentos son muy importantes para que perdamos el sentido de tu relato. Y como dijo beba algunos signos de puntuación se te escaparon.
    Felicidades!!

    Escrito el 29 abril 2015 a las 17:47

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