Cookie MonsterEsta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las condiciones de uso.

Do you speak english?

¿If you prefer, you can visit the Literautas site in english?

Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

<< Volver a la lista de textos

PETRICOR - por SandyinLove

Podía haber sido diferente. Pero fue así. Y así te marchaste, de un portazo, llevándote tus cosas y un pedazo de mí. Y yo me quedé frente a la puerta, atónita, esperando. Esperando a que regresaras, a que lo pensaras mejor antes de que el ascensor subiera al sexto piso; a que tiraras todas tus cosas en el suelo y corrieras a golpear la puerta. Pero no sucedió. Por supuesto que no sucedió. Esas cosas sólo pasan en esas comedias románticas empalagosas de Cameron Diaz, en las que sí, te echas unas risas y, al final, te cae la lágrima tonta y fácil. Pero todos sabemos que en la vida real no es así. Escuché entonces las puertas del ascensor abrirse, las ruedas de tu maleta, y las puertas cerrándose de nuevo. El sonido del ascensor descendiendo, cada vez más débil, hasta que desapareció del todo, tal y como tú desapareciste de mi vida ayer, justo ayer.

Digo que podría haber sido diferente porque ni tú ni yo lo supimos hacer bien. En realidad creo que no quisimos, pero me siento mejor si digo y creo que no supimos. Las cosas siempre se pueden hacer mejor: cosas que no nos quisimos decir, cosas que nos dijimos de más. Qué absurdo, ¿verdad?

Afuera empieza a llover. Me tiro en el sofá de cualquier manera. Alcanzo el mando a distancia sobre la mesita con un pie y lo acerco hasta que puedo estirarme y cogerlo por la mano. Miro lo que sea, qué más da, no importa. Mis ojos se desvían hacia la mantita que me regalaste. Conejitos sonrientes con su también sonriente zanahoria. Echo una fugaz mirada al móvil por enésima vez. La luz sigue sin parpadear. Ni una llamada, ni un mensaje desde ayer. Nada, no hay nada. Me planteo si ser yo quien dé el primer paso, de nuevo, como siempre. Pero no. Yo también estoy cansada de esto. Quizás sea mejor así. Quizás debería aceptarlo de una vez, levantarme de este sofá, darme una ducha y salir a enfrentarme a la vida sin ti.

Me dirijo al baño. No están ni tu cepillo de dientes, ni tu cuchilla de afeitar, ni tu champú para pelo graso con olor a eucaliptus.

Me quito la ropa lentamente pero no me atrevo a mirarme siquiera al espejo. Me meto en la ducha y pasa una eternidad mientras dejo que el agua caliente y mis lágrimas recorran mi piel para irse por el desagüe para siempre. Como tú.

Después me dirijo a la habitación. Todavía está el sobre que dejaste en mesita del lado en el que solías dormir. Me di cuenta poco después de que te marcharas. Un pinchazo sacudió mi estómago y por un momento imaginé que contendría un perdón, o un hasta pronto, un nunca te olvidaré, o una dirección a donde poder ir a buscarte. Pero de nuevo, esas cosas sólo pasan en las películas. El sobre estaba vacío. Me dirijo hacia él, lo vuelvo a abrir con la esperanza de que quizás no miré bien ayer, quizás el papel era demasiado pequeño, incluso, durante la noche, un misterioso papel con patas había ido hacia él, sigiloso, y se había colocado dentro. Pero el pequeño papel travieso sólo existe en mi imaginación. Estoy segura que lo hiciste a propósito. Lo huelo una vez más y lo rompo en mil pedazos con rabia.

Busco cualquier cosa en el armario, un armario que ahora está medio vacío. Me pongo algo cómodo, los zapatos y el abrigo. Justo antes de abrir la puerta, la misma que tú cerraste ayer de un portazo para no volver más, cojo un paraguas. Evito el ascensor y bajo por las escaleras. Poco después estoy en la calle. Una ráfaga de viento hace que mi cabello se alborote y se me venga a la cara. Me lo aparto como puedo. De repente ya no llueve. Inspiro fuerte y me impregno del delicioso olor a pavimento mojado. Petricor, dicen que se llama. Unos rayos de Sol, que asoma tímido entre las nubes, me rozan las mejillas y me calientan ligeramente la cara. No puedo evitar sonreír al notar esa sensación mientas cierro los ojos e inspiro de nuevo. Llegó el momento de seguir adelante. Me giro un momento antes de doblar la esquina. Adiós, pasado. Hola, presente. El Sol ha ganado la batalla y luce reluciente en un cielo azul, haciendo más intenso el petricor.

¿Te ha gustado esta entrada? Recibe en tu correo los nuevos comentarios que se publiquen.

8 comentarios

  1. 1. Frida dice:

    Hola SandyinLove. Me ha gustado tu relato. Es dinámico y se palpa en él sentimiento. La desolación que tu protagonista muestra, es muy fácil sentir empatía por ella. El final del amor, porque como bien reflexionas, no sólo basta con quererse, siempre debe haber más. La evolución de dos personas durante un largo período, debe ser unísona, o si no la relación se romperá. Por eso me ha encantado el final, en el que a la par que la lluvia, tu protagonista se deja embargar por la tristeza, pero que en cuanto vuelve a revisar ese sobre vacío, que él le dejó, represantando a la nada que ha dejado como legado para ella tras su partida, decide valientemente tomar las riendas de su vida y seguir adelante. La parte final es la que más me ha emocionado, sin duda alguna, es un buen clímax para la narración que nos presentas.

    Escrito el 3 noviembre 2015 a las 01:42
  2. 2. SandyinLove dice:

    Hola Frida! Gracias por tu comentario, me anima bastante porque los 3 comentarios que recibí no fueron demasiado buenos. Dos en concreto no me aportaron demasiado, y luego hubo uno en que la persona hace un análisis muy amplio y la verdad, lo agradezco mucho porque me hizo ver cosas que había pasado totalmente por alto, y sé que son críticas totalmente constructivas para ir mejorando poco a poco, porque al final es mi primer relato. Lo que pasa que esta persona me puso comentarios negativos hasta en donde deberían ir positivos, así que al final te preguntas: “jo, tan mal lo he hecho?”. Así que agradezco profundamente tu comentario 🙂

    Escrito el 3 noviembre 2015 a las 10:40
  3. 3. Isolina R dice:

    Hola SandyinLove:
    Yo fui quien te hizo el comentario extenso. Y me quedó mal sabor de boca porque pensé que podías desanimarte. Por eso terminé con estas palabras:
    “Después de tanto comentario siento que no estoy haciendo justicia a tu cuento porque me ha gustado más de lo que parece. Quizá debí señalar otros aspectos positivos”.
    Es verdad. Me gustó bastante más de lo que pareció al señalarte tantas cosas mejorables. Sigue adelante. No lo has hecho mal.Supongo que al ser mi primer comentario lo hice con bastante torpeza. Espero haber aprendido que los aspectos positivos pueden ser tan importantes o más para el autor que los mejorables. Te pido disculpas por mi torpeza.
    Saludos.
    Isolina R

    Escrito el 6 noviembre 2015 a las 23:04
  4. 4. Demetrio Vert dice:

    Hola Sandynlove.

    He leido tu texto y estas son mis opiniones, hechas con respeto y devoción. Estamos en un blog para aprender, y debemos expresar con sinceridad nuestra impresión.

    Yo veo una anécdota más que un relato. Una anécdota escrita con dominio del lenguaje, pero anécdota al fin y al cabo. Un relato tiene presentación, nudo y desenlace. Y conflicto. Suceden muchas cosas (acciones) que son las que crean la tensión dramática.
    En tu relato hay muy poca acción. Todo es el meditar de un personaje sobre su interior. En realidad solo ocurren dos cosas. Un personaje que deambula apático y melancólico, y una decisión que lo lleva a un cambio de lugar y de sentir.

    La presentación es larga. Demasiado. Con muchas anécdotas (no acciones)que en mi opinión no aportan nada al relato. ¿Qué aporta al mismo todo lo que se dice a sí misma la protagonista sobre Cameron Díaz y las películas? Medítalo. En mi opinión nada. Aspectoos como este hay muchos.La presentación debía ser más escueta, y para darle dramatismo con alguna acción que la protagonista ejecute en ese momento que refuerce su melancolía. Ej.: Se pone allorar dándole un sofoco, rompe algún vestido o vaso utilizado por él; algo que nos muestre su estado mediante la acción, ya que no puedes introducir un diálogo con un tercero pues ella dialoga consigo misma.
    Todas sus reflexiones sobre lo que pudo haber sido y no fué no aportan nada al relato, pues ya no tienen consecuencias en la historia. Es un soliloquio íntimo que no tiene ningun efecto sobre el relato; y además, sin acciones.

    El nudo (o desarrollo de la historia) entra demasiado tarde. En realidad solo es una frase, “Estoy segura que lo hiciste a propósito. Lo huelo una vez más y lo rompo en mil pedazos con rabia”. Ahí esta el conflicto de la historia, cuando ella cree que él lo hizo adrede y lo rompe. No entiendo porqué lo huele si acaba de decirse que el otro le ha hecho una jugarreta para que sufra. Dejar, o enviar, un sobre vacío a alguien es una putada muy fuerte. Todo lo anterior a esta frase viene siendo más de lo mismo, la continuidad de la presentación. Melancolía, abatimiento, nostalgia; y sin acciones. Lo poco que hace, escudriñar el baño en busca de objetos de él, ducharse, ver el armario medio vacío, etc., son acciones cuyo fin es manifestar el estado meláncolico de la protagonista, aspecto que ya sabemos desde el principio. No nos proporcionan dudas, conflictos, giros; no aportan tensión dramática. Ella continua deambulando sin reaccionar a nada.

    El desenlace se disuelve porque también; le falta dramatismo. No es verosímil. ¿Se aleja del pasado porque lo decide ella o porque sale el sol y huele a mojado? ¿Así, de repente, desaparece la melancolía que hasta instantes antes la ha tenido abrumada? ¿Unos rayos de sol son suficientes para borrar sus conflictos sentimentales? Al desenlace le falta dramatismo. Sí, ella puede decidir tirar hacia adelante, pero no tan fácilmente. Algo le tiene que suceder para que la desgarre u olvide. (Hechos, acciones).

    En resumen, mucha descripción de un estado melancólico, poco desarrollo de la historia y un desenlace falto de emoción.

    Hay una buena base para una buena historia, que no sea una anécdota. Alguién abandona a quién le ama. Un dolor y una rabia por el abandonado, o sea un conflicto entre el deseo y la humillación. Y una decisión que puede traer consecuencias, buenas o malas. Solo hay que narralas de manera verosímil, universal y trascendente.

    Manejas bastante bién el lenguaje, pero deberías centrarte en “mostrar” en lugar de “describir”. Si te concentras en ello, seguro que harás buenos relatos. Yo te animo.

    Saludos.

    Demetrio.

    Escrito el 8 noviembre 2015 a las 18:28
  5. 5. SandyinLove dice:

    Hola Isolina! Vaya, no sé por qué pensé que eras un hombre! No, que de verdad agradezco mucho tu comentario, especialmente porque se nota que te tomaste un buen rato análizandolo y sacándole punta y valoro mucho el esfuerzo. Además, tienes razón en casi todo (aunque discrepo en un par de cosas), y no fui consciente hasta que lo releí después de tu crítica. Lo único es que para la próxima, intenta poner algo positivo en los espacios para ello, porque creo que si están separados de ese modo, será porque tienen esa finalidad. Si no, darían opción a redacción libre (supongo). En serio, gracias por tu análisis.

    Hola Demetrio, gracias también por tu comentario. Sí, tienes razón, supongo que sólo describí cómo me sentía yo en ese momento. Lo tendré en cuenta para la próxima.

    Saludos!

    Escrito el 8 noviembre 2015 a las 21:27
  6. 6. Demetrio Vert dice:

    Hola SandyinLove.
    Estupendo. Has dado en el clavo.
    Yo sentí en todo tu relato una exposición de un estado de ánimo (real o de ficción) del autor.

    El autor, crea personajes, que tienen sus carácteristicas y obran según la lógica de cómo son. En una obra larga (una novela), el autor puede poner algunos de sus pensamientos o filosofía, pero siempre en boca de un personaje cuyo perfíl de para ello.

    Aquí, es evidente que has puesto tus pensamientos en boca de un personaje, pero parece que el personaje está creado para decir solamente lo que el autor siente o sentiría en una situación así.

    Me alegro de que digas “supongo que solo describí…”. Eso mismo, describiste una angustia. No la contaste.

    Änimo y adelante.

    Saludos.

    Escrito el 9 noviembre 2015 a las 12:32
  7. 7. Fernando dice:

    Hola SandyinLove. Muy buen relato. La descripción de la emoción de la protagonista (asumiendo que sos vos misma porque está escrito en primera persona) me hizo sentir lo que te pasó como propio, lo lograste, muy buenas las descripciones de las emociones, los pensamientos, los deseos, las luchas internas y la decisión final. ¡Felicitaciones!

    Escrito el 13 noviembre 2015 a las 20:18
  8. 8. beba dice:

    Hola SandyinLove:
    Me parece muy bueno tu relato. Una historia que transcurre en el alma de alguien, ya sea que esté en su casa o en la calle. Un conflicto emocional no necesita resolverse más que con lágrimas y, después, con decisiones a futuro.
    Me gustó, además la expresividad de tus imágenes y el manejo elegante del lenguaje. Felicitaciones.

    Escrito el 20 noviembre 2015 a las 03:24

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.