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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Incomprensión pedagógica - por Conxita

Web: http://enrededandoconlasletras.blogspot.com.es/

Han pasado los años y Carlos aún recuerda aquel día.

—¿Carlitos tienes algo qué decirme?

— No mamá.

La mirada huidiza del niño le dice a Gloria que miente. Hace semanas que lo observa preocupada, está apagado y sombrío, sin ganas de nada y con una actitud desafiante en muchos momentos que la saca de quicio. Sabe que aún es muy reciente lo de su tía Luisa pero Carlitos no levanta cabeza, vamos ni él ni nadie en la familia. Han ido sumando desgracias que cada vez parecen más difíciles de encajar o quizás es que su resistencia ya está al límite. Sea lo que sea, el niño no sabe cómo afrontarlo, la escuela tampoco está ayudando.

— ¿Seguro…?

El niño la mira. De nuevo el desafío en sus ojos, el nada me importa. ¿Cómo explicarle a ese niño que la vida se lleva a los buenos, que es injusto pero que hay motivos para vivir, para seguir luchando? ¿Cómo? cuando ella no los tiene.

La situación en la escuela los está llevando al límite. Lejos de preocuparse y ser comprensivos con él, han emprendido una especie de carrera moralista para demostrar que la chulería y la indisciplina no se toleran en las aulas. Carlitos se defiende con más rebeldía en una espiral que no se detiene.

Gloria coge el sobre y lo pone encima de la mesa.

— Vamos ábrelo.

El niño no lo toca, sabe que el sobre estaba vacío. Sus ojos se llenan de lágrimas por la decepción que siente en su madre. No puede decirle nada, no hay excusas para lo que ha hecho, ahora también la miente a ella.

Todo se le ha descontrolado y no sabe cómo pararlo. Siente tanta ira. « ¿Cómo puedo ir al colegio como si todo siguiera igual?», piensa. «Tía Luisa ya no está». No, no puede hacer como si nada hubiera pasado. « ¡No está!». «Ella siempre lo apoyaba, lo ayudaba con los deberes mientras mamá trabajaba, le daba consejos para controlar su mal genio y ahora ese Dios que se supone es bueno, se la ha llevado. Era maravillosa y está muerta. Y esos estúpidos profesores sólo le piden deberes que no hace, lo castigan y no entienden nada de nada. ¿Con quién estudia él? ¿No ven que no puede concentrarse? Mamá ha ido en diversas ocasiones a la escuela para pedirles paciencia, que necesita tiempo, que no lo presionen tanto, pero allí han decidido que él es un vago y que lo que necesita, es un escarmiento».

«A su hijo le falta disciplina y trabajar más».

A ella le dicen que saben lo que Carlitos está pasando, que lo tienen en cuenta. En cambio, él solo recibe castigos, suspensos y ridiculizarlo delante de todos. Ya no le queda nada y nadie se da cuenta. No consigue concentrarse, las letras se juntan, su cabeza arde de esfuerzo y con frecuencia, cuando empieza a estudiar se le agolpan las lágrimas. ¡No puede hacerlo!

Ayer su tutora le dio el sobre, dentro algo que herirá profundamente a su madre, por eso ha decidido romperlo.

— Carlitos, por favor, ¿dime qué pasa?

Las lágrimas del niño la enternecen, debajo de su chulería solo hay un niño asustado que no sabe cómo soportar lo que está pasando. Gloria no se cansa de insistir en la escuela que tengan paciencia, que es un buen niño, ahora asustado, que requiere tiempo y perseverancia.

Entre sollozos, Carlitos le da la cuartilla rota. Es su expulsión por mal comportamiento.
Ahora se añaden las lágrimas de Gloria delante de la incomprensión, la rabia la abruma. Maldita escuela, son incapaces de ponerse en el lugar de ese niño, ¿por qué no ven lo que está sufriendo? ¿Para qué tantos recursos psicopedagógicos si son incapaces de entender su dolor?

— No llores Carlitos lo resolveremos. Sé que no es que no quieras, es que no puedes. Le pondremos remedio.

Gloria inicia una lucha sin cuartel con el colegio, se dirige a instancias superiores intentando encontrar quien los escuche, defendiendo el derecho de los niños a ser comprendidos. Recibe rechazos pero también encuentra a buenos profesores, dedicados a educar en lugar de solo instruir, preocupados por las personitas en lugar de solo por los conocimientos.

Gloria cambia de escuela a Carlitos, atrapado en el rol del pasota contestatario y con ayuda ve como el niño empieza a florecer.

Carlos cierra los ojos, aún con la pena por la pérdida, mientras se dispone a dar su primera clase en el instituto.

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16 comentarios

  1. 1. Tavi Oyarce dice:

    Hola Conxita:
    Tu relato está muy bien estructurado y abordas un tema contingente: la relación de los adultos con los niños. Todos, de una u otra forma, cargamos algún pequeño trauma, de nuestro paso por la infancia.
    Te felicito.

    Algunos alcances.
    Me habría gustado saber la edad del personaje (niño) porque al llamarle Carlitos imaginé un chico de 6 años, pero al ver como pensaba, quedé en la duda. Razón por la que no opino sobre el personaje.
    En la frase: “la miente a ella” Revisa el articulo “la”
    en esta otra: “la rabia la abruma”, creo que debiera quedar “la rabia le abruma”.
    Espero que sigas enviando cuentos para leerte y Gracias por pasar el mío

    Escrito el 1 noviembre 2015 a las 14:44
  2. Gracias Tavy por comentar y por tus acertadas sugerencias.

    Imaginé que el niño aún era pequeño, pero mayor de esos 6 años que tu le pones, quizás 8 o 9 o entrando en la preadolescencia, el diminutivo era algo cariñoso que hacen a veces las madres con sus chicos, pero si que es cierto que podía inducir a pensar que era más pequeño.
    Un saludo

    Escrito el 2 noviembre 2015 a las 19:40
  3. 3. Isabel dice:

    Me ha gustado mucho el tema de tu relato. Transmites muy bien el aspecto psicológico del niño, ese cambio de conducta debido al suceso tan triste que ha vivido.
    Respecto a la forma, creo que está muy bien estructurado. Si acaso diría que el final parece un poco precipitado.
    Buen relato.

    Escrito el 2 noviembre 2015 a las 23:14
  4. 4. Wiccan dice:

    Muy buen relato. Me parece que está muy bien escrito, que se justifican perfectamente tanto los sentimientos de la madre como los sentimientos del niño y que se recrea muy bien el ambiente hostil del colegio en el que se mueven tanto uno como otro
    Me ha gustado mucho también porque tengo una amiga que vivió algo muy parecido con su hijo y todo lo que explicas en tu relato en relación a la madre me recordaba a las conversaciones con ella, parece mentira que algo asi pueda pasar en estos momentos pero desgraciadamente pasa.
    En cuanto a forma, también pienso que está muy bien estructurado. Solo te voy a comentar dos cosas que me sonaron raras aunque no podría decir que están mal: se cambia el tiempo verbal en “el sobre estaba vacío” cuando esa frase empezó en presente; y al utilizar la palabra “ridiculizarlo” yo esperaría un sustantivo tal y como está escrita la frase. Son dos tonterías porque no afectan al texto pero como al leerlas me chocaron creo que es bueno comentarlo.
    Me gustó mucho.
    Un saludo.

    Escrito el 3 noviembre 2015 a las 20:01
  5. 5. Wolfdux dice:

    Una historia dura la que aquí nos presentas pero con rayo de esperanza en ese final. Esta muy bien escrito y se lee del tirón. Felicidades Conxita.

    Un saludo.

    Escrito el 4 noviembre 2015 a las 15:40
  6. Gracias Isabel, igual tienes razón que podría haber acabado más paulatinamente.
    Gracias Wiccan por tus palabras, totalmente de acuerdo con tu apreciación el sobre estaba vacío era incorrecto porque estaba en presente, pero la obligatoriedad de la frase era esta y no supe solucionarlo. De hecho en mi blog que he publicado el relato, lo cambié porque era incorrecto y sí te agradezco que lo comentes, lo que queremos todos es mejorar.
    Gracias Wolfdux me alegra que te haya gustado la historia, con mucha más frecuencia de la que pensamos eso se da.
    Gracias por comentar a todos.

    Escrito el 4 noviembre 2015 a las 17:53
  7. 7. Paola dice:

    Hola, Conxita
    Me ha gustado mucho el relato, tocas un tema especial que a todos nos llega dentro. Yo quizás recortaría un poco las partes en las que cuentas que en el colegio le dicen “que lo tendrán en cuenta y luego no lo hacen” suena un poco repetitivo. Por lo demás, he disfrutado leyendo. Saludos

    Escrito el 5 noviembre 2015 a las 19:16
  8. 8. José Torma dice:

    Hola Conxita (me encanta tu nombre, dire aqui de pasada)

    Gracias por tu visita.

    Tu relato me parece muy completo, la reaccion de los niños ante la muerte es muy compleja, nunca terminamos de entenderlo, porque racionalizamos lo que ya sabemos y lo queremos aplicar a lo que fuimos y nunca es facil. A mi el niño nunca me parecio chica, mas bien adolescente, 13 o 14 que es donde las hormonas y las emociones estan en plena revuelta. Aca en Mexico es muy comun a los Carlos decirles Carlitos, independientemente de su edad, por eso y por su psique, yo lo imagine adolescente.

    Te felicito, muy bueno tu relato. Tengo un par de dudas en la forma, pero creo que son niñadas de mi parte y no te expondre a ellas.

    Saludos.

    Escrito el 6 noviembre 2015 a las 02:44
  9. Creo que has logrado aqui un exitazo. Pocos son los relatos en donde se habla del trauma que causa en un niño la perdida de un ser querido y mas cuando este es cercano. Como ya te dijeron, narras muy bien el caracter del niño. En cuanto a la escuela, razon tienes cuando dices que en las escuelas no comprenden a los niños. Solo se preocupsn por cobrar su sueldo, nada mas.
    En fin, buen relato.
    Felicitacione y saludos.

    Escrito el 6 noviembre 2015 a las 15:45
  10. Muchas gracias Paola y por tu aporte, creo que tienes razón y que esa frase no aporta, es evidente que no lo tienen en cuenta en el colegio y por tanto puede resultar redundante. Me alegra que te haya gustado.

    Muchas gracias José Torma, por mi nombre y por el relato. Si puede entenderse como un adolescente, yo lo imaginaba algo más pequeño por el diminutivo, pero también es cierto que las madres los utilizamos aunque sean ya grandes…cosas de madre.Me ha gustado tu aporte de que en México es común el apelativo de Carlitos. Cualquier cosa que me ayude a mejorar será bienvenida.

    Gracias por tus palabras Ryan, me alegra que te haya gustado y sí, aún los niños son unos grandes incomprendidos por parte de algunos maestros en las escuelas. No siempre podemos saber cómo afectará a cualquier persona y menos a un niño, la pérdida de un ser querido, si ya es difícil en los adultos en los niños aún más.

    Un saludo y gracias por leerlo

    Escrito el 8 noviembre 2015 a las 18:36
  11. 11. grace05 dice:

    Muy buen relato. Me gustó mucho como vas exponiendo, casi en paralelo, los sentimientos del niño, con las actitudes que recibe desde la escuela. Lamentable que los educadores prioricen los contenidos ante la angustia de un niño por la muerte de un ser querido. Espero que esta actuación de los educadores solo haya sido excusa para poder desarrollar tu relato, y no sea “moneda común”.
    ¡Te felicito!!!
    Te invito a comentar 194

    Escrito el 9 noviembre 2015 a las 23:25
  12. 12. beba dice:

    Hola, Conxita:
    Me gustó mucho tu historia, recrea, con mucha sensibilidad, el proceso de un niño “enlutado” e incomprendido; y trasluce la preocupación y la lucha de la madre. Como ya te señalaron, es probable que las 750 se te hayan venido encima, de golpe; el desenlace no aparece tan elaborado como el resto del relato.
    Un saludo.
    Pero me pareció muy bueno tu trabajo.

    Escrito el 10 noviembre 2015 a las 03:03
  13. 13. beba dice:

    No te preocupes; no es Alzheimer. Como habrás notado, hubo un error de dedos. Cariños.

    Escrito el 10 noviembre 2015 a las 03:05
  14. Gracias Grace05 por tu lectura y tus palabras. Es cierto que no todos los educadores son así, pero “haberlos los hay”, más preocupados por el temario que por las personas. Espero que vayan siendo menos…

    Gracias Beba, me alegra que te haya gustado la historia de ese niño que está haciendo el duelo de la manera que sabe, rebelándose y la lucha de su madre frente a la escuela, defendiendo a ese niño que sufre. Si teneis razón que igual el final es muy precipitado, pero lo que quería mostrar es que a pesar de los pesares, el niño sale adelante y se convierte él mismo en un educador.
    Un saludo

    Escrito el 13 noviembre 2015 a las 19:26
  15. 15. Roger/NHICAP dice:

    Hola Conxita,
    Elegiste un tema difícil que has resuelto con acierto. Pienso que es un buen relato, un trabajo donde expones varias reflexiones interesantes acerca de la educación actual de los niños en las escuelas. Y lo haces en forma de preguntas, hecho que me ha gustado y aligera la lectura. Un buen recurso.
    Quizá en la definición del estado de Carlitos vendría bien mostrsr más en lugar de explicar. Algún: “Mamá, déjame en paz”;”Mamá,vete a paseo”;o un chillido: “dejarme en paz” impactan más al lector.
    Me ha gustado como resuelves el final.
    Un abrazo

    Escrito el 16 noviembre 2015 a las 17:39
  16. Gracias Roger,
    Tienes razón que sería mucho más real si mostrara más, tengo tendencia a explicar y lo tengo que corregir y hacer que los protagonistas sientan más.
    Me lo apunto para el próximo.
    Un saludo

    Escrito el 16 noviembre 2015 a las 21:07

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