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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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REFLEJOS - por PAULATREIDES

«Harold siempre ha estado a mi lado. Es mi lazarillo, mi guía, me ayuda e intenta convertirme en buena persona. Siempre he sido algo violento, lo sé, la maldad forma parte de mi ser y si él no estuviera a mi lado, yo no seguiría con vida.»
El pequeño apartamento se encuentra patas arriba; un par de botellas de ginebra sobre la mesa, otra de refresco junto a una cubitera con dos dedos de agua y snacks pisoteados que se esparcen aleatoriamente por el suelo. El caos se completa con algunas fotos rotas, libros deshojados, restos de un jarrón y Anne, la preciosa Anne, desnuda y sentada en la pequeña butaca roja junto al televisor, con las manos atadas a la espalda y la cabeza abierta, empapada en su propia sangre que seguía goteando buscando el charco que se crecía bajo ella. Harold, tumbado en el sofá, abre los ojos.
—¿Qué has hecho Harold?
—¡Joder Andrew! Me has asustado. —Se incorpora con rapidez y fija su mirada en el cuerpo inerte de la joven—. ¿Qué le ha pasado a Anne?
—¿Qué le ha pasado? Dímelo tú, es tu piso. Mira tus manos y tu ropa, están ensangrentadas —comenta con gesto serio.
—No sé, no lo sé… no recuerdo nada —responde llevándose las manos a las sienes.
—¿Cómo que no lo sabes? Anne te quería ¿Cómo has podido hacerle algo así?
—¡Te digo que no sé lo que ha pasado! Yo también la quiero, no sería capaz de hacerle daño.
Harold se incorporó y paseó por el salón con las manos en la nuca y farfullando.
—¿Qué es lo último que recuerdas, Harold?
—Anne vino a ayudarme… con lo de la solicitud. —Se detuvo en medio de la estancia y se giró—. Tu sabías que lo iba a solicitar, ¿verdad?
—¿Y la rellenasteis?
—Claro. Para eso vino, siempre me echa una mano cuando lo necesito. Completamos los impresos y lo dejamos en el sobre que hay junto a la puerta.
—Yo he mirado antes y el sobre estaba vacío.
—¡Te juro que lo pusimos dentro! Lo rellenamos, vimos una película y tomamos algunas copas, eso hicimos.
—¿Y? —preguntó Andrew frunciendo el ceño.
—Nada más, debí quedarme dormido… no sé. Pero tú, ¿dónde estabas tú?
—A mí no me metas en esto, siempre culpas a los demás de tus errores. Harold, realmente me das pena.
—Ella te odiaba, no quería saber nada de ti. Cada vez que la vida me sonríe, me la juegas, no soportas que todo me vaya bien.
Se acercó a la butaca, se arrodilló junto a Anne y comenzó a llorar desconsolado.
—Lo siento Anne, los siento mucho. Yo no he sido, ha sido Andrew. —Se incorporó—. Pero es culpa mía, no debí quedarme dormido.
—¡Esa zorra se lo merecía! Lo sabes. Primero me divertí con ella, tuve que amordazarla ¿sabes? No te imaginas la fuerza que tenía y como gritaba la cabrona.
—¿Qué le hiciste a la pobre Anne? —pregunta con los ojos enrojecidos.
—No sabes lo que te has perdido. Ni siquiera te atreviste a decirle lo que sentías, pero yo hice que disfrutara.
—Yo la respetaba, la…
—¡¿Y de que te ha valido el respeto?! Nunca has conseguido nada con respeto… Serás imbécil.
Harold se dirigió de nuevo al sofá y se sentó. Cabizbajo, comenzó a gimotear.
—¿Y que qué vamos a hacer ahora?
—Qué vas a hacer, querrás decir. Era tu amiga ¿no?, tu salón, tu apartamento; tu problema. Aunque también podrías coger el sobre e ir a entregarlo.
—¿No me dijiste que estaba vacío?
—Era broma idiota, no quiero que te vayas. Me divierto contigo; te veo y me río, eres patético además de gilipollas.
—Pero podría funcionar, sería una buena salida. Voy a cambiarme de ropa —se levantó y comenzó a andar de un lado para otro— y a lavarme, e iré a entregar la solicitud: no podrán rechazarme. Llamaré a la policía para que vengan y ya no podrán cogerme.
Llegó hasta el baño y miró su imagen en el espejo. Abrió el grifo y dejó correr el agua de la ducha. Desnudo y de rodillas, con el agua cayendo sobre su rostro, frotaba sus manos con fuerza mientras lloraba.
El vapor empañó el espejo y Harold pasó su mano para limpiar el cristal. Se quedó mirando fijamente su reflejo.
«Bueno, creo que durante un tiempo pasaré del triste de Harold» pensó mientras esbozaba una ligera sonrisa.

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19 comentarios

  1. 1. R. Andrés Navarro dice:

    Me gustan los textos de locos. Creo que está bien conseguido el tema de la doble personalidad.
    En general está muy bien, pero yo te recomendaría que le dieras algo de acción para darle más movimiento a la historia. Quizás reducir un poco los diálogos para meter más movimiento. Aunque puede que con ello perdieras la intriga de saber si tiene doble personalidad o no

    PD: Tienes que leer el texto de Fabián, Catarsis. Te vas a reír.

    Escrito el 29 octubre 2015 a las 16:46
  2. 2. Lionel Muñoz dice:

    Me gustó mucho. Yo escribí sobre uno que se vuelve loco.
    Para mí, lo del diálogo está bien: es necesario para que se comprenda la doble personalidad.

    42. Correspondencia Radical

    Escrito el 30 octubre 2015 a las 00:18
  3. 3. Marcelo Kisi dice:

    Hola!!

    Escrito el 30 octubre 2015 a las 10:45
  4. 4. Marcelo Kisi dice:

    Hola! (el anterior HOla se envió antes de tiempo, pero valga como saludo 😉 )
    Bueno verte otra vez por aquí después de las merecidas vacaciones!
    Me encantó tu diálogo, no me vi venir el desenlace, creo que está muy bien logrado.
    Ojo, tenés un cambio de tiempo verbal, de pasado a presente en:
    —¿Qué le hiciste a la pobre Anne? —pregunta con los ojos enrojecidos.
    Por lo demás, me compadecí mucho con Harold, la impotencia total de no poder dominar a Andrew. Terrible.
    A mí me tocó el 151.
    Nos seguimos leyendo!

    Escrito el 30 octubre 2015 a las 10:49
  5. 5. Lemo dice:

    Hola Paula,
    Me gustó mucho el relato. Como novel veo un nivel muy bueno en muchos de vosotros lo que me anima a seguir y a aprender. No me atrevo todavía a analizar hasta que no empiece yo a hacer las cosas de mejor manera.
    Lo único que me chirría es justamente el tiempo verbal de la frase del taller y justamente por que a mi me cuesta esa faceta te lo pregunto: No sería mejor “—Yo he mirado antes y el sobre está (en vez de estaba) vacío.” Se supone que la escena es en presente, aunque lo mirase antes el sobre sigue allí.

    No obstante me pareció muy bueno. Aquí me tienes como fiel lector para el próximo relato. Como seáis todos así no podré leer y comentarlo todo.

    Escrito el 30 octubre 2015 a las 11:17
  6. 6. Fabián dice:

    Andrew y Nathan no serán primos? 😛
    Que casualidad, pensamos casi lo mismo eh.

    Yo no le quitaría diálogos para meter acción, es más, no se me ocurre que escena de acción podrías meterle, no se va a liar a tiros consigo mismo jajaja.

    •Forma

    No encontré nada que me hiciera tropezar en la lectura y que me sacase de la trama en ningún momento. Tanto puntuación como sintaxis y estructura están de 10. La única observación que podría hacerte es una tontería, y creo que es una cuestión de gustos:

    “—¡Joder Andrew! Me has asustado. —Se incorpora con rapidez…“
    “…no recuerdo nada —responde…“

    Los verbos en presente (“incorpora”,”responde”) en las acotaciones del narrador nunca me acabaron de convencer, yo los prefiero en pretérito imperfecto: “Se incorporó”, “respondió”.
    Pero es lo dicho, es mas una cuestión de gustos que otra cosa, así también está bien y no hay ningún error al respecto.

    Gracias a tu relato me recordaste una duda que tenía hace tiempo y pude quitármela con don google. Mi duda venía con el uso de los signos de exclamación junto con los de interrogación, no sabía cual iba primero, si el de interrogación o el otro, pero en realidad da igual el orden, ambos son correctos, tanto: “¡¿?!” como “¿¡!?”, quería compartirlo contigo ya puestos.

    •Contenido

    Muy buen estructurado; y muy bien uso del narrador. Dejaste que fuesen los personajes los que cuentan la historia, al narrador solo lo utilizaste para la descripción del escenario y las acotaciones. De esta manera los personajes pueden brillar y la trama avanza sola.

    Lo único que no entendí es a que solicitud se referían, pero vamos, es totalmente irrelevante para entender lo que esta pasando.

    Muy buen trabajo.

    Escrito el 30 octubre 2015 a las 11:56
  7. 7. Jose Luis dice:

    Hola
    He notado que en algunas partes cambian los tiempos verbales, se mezclan los tiempos presente y pasado. Creo que el relato se debe contar en un solo tiempo verbal. También he notado la falta de alguna coma, pero son errores muy pequeños que no empañan para nada la lectura de la historia. Es casi idéntica, muy parecida a otra historia que he leído en esta misma recopilación de cuentos, estilo doctor Jeckill y míster Hyde. Buen relato, entretenido y bien narrado. Un saludo

    Escrito el 30 octubre 2015 a las 19:28
  8. 8. Darío Lana dice:

    Acabo de leer el relato de Fabián y sin dudarlo he pasado a leer el tuyo.
    ¡Me han encantado los dos!
    Creo que esta escena tan solo se puede desarrollar con un buen diálogo y tú lo has conseguido.

    Saludos

    Escrito el 31 octubre 2015 a las 00:08
  9. 9. Vespasiano dice:

    Hola Paula:
    Genial tu truculenta historia. Confieso que no me había dado cuenta, en la primera lectura que hice, de la doble personalidad del protagonista.
    Estaba abrumado por la escena tan desagradable y veía tres personajes en la habitación.
    Felicidades.
    Te dejo la dirección de mi recién creado blog por si te apetece entrar en él.

    Escrito el 1 noviembre 2015 a las 16:27
  10. 10. Tim Galano dice:

    Hola Paula.

    Encantado de volver a encontrar textos como los tuyos por aquí

    Me ha gustado mucho la escena, creó que es brillante, el inicio me encantó, el diálogo muy bueno para poder creer que en realidad es un monólogo, y el cierre perfecto para describir la mente del protagonista.

    Encantado de leer relatos como este, enhorabuena!!

    ¡Nos leemos!

    Escrito el 2 noviembre 2015 a las 22:54
  11. 11. beba dice:

    Hola, Paula:
    Felicitaciones por tu texto; un argumento original;muy bien llevado el relato; un desenlace sorpresivo. Como siempre, excelente manejo del lenguaje.

    Escrito el 3 noviembre 2015 a las 00:25
  12. 12. Manoli VF dice:

    Hola Paula.
    A ver, tu texto toca un tema complejo. He escrito sobre el mismo varias veces y tengo algo de experiencia en el género y te comento que, en este caso, falta un poco de perspectiva. Cuando digo perspectiva me refiero a la voz del narrador que casi no se distingue de los diálogos. Cuando describes el apartamento, no se sabe muy bien si es el narrador o el personaje el que lo hace, puesto que dices: “La pobre Anne.” No obstante al final vuelves a introducir al narrador como alguien impersonal, cuando describes lo que hace en el baño. En todo el texto introduces la figura del narrador tres veces. Esas dos que te mencioné y cuando dices que “se acercó a una butaca” no está clara esta función narrativa que interrumpe el flujo del relato.

    Los diálogos en sí están bien, y el tema de la doble personalidad, aunque daría para más, está bien esbozado. Repasa la introducción, porque empiezas con un pensamiento.

    Por lo demás la atmósfera del cuarto y el caos del personaje están bien construidos.

    Un saludo.

    Escrito el 4 noviembre 2015 a las 13:16
  13. 13. karu dice:

    Hola!!

    Yo si creo que los diálogos son adecuados para enfatizar la doble personalidad.

    La descripción del apartemento, yo la haría en pasado

    Un saludo””

    Yo soy la 134 🙂

    Escrito el 5 noviembre 2015 a las 12:36
  14. 14. Carlos Rosae dice:

    Hola Paula

    Me ha gustado la forma de tratar la doble personalidad, sobre todo el hacerlo a través de un diálogo perfectamente traído, que da agilidad al relato.

    Confieso que he tenido que leerlo un par de veces para captarlo, pero el final es sorprendente.

    Felicidades

    Escrito el 5 noviembre 2015 a las 19:42
  15. Doble personalidad…eso es algo que a mi me da cierto miedo. Por eso desarrolle un alter ego: Ryan, mi pseudonimo, je je.
    Me encanta la forma como has narrado el relato. Cuando llegue al final, al momento en que el se mira en el espejo, entendi de que se trataba y me rei al sentirme tan idiota. Haz hecho un excelente trabajo.
    Felicitaciones y saludos.

    Escrito el 6 noviembre 2015 a las 14:25
  16. 16. Vespasiano dice:

    Hola Paula:
    Al final de mi comentario, olvidé dejarte la dirección de mi blog, donde espero ver tus consejos que serán siempre bien recibidos:
    lhlupianes.blogspot.com.es
    Gracias.

    Escrito el 6 noviembre 2015 a las 20:25
  17. 17. Pepe ILLARGUIA dice:

    Hay que ver lo que hacen un par de botellas de ginebra, o son los snacks? Si lo llega a descubrir antes míster Hyde habría pasado de su médico de cabecera, y de su brebaje burbujeante. Un placer leerte Paula.

    Escrito el 7 noviembre 2015 a las 18:14
  18. 18. José Torma dice:

    Caray Paula, que rico relato, aunque mi mente acelerada intuyo que era el mismo (he usado el recurso en alguno de mis relatos) pero poco demerita. Los dialogos fluyen muy bien y nos mostraste en vez de contar el cuerpo de la pobre mujer, mi mente lleno los huecos y vi toda la escena.

    Felicidades, el tiempo verbal, lo pongo aqui nomas porque lo vi jajaja

    Un abrazo y felicidades.

    Escrito el 11 noviembre 2015 a las 20:37
  19. 19. Leonardo Ossa dice:

    Hola Paula. Tienes acá una historia espeluznante que he leído con una plegaria de fondo, para que jamás tenga yo una experiencia tan demente como la que narras. He ido devorando tu escrito con la esperanza de que Anne diera señas de tener aún algún signo vital. Has presentado bien la escena y el titulo “Reflejos” se ajusta a la medida con el remate del texto.
    ¡Felicidades!

    Escrito el 20 noviembre 2015 a las 00:33

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