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El lápiz mágico - por Tonino

El lápiz mágico

Recibí un mensaje en el móvil, era Juan. Insistía que fuera a su tienda, un local lleno de antigüedades y objetos extraños. Tenía algo que enseñarme, alguien había dejado una caja antigua en el local junto con una nota, el sms no mostraba nada más y eso me dejó algo intrigado.

Conseguí hacer un hueco por la tarde, sobre las siete, creo que eran. Había anochecido y no había nadie en las inmediaciones de la tienda, incluso de lejos, el local parecía estar cerrado. Juan decía que los objetos antiguos resaltan más con escasez de luz, y por ello siempre tenía la tienda en penumbra.

De la puerta colgaba un viejo letrero. Cerrado. Algo que me extrañó, porque la tienda solía estar abierta hasta las nueve, además, Juan quería que fuera a verle. Me iba a ir cuando me acordé del timbre, así que llamé y esperé. Un momento después me abrió, me fijé en su cara, estaba más seria que de costumbre. Cuando entré, volvió a cerrar la puerta con llave, no dije nada, pero me extrañó y la curiosidad se intensificó.

Tuvimos que cruzar la tienda hasta llegar al pequeño almacén, que a veces, servía como taller, por suerte allí había más luz. Entró delante de mí y se hizo a un lado sujetando la puerta hasta que estuve dentro, después la cerró. A esas alturas, la curiosidad fue dando paso al miedo, comenzaba a estar asustado. Me quedé allí de pie, no sabía muy bien qué hacer, le observaba. Fue entonces cuando me percaté que aún no había hablado desde que entré, ni siquiera al abrirme la puerta.

Me acerqué a la mesa, apenas lo miré a la cara. Estaba observando un pequeño cofre, poco más grande que un palmo, de color marrón, la madera se veía vieja. Me llamó la atención la forma en que estaba hecho, parecía de un tiempo lejano. También había una nota al lado del cofre, que, curioso comencé a leer ante la silenciosa mirada de Juan. Noté como según leía, la frente se me arrugaba, apenas había dos renglones escritos a mano. La caligrafía parecía ser antigua, muy clara para estar escrita a mano, en cambio el papel se notaba que había sido arrancado de algún cuaderno. Cuando terminé de leer miré la pequeña caja, dentro debía haber un lápiz con propiedades mágicas que fue creado por un alquimista.

Con nerviosismo quité el seguro que bloqueaba el cierre, apreté un botón y abrí la tapa con suavidad. Sobre una tela roja, que cubría la madera por dentro, descansaba algo que nunca antes había visto, tenía un extremo más puntiagudo que el otro y extraños grabados en toda su longitud, era frío al tacto y muy ligero. Costaba imaginar que aquello fuese un lápiz, o al menos no se asemejaba a los que se usan en la actualidad, no tenía carboncillo en su interior para poder dejar la marca a su roce con el papel.

Juan comenzó a hablar, su voz me cogió de sorpresa, esa fue la primera vez que habló desde que llegué. Dijo que había estado buscando información en internet. Había encontrado un artículo que hablaba del lápiz mágico en una revista de investigación online, donde decía que su leyenda se remontaba al siglo IV. Con él se habían dibujado cosas que luego ocurrieron, también se usó para cruzar a otros mundos a través de puertas que se dibujaban en el aire, se redactaron tratados de paz que eran imposibles de imaginar, creó grandes obras literarias, aunque su escritor no supiese escribir, incluso grandes edificios se levantaron adelantándose a su época gracias a sus trazos en el diseño. Ante nosotros teníamos el lápiz que demostraba que su leyenda era cierta.
Quedamos un tiempo en silencio, no dejaba de mirarle. Reconozco que hubo un momento que creí que me estaba gastando una broma. Sus palabras se repetían en mi cabeza. Si era cierto todo lo que decía, ¿los grandes avances de Einstein podrían ser fruto del lápiz?, ¿o si El Quijote lo escribió Cervantes con la ayuda de la magia?, ¿o el diseño de la cúpula de la catedral de Milán que hizo Da Vinci? Algo así cambiaría la historia tal y como la conocemos.
Fui a decir algo, pero la voz de Juan se me adelantó.
—¿Y tú qué crees que ocurrió?

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3 comentarios

  1. 1. Fabián dice:

    Me gusta como actúan los personajes y poco a poco vas creando tensión. La idea de un instrumento que fue utilizado a lo largo de la historia para crear elementos claves de la humanidad me parece muy original.

    Con respecto a las observaciones que he hecho, hay que tener especial cuidado con la puntuación:

    •“Conseguí hacer un hueco por la tarde, sobre las siete, creo que eran…” → “Conseguí hacer un hueco por la tarde, creo que eran sobre las siete…” Suena mas natural, y no hay una coma interrumpiendo la frase.

    •”De la puerta colgaba un viejo letrero. Cerrado…” → “De la puerta colgaba un viejo letrero: “Cerrado”…” Al tratarse de una cita debe estar dentro de las comillas.

    •Muchas veces las comillas se pueden usar para hacer incisos, y lo has hecho muy bien en algunas frases y mal en otras:
    “Tuvimos que cruzar la tienda hasta llegar al pequeño almacén, que a veces, servía como taller, por suerte allí había más luz…” → “Tuvimos que cruzar la tienda hasta llegar al pequeño almacén que, a veces, servía como taller, por suerte allí había más luz…”

    •”…poco más grande que un palmo…” Me hace dudar el usar la medida del palmo para determinar el tamaño de algo, siempre lo había visto como medida de longitud o de altura. Aquí no estoy seguro eh. Quizás poner :”…poco más alta que un palmo…” ?

    •”También había una nota al lado del cofre, que, curioso comencé a…” El “que” entre las comas queda muy raro → “También había una nota al lado del cofre que, curioso, comencé a…”

    •”Sobre una tela roja, que cubría la madera por dentro, descansaba algo que nunca antes había visto…” Un ejemplo donde si que empleaste bien la coma a modo de inciso.

    •”Con él se habían dibujado cosas que luego ocurrieron, también se usó para cruzar a otros mundos a través de puertas que se dibujaban en el aire…” ¿Que tal un “…que se trazaban en el aire…” para no repetir la palabra “dibujar”?

    •”Quedamos un tiempo en silencio…” → “Nos quedamos un rato en silencio…”

    Escrito el 30 noviembre 2015 a las 01:51
  2. 2. Karen Katina dice:

    Hola Tonino.
    Me gusta el tono y la intriga que maneja la historia, como avanza hasta revelar el misterio. Sobre todo la frase final que deja al lector preguntándose sera posible?
    Gracias por pasar por mi historia y dejar tu comentario.

    Escrito el 1 diciembre 2015 a las 18:38
  3. 3. beba dice:

    Hola, Tonino:
    Me ha gustado tu historia, muy ágil e interesante. Reitero los comentarios de Fabián; agrego que muchas de las situaciones que necesitan pausas pueden resolverse con punto y seguido, o con punto y coma.
    Pero la trama de tu relato es firme, y manejas bien la gramática.
    Adelante.

    Escrito el 10 diciembre 2015 a las 02:35

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