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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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El lápiz mágico - por Dispersus

En los momentos en que comenzaba mi carrera como escritor, en una ocasión tuve la oportunidad de hablar con un antiguo compañero y amigo de la universidad, también interesado en el antiguo oficio de juntar palabras. Según me contó, existía una creencia en ciertos círculos literarios que rayaba la superstición. Se trataba de un lápiz mágico. De acuerdo con aquel mito, quienquiera que fuera su poseedor, sería dueño de las prosas y rimas más sobresalientes del mundo. Su arte no tendría parangón entre el resto de sus colegas. Cierto es que no presté especial atención a la narración de mi amigo. Tan solo asentía de forma que pareciera interesada y trataba de reprimir los bostezos que asomaban a mi boca. No conseguía entender como una persona como aquella era capaz de creer, ni siquiera en parte, ese tipo de historias.
El tiempo nos separó, pero el destino caprichoso nos dio la oportunidad de coincidir de nuevo, aunque sólo fuera durante unos minutos. Habían pasado muchos años desde nuestro último encuentro. Fue en un parque cualquiera, paseamos en dirección contraria y la casualidad quiso que nos cruzáramos. Después de saludarnos efusivamente, tomamos asiento en un banco al borde del paseo, con un seto de boj a nuestra espalda y un verde prado por delante. Mucho había cambiado desde nuestro último encuentro. Yo, por ejemplo, tras varios reveses literarios que no supe digerir al considerar injustos, opté por abandonar aquel mundo. Encontré un trabajo que me permitió vivir con dignidad y olvidé mis sueños creativos. Respecto a él, según me contó tuvo mejor suerte pero un final similar al mío. Tras unos comienzos prometedores que presagiaban una apreciable carrera literaria, optó por abandonar todo y dedicarse a la enseñanza. Yo intuía que algo grave había sucedido para que actuara de ese modo, teniendo en cuenta sobre todo las expectativas que había creado en sus comienzos pero, por más que insistía, el silencio era su única respuesta a esa pregunta.
Varías horas pasamos los dos acompañándonos de nuestra charla y de nuestros silencios. Fue después de uno de ellos, en que yo creí que daríamos por terminada nuestra conversación, cuando acercándose tímidamente junto a mí , me susurro al oído: “Existen” Yo, en un primer momento, no entendí a que se refería con esa palabra, pero él siguió insistiendo y de nuevo en un murmullo me dijo: “El lápiz mágico. ¿Recuerdas?” Me costó hacer que mi mente recordara aquella conversación, si bien es cierto que, quizá por lo extraña que me pareció en su momento, nunca la pude apartar del todo de mi memoria. A partir de ese momento, mi amigo parecía otro. Su expresión se relajó y comenzó a detallarme ciertos sucesos que, al parecer, le sucedieron pocos años después de nuestra última charla. Me habló de jornadas extenuantes y a la vez placenteras frente a montones de folios en blanco. De su ambición por llegar a ser alguien en el universo literario. Alguien grande y reconocido. Por lo que me contaba, disciplina no le faltaba. Y por lo que yo sabía, clase para llegar a serlo, tampoco. Minutos después, en los que pasó de la ilusión al desengaño, me sorprendió sentenciando: “Son los editores. Con su lápiz mágico eligen quienes serán los escritores que pasen a la posteridad y quienes los que no superen el más triste de los anonimatos”
Unos minutos después, mientras observaba como se alejaba mi amigo entre aquellos setos de boj, por fin comprendí todo. Pero de ningún modo lamenté aquel momento único en el que decidí dedicar mi vida a la escritura.

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11 comentarios

  1. 1. Carmen dice:

    Me gusta mucho el lenguaje que utilizas. La construcción de las frases y las descripciones, tanto de paisajes, como de personajes y situaciones. Tu relato está más cerca de la realidad que de la ficción; pero muestra una gran pasión por la literatura.

    Escrito el 29 noviembre 2015 a las 18:33
  2. 2. Wolfdux dice:

    Un relato muy bien narrado. De lectura ágil y amena. Felicidades. ¡Nos leemos!

    Escrito el 29 noviembre 2015 a las 23:30
  3. 3. Manoli VF dice:

    Hola Dispersus. De tu texto me llaman la atención muchas cosas que paso a aclararte.
    En cuanto al contenido comienzas creando expectativa e intriga en el lector, que cree que, en efecto, se habla de un lápiz físico dotado de poderes mágicos. Este dato lo dejas en suspense para retomarlo al final con bastante acierto. Se entiende el relato pero, siempre a mi juicio (como lectora), hay bastantes lapsus narrativos que probablemente se deban al límite de palabras impuesto. El final se ve un poco acelerado: “minutos después, en los que pasó de la ilusión al desengaño, me sorprendió sentenciando: Son los editores.” Hay un salto narrativo: pasó de la ilusión al desengaño; no se explica por qué. Entiendo que quieres desvelarlo en la frase final: Son los editores, pero algún detalle sí creo que podías dar, como contar lo extenuado que fue para el personaje ir de puerta en puerta, o mantenerse en la cartelera…

    En cuanto a la forma en general está bastante bien, he visto alguna cosilla como en el párrafo en el que describes el reencuentro con los personajes:”…tomamos asiento…Mucho había cambiado” tuve que leerlo dos veces para entenderlo, ese “Mucho” parece referirse al personaje: Mucho había cambiado, ¿Quién? ¿El protagonista? Si te refieres a que habían pasado muchas cosas no está bien expresado.

    También me ha resultado chocante que aunque no hay datos que digan que la conexión entre los personajes fuese fuerte, al reencontrarse ambos de nuevo pasen juntos “varias horas” quizás si este reencuentro fuese en un acto social se justificase más que se pusiesen al tanto de sus vidas. Son impresiones que me surgieron al leer tu texto.

    Decirte que es una buena historia y que resuelves muy bien el tema del lápiz por lo que merece mucho la pena detenerse en ella.

    He disfrutado leyéndola y espero que te sirva mi comentario.

    Un saludo.

    Escrito el 30 noviembre 2015 a las 10:51
  4. 4. L.M.Mateo dice:

    Hola Dispersus:

    Tengo que decir que me ha gustado mucho tu relato. Efectivamente, te ha pasado como a mí y has tenido que acelerar el final, pero creo que lo has solventado muy bien. Me has sacado una gran sonrisa.

    En mi caso no coincido con Manoli en el análisis de contenido, pues a mi no me ha resultado confuso en ningún momento y veo los lapsus bien insertos. Pero bueno, esto es diferencia de opinión. Lo mismo sucede con la relación entre los personajes, ya que en las primeras líneas dejas claro que son compañeros de universidad y “amigos”, así que pasar varias horas juntos me parece natural. Será porque yo lo hago con algunas compañeras de la uni cuando coincidimos todas en España (que, por desgracia, suele ser una vez cada tres o cuatro años).

    Sí que te llamo la atención en dos detalles: “como una persona como…” El primer “cómo” debe ir acentuado.

    “En los momentos en que comenzaba mi carrera como escritor, en una ocasión tuve la oportunidad de hablar con un antiguo compañero y amigo de la universidad, también interesado en el antiguo oficio de juntar palabras. Según me contó, existía una creencia”.

    Le veo un problema a ese inicio. Dices que “en una ocasión”. Es decir, se interpreta que hablaron una sola vez, por eso al decir que es su amigo, queda extraño (y de ahí la interpretación de Manoli, muy probablemente). Yo lo trasladaría a partir del primer punto y seguido. Es decir:

    “En los momentos en que comenzaba mi carrera como escritor tuve la oportunidad de hablar con un antiguo compañero y amigo de la universidad, también interesado en el antiguo oficio de juntar palabras. Según me contó en una ocasión, existía una creencia…”

    De ese modo creo que queda más claro que ese amigo y compañero es con el que hablaba de escritura habitualmente, y que “en una ocasión” le relató la leyenda del lápiz.

    Espero servirte de ayuda en algo, y muchas gracias por haberte pasado por mi relato.

    Un abrazo.

    Escrito el 1 diciembre 2015 a las 14:00
  5. 5. Dispersus dice:

    Gracias a tod@s por vuestros comentarios. Es interesante ver opiniones tan diferentes ante un mismo texto. Es el caso de Manoli y L.M.Mateo. Donde una persona ve una cosa, otra ve casi la contraria. Esto es lo bonito de la Literatura, la imaginación sigue siendo libre.
    Gracias de nuevo, me habéis ayudado a encontrar algún otro pequeño fallo que todavía no ha salido a luz. Intentaré arreglarlo. 😉
    Saludos

    Escrito el 1 diciembre 2015 a las 23:10
  6. 6. Frida dice:

    Hola Dispersus, para comenzar he de darte las gracias por haberte pasado por mi relato.

    Para mí, el fallo más significativo que he visto al leer, ha sido el que ya te ha apuntado LM Mateo, el como ese sin acentuar, pero sacando eso, he disfrutado de la lectura. Desgraciadamente la triste realidad es que las editoriales son crueles, muchas veces se permite que cierta gente sin talento para las letras, personas a las que no mencionaré pero que muchas veces salen en nuestras pantallas, publiquen libros, dejando que personas con auténtico talento guarden en el cajón de por vida sus manuscritos.

    Creí que poseer un lápiz mágico, haría que el amigo de tu protagonista tuviese éxito, pero lo cierto es que el final me sorprendió, pues ni con magia fue posible.

    Un bonito relato, muy reflexivo. Te felicito.

    Escrito el 2 diciembre 2015 a las 11:04
  7. 7. beba dice:

    Hola, Dispersus:
    Felicitaciones por tu estilo claro, ordenado y elegante. La historia me agradó muchísimo. La metáfora del lápiz-editor es excelente y muy real; mis aspiraciones literarias no van más allá del “hobby”; pero se perciben los escollos para los que quieren llegar más lejos; ni qué decir, de los que quieren vivir de lo que escriben.
    Adelante

    Escrito el 2 diciembre 2015 a las 17:14
  8. 8. Lemo dice:

    Hola Dispersus

    Estoy en pleno reto Beba, y tu relato me gustó. A medida que iba avanzando veía como el relato se acababa y me daba la sensación que no podía ser, que había mucho mas que contar. Pero es lo que tiene estos relatos cortos, que te dejan con las ganas si son buenos.
    El único tema que no acabo de entender es la última frase: “Pero de ningún modo lamenté aquel momento único en el que decidí dedicar mi vida a la escritura.” respecto a la siguiente: ” tras varios reveses literarios que no supe digerir al considerar injustos, opté por abandonar aquel mundo. Encontré un trabajo que me permitió vivir con dignidad y olvidé mis sueños creativos.” Si olvidó sus sueños creativos cómo es que dedica su vida a la escritura ?

    Gracias por tu relato.

    Escrito el 3 diciembre 2015 a las 18:11
  9. 9. Dan D'Ors dice:

    Hola Dispersus, primero gracias por tus palabras en mi relato.
    En cuanto al tuyo, yo también me quedé con la sensación de que no eran tan amigos y luego me sorprendió que se pararan tanto rato… Después leyendo los comentarios lo he entendido mejor. También me sumo a lo que te ha dicho Lemo, la última frase no la termino de entender. Su decisión fue no dedicarse a la literatura y abandonar sus sueños. ¿O te refieres a cuando decidió que sí aunque luego abandonara?
    Por último, revisando con ojo he descubierto dos puntos que parecen haberse ausentado, uno después de “Existen” y otro al final de “anonimatos”.
    Un relato muy interesante, también me sumo a la sorpresa y agrado por la metáfora con el lápiz 😉
    ¡Nos leemos!

    Escrito el 4 diciembre 2015 a las 02:44
  10. 10. Dispersus dice:

    Gracias por los comentarios.
    Respecto a la última frase, intentaré explicar lo que intenté transmitir.
    Al escribir era consciente de que podía no encajar la última frase con el comienzo, pero yo lo escribí desde el punto de vista de alguien que intenta hacerse un hueco como escritor y, al verse rechazado, desiste de esa idea. Pero eso no significa que siga enamorado de la literatura, que siga escribiendo y que la literatura siga siendo su mayor ilusión en la vida.
    Quizá esa idea que he intentado explicar, no haya quedado muy clara y de ahí vuestros comentarios.
    Espero haber aclarado algo el tema.
    Gracias de nuevo por pasar por aquí.

    Saludos

    Escrito el 5 diciembre 2015 a las 11:32
  11. 11. Christian Joseph White dice:

    Te felicito por tu relato, compañero. Me ha gustado mucho. Tiene un significado simbólico muy profundo. El final chirriaba un poco pero ya has explicado la razón. Nos leemos, mis saludos 😉

    Escrito el 5 diciembre 2015 a las 17:59

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