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El lápiz mágico - por Zory

Tuvieron que pasar diecinueve largos años para que su sueño se hiciera realidad. Y es que para Cookie no había nada más importante; aquello era el anhelo más grande de su vida y todo lo que pensaba giraba en torno a ello. Muchos coinciden en que el primer paso es imaginarlo, todo lo demás vendrá después. Y es que dicen que lo creado fue primero pensado, así que si un consejo pudiera dar Cookie, este sería nunca subestimar el poder que la mente ejerce sobre todas las demás cosas.
Ella siempre sintió una atracción hacia lo sobrenatural, le encantaba sentarse frente al televisor a ver diariamente “El Gran Alfonso”, su maestro y tarotista preferido. Me contó en una oportunidad que justamente el día de su cumpleaños numero trece, él reveló un ritual mágico para convertir los sueños en realidad: Se trataba del “Mapa del Tesoro”: consistía en tomar una gran cartulina que serviría como una especie de lienzo; a continuación tenías que buscar en libros, revistas o periódicos, imágenes que consideraras poderosas, pudiera ser la foto de alguna ciudad en particular que siempre quisiste visitar, quizás el automóvil que soñaste conducir, el apartamento donde quieres vivir, en fin, cualquier cosa que desees y a continuación recortarlas y pegarlas. Lo próximo sería decorarlas con brillo, marcadores de colores y lo más importante, tu sagrado lápiz mágico con el que escribirás las peticiones mas hermosas y hasta locas de tu mente y alma. Cookie siempre me decía que lo que hacía especial y mágico a ese lápiz era el simple hecho que tu creyeras que lo fuera, pero eso sí, únicamente podría ser usado para crear peticiones. Así que puso manos a la obra y comenzó a revisar las cientos de revistas y recortes de periódico que tenia guardado en su cajón especial.
Como sucede muchas veces, las amistades de Cookie eran de lo más diversas, así que mientras algunos la aupaban a seguir construyendo su mapa del tesoro, otros no paraban de burlarse diciendo que era una tontería y que jamás haría su sueño realidad. Y cierto es que quizás sobradas razones existían para que pensara, si eso que tanto anhelaba sería muy cuesta arriba conseguirlo. Estaba en primer lugar la brecha generacional. Nacida en el año 1981, estaba obsesionada con la cultura de la década de los sesenta, transcurrían los años noventa así que aun era pequeña. Otra dificultad que veía para alcanzar su sueño, era que vivía en su pequeño país natal ubicado muy lejos del lugar al que quería llegar. El dinero era otro factor que la afectaba, contando solo con 13 años de edad, no tenia los ahorros suficientes para llevar a cabo con éxito su plan.
La vida fue pasando, los años transcurrieron y el amor y fanatismo de Cookie se mantuvieron y hasta crecieron con el tiempo. Muchos acontecimientos sucedieron en su vida como es lógico, sin embargo ella aun conservaba su hermoso mapa del tesoro, lleno de recortes que la hacían soñar y pensar que algún día todo se haría realidad.
Llegado el año 2012, “El Gran Alfonso” en el ultimo programa que transmitió antes de retirarse de las pantallas, regaló a sus fieles televidentes un ultimo y maravilloso ritual llamado “La Plana de las Cuarenta y Nueve Veces por Cuarenta y Nueve Días”. Solo debías buscar un cuaderno y con tu lápiz mágico escribir cuarenta y nueve veces por cuarenta y nueve días consecutivos tu deseo. Ella jamás perdió la fe y nuevamente puso manos a la obra por ese periodo de tiempo.
Llego el año 2013 y recién había terminado su plana cuando escucho por la radio que su amado e idolatrado grupo The Rolling Stones darían un concierto para celebrar su 51 aniversario, nada más y nada menos que en el mítico Hyde Park londinense. Para ella no había lugar en el mundo mas emblemático para verlos en vivo que aquel parque donde en 1969 le dijeron adiós a su líder fundador.
Finalmente Cookie voló desde Caracas, Venezuela hasta Londres. Era la primera vez que cruzaba el charco, estaba sola, pero sabía que sería el viaje más importante de su vida, aquel que le demostró a ella y a tantos otros, que si tienes un anhelo, un deseo, un sueño, puedes cumplirlo, no importa lo loco que pueda parecer, lo único que hace falta es, primero imaginarlo y después escribirlo cuarenta y nueve veces por cuarenta y nueve días consecutivos con tu lápiz mágico.

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4 comentarios

  1. 1. Manoli VF dice:

    Hola Zory, he leído tu relato y como me has pedido mi opinión te contaré que la historia la he visto un pelín atropellada. La narración es un poco de “fue allí, hizo eso y volvió…” se eluden muchos detalles, y tampoco se sabe qué pasó con el mapa del tesoro, en teoría iba deseando cosas de las que después no se habla, y al final sólo queda lo del grupo musical, pero tampoco esto es un deseo cumplido mágicamente puesto que es ella la que toma el avión directamente (no un regalo o una sorpresa) No se..
    La idea el lápiz como instrumento para remarcar el mapa de deseos sí es original y me ha gustado, pero puliría la historia y los detalles.
    Por lo demás es bastante amena y fácil de leer. Un saludo.

    Escrito el 30 noviembre 2015 a las 00:57
  2. 2. Fabián dice:

    Más que un relato me da la sensación de estar leyendo un resumen de una idea, como planteamiento base para desarrollarla poco a poco.
    El narrador lo acapara absolutamente todo, sin dejar que los personajes participen del relato.

    Creo que se extiende un pelín con las explicaciones de los rituales para hacer realidad los sueños, esas partes se hacen algo lentas y aburridas.

    Personalmente no me gusta cuando los narradores rompen la barrera que separa al lector del relato (la “cuarta dimensión” se le llama). Cuando explica las instrucciones en segunda persona, hablándole al lector directamente: “…tenías que…”, “…que consideraras…”, “…siempre quisiste …”, etc. A mi este tipo de cosas me saca bastante de la historia, es una cuestión de gustos personales eh, tampoco me lo tengas muy en cuenta.

    Coincido con Manoli, en que se mencionan cosas que luego quedan en el aire, y que no llevan a ninguna parte.

    Tampoco veo que el lápiz tenga la relevancia necesaria como para estar en el título, es un simple instrumento mas de todo ese ritual, que bien podría ser sustituido por cualquiera de los otros materiales: “La cartulina mágica” o “El cuaderno mágico”.
    Cuando algo se menciona en el título, ese algo tiene que tener cierta relevancia en el relato.

    Entiendo que el relato que quisiste dar con el relato, es que con esfuerzo, paciencia y ganas, todo es posible.

    “…aquel que le demostró a ella y a tantos otros, que si tienes un anhelo, un deseo, un sueño, puedes cumplirlo, no importa lo loco que pueda parecer, lo único que hace falta es, primero imaginarlo y después escribirlo cuarenta y nueve veces por cuarenta y nueve días consecutivos con tu lápiz mágico.“

    Primero imaginarlo, y luego romperse el lomo para conseguirlo, como lo habrá hecho la protagonista para poder comprar los pasajes del vuelo y los tickets del concierto.
    Es que puesto así como lo has dejado tu, se me hace algo “flower power” el mensaje, es bonito si, eso no lo negaré, pero no es real. Da a entender que, a pesar de que la protagonista ya es una mujer adulta, no ha madurado y sigue en sus trece.
    El mensaje debería de ser otro, el de luchar por los sueños y no quedarse sentado simplemente soñando.

    Esto lo podrías desarrollar más eligiendo un punto de su vida, y dejando que sea la propia protagonista la que cuente su historia al lector.

    Escrito el 1 diciembre 2015 a las 14:15
  3. 3. Wolfdux dice:

    Hola Zory.

    Coincido con Manoli y Fabián en que la historia puede dar más de sí. La idea es buena, pero la ejecución no lo ha sido tanto. Es cuestión de ver en que puedes mejorarlo, y ahora, sin el límite de palabras dejar volar la imaginación y darle más profundidad al relato.

    Un saludo.

    Escrito el 3 diciembre 2015 a las 18:56
  4. 4. Caciba dice:

    Tu relato es muy positivo, con un mensaje que todos deberíamos tener en cuenta. Yo creo que es el mejor uso que se puede dar a un lápiz: anotar los deseos 🙂 Has tenido que encerrar tu idea en 750 palabras y da para mucho más. Es muy difícil abreviar cuando lo que nos gustaría es desarrollar más el contenido. Así creo que me va a pasar a mí este mes. Te busco en el siguiente relato. ¡Nos vemos!
    Un saludo

    Escrito el 4 diciembre 2015 a las 00:37

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