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"El lápiz mágico" - por ELVI

Se me amontonan las palabras, hablo deprisa, no puedo respirar, apnea o disnea, no se.
Nunca supe como vivir, verseaba sobre la ambigüedad de las cosas, dando siempre resultados aburridos y mediocres.
¿Puede haber principios sin fin? Ahora entiendo que si, lo inacabado sigue siendo una idea en si misma.
Soy un pesimista errante de esos sin futuro que se tiran y andan las calles, sin llegar a ser vagabundo. El presente es mi hábitat, todas las mañanas me entrega su mano fría, prometiéndome regresar.
Ahora me encuentro en una plaza cualquiera, rodeada de árboles. Oigo el sonido de su fuente canturreandome en los oídos.
Los pájaros con sus trinos empiezan a despertar, recordándome mi infancia en el campo. Inhalo aire profundamente para traer a ese niño que aun duerme dentro de mi, pero persiste el hombre amargado que soy.
Las calles están vacías, desérticas, convergiendo en laberintos sin sentido. No hay trafico, ni gatos, personas o perros.
Tengo hambre y comienzo a andar con los brazos cruzados hacia atrás, mirando al suelo gris que me reconoce de tantas veces haber visto mis ojos, de tantos pasos dados sin sentido a la nada.
Las casas con sus luces apagadas y sus persianas a medio echar, me asfixian.
Miro hacia arriba, los edificios de ambos lados de la acera se unen sin apenas dejarme ver el cielo, en una encerrona total, carente de sentido.
Decido correr en un desvanecido intento de no ser, cayendo exhausto. Hasta que despierto, sintiendo el olor de mi sudor mezclado con el asfalto.
Estoy rodeado no se si de basura u hojarasca. Acerco mis manos llenando los bolsillos de esa materia inerte, para obtener algo de calor que me calme. Tengo que subsanar mis carencias vaciando lo recogido, en una selección de supervivencia y encuentro: Un papel arrugado que no pone nada, una goma del pelo agarrada a una horquilla, una cajetilla de tabaco con una colilla apagada y… ¿Un lápiz?
No encuentro significado a este jeroglífico de objetos.
Me pongo en pie, cojo el lápiz devolviéndolo otra vez al bolsillo. Aliso el papel y como si de una bandera se tratara lo agito para continuación guardarlo.
El resto de las cosas las cubro con tierra. Mientras que reinicio mi camino, pienso en las personas que las poseyeron.
Empieza a amanecer, la claridad se asoma entre la oscuridad de la noche.
La gente comienza su día, me saludan al pasar, hasta incluso a veces me sonríen.
Es extraño, pero me encuentro muy bien , quizás sea el preámbulo de una catarsis existencial , me invade el miedo.
Los nervios me hacen hurgar en los bolsillos y el lápiz en silencio me escribe: ¡Estas vivo!
Algo invade mi interior haciéndome pensar en un pasado de amarga oscuridad y tristes sentimientos.
Accidentalmente a la par, recibo el impacto de un niño que tropieza contra mi pecho.
Recuerdo la goma del pelo,era de mi madre, casi huelo esa imagen inexistente. Recuerdo cuando me abandono, la colilla de cigarro apagada del hombre prematuro que fui.
Me recuerdo cuando era, cuando deje de ser.
El niño me sonríe y el lápiz vuelve a escribir: ¡ESTÁS VIVO!
Tiro el papel que inexplicablemente sigue en blanco. Corro, mientras que con todas mis fuerzas agarro el lápiz con la esperanza de escribir un futuro.

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5 comentarios

  1. 1. Frida dice:

    Hola ELVI. Fuí una de tus comentaristas. Me encantó tu relato, desde el principio me atrapó. Conseguiste crear una atmósfera densa, un protagonista asomado a la locura, perdido en este vasto mundo, condenado a un aciago futuro. Creo que ya te lo comenté, pero la alusión de un cigarrillo usado y aplastado, para compararlo con el protagonista, me pareció increíble, muy buena. El final, no puede ser mejor, con ese hombre corriendo a lo loco por la calle, decidido a crearse un futuro, una esperanza, cuando hace no mucho no tenía nada, la reflexión a la que nos invitas, sobre lo que somos, sobre la nada que nos invade el alma; somos arcilla que nosotros mismos moldeamos como deseamos o como la vida nos permite, es de lo mejor. Recibe un aplauso de mi parte, pues tu relato me pareció magnánimo.

    Escrito el 30 noviembre 2015 a las 19:41
  2. 2. Manoli VF dice:

    Reconozco que al principio se me ha hecho un poco espeso el relato, monótono y algo insustancial, no obstante el estado del ánimo del personaje y su dejadez están bien recreados. Después ese soplo de aire fresco que surge a través del lápiz le da otro matiz al texto, pero en cualquier caso me ha parecido un argumento un poco limitado.

    Saludos.

    Escrito el 1 diciembre 2015 a las 19:16
  3. 3. Elvi dice:

    Las palabras no solo se leen, desde pequeña me enseñaron los comentarios de texto.
    La poesía existe en lo relatos.
    UN BESO LLENO DE PAZ A TODOS.

    Escrito el 1 diciembre 2015 a las 20:43
  4. 4. Robert w. Peterson dice:

    Relajate Elvi que te veo muy alterado/a. ¿Es tu carta de presentación? Cuéntame más, quiero saberlo.

    Bromas al margen:

    En la parte formal del texto te faltan algunas tildes; debes cuidar los párrafos, el relato está escrito como si lanzases pensamientos al aire y eso no ayuda al lector; «es lo que buscaba» me dirás, pero no, no voy a creerte. Arma párrafos más extensos que aborden una misma idea, eso nos sirve para crear imágenes mentales más sólidas. Tu estilo es bueno, formas bien las oraciones, el uso del vocabulario está a la altura y hay melodía en la trama.

    Otro error que consideraría. Ese tipo de relato reflexivo es fácil ¿sabes? Lo complicado es montar una trama con sus escenarios, cosas tangibles y no esa sensación de inconsistencia. Te animo a meditar sobre ello.

    Saludos.

    Escrito el 1 diciembre 2015 a las 21:44
  5. 5. CARMELILLA dice:

    Hola Elvi, hay párrafos de tu texto que me cuestan entender y que he tenido que leer un par de veces, esto en otro contexto me hubiera dirigido directamente a dejar de leerlo. Me ha faltado también algo más que me hubiera mantenido la atención inicial hasta el final sin tener que repetir la lectura. Me gusta tu relato a pesar de la dificultad que te comento. Seguimos en ellos. Saluditos.

    Escrito el 3 diciembre 2015 a las 16:58

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