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DREADWOOD - por Lidia Blanca

DREADWOOD
Esto se está poniendo feo, pensé. Ray, el líder del grupo de trekking del que Marcia y yo formamos parte, ha decidido cambiar el trayecto de ese día a último momento. Lo planeado era escalar la colina de Cresthill para regresar al atardecer poco cansados. Sin embargo, apoya el mapa sobre el capó de la camioneta y nos anuncia que ya que hace mucho calor para trepar atravesaremos el bosque Dreadwood, un lugar poco transitado y bastante virgen. A todos les parece buena idea. A mí no. Este bosque tiene mala fama; varias personas desaparecieron en los últimos años, otras volvieron presa de alucinaciones auditivas y visuales que nunca las abandonaron. No les digo nada a los demás pero le pido a Marcia que no vayamos. Se ríe de mis temores diciendo que son infundados, sólo leyendas, que no nos pasará nada mientras nos mantengamos juntos. Y somos treinta.
Salimos a las 9 de la mañana. Como de costumbre y por cábala, nosotros caminamos atrás del resto. Al principio vamos por un sendero tranquilo y dibujado por el tránsito humano. Pero pronto, se convierte en un bosque cerrado, alto hasta donde se pierde la vista, de sequoias, fresnos, encinos, eucaliptos impresionantes, olmos, arces, algarrobos y muchas, muchas lianas y tierra húmeda. Imponente. Pero eso no me tranquiliza, al contrario. La luz del sol entra pidiendo permiso. La trama verde y marrón se le opone con tenacidad porque es un bosque sombroso e impenetrable, protegido de podadores y madereras.
Son las 12 y el día parece un anochecer. Marcia camina decidida delante. Pero me doy cuenta de que, de a poco, voy quedando rezagado y jadeante. Demasiado cansado para tres horas de caminata y esto no es normal. Me apoyo contra un algarrobo deslizándome hasta quedar sentado en la tierra húmeda. Parece que mis piernas estuvieran atravesadas por alfileres.
Me viene a la mente mi abuelo materno cuyo padre era guardabosques en Italia. No sé nada más. Todo es un espacio en blanco, un vacío de conjeturas y ciegas suposiciones sobre mi familia de origen. Por qué me habrá quedado grabado eso, lo del bisabuelo, no lo sé, pero ahora lo recuerdo.
¡Maldición! Me quedé dormido. ¿Cómo puede ser que Marcia no haya venido a buscarme? Todo es oscuridad y me olvidé la linterna. Como diría un amigo ¡qué pinche! Error fatal para un senderista. Senderista estúpido.
Tanteo con las manos y percibo rugosidades, plantas, cuerdas que cuelgan, siento una bruma espesa que humedece mi cara, piso hojas secas, quebradizas, escucho chillidos agudos y lejanos probablemente de monos, arriba en la copa de los árboles. Me da la vaga impresión de que alguien acecha. Comienzo a temblar y no es de frio, tengo miedo, mucho miedo y recuerdo algo más de mi bisabuelo: murió en el bosque, de un escopetazo.
Escucho por fin que mi mujer me llama pero la voz se aleja en vez de acercarse. Sin embargo en la negrura toma mi mano y me siento a salvo. También muy idiota por ser tan aprensivo, sudar y tener fantasías que nublan mi entendimiento. Soy un débil. Ella es mucho más fuerte que yo, siempre. Ahora todo está bien. Como a un ciego dócil, me lleva con seguridad si bien parece haber olvidado igualmente su linterna. Tiene sus fallas, también. Una gran nube cubrió todo, me dice. No es usual pero pasa. Sé por dónde voy. Confío en ella. Sugiere que descansemos un momento y como un bebé me quedo dormido entre sus brazos.
Cuando despierto la luz ha vuelto, como después de un apagón. La nube desapareció totalmente y también Marcia.
Hace mucho, mucho, demasiado que estoy en el bosque: busqué senderos, marcas, señales. Nada. Siempre perdido, siempre esperando. Camino todo el día, me alimento de hojas y setas, chupo la humedad de los troncos, mi ropa está rasgada, y en el pequeño espejo que tengo noto que la barba me llega hasta el pecho y soy un saco de huesos. No saldré más de acá, estoy seguro.
Se cumplió la peor de mis pesadillas. He muerto para el mundo.

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5 comentarios

  1. 1. beba dice:

    Hola, Dreadwood:
    Buen relato de suspenso; el desenlace, esperable, ya que todas las señales parecen sobrenaturales. Está bien escrito, aunque el espejo tiene poco protagonismo, y nadie miente, al parecer; a menos que sea Marcia, ya fantasma. Pulcro el manejo gramatical. Ritmo adecuado.
    Adelante. Buenos augurios.

    Escrito el 18 diciembre 2015 a las 00:26
  2. 2. Cryssta dice:

    Hola Lidia, el relato me ha gustado aunque a mí me ha resultado un poco pesado de leer, tal vez porque las frases y párrafos son largos. Te diré algunas cosas que creo se pueden mejorar:

    – “en el último momento” en vez de “a último momento”
    – “virgen” sobra el “bastante” o algo es virgen o no lo es
    – “dice que no nos pasará nada”
    – no entiendo la expresión “por cábala”
    – “Pronto se convierte en un bosque cerrado” sin el “pero”
    – para mí sobraría enumerar las clases de árboles que hay, es más, al no entender de botánica me entran dudas de si todas esas variedades pueden estar en el mismo entorno
    – los números en letra
    – “Me doy cuenta de que poco a poco”
    – Faltan las interrogaciones en la pregunta
    – “en la copa de los árboles” sobra el “arriba”, ya se sabe que es ahí donde están las copas
    – “frío”
    – quedaría mejor acortar las frases

    Espero haberte ayudado. Un abrazo.

    FELIZ 2016

    Escrito el 18 diciembre 2015 a las 12:30
  3. 3. Diego Manresa Bilbao dice:

    Lidia,
    Un interesante retrato, aunque el final me ha parecido un poco esperable… Aun asi, tiene cosas muy buenas!!!
    Nos leemos!

    Escrito el 19 diciembre 2015 a las 19:12
  4. Hola Lidia,
    De acuerdo con las indicaciones que te hace Cryssta, algunas que yo he encontrado y que espero te puedan ayudar son las siguientes:

    – Esto se está poniendo feo, pensé. Igual como es algo que está pensando el protagonista estaría bien ponerlo entrecomillado.

    Quizás yo pondría alguna coma más en la explicación del motivo, en la frase siguiente porque me resulta muy larga:
    – Sin embargo, apoya el mapa sobre el capó de la camioneta y nos anuncia que, ya que hace mucho calor para trepar, atravesaremos el bosque Dreadwood, un lugar poco transitado y bastante virgen.

    En la siguiente frase tengo la duda de si es presa en singular o presas en plural porque estás hablando de varias personas:
    – otras volvieron presa de alucinaciones auditivas y visuales que nunca las abandonaron.

    Algunas de las descripciones me ha parecido que aportan poco y distraen la atención de la trama, como por ejemplo esa descripción un tanto exhaustiva de los tipos de árboles del bosque y otra cosa que igual me chirriaba e que hablabas de un bosque y después de chillidos de monos…no sé donde estás situando el relato pero me he quedado con la referencia de Italia y me ha dejado descolocada. Después he visto que era el bisabuelo, en todo caso yo te aconsejaría revisarlo, igual pueden ser otros animales.

    Creo que revisando un poco más estas cosillas te quedaría un texto más fácil de leer.
    Un saludo

    Escrito el 20 diciembre 2015 a las 12:33
  5. 5. Ismael Tomas Perez dice:

    Hola Lidia:
    Disculpa la demora, pues estos días de fiestas no he podido conectarme.
    Referente a tu escrito, soy de la opinión de Cryssta y de Conxita Casamitjana. Ademas, tengo que añadir, que para mi gusto deberías separar mas las frases, te falta alguna coma y sobre todo utilizar el punto y aparte. Eso da mas fluidez al texto, ya que en algún momento se hace espeso.
    Felicidades y espero haberte ayudado.

    Escrito el 4 enero 2016 a las 20:16

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