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Monse - por Sara Sarutte
Monse espera en la fila para subir al ascensor, hoy es lunes y empezó la semana cansada, de lo contrario hubiera subido por las escaleras. Primero al piso dieciocho a llevar facturas, luego al dieciséis a buscar papelerío y por último, al ocho, a llevar un reclamo. Es un recorrido corto el de esa mañana.
No hay mucha gente en el hospital, es Enero y la mayoría está de licencia,tampoco hay estudiantes,hace calor y se oye silencio.
En el piso quince se bajó un señor y le dijo “hasta luego, buena suerte”, Monse respondió con una balbuceo, sin detenerse en las palabras, raras, para ser un saludo de alguien con quien no había entablado dialogo. Pero ella no notó nada extraño, porque Monse no suele notar cosas.
Monse trabaja en el hospital desde hace tantos años que nadie sabe cuántos, se sabe de memoria lo que hay en cada piso, cada clínica, cada consultorio, también sabe cuáles son los pisos abandonados, cuánto hace que lo están y que había en su época de esplendor. Lo ha visto deteriorarse, arreglarse y volver a caer. Ha visto muertes, nacimientos, abortos, operaciones, trasplantes, una vez vio como resucitaban a un paciente en el pasillo.Todo lo observa en silencio,porque Monse no tiene opiniones,apenas tiene un pensamiento que le permite sobrevivir.Su trabajo le ha facilitado el gran conocimiento que tiene del edificio, le gusta bromear diciendo que es el cartero del hospital. Este ha sido su primer y único empleo, su madre también había trabajado allí, era enfermera, y Monse su única hija. Algunos dicen que su verdadera madre la dejó en el hospital enseguida que nació y la enfermera se la llevó a su casa, otros dicen que creció en el hospital siempre esperando que su madre volviera a buscarla y la enfermera le dio la tarea de mensajera que aún realiza.
Muchas cosas se dicen de Monse y pocas se saben.
Después que murió la enfermera, Monse quedó más apagada y ausente que lo que siempre fue, dando vueltas por el hospital hasta la hora de irse a algún lugar donde vive y pasa la noche, nadie sabe donde vive Monse.
Pero este lunes fue diferente, luego de que el señor se bajó hubo un corte de corriente en toda la ciudad y el ascensor se detuvo por unos segundos en que tardo en prenderse el generador eléctrico. Al volver a funcionar Monse no se dio cuenta, se había asustado y cuando la puerta se abrió automáticamente para que desalojen los cubículos ella no lo notó. Monse se quedó sentada en el suelo, ya sin miedo ni decisión, solamente descansando.
Pasaron muchas horas cuando Monse levantó la vista del suelo y abrió la puerta con una mano, no se animó a bajar. Su primera reacción fue darle la espalda a lo que vio, acto que no le sirvió de nada ya que el ascensor estaba recubierto por un gran espejo que seguía mostrando eso. Eso, es un gran bosque, muchos árboles, verdes, marrones y medio amarillos, mucho pasto, verde muy verde y claro. Monse sonríe, ese lugar es hermoso, ella no puede darse cuenta, pero es un paraíso lo que está viendo, es un lugar maravilloso y soleado.
Monse se anima y camina, y va sonriendo, y a medida que se mete en el bosque va teniendo ideas y pensamientos, va entendiendo y va dejando de ser.
El hospital estuvo sin luz veinte horas, inmediatamente del corte se decidió anular los ascensores para no gastar energía de más. El operario que registro las cámaras declaró llorando que no vio a Monse, que cuando decidió clausurar los ascensores no vio que ella estaba adentro, que él la apreciaba mucho, que nunca se iba a perdonar su muerte.
Hola, es muy lindo el relato, aunque un poco triste. Me gustó mucho la caracterización del personaje de Monse. A simple vista (no tengo mucho tiempo ahora), te puedo hacer un par de observaciones:
Cuidado con los tiempos verbales: estás mezclando presente y pasado, lo que hace que el relato pierda unidad. Lo que te recomiendo es que elijas uno de los dos y lo mantengas a lo largo de todo el texto. Por ejemplo:
“Monse se animó y caminó, iba sonriendo, y a medida que se metía en el bosque iba teniendo ideas y pensamientos, iba entendiendo e iba dejando de ser.
El hospital estuvo sin luz veinte horas, inmediatamente del corte se decidió anular los ascensores para no gastar energía de más.”
Puntuación: hay muchas comas, muchas de las cuales no corresponden. La acción no es muy vertiginosa, por lo que sí se pueden usar oraciones largas, pero con algunas condiciones: que varíes el orden incluyendo oraciones breves donde la sintaxis lo permita y que uses punto seguido, punto aparte y punto y coma para hacer pausas algo más largas. Te pongo un ejemplo:
“No hay mucha gente en el hospital; es enero y la mayoría está de licencia. Tampoco hay estudiantes. Hace calor y se oye el silencio.”
El hombre del ascensor: crea un misterio sin resolver, que no estaría mal si se dieran más elementos que lo relacionaran con el resto del texto. Así como está queda medio descolocado porque no hay ninguna justificación narrativa para su aparición.
Espero que esto te sirva; estoy segura de que aquell@s de nuestros colegas que te comenten después de mí te van a marcar otros detalles a tener en cuenta.
Gracias por comentar en mi relato!!
No es “varíes el orden”, sino “varíes el ritmo”, el ritmo!! No sé qué pasó ahí jajajaja
Hola Sara, me gustó su relato. Triste, tierno, trágico. Tiene un personaje bien detallado, uno de esos personajes que crean ese rapport tan importante para poder seguir una lectura.
Ya Denise le hizo muy buenas observaciones que contribuyen a mejorar el texto.
He notado que hay comas sin espacios ejemplo: “licencia,tampoco”
En cuanto al contenido, pese a entenderlo, siento que puede ser más claro, sobre todo en los párrafos donde se describen los sucesos de la muerte.
Felicidades, nos seguimos leyendo!
Entrañable y dramático a la vez, de esos dramas que no hacen ruido y se cuelan en lo cotidiano…logras transmitirlo muy bien. Lo único que sí te recomiendo es vigilar los tiempos verbales que causan un poco de confusión, así como el final, lo releí varias veces, cuando cuentas lo del ascensor.
Escribes bien y enganchas al lector. Enhorabuena.
Nos seguimos leyendo ( te invito a leer el 38)
Felices fiestas.
Hola Sara, primero, muchísimas gracias por valorar mi cuento, te lo agradezco mucho y tengo en cuenta tus consejos.
Me ha gustado mucho tu cuento. El personaje de Monse me parece muy bien estructurado y bien hecho. Es misterioso y a la vez me da la sensación de ser una persona tierna. La historia me ha tenido enganchado desde el primer momento y el final no me lo esperaba en absoluto, es más, he tenido que leerlo varias veces para creérmelo de verdad.
El único fallo que puedo encontrar es en el uso de los tiempos verbales, pero aun así, es un gran relato y muy bueno, un abrazo!
Hola Sara Sarutte, ante todo gracias por pasar por mi relato y estoy tomando nota de los consejos que me diste. 😉
Tu relato me ha gustado. El final un poco triste pero a mi me gustan los finales que no siempre son tan felices, así es más real! Felicidades y sigue así. Saludos
Hola sara: disculpa que no haya podido comentar antes tu relato; con esto de las fiestas, estoy algo liado.
Lo primero de todo felicitarte por el hecho de participar: pues eso para mí ya es un logro.
debes de hacer más incapié en las puntuaciones; usa los dos puntos para hacer relaciones de cosas. Ejemplo: “Monse trabaja en el hospital desde hace tantos años, que nadie sabe cuantos. Se sabe de memoria lo que hay en cada piso: cada clínica,cada consultorio…etc”
tomate tu tiempo a la hora de revisar; revisa palabras que se repitan y sustituyelas por otros sinonímos. Hazte un pequeño esquema, en el que tengas claro: nudo, enlace y desenlace; a mí me suele funcionar. Después de revisar el texto varias veces, dejalo descansar un tiempo y vuelve a revisarlo.
Bueno, no me enrollo más. que tengas unas entrañables navidades:¡Feliz 2016!
Un fuerta abrazo
Primero quiero agradecerte el haber leído mi relato, tomo muy en cuenta este blog y en especial a quienes se toman tiempo para leerme.
Bonito relato, buen final, los detalles de los tiempos verbales que te marcaron anteriormente sería lo único que empañó el relato. Todos estamos creciendo un poco cada día y espero que tomes nota para que sigas adelante. Felicidades vas muy bien. Saludos y felices fiestas.
El relato me llega al corazón porque me hiciste sentir el personaje, preocuparme por él, describiste su entorno lúgubre y lo contaste con el tono correcto.
Coincido con Denise que el hombre del ascensor me mete confusión, como si fuera una pista falsa.
Al final me parece correcto decir´´inmediatamente después del corte´´Cuando nombras las cámaras deberías aclarar que son de vigilancia.
Me encantaría que el cuento continuara y se convirtiera en algo fantástico.Pero no lo tomes como una critica, sino como una opinión del potencial que tiene la historia.
Te felicito, chau.