Cookie MonsterEsta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las condiciones de uso.

Do you speak english?

¿If you prefer, you can visit the Literautas site in english?

Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

<< Volver a la lista de textos

Lo que el arte necesita para ser - por Catalina

Se acercaba el cumpleaños de su amiga y María, como de costumbre, hacía días que pensaba en un buen regalo para ella. Después de descartar ideas una tras otra, solucionó en pintar un cuadro y regalárselo. Pero he aquí otro dilema ¿que pintar? Podía hacer un retrato, pero no era lo suficientemente buena para hacerlo; ya que a su amiga le gustaba leer, podría hacer algo que representase su género favorito, pero no se le ocurría forma de pintar eso ¡qué difícil era elegir!

Finalmente, se decidió por pintar un paisaje, ahora otro problema ¿Qué paisaje sería? Podía hacer una escena primaveral, llena de colores; un glaciar o algo similar, en colores blancos y celestes; o bien podría ser un paisaje otoñal, en tonos rojos y marrones. Se decidió por este último. Reunió sus materiales y se propuso a pintar.

Con pincel en mano, sentada frente al lienzo, la joven artista pensaba y pensaba, y seguía pensando. Estuvo unas cuatro largas horas buscando algo bueno que sea digno de regalarle a su amiga. No podía hacer un cuadro cualquiera y entregárselo, debía estar a su altura. No había notado que ya era de noche y, tiempo más tarde, se quedó dormida sobre el lienzo casi en blanco. Cuando despertó, no estaba enfrente a su escritorio de algarrobo. Lejos de ello, se encontró en medio de un bosque. Camino de un lugar a otro, trato de averiguar cómo había llegado hasta allí. Se pellizcó a sí misma para corroborar que aquello no era un sueño, soltó un pequeño alarido, no por el dolor sino por haber tomado conciencia de que ese lugar, sea cual fuese, era real.

− ¿Por qué te lastimas sola? ¿Eres idiota? – dijo una voz

− ¿Quién dijo eso?

− es mi hermano, no le hagas caso – le respondió una joven que estaba sentada bajo un árbol no lejos de allí. Tenía el cabello color rojo intenso, era de baja estatura y se notaba en su rostro que era una persona tranquila.

− ¿sabes dónde estamos?

La joven quedo pensativa unos segundos y contestó

− tu deberías saberlo, es cosa tuya que estemos aquí – esa respuesta la confundió aún mas

− me llamo María, un gusto ¿tu nombre?

− sabemos quién eres – dijo la voz – pero eres tan idiota que no sabes quienes somos

− nos presentaré – continuo la joven – nosotros somos espejos de tu arte, al igual que todo este lugar. Yo soy Habilidad y mi hermano mayor es Inspiración. Cada árbol aquí representa una pintura que hayas hecho, el tamaño del tronco está relacionado con que tan satisfecha estabas con lo que hacías y cada hoja en ellos aparece cuando tienes una duda o dificultad.

− no entiendo, ¿Qué hago aquí? ¿Y por qué tu hermano se esconde?

− estoy frente a ti idiota, eres tú la que no quiere verme
Habilidad se armó de paciencia y explicó:

− esto es sencillo, te trajimos aquí porque hace tiempo que no haces nada. Por si no lo notaste, la mayoría de los arboles están perdiendo color. Esto se debe a que estas dudando demasiado de nosotros y por ende, de ti misma. Además es preocupante que no puedas ver a mi hermano aún estando en frente tuyo, será cuestión de tiempo para que no puedas verme a mí tampoco. Mira, estamos aquí donde los árboles son grandes y hermosos, es porque son los más viejos pero si caminas hacia el norte veras de que estoy hablando. Ve, no te queda mucho tiempo aquí

− presta atención – María sintió una mano sobre su hombro pero no vio quien hablaba – ve a dar una vuelta, relájate y piensa en lo que dijo mi hermana, puede que solo sea un espejo pero no quiero desaparecer

Así hizo, a medida que caminaba, notó que los grandes árboles se transformaban poco a poco en pequeños arbustos. Llegó a un punto en donde no había nada, era un pastizal en el que lo único que había era un pequeño y débil arbusto. Se acercó y al tocarlo se vio a si misma sentada frente a un lienzo en blanco, justo como había estado hace unas horas. De repente se sintió triste, una lágrima cayó sobre su mejilla y mojó al arbusto.

Se despertó en su estudio y comenzó a pintar el cuadro para su amiga. No lo pensó, solo lo hizo. Era un hermoso bosque, lleno de árboles de todo tipo y, en una esquina, un pequeño pero bello arbusto.

¿Te ha gustado esta entrada? Recibe en tu correo los nuevos comentarios que se publiquen.

4 comentarios

  1. 1. Saldivia dice:

    Hola Catalina, saludos. Me parece buena idea la personificación de la habilidad y la inspiración, un poco en la tradición de las musas. La inspiración (curioso que sea hombre, suele asociarse más con mujer por lo veleidosa) resulta antipática en tu relato, y la habilidad, muy comprensiva. Creo que el hecho de que inspiración diga “idiota” tan seguido es innecesario, la inspiración seguramente manejará muchos sinónimos. Me gusta el cierre de tu historia, si bien por la mitad me desenganché un poco. me quedo con la originalidad del tema y su tratamiento. Éxitos!

    Escrito el 17 diciembre 2015 a las 17:46
  2. 2. Majose dice:

    Hola! El inicio de la lectura tiene mucha fluidez, te deslizas por el texto con suavidad. El tema muy bueno. Por decirte algo la forma verbal “sea en lugar de fuera” supongo que las prisas. Lo que a mi particularmente me ha impactado en la lectura es la palabra “idiota”, es muy brusca, fuera del ambiente que consigues crear en la narración.
    Felicidades

    Escrito el 18 diciembre 2015 a las 18:34
  3. 3. MM Ariel dice:

    Hola Catalina,

    Interesante historia. Me gustan esas que tienen imaginación y algo diferente que decir, como la tuya. Sigue adelante.
    Encontré que faltan algunas mayúsculas al inicio de los diálogos; tildes como solucionó y estás, y puntos antes de mayúscula. Por lo demás todo me pareció bien. Felices fiestas.

    Escrito el 21 diciembre 2015 a las 19:22
  4. 4. Cryssta dice:

    Hola Catalina, tu relato me ha gustado mucho, como no tengo mucho tiempo paso a decirte los mejorables que yo he encontrado:

    – “¿qué pintar?”
    – repasa los guiones del diálogo, hay una entrada en el blog donde se explica bien cómo ponerlos
    – “Pincel en mano y sentada frente al lienzo” la otra opción sería “Con el pincel en la mano”
    – “buscando algo bueno que fuera digno”
    – has puesto dos negaciones muy seguidas: “No podía hacer” y “No había notado” se arreglaría poniendo un punto y aparte tras “altura”, mejor si además eliminas una de las negaciones
    – “no estaba frente a su escritorio”
    – “Caminó”
    – “trató”
    – “ese lugar, sea cual fuere, era real”
    – elimina “no lejos de allí” porque ese “allí” no se sabe a dónde se refiere
    – “quedó”
    – “Tú deberías”
    – “más” lleva tilde porque indica cantidad
    – “quiénes somos”
    – “continuó”
    – “relacionado con lo satisfecha que estabas con lo que hacías”
    – “árboles”
    – “estás”
    – “será cuestión de tiempo que no puedas verme a mí tampoco”
    – “verás de qué estoy hablando”
    – “no vió quién hablaba”
    – “justo como había estado hacía unas horas”

    Espero haberte ayudado. Un abrazo

    Escrito el 22 diciembre 2015 a las 20:47

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.