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el último beso - por Keren Johana

Era tarde ya, la noche ya quería dar paso al día, los rayos plateados de la luna cada vez eran más difusos. En una casucha mal trecha y abandonada, ella estaba de pie, con la esperanza de que el sol durmiese hoy mucho mas, que el tiempo se detuviera y no volviese a andar. Mientras esperaba retorcía con sus manos una punta de su vestido, aquel vestido que tanto le gustaba a él. Que caía suavemente por su cuerpo, ciñéndose a aquella perfecta figura, y del cual se deshacían con mucha facilidad cuando la lujuria y la pasión alcanzaban sus puntos máximos.
Él llego corriendo, agitado y sudoroso, pero aun así, ella se lanzo en sus brazos apenas lo vio, se aferro a él cómo se aferra un moribundo a su último aliento de vida. Enterró su rostro en su camisa, intentado absorber todo su aroma y que jamás pudiese alguien quitárselo.
Él la abrazo, y besó su cabeza, mientras ella lloraba silenciosa en sus brazos, las palabras en esos momentos se dedicaron a observar, en aquellos instantes ellas no tenían nada que hacer ahí.
Los dos amantes se quedaron así por un instante, intentando pelear con el tiempo que se había hecho su enemigo.
Un te amo susurrado de los labios de él fue a dar al alma de ella, haciendo que esta se agitara con mayor violencia, queriendo escapar y vivir eternamente bajo el refugio de aquellas dos dulces y mágicas palabras.
Aun así ella fue incapaz de pronunciar respuesta alguna, solo sollozos y gimoteos, mientras él seguía susurrándole al oído cuanto la amaba. Siendo cada te amo, un latigazo que le perforaba hasta las entrañas y una dulce melodía en una noche de tormenta.
Él tomó su rostro entre sus manos, sus miradas se encontraron, y se podría decir que el tiempo se detuvo en ese frágil segundo y que la tierra tembló, pero ellos de eso no se enteraron. Sus ojos grises se toparon con esos ojos azules inundados hasta más no poder de lágrimas, esos ojos azules que tanto le habían confesado en miradas traviesas cuanto lo amaba, hoy le pedían perdón, le pedían que la entendiese, que era su deber.
– Podemos irnos juntos, ahora, nadie nunca te encontraría. – le dijo él mientras le daba pequeños besos aterciopelados en el rostro, sin tocar sus labios, aunque se muriese por devorarlos.
– Sabes que no puedo.- aunque le costó la vida decir aquello, sabía que era lo correcto, demasiado con haber permitido que esto sucediera, como para arriesgar más.
– ¿no me amas?
– Claro que te amo, pero desde un principio sabias que esto no podía ser. Yo tengo dueño.
– Amor mío, tu puedes ser libre si quieres.
– No, no puedo, esta la vida de mis padres en riesgo, y eso aunque me duela, vale más que cualquier cosa que yo pudiese sentir. – soltó aquellas palabras que tanto la quemaban por dentro, pero ahora que las había dicho, no dejaban de dañarla. Él no dijo nada, la soltó y se dio la espalada.
Los dos sabían que lo que ellos sentían nunca debió de pasar, pero pasó, aunque ella estuviese comprometida o más bien vendida. Era un pacto que no se podría cancelar, su novio o más bien dueño, le había prestado una cuantiosa cantidad de dinero a los padres de ella cuando estos quedaron en la ruina por unos malos negocios. Pero la vida no les jugo en favor, y ahora con una gran deuda y sin dinero, la única forma de pago que se encontró viable fue la mano y el cuerpo entero de su única hija. Si aquello no se hacía, la sangre de los deudores mancharían las calles.
– ¿Entonces… para que me pediste que viniera?- la rabia y la tristeza se debatían en cada palabra que él pronunciaba.
– Sé que no debería pedirte esto.- se tragó su orgullo, quiso olvidar al mundo, y solo concentrarse en el hombre que tenía en frente por el cual su corazón daba cada latido. – solo quiero pedirte una última noche, una sola, un último beso, una última caricia, mañana me casaré y me tendré que ir muy lejos y no podré volver a verte. Entonces me tocara dar todo lo que a ti te doy a otro hombre, excepto mi corazón, ese si será tuyo por siempre.

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8 comentarios

  1. 1. Gama dice:

    Me parece una historias bien lograda,tranmite muy bien ese deseo erótico que sienten dos personasal encontrarse en la noche, aunque no es del tipo de relatos que acostumbro leer me he encontrado con que es agradable tu lectura, sin embargo te recomiendo que lo revises una vez más ya que encontré algunas faltas ortográfica.
    En la oración “…las palabras en esos momentos se dedicaron a observar, en aquellos instantes ellas no tenían nada que hacer ahí.” Considero que se repiten palabras y podrías darle un poco mnás de estilo.
    Espero mi comentario te sea de ayuda.
    Sigue escribiendo!

    Escrito el 19 enero 2016 a las 16:51
  2. 2. Yina dice:

    Es una historia que puede reescribirse para lograr la economía de palabras y eso que se pide mucho en escritura creativa: mostrar antes que decir. Me parece que el inicio necesita un poco más de fuerza para poder convencer al lector de seguir leyendo.

    Me gustó mucho esto: “se aferro a él cómo se aferra un moribundo a su último aliento de vida”, pero debes cuidar las tildes en esos verbos en pasado: se aferró, se lanzó, llegó, etc. Si ya escribiste “se aferró” hubieras usado un sinónimo en “como se aferra” para no repetir.

    Escrito el 19 enero 2016 a las 17:22
  3. 3. Beth dice:

    Muy interesante, podrían hacerse un par de arreglos como ya se ha mencionado en los dos comentarios anteriores, pero esta muy bien. Me ha gustado mucho ya que a mi me ha resultado muy realista la emotividad en la pareja de enamorados.

    Escrito el 25 enero 2016 a las 17:55
  4. 4. Keren Johana dice:

    Gracias a todos por los comentarios, y los tendré muy encuentra. Espero seguir creciendo como escritora.

    Escrito el 25 enero 2016 a las 22:05
  5. 5. charola dice:

    ¡Hola Keren Johana! Me gustó el contenido de tu relato, pero debo decirte que hay algunas palabras mal escritas que deslucen la trama: casucha mal trecha, debe ser casucha maltrecha, espalada, en vez de espalda. Creo que debió ser “le dio la espalda” no “se dio la espalada”. Al empezar dices: “Era tarde ya, la noche ya quería…” un ya está sobrando. Repites aun así en un tramo muy corto y el “aún” es con tilde. Creo que ya te han dicho las demás tildes que no las has puesto. Las rayas de diálogo no están bien utilizadas. Al inicio después de la rya no le des espacio y al final no le pongas punto ni tampoco guión, más bien cierra con la raya de diálogo. Por lo demás es una historia de amor bien contada. Sigue escribiendo. Saludos. Te seguiré leyendo.

    Escrito el 26 enero 2016 a las 00:11
  6. 6. Vardolac37 dice:

    Keren, ahora entiendo el porqué de tu comentario sobre mi relato. De verdad has derramado mucha pasión y sentimiento, también tristeza. En fin es un buen relato y te felicito.
    Recuerda que el escritor no se hace de un día para otro, se trata de mucha perseverancia y lo digo con base. Porque estuve varias veces tentado en dejar de hacerlo, pero gracias a Dios que no.

    Keren, gracias por tu comentario y espero leerte la próxima vez

    Escrito el 26 enero 2016 a las 00:48
  7. 7. Keren Johana dice:

    Gracias por tomarse el tiempo de leerme, y comentarme, lo aprecio mucho. Esos comentarios me ayudan mucho, tengo un problema con las tildes, pero ahí voy con ellas, y quiero seguir mejorando.

    Vardolac, tienes toda la razón, escribir no se da de la noche a la mañana, por eso hay que trabajarle de manera constante.
    Besos y espero volver a leerles en loa aiguientes talleres.

    Escrito el 26 enero 2016 a las 02:33
  8. 8. Keren Johana dice:

    Charola, tendré muy en cuenta lo de las rayas del diálogo, gracias. 🙂 nos leemos.

    Escrito el 26 enero 2016 a las 02:36

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