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El último beso - por Fabián

Web: http://www.escrites.com/escritos/blogger/listings/conde-nadie

Tras encender los cigarrillos de los dos oficiales condenados, el coronel general se posicionó a un lado del pelotón de fusilamiento.

—Quiero que sepáis —empezó Joseph, encendiendo uno para él— que estoy arriesgando mucho al desobedecer las ordenes del Führer. Ya sabéis por que estamos aquí. Me ordenó que os gaseara como a cualquier otro reo; pero considero que os merecéis un juicio digno bajo el cielo de dios, aunque la sentencia ya esté dictada. No solo por que eres mi padre —dijo mirando al mariscal Hans—, sino también por vuestra trayectoria ejemplar en todos estos años como miembros de la Schutzstaffel.

Tanto el mariscal como el mayor oían las palabras de Joseph, disfrutando en silencio de los que serían sus últimos cigarrillos.

—Por eso me ha parecido justo que tuvierais una mención especial antes de ser ejecutados. He dispuesto hasta testigos. —El coronel general se giró hacia nosotros abarcándonos con un gesto de su mano—. Para que recuerden el día de vuestra muerte y que vuestras hazañas sean contadas generación tras generación. Como podéis ver la acusación no se encuentra aquí presente, pues doña Eva está profundamente dolida como para veros o dirigiros la palabra. Quiero que muráis como hombres, a pesar de haber traicionado la confianza de nuestro Führer, y de haber traumatizado a su señora esposa.

Joseph hizo una pausa para dar una larga calada a su cigarro y echar el humo hacia las nubes. Nunca lo había visto así de nervioso.

El deber… —La voz le falló y carraspeó, mientras el pelotón intercambiaba miradas—. ¡El deber de un miembro de la Schutzstaffel! —continuó, levantando la voz— Es el de proteger la vida de nuestro líder y la de toda su familia. Asegurar el bienestar civil y apresar a todo aquel que atente contra los ideales del Reich.
»Mariscal Hans, padre. Largos años¨de amistad son los que te unen con nuestro Führer, y por los cuales se te han dado tareas propias de un guardaespaldas de élite, poniendo en tus manos la seguridad de su señora esposa. Pues debes comprender su reacción frente a semejante confesión, y la ofensa al pretender que te guardase el secreto. ¡Es la esposa de nuestro líder! —Bajó la mirada y respiró hondo—. ¿Cómo un hombre como tu no piensa en las consecuencias antes de actuar de forma tan temeraria? ¿De verdad pretendías que lo ocultase todo a su señor esposo?

Cabizbajo, Hans lanzó la colilla de su cigarro a un lado. Parecía estar diciéndole algo al mayor, imposible de oír debido a la distancia. Éste se acercó a él y posó una mano sobre su hombro.

—¡Preparad armas! —El pelotón obedeció apuntando sus fusiles al unisono, sobresaltando a ambos condenados—. Mayor Julius… Un soldado admirable y un referente para la inmensa mayoría… Prefiero limitarme a los halagos por sus servicios militares y dejarlo así, pues no se que decirle a un hombre como usted.
»¡Otro de los deberes de un soldado de las SS —continuó volviendo a alzar la voz—, es el de preservar la raza aria! Aún queda mucho trabajo por hacer para separar la sangre impura de la verdadera sangre germánica y, como bien sabéis, no queremos sangre sucia, desobediente, pervertida, pagana… No se que ha pasado con vosotros dos y tampoco quiero saberlo, temo que sea contagioso, pero ahora mismo representáis una amenaza para el programa, lo que os convierte en enemigos del Reich ¿Unas últimas palabras?

Su padre mantenía una postura determinante, con los hombros hacia atrás y la barbilla en alto, como esperando con orgullo los siete balazos que acabarían con su vida.

—¡A la mierda el Reich! —El mariscal se giró sobre sus pies y abrazó al mayor. Ambos hombres se fundieron en un beso sincero cargado de lágrimas.

—¡Fuego!

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12 comentarios

  1. 1. Lesly Bosco dice:

    Hay algunos errores a la hora de acentuar (“tú” cuando es pronombre personal, “sé” presente 1ª persona singular, “qué” interrogativo…).. cosillas.
    El reto está bien conseguido, solo a título personal y es algo que a lo mejor no he entendido, no me cuadra que esté desobedeciendo al líder que quería que gasease a los condenados pero se lleva testigos… No sé, si no supiese el tema del reto a lo mejor no me parecería un poco forzado.
    Aunque a lo mejor es un relato muy corto para mostrar los sentimientos de Joseph, que se entreven, no deja claro si está avergonzado o si siente pena, aunque tampoco veo que al final se lo piense mucho y supongo que esa es la respuesta.
    El relato está bien, al final es sorprendente, no esperaba en ningún momento el desenlace ni se me había ocurrido por el título del relato la verdad.

    saludos

    Escrito el 19 enero 2016 a las 16:52
  2. 2. Paola dice:

    Hola Fabian
    como ya te he comentado me parece muy original tu relato, además puede dar lugar a un buen debate sobre el tema…
    El final totalmente inesperado.
    Nos leemos

    Escrito el 20 enero 2016 a las 12:39
  3. 3. Elvi dice:

    Sin meterme en tecnicismos el relato y la idea me parecen estupendos. Lo considero un argumento muy válido como para escribir una novela.
    Creo que a tu escrito le ha faltado espacio. Tiempo por tu parte. Corrigiendo eso, me ha gustado mucho.
    Bien, por tu narrador testigo.

    Escrito el 20 enero 2016 a las 21:37
  4. 4. Darío Lana dice:

    ¡Hola Fabián!
    Me ha parecido increíble la forma en la que captas la atención, para saber qué habrán hecho para merecer ese castigo. El giro final es genial. El ritmo del relato es muy correcto y salvo las correcciones ortográficas que ya han comentado, lo demás está muy logrado.
    Enhorabuena por un relato tan original

    Un saludo

    Escrito el 22 enero 2016 a las 13:11
  5. 5. saldivia dice:

    Hola Fabián. Admiro mucho los relatos con finales contundentes, y el tuyo se lleva todos los méritos del caso en ese rubro. Muy original la temática y su desarrollo. Resulta inusual (pero no imposible) el manejo emocional de Joseph, permitiéndose sus paseos por la consideración a su padre, se tiende a pensar que en una situación así, el hijo se alejaría totalmente del aspecto filial para poder soportar el hecho de ordenar dar muerte a su padre, sin embargo el entrenamiento al que eran sometidos los acólitos del nazismo creo que da para esas conductas. En cuanto a lo formal, suelo ser poco acucioso, sin embargo te sugiero que cuando escribas dios desde la perspectiva de un creyente o de alguien que acepta su existencia (como aparenta ser Joseph al decir “bajo el cielo de dios”) lo pongas con la D mayúscula, aquí te dejo un vínculo útil: http://buscon.rae.es/dpd/srv/search?id=BapzSnotjD6n0vZiTp
    Espero leer de ti en el futuro, ¡éxito!

    Escrito el 22 enero 2016 a las 15:10
  6. El final es totalmente sorprendente, aunque no es muy de mi agrado. Perfecto para el tipo de relato pues por como iba la cosa, no me esperaba que los mataran por eso. Pensaba que habían atentado con matar a Hitler. Que equivocado estaba.
    Felicitaciones y saludos.

    Escrito el 22 enero 2016 a las 16:54
  7. 7. Miriam Torres dice:

    Hola Fabián.

    Tu relato me ha dejado sin palabras. Me ha transmitido la dureza del nazismo con las palabras del general hacia los condenados, con los que no tiene ningún tipo de miramiento. He visualizado la escena con gran nitidez hasta en ese final tan triste como hermoso.

    Las correcciones ya te las han indicado el resto de lectores. No podría juzgarlo severamente porque el trasfondo de la historia hace que me olvide del resto. Y me sumo al comentario de Elvi, creo que es un buen final para una buena novela, o un punto de partida para crear lo que sucede hasta llegar a ese momento final. Piénsalo. Y si lo haces, por favor, compártelo.

    Gracias por tu historia.

    Mi texto es el 203, por si quieres leerlo.

    Escrito el 22 enero 2016 a las 21:32
  8. 8. Leonardo Ossa dice:

    Hola Fabián, he leído el texto varias veces con la banda sonora que nos sugieres en “Escrites” y me parece que he visto con mis propios ojos la escena que nos presentas. Me ha gustado todo, y me has creado también una duda, pues veo que has utilizado las rayas de diálogo. En mi participación he intentado contar la historia desde el punto de vista de un narrador testigo, así que consideré que no era necesario usar las rayas. En todo caso me habrán de corregir. He creído que no era necesario porque, al menos en mi caso, solo hay una voz que cuenta lo que ve, lo que le parece, y lo que atestigua haber oído de otro personaje.
    Hasta pronto. ¡Felicitaciones por ese texto!

    Escrito el 23 enero 2016 a las 03:54
  9. 9. Cesar A. Martín dice:

    Hola Fabián,
    Un relato muy amplio, documentado, bien ambientado, y con el ritmo y el tono adecuado. Y un desenlace que le da más brillo a todo lo anterior. A mi parecer no era necesario explicar la sustitución de la cámara de gas por el fusilamiento, da la sensación que es una acotación para el lector y el texto tiene el suficiente peso como para que no nos importe.
    Buen trabajo y un saludo.

    Escrito el 23 enero 2016 a las 19:07
  10. 10. Manoli VF dice:

    Al principio me costó entender la figura del narrador, Fabián, hube de leerlo varias veces. EL argumento es muy llamativo y aunque se ha escrito mucho, pero mucho, sobre el nazismo, la verdad es que el tema impacta y siempre estará vivo y así conviene también que sea. Dicho lo cual, tu relato capta muy bien el interés, y tiene un buen desarrollo y estructura. A mí me ha gustado, sobre lo técnico ya te han comentado algo, yo creo que más que nada de puntuación, pero no es algo que se me de muy bien para indicártelo.

    Un saludo y nos seguimos leyendo (el mío es el 67)

    😉

    Escrito el 25 enero 2016 a las 00:27
  11. 11. Fabián dice:

    Muchas gracias a todos por las correcciones y sugerencias!

    Quiero aclarar algunas de las dudas que me han comentado.

    Mi narrador testigo funciona a modo de cámara, aunque se encuentre entre los testigos que están viendo la escena, y que se menciona a si mismo en un par de veces, su función es la misma que la de una cámara. Por eso utilicé el diálogo indirecto.

    La presencia de testigos forman parte de la pantomima que organizó Joseph para darles una muerte más digna a los dos oficiales; ya que no han tenido un juicio justo y fueron condenados a ser gaseados por ser homosexuales. Joseph considera que, dejando de lado el que sean gays, no dejan de ser dos miembros muy importantes de las SS, y por eso cree que es justo que tengan un “juicio” y sean ejecutados como hombres y no como reos, aunque la sentencia ya esté dictada.
    Él mismo lo dice, quiere que tengan una muerte digna y la gente los recuerde por su carrera militar, y no por ser gays. Los testigos están ahí para dar fe de que tuvieron una muerte “digna”, así como los condenados a muerte también tienen un número de testigos a día de hoy.

    La mención a las cámaras de gas no es más que para ubicar al lector en la ambientación. No quería mencionar a Hitler directamente, ni utilizar la palabra “nazi” para no hacerlo tan evidente. Utilicé “Fuhrer”, “schutzstafell” y “gasear” a modo de pistas para que el lector se ubique en la ambientación y en la época por deducción, pero sin hacerlo rebuscado como para enviarlo directo a la wikipedia con deberes.

    Escrito el 26 enero 2016 a las 20:32
  12. 12. Wolfdux dice:

    Hola Fabián, un relato muy bueno. Me ha chocado (mi vena de historiador a salido a la luz) que el coronel hable de Eva como la esposa de Adolf. (se casaron el día antes de suicidarse) Pero como en el fondo tu mismo has dicho, no mencionas a nadie, así que mejor me callo, jeje.

    Un abrazo.

    Escrito el 29 enero 2016 a las 22:47

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