Cookie MonsterEsta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las condiciones de uso.

Do you speak english?

¿If you prefer, you can visit the Literautas site in english?

Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

<< Volver a la lista de textos

IMPREVISIBLE - por agueda varillas

IMPREVISIBLE
-Maite…qué le ves, ¿nunca te gustó? – preguntó Miguel.
-El día que se presentó en el chalé de la playa me pareció algo alocado, pagado de sí mismo y con ánimo de exhibir “poderes”, Cuando se despidió, ya nos había dejado su carta de presentación: era de familia acomodada, presumía de automóvil, de estudios en Inglaterra, y se las daba de guapo -Maite hizo una pausa deliberadamente-. Pensé para mis adentros: este es un gilipollas. Durante el invierno nos visitó con asiduidad. No voy a decir que fueran desagradables sus modales, pero se iban haciendo día a día insoportables. Llamaba, y yo le abría la puerta. Me saludaba amablemente, y yo le sonreía, me entregaba el abrigo, y se lo colgaba en el armario de la entrada. De manera rutinaria le daba acceso al salón de la vivienda, donde ya estaba Don Julián en su silla de ruedas. Tomaban el desayuno: café con leche y unas tostadas con margarina y mermelada. Pasada una media hora, devolvía el abrigo a su dueño, tapaba con una pequeña manta las piernas de mi señorito y abría la puerta sonriendo.
>>Que lo paséis bien, y usted meta las manos debajo de la mantita.
Cuando desaparecían en el ascensor, le sacaba la lengua; no podía evitarlo, Miguel, no podía.
Ya de vuelta, dejaba a Don Julián acomodado en el salón y se despedía hasta el día siguiente. El señor dedicaba el resto de la mañana a su álbum de sellos; parecía estar absorto aunque de vez en cuando me interrogaba:
-¿Consideras que “el Mario” (de esta manera nombraba a casi todas las personas que conocía; su paseante no se iba a quedar sin el artículo) es un buen chico? ¿Crees que tengo que advertir a “la Gloria” (su nieta) si hace algo que no me guste? ¿Sabes que acabarán los estudios y se terminarán casando? ¿Te gustaría que lo invitáramos a comer para Ramos?
Yo quería contestar con evasivas, el viejo me dirigía, y terminaba vomitando sin pretenderlo, aunque supongo que él, era lo que buscaba.
>>Pues no, no y no -le respondía-. Creo que a éste le falta algo o le sobra, y no me diga usted que no se ha dado cuenta. Muy sonriente, muy sonriente, pero el otro día le oí decir por lo bajo que yo era una “tonta del culo”; mire usted que educadito está. Eso no se lo digo a Gloria porque le doy un disgusto, pero si se pasa conmigo ya no voy a aguantar; ella, después, que haga lo que le parezca.
– No crea usted, -seguía Maite diciéndole a Miguel- hay detalles que no se me pasaron. Él tenía que salirse siempre con la suya, ella, como le admiraba tanto y se derretía en su presencia, ni se enteraba que sólo se hacía lo que él quería. A mí no me gustaba esa relación, a ellos sí… ¿y qué quiere usted?
-Que me cuentes todo lo que sepas, lo que hayas visto…-apremió Miguel
-Mire: que con su pan se lo coman, – saltó Maite, algo malhumorada- yo no me voy a meter en el fango, a perder mi empleo, si ellos no lo ven…
-¿Qué es lo que hay que ver? -preguntaba Miguel- Aparentemente…
-Ese está fingiendo, se lo digo yo –replicó Maite-. Seguro que ha hecho más de una idiotez, y como hay medios, lo han sacado de los líos en los que se haya metido. Le digo a usted que muchas veces le ha dicho no a Gloria, se ha inventado una escusa, un curso, una chorrada, vamos, lo que sea, y en unos días no se han visto. He oído algunas conversaciones, y además, el padre no ha venido por aquí a saludar a Don Julián, con lo que es él, está en boca de todos; no hay persona en la calle que no me pregunte por el señor…
-Al viejo no se le engaña así como así -concluyó Miguel al tiempo que se despedía, y le recordaba a Maite que Gloria era “su chica”-. No voy a consentir que le hagan daño; la quiero demasiado.

¿Te ha gustado esta entrada? Recibe en tu correo los nuevos comentarios que se publiquen.

4 comentarios

  1. 1. Caciba dice:

    Hola, Águeda.

    Decirte, en primer lugar, que valoro mucho los textos con tanto diálogo, me parece muy complicado. Éste es mi cuarto relato y te diré que todavía no me he atrevido a escribir ni uno, así que enhorabuena por ello.

    Te digo alguna cosilla que creo que se puede mejorar:

    – Sé que los guiones de los diálogos no son esos, son los largos. Eso lo he aprendido aquí. En esta página puedes encontrar una guía sobre cómo escribir diálogos. Échale un vistazo.

    – Quitaría las comas delante de todas las “y” y la pondría entre las interrogaciones (las preguntas que hace el señorito). Se te escapó una coma en lugar de un punto en: “poderes”, Cuando (un despiste, está claro). También pondría una coma entre: “…absorto aunque…”.

    – Excusa.

    – Me sonó raro que le diga a Miguel: “No podía evitarlo, Miguel, no podía”, porque le trata siempre de usted. Yo creo que mejor sería: “No podía evitarlo, D. Miguel, no podía”.

    Sí que me has dejado con la intriga de quién es ese Miguel… Mario no sé qué clase de persona será, pero Miguel… ¿Quién es Miguel?

    Enhorabuena. Espero seguir leyéndote.

    Escrito el 19 febrero 2016 a las 13:47
  2. 2. CARMELILLA dice:

    Hola Agueda:
    He leído varias veces tu capítulo porque con una primera lectura no he conseguido identificar adecuadamente a cada personaje ni lo que ocurría, en mi opinión, la acción, lo que ocurre está confuso.
    Para ayudar también en la lectura, creo que deberías haber separado algún párrafo. Los pensamientos, entre comillas.
    En mi opinión, ha faltado ese final intrigante que te deja con el deseo de empezar lo más pronto posible en la lectura del siguiente capítulo. En este caso, sí necesito la lectura de la continuación porque más que intrigada, me he quedado confundida con quién es quién y qué es lo que pasa.
    Agueda, sigue participando, nos sirve de aprendizaje.
    ¡Bien hecho!
    Saluditos.

    Escrito el 19 febrero 2016 a las 16:50
  3. 3. Dianet dice:

    Hola Agueda Varillas

    Estoy de acuerdo con los compañeros que te han comentado, yo misma iba a darte los mismos consejos. Creo que si mejoras el texto se puede entender mejor.

    Un saludo

    Escrito el 23 febrero 2016 a las 09:44
  4. 4. tyess dice:

    De entrada, tengo mis dudas de si esos signos de interrogación en la primera línea están en donde deben estar. Si faltan en “¿Qué le ves?”, pero, ¿está preguntándole si nunca le gustó?

    El dialogo me parece apropiado para introducirnos a la situación sin tener que realmente narrar la historia, pero a ratos suena muy extraño, poco natural. Como si estuviera leyendo una narración. ¿Así es como habla Maite? ¿Por qué?

    En cuanto a la novela que nos estás presentando… No tengo idea de para donde va. Todavía no la descartaría, eso sí. Seguiría, para ver que ruta lleva. Pero todavía no me has enganchado.

    Escrito el 28 febrero 2016 a las 06:22

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.