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Huesos ancestrales - por Noemi
Huesos ancestrales
«Debería haber tomado el autobús»
Antes que acabase el día se arrepentiría de no haberlo hecho. Pero la mañana de marzo con el sol aún imberbe y las primeras florecillas blancas bajo los árboles pelados la tentaron.
Sophie pedaleaba con energía. El aire frío, que hacía llorar sus bonitos ojos grises, le cortaba la carnosidad de los labios y castigaba sus rizos dorados. Era una chica sencilla, había venido a la Universidad a estudiar arqueología y su única pasión era doctorarse y volver a su pueblo cuanto antes para escavar los restos neolíticos. Había pasado meses trabajando en su tesis y hoy tendría su primer encuentro con el doctor Hjördis Mikelson, su director. Hombre joven, demasiado atractivo pero reticente, sarcástico y muy hábil en mantener las distancias con el intemperante alumnado. Su obsesión: la puntualidad.
Sophie Andaba bien de tiempo pero la subida, con viento de frente, le costaba más que de costumbre.
«No importa, a partir del cruce quedan solo pocos metros»
Entonces sintió el rebote «¡Había pinchado! Ella que nunca…¿Y ahora qué?»
Empezó a caminar cuesta arriba,a contracorriente y con la bici a rastras. Su mente no tardó en vislumbrar un despectivo rictus esperándola. El gesto preciso para mandar a la mierda meses de sudor y lágrimas.
Sacó el teléfono y llamó a Mikelson. Le respondió el contestador automático. Dejó un mensaje y continuó con su víacrucis, tratando de acelerar el ritmo.
«¡Qué raro! ¿Por qué no atiende? Tendría que estar en su oficina esperándome»
Cuando por fin llegó a "Seminarios", aparcó la bicicleta en el cancel y entró. A esa hora el paraninfo estaba despoblado y a media luz. No había clases y las reuniones de doctorado se convocaban a puerta cerrada.
Sophie trepó casi sin aliento los escalones que llevaban hasta la tenebrosa galería del profesorado. Dos filas de puertas grises enfrentadas. El silencio era absoluto. Salvo en los extremos del larguísimo pasaje, no había ventanas. Algunas lámparas de bajo consumo ubicadas a tramos regulares mantenían una penumbra indolente. Tenía que detenerse en cada una de esas puertas mudas, feas como un reproche. Un ligero olor a moho y encierro en medio del obsesivo sosiego, le provocó dolor de estómago y frenéticos impulsos de salir corriendo. Se mordió el labio: «Serénate no seas loca, respira hondo»
Avanzó unos metros más y se detuvo. Había escuchado pasos. Rápidos, sordos, pisadas de caucho. Miró hacia el extremo próximo del corredor. Allí el viento había entreabierto la ventana y la cortina flameaba histérica. Sophie se volvió hacia el otro lado y lo encontró sumido en una oscuridad claustrofóbica.
«No perdamos más tiempo»
Pasó frente a otras cinco puertas y en la última leyó Dr. Hjördis Mikelson en letras negras sobre una chapa dorada.
Suspiró, iba a tocar el timbre cuando vio la luz verde: la puerta estaba sin llave. Golpeó con los nudillos antes de bajar el picaporte y abrir. Entró y dio unos cuantos pasos .Un claroscuro natural de persianas entreabiertas resbalaba por las paredes abarrotados de estantes llenos de libros, expedientes y carpetas. Papeles y más papeles. Casi sintió cómo se abalanzaban sobre ella para aplastarla. No había lugar más que para un escritorio junto a la ventana y la vacía silla giratoria del profesor. Sophie supuso que a su espalda, en el ángulo más sombrío habría un sillón destinado al alumno. Se aproximó al escritorio, en la agenda abierta estaba escrito su nombre: Sophie Persholm. Le pareció oír pisadas.
«Ya viene, mejor que me siente antes de que entre. Es preferible que parezca que yo le espero a él y no él a mi»»
No pudo sentarse. El sillón ya estaba ocupado. Una muchacha con los ojos grises demasiado abiertos, los carnosos labios azulados, y unos áureos bucles sucios de sangre estaba sentada desnuda. Ahí, donde ella misma debería haber estado.
Todavía se oían pasos. Pero nadie entró.
Hola Noemi, has cumplido con el reto y ne has dejado en suspenso con ese final. Me gustaria saber que le ha pasaso a la chica seguro algun asesino en serie ya que la muerta tiene caracteristicas similares a la protaginista. O el asesino se confundio?Espero saber que paso. Me ha gustado tu relato
Espero pases por el mio es el 232. Saludos
Hola Noemi debo decirte que a mi personalmente me ha gustado tu historia. Está bien llevada y con buen ritmo, literalmente la encuentro correcta. Un final muy bueno que engancha y te da pie para poder seguir escribiendo. Solo te voy a poner un par de cosas que creo que no están correctas.
Antes que acabase el día… Antes de que acabase el día
Con viento de frente… Con el viento de frente.
Estoy en el número 52, por si te apetece comentar algo. Un saludo
Hola Noemi, a mi también me ha gustado mucho, y el reto cumplidísimo.
Me han gustado tus descripciones y como utilizas los adjetivos.
Quizás salta un poco “rápido” del pinchazo de la bici a la llegada al edificio, pero es sólo una sensación, esta super bien, saludos
Hola Noemi, tu capítulo número uno me ha gustado por la forma en que describes la escena. Me parece que ha quedado muy bien planteado un relato de “novela negra”, pues a partir de aquel suceso vendrán todas las investigaciones necesarias para establecer el crimen con el que finaliza el relato.
El titulo: “Huesos ancestrales” no me refleja mucho lo que allí acontece, pues hace relación a la actividad profesional que la protagonista empezará a ejercer, pero no es vinculante con el suceso descrito, aunque, por un instante se me ocurrió que la “muchacha con los ojos grises demasiado abiertos, los carnosos labios azulados, y unos áureos bucles sucios de sangre” era una especie de visión que estaba teniendo la estudiante de sí misma, ya que ella también tiene “bonitos ojos grises, carnosos labios y rizos dorados”.
Todo es un misterio que se resolverá leyendo la novela, incluida la razón de ese titulo. ¡Felicitaciones!
Un abrazo.
Noemi, muy interesante tu historia, me ha gustado, no vayas a tirar la toalla y sigue escribiendo. Gracias por el comentario (115). Saludos!
Noemi, muy buena historia. Creo que no esperaba que fuese así. Pense que iba a ser un relato sobre algo rutinario pero termina dando un giro macabro. Engancha y cumple. Me gustó.
Si tenes ganas pásate por el mío (51). Un abrazo
Buenas Noemi,
Buen inicio de historia, me ha gustado. El lenguaje está bien utilizado, la progresión de la narración es natural y el contenido queda bien plasmado, dando pistas de posibles conflictos en la historia pero sin dar las cosas por cerradas para que el lector pueda dudar de lo que está pasando. Personalmente, el final me lleva a pensar más en un desarrollo esotérico o fantástico de la historia que a una novela negra de asesinatos (puede que el título también influya un poco).
En cuanto a cosas que mejorar, desde mi punto de vista abusas un poco de los adjetivos, es una cuestión de gustos. Se te ha escapado una mayúscula en “Sophie Andaba bien” y un error de concordancia en “resbalaba por las paredes abarrotados de estantes llenos”, que tendría que ser “abarrotadas”. Otra cosa que me pareció, sobre todo, al final es que usabas bastante la conjunción “y” muy cerca (“picaporte y abrir. Entró y dio”;”expedientes y carpetas. Papeles y más papeles”), no es que esté mal pero me sonó repetitivo.
En cualquier caso, buen inicio de novela. Muchas gracias por tu pase por mi relato y tus comentarios, ni con todos los repasos había sido consciente de las repeticiones. Un saludo!!
Buen relato Noemí. Me da la impresión de que el asesino se equivocó de chica. Sophie a tenido suerte está vez…
Hola Wanda, Ophelie,Endika, Leonardo,Virginia,Lucas, Wiccan y Jesus
Muchas gracias por haberme leído y comentado. Estudiaré cuidadosamente todas las sugerencias,de un modo u otro todas aciertan pero es increíble la cantidad de ideas que son capaces de despertar. Muchas gracias a cada uno otra vez y ¡Nos seguimos leyendo! Un abrazo.