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El septimo universo - por Pimpinella Escarlata

El séptimo universo

El ascensor se abrió. Un hombre estaba tirado con su uniforme manchado de sangre mirando el destornillador. Se escuchó la sirena de la ambulancia llegar al edificio.

Gómez recuerda al anciano que entró con él. El viejo le sonrió y pulsó el botón del quinto piso. Él pensó que había correspondido esa sonrisa pero en realidad estiró los labios sin mostrar los dientes. Fijó la vista en los números de la pantalla del ascensor.

—Parece que este verano hará calor― comentó el anciano.
―Eso parece—
― ¿Vienes a reparar el ascensor?―
—Si—

Por un momento olvidó en que piso debía bajarse y siguió hasta el tercero. El ascensor se detuvo. El anciano se arregló el corbatín. Un niño entraba con un diccionario en las manos. Sus pantalones cortos dejaban a la curiosidad una mancha negra, peluda en la pantorrilla izquierda. Gómez no estaba seguro si había visto al niño o la mancha antes y en otro lugar. El niño pulsó el quinto y se sujetó del pasamano.

― ¿Sabe cómo encuentro la palabra Multiverso en este diccionario?―
―Debes buscar en la letra M―, respondió Gómez.
— ¿Vives aquí?― Si―
— ¿Sabes en que piso esta la familia Pérez Juárez?
—Un momento, lo buscaré en el diccionario―
—“referirse a la familia Gómez Ansías”―, leyó cerrando el libro.
—Cada piso es diferente—dijo el niño—El ascensor funciona bien.

Revisó la hoja de servicio. «El centro de reparaciones no se equivoca», pensó. La familia Pérez Juárez está en el piso siete. El reporte de la familia indicaba que el ascensor no se detenía nunca. Pero lo había visto detenerse para dejar al anciano. Quizás el niño tenía razón, el ascensor funcionaba bien. Lo vio salir y alejarse por el pasillo del tercer piso. La mancha con forma de conejo le recordó la suya.

—Coincidencias―, musito.

Presionó el piso siete. El ascensor cerró las puertas y empezó a subir. Se escuchó el rechinar de los cables de tracción. Gómez pegó sus orejas al frío acero inoxidable. Quizás ese era el verdadero problema, los cables. La subida pareció más larga. El ascensor hizo una parada brusca en el sexto piso. Se inclinó a la caja de herramientas y sacó su manual de reparación de ascensores. Buscó en la sección de errores. Se tronó los dedos. Las puertas se abrieron y una mujer de lentes oscuros subió.

— ¿Vienes a reparar el ascensor?
—Sí. Tengo el reporte que hizo la familia Pérez Juárez―
— ¿La familia Pérez Juárez?―, pregunto ella.
— ¿No viven aquí?
―No. En el séptimo vive la familia Gómez Ansias—
―Yo soy Rebeca Ansias, la ex del señor Gómez—
―Yo soy Gómez—dijo el, cerrando el manual.
― ¿Gómez dijo usted? Hay muchos Gómez—respondió la mujer.
― ¿Cómo se montó en este ascensor?
―Solo presioné el número del piso―
— Te esperábamos desde hace meses―
— ¿Hace meses? Me enviaron hace apenas una hora―
— ¿Estás seguro? Llevas mucho tiempo en este ascensor—

Él no se explicaba porque se presentaba a las demás personas como Gómez si su verdadero apellido era Zapata. Tampoco se desmontó en el piso siete. El ascensor empezó a descender hasta el primer piso.

―Tengo problemas con mi ex— dijo la mujer.
―Descubrí su traición y ahora quiere abandonarme―
—Debes evitar que tome el ascensor y baje—
La mujer habló como Laura, su esposa, y más con ese lunar en la barbilla. Ella lo miró por encima de sus lentes azules y preguntó:
― ¿Nos conocemos de algún lado?
—No, no creo―
―Te pareces a el—
— ¿A quién?—
―A Gómez―
La mujer no salió del ascensor, en cambio, el anciano y el niño subieron. Pulsó el siete. El anciano se tronaba los dedos mientras el niño buscaba significados en su diccionario: mentira, miedo, muerte. Todos parecían tener la misma preocupación.

— ¿Qué hora es ?—, pregunto Gómez.
―Para ti, en tu universo, son las 10am, para nosotros el tiempo va más lento—respondió ella.
―El ascensor te trae o te lleva―
―No entiendo―

El anciano, el niño y la mujer bajaron en el séptimo. El sacó de su pantalón un destornillador plano para desmontar el centro de mando del ascensor.

Se escucharon unos gritos. Un hombre corrió hacia la cabina con las manos y camisa manchada de sangre. El marcó el primer piso. La policía esperaba abajo.

El titular decía:
“El viajero del ascensor de la Torre Paralela fue apresado hoy. Gracias al anciano y al niño, pasado y futuro de Gómez, quien retornó a su universo.”

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3 comentarios

  1. 1. Leosinprisa dice:

    Hola Pimpinella,

    bueno, bueno, bueno, que nos encontramos aquí, viajes en el tiempo, multiversos, personajes que parecen cruzarse consigo mismos. No te puedo negar que estas historias del más puro estilo de ciencia ficción son mis favoritas (junto al género de fantasía) y la he leido, más bien devorado, con sumo interés.

    Ahora es cuando vienen las correciones:

    Primero vamos a ver los guiones de los diálogos. Cuando uno de tus personajes deja de hablar y siempre que le acompañe alguna referencia que hagas sobre él (como muy bien has hecho en tú primera línea de diálogo) se pone el guión.

    El problema está en las siguientes líneas de tú relato, ahí sigues poniendo el guión largo cuando no lo necesita, con un punto y aparte es suficiente.

    También separas el signo de interrogación del guión inicial. Siempre se pone a continuación y no con esa separación que has dejado.

    En otros casos, con el guión final bien puesto, juntas a la siguiente oración y debe ir separada por un espacio:

    Hay muchos Gómez—respondió la mujer.
    Cuando debería ser:

    Hay muchos Gómez— respondió la mujer.

    No sé si es porque no te has fijado a la hora de corregirlo, supongo que si, pues en otras partes lo haces correctamente.

    También en está línea:

    — ¿La familia Pérez Juárez?―, pregunto ella.

    Debería ser:

    —¿La familia Pérez Juárez? —preguntó ella.

    Fijaté que despues de los signos de puntuación, tanto de admiración como de exclamación, no hay que poner puntos, ni comas.

    En cuanto al texto narrativo, creo que algunos punto y seguido se podrían eliminar, pues eliminan un tanto el ritmo de lo que lees, pues le confieren el aspecto de algo telegráfico, como si fuera a golpes cuanto cuentas. Eso desde mi apreciación subjetiva, claro está 🙂

    Sobre tu historia, es interesante, y aunque adivino por donde van los tiros de cuanto cuentas, a veces me siento un tanto perdido. Tras leerlo varias, se comprende un tanto mejor.

    Tal vez adolezco de un sentido, como lo diria, más “poético” (está también es una opinión subjetiva) de la narración, pero en esencia, has intentando dar un ritmo coherente e interesante, que es lo que cuenta en realidad, tú esfuerzo por haberlo intentado y plasmado la idea con el mayor interes.

    Esa estructura que digo “poética” es una habilidad que se adquiere cuando has escrito muchas historias y has comprendido como funciona el ritmo narrativo y sus misterios. Y aún así, a veces, lo que crees has hecho bien, no lo está tanto.

    Esto último lo digo por experiencia propia 🙂

    Ha sido un placer leerte. Un saludo

    Escrito el 19 marzo 2016 a las 10:30
  2. 2. Yubany Checo dice:

    Excelentes comentarios y agradezco tus observaciones. Las tendré muy pendiente cuando siga trabajando sobre este texto. No se si te ha pasado que escribes algo como esto y vuelves y vuelves sobre el y al final no se parece mucho a la primera version. Esto me ha pasado con este texto. Magnifico que te guste el genero. Espero seguir contando con tus comentarios mas a seguido y publicar mas relatos por aqui. Como bien dices aun me queda mucho por escribir para alcanzar la magia del ritmo narrativo.

    Gracias!

    Escrito el 20 marzo 2016 a las 23:20
  3. Saludos Pimpinella Escarlata:

    Interesante relato sobre universos paralelos que da lugar a una intrincada red de encuentros y desencuentros. Me parece, puedo estar equivocado; pero, 750 palabras son pocas, a mi juicio, para abordar la tarea que representa esta historia: pocas palabras y muchos personajes, terminan desmadejando la lógica de sentido. Con un mayor espacio, tal vez se conseguiría un relato genial.
    El texto está bien presentado y en momentos sobrecoge y apasiona. Bien logrado, felicitaciones

    Escrito el 22 marzo 2016 a las 00:08

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