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Ellos - por DreamxAlchemist

Abrió el encendedor, dejó que la llama iluminara las paredes oxidadas de su improvisada fortaleza, y luego de unos segundos lo cerró. Prefería el frío y la oscuridad antes que tener que recordar. No soportaba ver las manchas de sangre seca, no soportaba rememorar los gritos desesperados de sus colegas, no soportaba el peso de la traición. Abrir, encender, cerrar. El chasquido metálico partía al sombrío silencio que reinaba dentro del ascensor. Una y otra vez, el mismo movimiento, el ancla que lo mantenía sujeto a la poca cordura que le quedaba. Se recostó en una esquina, deslizándose lentamente hasta caer al suelo, sabía que en cualquier momento sucedería.

Poco a poco, el aire que atravesaba su diafragma era transmutado en una dulce melodía, las notas iban y venían a través de sus labios llevando consigo un cálido recuerdo: Era la canción de cuna que le cantaba su madre cuando era niño. Siempre lograba calmarlo, siempre le brindaba un poco de paz sin importar qué tan mal estuvieran las cosas. Por un momento, pensó que todo estaría bien, que quizá contaría con la suerte que sus amigos no habían tenido, pero se equivocó.

Una embestida anunció su llegada, las puertas del ascensor se habían abollado debido al golpe. No resistirían mucho, así que prefirió cerrar los ojos antes que tener que hacer frente a esas criaturas. Ocultó el rostro en su regazo, y rogó para que todo pasara rápido. La segunda embestida no tardó en llegar, y luego una tercera, y una cuarta. Finalmente, las puertas cedieron.

Su corazón latía tan fuerte que podía escucharlo como si tuviera un estetoscopio adherido a sus oídos. No existe palabra en el diccionario que abarque el mar de sensaciones que lo invadieron cuando escuchó un silbido venir del pasillo. Al principio era trémulo y solitario, pero luego pasó a ser un coro que interpretaba al unísono la misma melodía: La canción de cuna que tanto le gustaba. Lo único que le brindaba un poco de consuelo, ahora lo arrastraba cada vez más a la orilla del precipicio. Como si dedicaran una canción de Réquiem para su víctima.

Ellos silbaron con maquiavélica decisión las notas que seguramente habían escuchado momentos antes. Porque Ellos habían estado ahí desde el principio, porque Ellos disfrutaban alargar el sufrimiento de sus presas, porque Ellos reclamaban venganza… y la obtuvieron.

Porque Ellos, algún día, también vendrán por ti.

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5 comentarios

  1. 1. Cryssta dice:

    Me ha gustado mucho tu relato y además está muy bien escrito así que en los mejorables solo te diré un par de cosas:

    – después de los dos puntos va minúscula
    – creo que el relato quedaría mejor sin las repeticiones. A ver qué te parece así:
    “No soportaba ver las manchas de sangre seca, ni rememorar los gritos desesperados de sus colegas. No soportaba el peso de la traición”.
    Y al final cuatro “porque Ellos” son demasiados también. Yo lo dejaría así:
    “Silbaron con maquiavélica decisión las notas que seguramente habían escuchado antes. Porque Ellos habían estado ahí desde el principio, disfrutaban alargando el sufrimiento de sus presas; reclamaban venganza… y la obtuvieron.
    Ellos, algún día, también vendrán por ti”.

    Es solo una sugerencia, el relato es tuyo.

    Un abrazo.

    Escrito el 17 marzo 2016 a las 20:08
  2. 2. Cabalinho dice:

    Hola, DreamxAlchemist,

    interesante relato, me ha gustado y angustiado al mismo tiempo jeje.
    Coincido con lo que apunta Cryssta respecto a los de la minúscula tras los dos puntos. Te señalo también algunas cosillas sin importancia pero que me han chocado un poco:
    “luego de unos segundos” no me parece correcto, pondría “tras unos segundos” o “después de unos segundos”.
    “El chasquido metálico partía al sombrío silencio”, ahí pondría “el” en lugar de “al”.
    “Se recostó en una esquina, deslizándose lentamente”: se considera incorrecto o desaconsejable este uso del gerundio. Prueba a usar “se recostó en una esquina mientras se deslizaba”. Y en la misma oración, “hasta caer al suelo, sabía que en cualquier momento sucedería”: aquí pondría un punto, o un punto y coma, pero no una coma. Me parece que merece una pausa más marcada.
    “qué tan mal estuvieran las cosas. Por un momento, pensó que todo estaría bien”: usas dos veces el verbo estar, prueba con un sinónimo.
    También pondría un punto y aparte antes del “pero se equivocó”, a mi entender le daría más impacto.

    Felicidades, y a seguir así, que está muy bien 🙂

    Escrito el 17 marzo 2016 a las 23:17
  3. 3. Diego Manresa Bilbao dice:

    Buenas!
    Muy interesante tu relato, como la cancion se convierte en tortura, y como narras la angustia y, al final, aceptacion del destino del protagonista…
    Buen relato, de verdad…
    Nos leemos!

    Escrito el 19 marzo 2016 a las 12:52
  4. 4. DavidRubio dice:

    ¡Me atrapó la lectura de tu relato!
    Es sencillo, de acuerdo. Pero sabes utilizar los elementos de terror para que nos imaginemos en ese ascensor esperando a esos seres. Alguien dijo que el miedo no es ver un fantasma, sino ver que el fantasma te está mirando. La imagen de esos seres acercándose mientras tararean la canción. Puff… ¡Fantástica!
    Un terrorífico gustazo leerte
    Saludos

    Escrito el 20 marzo 2016 a las 18:28
  5. Un relato terrorfico, me mantuvo inmerso en la historia desde el inicio.
    Me parecio excelente y ese giro al final, uy.
    Felicitaciones, saludos y gracias por tu comentario en mi relato.

    Escrito el 31 marzo 2016 a las 16:02

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